Este documento enfatiza la importancia de desahogarse y confesar todo ante Dios. Aconseja vaciar el corazón ante Dios y contarle todo lo que se siente, ya que Él entiende mejor que nadie. También cita los Salmos 139 y 26 donde David invita a Dios a examinar su corazón y pensamientos para que le muestre cualquier cosa que le esté causando dolor o alejándolo del camino de Dios.
Este documento enfatiza la importancia de desahogarse y confesar todo ante Dios. Aconseja vaciar el corazón ante Dios y contarle todo lo que se siente, ya que Él entiende mejor que nadie. También cita los Salmos 139 y 26 donde David invita a Dios a examinar su corazón y pensamientos para que le muestre cualquier cosa que le esté causando dolor o alejándolo del camino de Dios.
Este documento enfatiza la importancia de desahogarse y confesar todo ante Dios. Aconseja vaciar el corazón ante Dios y contarle todo lo que se siente, ya que Él entiende mejor que nadie. También cita los Salmos 139 y 26 donde David invita a Dios a examinar su corazón y pensamientos para que le muestre cualquier cosa que le esté causando dolor o alejándolo del camino de Dios.
Este documento enfatiza la importancia de desahogarse y confesar todo ante Dios. Aconseja vaciar el corazón ante Dios y contarle todo lo que se siente, ya que Él entiende mejor que nadie. También cita los Salmos 139 y 26 donde David invita a Dios a examinar su corazón y pensamientos para que le muestre cualquier cosa que le esté causando dolor o alejándolo del camino de Dios.
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DESAHOGATE EN DIOS
SALMO 139 1-3
Cuéntale todo a Dios, abre tu corazón a
Dios, vacía tu corazón en la presencia de Dios, dile a Dios ya no puedo, a Él le interesa oír lo que tienes en el corazón.
Saca todo lo que llevas por dentro,
Dios es el único que entiende tu necesidad.
Hay gente que está cansada, que está
cargada, que está oprimida, gente que no puede ni levantar las manos y cuando tú no puedes Dios te dice no temas yo te ayudo porque tengo un plan contigo.
Hay gente que si dijeres lo que siente
por dentro seria menospreciada, rechazada pero gracias a Dios porque Él no es así.
Derrámate en las manos de Dios.
Dios te conoce, cuando tu entiendes
ese principio no tendrás donde esconderte u ocultarle algo.
Hay cosas dentro de nosotros que no le
agradan a Dios, pregúntale a Dios que no le agrada de ti, deja que Dios meta su mano en tu corazón y tome todas tus cargas, tu deja que el espíritu haga en vida. Deja de ser tan confianzudo no le cuentes tus cosas a todo el mundo cuéntaselo a Dios, desahógate con Dios, deja de contarles tus problemas a la gente.
Dios ama la verdad en lo más íntimo,
no tengas temor a Dios le gusta que le cuentes la verdad.
Cuando tus fuerzas flaquean Dios te
dice no te rindas yo estoy contigo.
Invita Dios para que conozca lo que
hay dentro, lo que hay en mi corazón.
La carga que llevas en silencio por
dentro dásela al Señor, entrégale todo al E.S para que saque ese dolor que hay dentro de ti que nadie lo sabe solo Dios.
Hay cargas que llevas por dentro que
solo lo saben tú y Dios, hay que herida porque el diablo se ha encargado
Dios sabe lo que está pasando en tu
casa no hay nada oculto, Dios está aquí para restaurar vida, familias, matrimonios.
No te conviertas en olla de presión,
guardando todo, y no dicen nada, cuando empiezas a guardar tantas cosas en el corazón eso rompe tu relación con Dios. El odio que David sentía por sus enemigos provenía de su celo por Dios. David veía a sus enemigos como enemigos de Dios, así que su odio era un deseo por la justicia de Dios y no por venganza personal
David abrió el corazón e invito a Dios,
Examíname oh Dios mete en mi corazón y revísame, no tengas miedo de invitar a Dios.
Salmo 139:23-24 «Examíname, Dios, y
conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mí camino de perversidad y guíame en el camino eterno.» David dijo Conoce mi corazón, mira mi dolor por lo que hablaron de mi por lo que me hicieron, mira lo que hay aquí, me duele la acusación falsa que me hicieron, me duele porque no me toman en cuenta, me duele lo que estoy viviendo.
Sal 26:1 Júzgame, oh Jehová, porque
yo en mi integridad he andado; He confiado asimismo en Jehová sin titubear. 2 Escudríñame, oh Jehová, y pruébame; Examina mis íntimos pensamientos y mi corazón.
Escudriñar se podría definir como:
Examinar algo con mucha atención, tratando de averiguar las interioridades o los detalles menos manifiestos.
En esta oración David invita a Dios
para probar sus pensamientos. Y la atención se centra directamente en lo que está dentro de él. Él quiere que Dios mire dentro de él, de su persona interior, de modo que él sea asegurado de que Dios conoce lo que hay en su corazón. En el Salmo 26:2 dice: «Escudríñame, Jehová, y pruébame; examina mis íntimos pensamientos y mi corazón.» Cada hijo de Dios debe instar al Espíritu Santo para sondear las profundidades de su corazón para ver si están permaneciendo en la Palabra de Dios y haciendo Su voluntad. Lo que preocupa David y él quiere que Dios busque es «si hay en mí camino de perversidad.» O «Dios busca algo en mí que causa dolor.» David quiere que Dios le muestre alguna forma ofensiva, para que pueda ser corregida. La frase, «guíame en el camino eterno» está hablando del “camino de Dios», o «el camino de la justicia.» Así que la petición es que Dios le ayude a caminar de una manera no ofensiva, pero en el camino de Dios. Jer 17:9 Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? 10 Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.
«¿Hay pensamientos pecaminosos,
intenciones malas o deficiencias que le causan dolor Señor? ¿Estoy haciendo daño a otros? Se necesita humildad para orar como lo hizo David, porque cuando lo hacemos, estamos invitando a Dios a corregir nuestros problemas, para que podamos volver a tener comunión con el Señor, porque el pecado nos separa de nuestro Padre celestial. Es sólo cuando somos completamente honesto con Dios que Él nos ayuda con nuestros problemas, y nos muestra cosas que muchas veces estamos demasiado ciegos para ver. Tenemos que darnos cuenta de que Dios ya conoce todos nuestros «caminos de perversidad «, y probablemente otras personas también lo conocen.
El salmista solicitaba a Jehová que
viera lo más profundo de él y se lo mostrara abiertamente. O sea que le pedía a Jehová que le ayudara por decirlo así a buscar una aguja en un pajar. Definitivamente, encontrar lo más oculto y quizás hasta lo imperceptible, con el fin de ver sus errores y poder seguir progresando en sentido espiritual.
Jehová puede llegar a ver lo más
profundo de nosotros... hasta cosas que ni nosotros mismos podemos identificar.
CONCLUSIÓN
Por eso, roguemos a Jehová que nos
escudriñe y que nosotros aceptemos de buena manera los consejos que él nos da y hagamos los cambios necesarios para ser mejores siervos de él. Como creyentes, no debemos huir de Dios con nuestras luchas, debemos correr a Dios por ayuda y una relación renovada con Él. Cuando humildemente admitimos y confesamos nuestros pecados a Dios es cuando crecemos en nuestra vida cristiana. ¿Estamos dispuestos a orar como lo hizo David? Necesitamos un corazón humilde para pedir a Dios que nos muestre nuestras debilidades y nuestros pecados. Dios quiere escuchar tu queja para ayudarte.