El Sembrador
El Sembrador
El Sembrador
Deuteronomio 6:6-7
Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y
hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
Explicación:
El Señor nos enseña como la semilla de la palabra al ser plantada en el corazón del hombre tiene
efectos diferentes en muchas personas.
Lo importante de esta parábola es como Jesús nos presenta los cuatro tipos de terrenos.
Cada terreno simboliza el corazón del hombre en quien fue sembrada la palabra.
Cuando Jesús predico y hoy cuando cada uno de nosotros predicamos, son muchos lo que
escuchan la Palabra de Dios pero esta Palabra cae sobre tipos de corazones diferentes.
Los 4 tipos de terrenos:
• Los de junto al camino.
• En pedregales.
• Entre espinos.
• En buena tierra.
Somos nosotros los maestros los responsables de cultivar la tierra de sus vidas
para que estén listos a recibir la semilla de la Palabra de Dios. Al final ustedes mismos tienen
que decidir si quieren ser "tierra buena".
Historia:
¿Dónde estuvo Jesús cuando contó la parábola? A lo mejor antes de sentarse en la barca
estuvo caminando con sus discípulos y vieron a un sembrador trabajando en su
campo.
Pregunta a los niños
¿Han visto a alguien sembrar o alguien alguna ves a sembrado una semilla?
"¿Qué tipo de semilla sembraste?
¿Qué tenías que hacer antes de sembrar?
¿Qué tenías que hacer después de sembrar la semilla?
¿Cuáles fueron los resultados?"
Una vez hubo alguien que dijo cosas tan asombrosas e hizo cosas tan milagrosas que la gente
empezó a seguirle. Un día Él les contó esta parábola:
Mateo 13: 1-9 Enseñando figuras
Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar. Y se le juntó mucha gente; y entrando él
en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa. Y les habló muchas cosas por parábolas,
diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar. Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó
junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Parte cayó en pedregales, donde no había
mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; pero salido el sol, se
quemó; y porque no tenía raíz, se secó. Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la
ahogaron. Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a
treinta por uno. El que tiene oídos para oír, oiga.
CONCLUSION:
La semilla hace referencia a la Palabra de Dios: "El sembrador es el que siembra la palabra"
En esta parábola, el sembrador es el mismo Señor.
El suelo o terreno es el corazón humano. Se mencionan cuatro tipos diferentes en función de las
distintas formas en que la Palabra es tratada por los que la oyen.
La semilla es la misma en todos los casos y la diferencia en el rendimiento depende enteramente
del tipo de suelo donde es sembrada.
La parábola nos muestra que Satanás se esfuerza por impedir que la Palabra arraigue en los
corazones.
La manifestación de la vida auténtica se ve por el fruto. Aquellos que afirman haber recibido la
Palabra de Dios, deben comenzar inmediatamente a producir el fruto del Espíritu de Dios
La meta es dar fruto.
La parábola trata sobre nuestra responsabilidad frente al mundo y nos enseña que tenemos el
deber de predicar la Palabra con fidelidad.