Controlamos y Transformamos La Cólera Sesión N
Controlamos y Transformamos La Cólera Sesión N
Controlamos y Transformamos La Cólera Sesión N
Momentos Actividades
PRESENTACIÓN
Motivación y exploración. Iniciamos la sesión solicitando a nuestras y nuestros estudiantes que, individualmente,
15 MIN. anoten en un papel sus respuestas a las siguientes preguntas:
¿en qué situaciones sienten cólera? ¿Qué hacen en esas circunstancias? ¿Cómo expresan su
cólera? Luego promovemos que voluntariamente compartan sus respuestas.
DESARROLLO Señalamos a nuestras y nuestros estudiantes que la cólera es una emoción natural que todos
información y orientación. los seres humanos experimentamos. Lo inadecuado es cuando la cólera nos domina y
45 MIN. lastimamos a otras personas, por eso es importante reconocerla y aprender a controlarla o
manejarla.
Realizamos las siguientes preguntas a la clase: ¿cuándo sienten cólera? ¿Qué hacen para
tratar de calmarse? Anotamos en la pizarra las palabras claves. En esta parte, es importante
promover el diálogo y la participación espontánea de nuestros estudiantes.
Luego sugerimos las siguientes acciones que nos permiten controlar nuestro enojo y no
dañar a las y los demás:
Respirar lenta y profundamente (repetir varias veces).
Contar hasta diez.
Leer.
Escuchar música.
Pintar.
Comunicar lo que sentimos a una persona de confianza
Mencionamos que pondremos en práctica el respirar lenta y profundamente.
Iniciamos el ejercicio indicando a nuestras y nuestros estudiantes que inhalen lentamente,
tratando de llenar todo el cuerpo de oxígeno; que retengan el aire unos segundos y lo
expulsen suavemente por la boca. Luego deben repetir este ejercicio seis veces.
Después, invitamos a las y los estudiantes a comentar sobre los efectos relajantes de la
respiración.
Pedimos que elaboren frases que pueden ayudar a calmar la cólera cuando una persona la
experimenta, por ejemplo: “Piensa antes de actuar”, “Ponte en el lugar del otro”, “Respira
profundamente si te enojas”, etc.
¿Qué es la ira?
La ira es una respuesta natural a las amenazas que se perciben. Hace que el cuerpo libere adrenalina, que los
músculos se tensen y que la frecuencia cardíaca y la presión arterial aumenten. Es posible que tus sentidos estén
más agudos y que tengas el rostro y las manos enrojecidos.
Sin embargo, la ira se convierte en un problema solo cuando no puedes controlarla de una manera saludable.
También existen causas específicas que pueden desencadenar la ira, según lo que te enseñaron a esperar de ti
mismo, de los demás y del mundo que te rodea. Tu historia personal también alimenta tus reacciones ante la ira.
Por ejemplo, si no te enseñaron a expresar la ira en forma adecuada, es posible que reprimas las frustraciones y
te sientas desdichado, o que las acumules hasta que estalles de furia.
Las tendencias heredadas, la neuroquímica cerebral o las enfermedades no diagnosticadas también influyen en
la tendencia de una persona a tener arrebatos de furia.
Expresión. Este es el acto de expresar tu ira. La expresión puede abarcar desde una discusión razonable y
racional hasta un estallido de violencia.
Represión. Se trata de un intento de contener tu ira y, posiblemente, de transformarla en un comportamiento
más constructivo. Sin embargo, reprimir la ira puede provocar que la mantengas en tu interior o que la expreses
con un comportamiento pasivo-agresivo.
Calma. Esto sucede cuando controlas tu comportamiento externo y tus respuestas internas calmándote y
dejando que las emociones se apacigüen.
Lo ideal es optar por la expresión constructiva, al comunicar tus preocupaciones y necesidades de forma clara y
directa, sin lastimar a otros ni tratar de controlarlos.
Además, existe evidencia de que la ira y la hostilidad están vinculadas con las enfermedades cardíacas, la
presión arterial alta, las úlceras pépticas y los accidentes cerebrovasculares.
Aprender a controlar la ira es un desafío que se les presenta a todas las personas alguna vez. Considera buscar
ayuda para los problemas de ira si tu ira parece estar fuera de control, te hace hacer cosas de las que te
arrepientes o lastimar a las personas que te rodean, o está afectando tus relaciones personales.