El Sistema CAP-AMP Cíclico, Mapeo de Cromosomas (Biología)

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1.

El sistema CAP-AMP cíclico


Inducción del operón lac en ausencia de glucosa a través del sistema CAP - AMP cíclico. En presencia de Glucosa el operón
lac se expresa a muy bajos niveles a pesar de la presencia de lactosa. Cuando los niveles de Glucosa bajan, se activa la
enzima Adenilato Cilcasa que transforma ATP>AMPc.

A su vez, el AMPc, una sustancia que funcional en la señalización celular, se une a la proteína activadora de genes del
catabolismo (CAP), activándola El complejo CAP+AMPc se une a una secuencia localizada 60 pb corriente arriba del
promotor y favorece la unión de la polimerasa al mismo, acelerando la expresión del operón

Transcripción y condensación de la cromatina en eucariotas El ADN de las células eucariotas se encuentra enrrollado en
estructuras proteínicas con forma de “carrete” de denominadas nucleosomas. El nucleosoma está compuesto por proteínas
denominadas histonas del tipo H1, H2A, H2B, H3 y H4.

Transcripción en cromosomas politénicos de Drosophila

2. Plásmidos y conjugación
Proteína activadora de catabolitos (CAP) actúa como un sensor de la glucosa. Activa la transcripción del operón, pero
solamente cuando los niveles de glucosa son bajos. CAP detecta la glucosa indirectamente, a través de la molécula de “señal
de hambre” AMPc.

Cuando la lactosa está presente, el represor lac pierde su capacidad de unirse al ADN. Esto deja libre el camino para que la
ARN polimerasa se una al promotor y se transcriba el operón lac.

Resulta que la ARN polimerasa sola no se une muy bien al promotor del operón lac. Puede que haga algunos transcritos,
pero no hará mucho más a menos que consiga ayuda adicional de la proteína activadora de catabolitos (CAP). CAP se une a
una región del ADN justo antes del promotor del operón lac y ayuda a que la ARN polimerasa se una al promotor, lo que
promueve altos niveles de transcripción.

Algunos de estos plásmidos se comportan como episomas, es decir, que pueden integrarse en el cromosoma; en este caso, si
se produce la conjugación, se puede transferir el propio plásmido más un segmento adyacente del cromosoma, que a su vez
podrá recombinarse con secuencias homólogas del cromosoma del receptor, dando lugar a un cromosoma híbrido.

Tipos de plásmidos:
Debido a la amplia variedad de plásmidos bacterianos que existen, estos pueden clasificarse en función de:

Su capacidad de conjugación: plásmidos conjugativos o no-conjugativos:


En función de si los plásmidos tienen capacidad para tranferirse entre bacterias, encontramos los plásmidos conjugativos y
los plásmidos no-conjugativos. Los no-conjugativos no tienen la información genética necesaria para generar el proceso de
transferencia.

Existen otros tipos de plásmidos conocidos como plásmidos movilizables, que en principio son plásmidos no-
conjugativos, pero que tienen la capacidad de parasitar la estructura de un plásmido conjugativo y así pueden transferirse.

Plásmidos de resistencia:
Los plásmidos de resistencia también se denominan Plásmidos R y son aquellos que contienen la información genética
necesaria para conferir resistencia a algunos tipos de antibióticos que de otra manera, matarían la célula huésped.

Realmente contienen genes que codifican para una serie de enzimas capaces de destruir o modificar algunos antibióticos.
Algunos sólo confieren resistencia a un antibiótico, pero se han llegado a detectar plásmidos con 8 genes que implican
resistencias a múltiples antibióticos.

Estos plásmidos son en gran parte los responsables de que muchas de las bacterias actuales sean resistentes a
prácticamente todos los antibióticos que se utilizan a diario. Cuando una persona o un animal es tratado con antibióticos,
sólo sobreviven al tratamiento aquellos que son resistentes y por lo tanto, las poblaciones bacterianas resistentes son
seleccionadas y se hacen más prevalentes. ¿Quieres saber qué pasará cuando los antibióticos dejen de funcionar?

Plásmidos de fertilidad:
También denominados Factores F11, los plásmidos de fertilidad son aquellos que contienen genes relacionados con la
capacidad de conjugación. Algunos permiten la formación de pilis para llevar a cabo la transferencia de plásmidos, otros
facilitan la unión de la célula con otras células, otros aseguran la transferencia de del ADN.

Además, los plásmidos de fertilidad son los que contienen segmentos llamados secuencias de inserción que son los que
permiten la integración del plásmido en el ADN cromosómico del huésped.

Plásmidos bacteriocinogénicos:
Las bacteriocinas son unas sustancias que segregan las propias bacterias para destruir a otras bacterias. Los plásmidos
bacteriocingénicos son aquellos que les confieren a las bacterias la inmunidad frente a un determinado tipo de bacteriocina o
les confieren la capacidad de secretar un tipo en concreto de bacteriocina. Estos plásmidos, en definitiva, lo que permiten es
tener una ventaja competitiva respecto al resto de bacterias que no lo tienen.

Plásmidos de virulencia:
Los plásmidos de virulencia son aquellos que contienen genes que van a codificar para ciertos factores de virulencia en las
bacterias patógenas. De esta forma, a través de un plásmido, una bacteria puede llegar a ser mucho más perjudicial de lo
que era sin dicho plásmido.

Entre estos también encontramos ciertos plásmidos que codifican factores de colonización diferentes que hacen que la
bacteria sea capaz de invadir nuevos tejidos a los que antes no era capaz de llegar.

Plásmidos metabólicos:
En este gran grupo de plásmidos metabólicos se incluyen varios tipos diferentes:

Plásmidos degradativos: que permiten degradar sustancias específicas como el tolueno o el ácido salicílico y
digerirlas

Algunos plásmidos son capaces de crear nuevas rutas metabólicas para utilizar ciertas sustancias como fuentes de energía
que antes la bacteria no era capaz de utlizar.

Plásmidos responsables del establecimiento de una simbiosis entre las bacterias y algunos tipos de plantas o animales

La mayoría de los plásmidos conjugativos tienen sistemas que aseguran que la célula receptora no tenga ya un elemento
similar.

La información genética transferida a menudo beneficia al receptor. Las ventajas pueden incluir resistencia antibiótica,
tolerancia xenobiótica o la capacidad de usar nuevos metabolitos.6 La conjugación de plásmidos benéficos puede ser
considerada una endosimbiosis procarionte. Sin embargo, la conjugación de otros elementos génicos puede se vista como un
tipo de parasitismo y un mecanismo desarrollado para su propagación.

3. Factor F
En el contexto de la genética bacteriana la conjugación es un proceso de transferencia genética (intercambio de material
genético entre bacterias) que requiere contacto directo entre una bacteria y otra. En este proceso hay una bacteria donadora y
otra receptora. En el ejemplo clásico y mejor conocido de este proceso (en Escherichia coli), la estirpe donadora posee un
elemento genético llamado F, que puede existir en forma de plásmido (elemento circular con capacidad de replicación
autónoma) o en forma integrada en el cromosoma (en este caso se replica como parte del propio cromosoma).

 Los plásmidos se replican en manera similar al cromosoma bacteriano. En Escherichia coli se han reconocido muchos
plásmidos, entre ellos el F ("factor sexual") y el R (resistencia a los antibiótico). El plásmido F contiene 25 genes, algunos de
los cuales controlan la producción de los pilis , "tubos" que se extienden desde la superficie de las células
bacterianas"machos"( F+), a la de las células bacterianas hembras ( F-) .
El plásmido R confiere , a las células que lo poseen, resistencia a los antibióticos o drogas . Un plásmido R puede llegar a
tener hasta 10 genes que confieren resistencia.

Los plásmidos R pueden transferirse a otra bacteria de la misma especie, a virus e, inclusive, a bacterias de diferentes
especies.

La resistencia a los antibióticos ha sido encontrada en gérmenes patógenos causantes de enfermedades tales como: tifoidea,
meningitis, gonorrea y otras. Actúan proporcionando la información necesaria para destruir el antibiótico o para cincunvalar
el bloqueo que produce el antibiótico en la vía metabólica bacteriana.

4. Mapeo cromosómico
El mapeo cromosómico es uno de las actividades centrales de los genetistas. Lo primordial es entender las estructuras,
función y evolución del genoma y conocer la localización de los genes. 

El mapeo cromosómico es el proceso de determinar las ubicaciones de genes específicos en un cromosoma. Los
cromosomas son colecciones de ácido desoxirribonucleico o ADN, que contienen genes, aunque no se entiende bien
dónde exactamente estos genes se encuentran dentro de los cromosomas.

Creación de un mapa cromosómico es útil para entender cómo los genes dan lugar a los rasgos físicos en los seres vivos.
El mapeo cromosómico también puede ser importante en el tratamiento de la enfermedad al permitir a los médicos
identificar genes que causan enfermedades.

Todo organismo vivo contiene un conjunto de instrucciones de funcionamiento dentro de las moléculas largas llamada ADN.
Estas moléculas se pueden encontrar dentro de cada célula del organismo y se agrupan en los cromosomas. Las unidades
específicas de estas moléculas, llamadas genes, se han encontrado para ser responsable de rasgos físicos en el organismo,
tales como el color de ojos o tipo de sangre.

Algunos genes en un cromosoma tienden a ser heredados juntos con los genes adyacentes. Esta tendencia, llamado
ligamiento genético, fue descubierto en los primeros años del siglo XX. El descubrimiento de las ubicaciones de los genes en
los cromosomas, por lo tanto, podría facilitar la comprensión de cómo se heredan y se expresan en la descendencia genes.

La comprensión de los genes, por lo tanto, permite a los científicos a entender los rasgos físicos de los seres vivos.

¿Qué es el ligamiento genético?


Cuando los genes están en cromosomas separados o muy lejos en el mismo cromosoma se segregan independientemente. Es
decir, cuando los genes van hacia los gametos, el alelo que se recibe para un gen no afecta al alelo que se recibe para el otro.
En un organismo heterocigoto doble (AaBb), esto resulta en la formación de los 44 tipos posibles de gametos con igual
frecuencia, 25\%25%.

Los entrecruzamientos durante la meiosis ocurren en posiciones más o menos aleatorias a lo largo del cromosoma, entonces
la frecuencia de entrecruzamientos entre dos genes depende de la distancia entre ellos. Una distancia muy corta,
efectivamente, es un "blanco" muy pequeño para los sucesos de entrecruzamiento, lo que significa que ocurrirán pocos de
estos sucesos (comparado con el número de sucesos entre dos genes más separados).

Como se ilustra en el diagrama siguiente, los homólogos de cada par se separan en la primera etapa de la meiosis. En este
proceso, el lugar a donde van los cromosomas de la "madre" y del "padre" de cada par es aleatorio. Cuando estamos
siguiendo dos genes, esto resulta en cuatro tipos de gametos que se producen con la misma frecuencia.

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