MODELO MERO DECLARATIVA Post Morten

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CIUDADANA:

JUEZ DE PRIMERA INSTANCIA EN FUNCIONES DE MEDIACIÓN,


SUSTANCIACIÓN DEL CIRCUITO JUDICIAL DE PROTECCIÓN DE NIÑOS,
NIÑAS Y ADOLESCENTES DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL
ESTADO MIRANDA, EXTENSIÓN BARLOVENTO, CON SEDE EN GUATIRE.
SU DESPACHO.

Nosotras, xxxxxxxxx, venezolanas, mayores de edad, titulares de la Cédulas de


Identidad Nro. V-xxxxx, respectivamente, domiciliadas en la ciudad de Caracas y
aquí de tránsito abogadas en ejercicio, inscritas en el IPSA bajo los Nros:
xxxxxxxx, y a los efectos de dar cumplimiento con lo establecido en los artículos
174 y ordinal 9º del artículo 340 ambos del Código de Procedimiento Civil,
fijamos como DOMICILIO PROCESAL, Edificio La Previsora, Piso 3, Oficina 33,
Esquina de Conde a Principal, Parroquia Catedral, Municipio Libertador, Caracas;
actuando en este acto en nuestro carácter de apoderadas judiciales de la
ciudadana: XXXXXXXXX, venezolana, mayor de edad, de profesión u oficio:
T.S.U. en Informática, soltera, de este domicilio y titular de la cédula de identidad
Nº: V-xxxxxxxxx, carácter el nuestro que se evidencia del poder debidamente
autenticado ante la Notaría Pública Cuarta de San Cristóbal, Estado Táchira, en
fecha ocho (08) de Noviembre de dos mil diecisiete (2017), quedando anotado
bajo el Nº: 14, Tomo 200, Folios 99 hasta 101 de los Libros de Autenticaciones
llevados por la mencionada Notaría, que acompañamos al presente libelo en
original, distinguido con la letra “A”; ante usted, muy respetuosamente ocurrimos
para exponer lo siguiente:

LOS HECHOS
En el mes de junio del año dos mil cinco (2005), nuestra mandante inició una
UNIÓN CONCUBINARIA, con quien en vida respondiera al nombre de
XXXXXXXXX, venezolano, soltero, de profesión u oficio: T.S.U, Administración
Informática, titular de la Cédula de Identidad Nº: xxxxxxxxx, la cual mantuvieron
en forma ininterrumpida, pública y notoria, entre familiares, relaciones sociales y
vecinos de los lugares en donde vivieron, hasta el día del lamentable
fallecimiento de su concubino, hecho este acaecido el día veintiocho (28) de
enero de dos mil catorce (2014), tal como se desprende de acta de defunción que
anexamos al presente escrito marcada “B”; por lo que la relación concubinaria
entre nuestra mandante, ciudadana XXXXXXXXX, y su concubino ciudadano,
XXXXXXXXX, fue de ocho (08) años y siete (07) meses, procreando un niño de
nombre XXXXXXXXX, nacido en fecha veinticinco (25) de marzo de dos mil diez
(2010), en la actualidad de siete (07) años de edad, cuya partida de nacimiento
anexamos marcada con la letra “C”, siendo reconocido por su prenombrado
padre, ciudadano: XXXXXXXXX.
Ciudadana Juez desde el comienzo de la relación concubinaria ambos
ciudadanos se dedicaron a trabajar juntos, y gracias a que ambos tenían ahorros
anteriores a esa relación y con dinero que obtuvieron en los primeros meses de su
vida en común, formaron un patrimonio que lo obtuvieron con el aporte de nuestra
mandante producto de su trabajo y el de él, ya que ambos laboraban en la
empresa Avon Cosmetics de Venezuela, C.A., y amén de las labores propias del
hogar y el cuido esmerado que siempre tuvo nuestra representada con su amado
compañero, como se lo dio y se lo da a su hijo, producto de ese gran amor,
decidieron adquirir un inmueble constituido por una casa ubicada en la
Urbanización Castillejo, xxxxxxxxxxxx, con una superficie aproximada de
SESENTA Y SEIS METROS CUADRADOS CON SESENTA Y SEIS
DECIMETROS CUADRADOS (66,66 M2), cuyos linderos son: NORESTE:
Fachada Noreste (acceso); SUROESTE: Fachada Suroeste; SURESTE: Casa 2-
11 A; y NOROESTE: Fachada Noroeste; según consta de documento
debidamente REGISTRADO en fecha dieciséis (16) de febrero de dos mil seis
(2006), bajo el Nº: xxxxx, PROTOCOLO xxxxxº, TOMO xxxxxxx, por ante la
Oficina de Registro Inmobiliario del Municipio Autónomo Zamora, Guatire del
Estado Miranda, que acompañamos marcado con la letra “D”; en dicho
documento como puede verse aparece como propietario solamente el ciudadano
XXXXXXXXX, pero como lo señalamos anteriormente el mismo fue adquirido en
la vida en común que sostenía nuestra poderdante con el ciudadano
XXXXXXXXX.
Durante la vida en común, la pareja conformada por XXXXXXXXX y
XXXXXXXXX, fijaron diferentes domicilios, inicialmente fijaron su residencia en:
Final Intercomunal Guarenas- Guatire, xxxxxxxxxxx Guatire, Municipio Zamora,
Estado Miranda, donde vivieron aproximadamente ocho meses, una vez
realizada por ante la Oficina de Registro Inmobiliario la compra del bien inmueble
ubicado en: la Urbanización Castillejo, Conjunto Residencial Mucuchies,
distinguida con el Nro: 2-11B, Guatire, Municipio Zamora, Estado Miranda, se
mudaron al mismo, subsiguientemente cambiaron su residencia a la siguiente
dirección, Urbanización Parque Alto, Conjunto Residencial Las Lomas, Edificio A-
5, Piso 5, Apartamento 53, Guatire, Municipio Zamora, Estado Miranda, y
posteriormente se residenciaron en la Calle Atlantida número 2, Casa sin número,
Guatire, Municipio Zamora, Estado Miranda, lugar en el que habitaban, hasta el
fallecimiento del ciudadano XXXXXXXXX.
Debemos señalar que el ciudadano XXXXXXXXX, procreó una niña de nombre
XXXXXXXXX, nacida en fecha dos (02) de febrero de dos mil siete (2007), en la
actualidad de diez (10) años de edad, tal como se desprende de acta de
nacimiento, que acompañamos marcada “E”.
II
DE LAS PERTINENTES CONCLUSIONES
(Ordinal 5º, Artículo 340 del Código de Procedimiento Civil).

Respetada Juez, la presente ACCIÓN MERO DECLARATIVA DE


RECONOCIMIENTO DE UNIÓN CONCUBINARIA es procedente por las
siguientes razones:
PRIMERA: Nuestra pretensión es la declaratoria de la unión concubinaria que
nuestra mandante, mantuvo con el ciudadano XXXXXXXXX, desde el mes de
junio del año 2005, hasta el día veintiocho (28) de enero de dos mi catorce
(2014), fecha en la cual falleció, como se evidencia de los documentos anexados a
la presente demanda, marcados con las letras B, C y D.
SEGUNDA: En el presente caso, nos encontramos que en la “unión estable de
hecho entre los ciudadanos: XXXXXXXXX y XXXXXXXXX, antes identificados, es
determinada por la cohabitación o vida en común, con carácter de permanencia, y
que dicha unión se encuentra formada por una mujer soltera y un hombre soltero,
tal como lo dispuso la sentencia de la Sala Constitucional en fecha 15 de julio de
2005, no existiendo impedimentos dirimentes que impidieran dicha unión.
TERCERA: Por cuanto el concubinato se constitucionalizó, en virtud de haber sido
incorporado en el artículo 77 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, que establece estas uniones estables de hecho entre un hombre y una
mujer que cumplan los requisitos pertinentes produce los mismos efectos del
matrimonio. Asimismo, según sentencia dictada por la Sala Constitucional del
Tribunal Supremo de Justicia, en fecha 05 de julio de 2005, estableció todos los
efectos jurídicos que emanan de esa relación concubinaria, y la cual debe ser
declarada Judicialmente, irremediablemente, este Tribunal al tener en sus manos
todos los elementos jurídicos deberá declarar judicialmente la existencia de la
relación concubinaria que existió entre los ciudadanos XXXXXXXXX y
XXXXXXXXX, desde el mes de junio del año dos mil cinco (2005), hasta el
fallecimiento del ciudadano: XXXXXXXXX, ocurrido en fecha veintiocho (28) de
enero de dos mil catorce (2014).
CUARTO: Para dar cumplimiento a la doctrina vinculante de la Sala
Constitucional en Sentencia del 15 de julio de 2005, referente al recurso de
interpretación del artículo 77 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, el objeto en los casos como el de marras, es que la parte accionante
obtenga previamente un instrumento fehaciente mediante el cual se acredite la
existencia de la comunidad concubinaria, es decir, la declaración judicial
definitivamente firme que haya establecido ese vínculo, cuando exista, por
ejemplo: un interés posterior de repartir los bienes adquiridos en ese tiempo.
QUINTO: Acerca de la figura del concubinato, la doctrina Casacional ha sostenido
que: “estas uniones (incluido el concubinato son similares al matrimonio, y
aunque la vida en común con hogar común) es un indicador de la existencia
de ellas, tal como se desprende del artículo 70 del Código Civil, este
elemento puede obviarse siempre que la relación permanente se traduzca en
otras formas de convivencia, como visitas constantes, socorro mutuo, ayuda
económica reiterada, vida social conjunta, hijos, etc. (Sic). Unión estable no
significa necesariamente, bajo un mismo techo (aunque esto sea un símbolo
de ella) sino permanencia en una relación caracterizada por actos, que
objetivamente, hacen presumir a las personas (terceros) que se está ante
una pareja, que actúan con apariencia de un matrimonio o, al menos, de una
relación seria y compenetrada, lo que constituye la vida en común. Se trata
de una relación permanente entre un hombre y una mujer y no de una entre
un hombre y varias mujeres (así todas ellas estén en igual plano) y
viceversa` (Vid. Sentencia Sala Constitucional TSJ: 15-07-2005, Carmela
Mampieri Giuliani en amparo) con ponencia del Magistrado Jesús Eduardo
Cabrera Romero.
DEL DERECHO

Fundamentamos el ejercicio de la presente demanda en disposiciones de derecho


que a continuación indicamos:
 El artículo 16 del Código de Procedimiento Civil, establece: “Para
proponer la demanda el actor debe tener interés jurídico actual.
Además de los casos previstos en la Ley, el interés puede estar
limitado a la mera declaración de la existencia o inexistencia de un
derecho o de una relación jurídica. No es admisible la demanda de
mera declaración cuando el demandante puede obtener la satisfacción
completa de su interés mediante una acción diferente”.
 El artículo 77 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
preceptúa: “Se protege el matrimonio entre un hombre y una mujer,
fundado en el libre consentimiento y en la igualdad absoluta de los
derechos y deberes de los cónyuges. Las uniones estables de hecho
entre un hombre y una mujer que cumplan los requisitos establecidos
en la ley producirán los mismos efectos que el matrimonio”.
 El artículo 767 del Código Civil, establece: “Se presume la comunidad,
salvo prueba en contrario, en aquellos casos de unión no matrimonial,
cuando la mujer o el hombre en su caso, demuestre que ha vivido
permanentemente en tal estado aunque los bienes cuya comunidad se
quiere establecer aparezcan a nombre de uno solo de ellos. Tal
presunción sólo surte efectos legales entre ellos dos y entre sus
respectivos herederos y también entre uno de ellos y los herederos
del otro. Lo dispuesto en este artículo no se aplica si uno de ellos está
casado”.
 El artículo 211 del Código Civil, preceptúa: “Se presume, salvo prueba en
contrario, que el hombre que vivía con la mujer en concubinato
notorio para la fecha en que tuvo lugar el nacimiento del hijo ha
cohabitado con ella durante el periodo de la concepción”.

PETITORIO

Por los argumentos de hecho y de derecho anteriormente expuestos donde quedo


establecida la presunción de la comunidad Concubinaria, de acuerdo con los
requerimientos establecidos en el artículo 767 de nuestro Código Civil Vigente y
en esa misma forma quedó establecida la evidencia de la contribución de nuestra
mandante en la adquisición del incremento del patrimonio de ambos, es por lo que
acudimos ante su competente autoridad en nombre y representación de nuestra
mandante, para demandar como en efecto lo hacemos, se sirva declarar
oficialmente que existió una Comunidad Concubinaria entre el hoy finado,
ciudadano XXXXXXXXX y la ciudadana XXXXXXXXX, la cual comenzó en el
mes de junio del año 2005, de manera continua, ininterrumpida, en forma
pública y notoria hasta el día de su fallecimiento, ocurrido en fecha 28 de enero de
2014.
Por cuanto el ciudadano XXXXXXXXX, procreó dos hijos de nombre:
XXXXXXXXX y XXXXXXXXX, pedimos se le designe un Defensor Público de
Niños, Niñas y Adolescentes, para que los represente en el presente
procedimiento.
Igualmente, solicitamos la notificación de la Vindicta Pública.
Por último pedimos que la presente demanda sea admitida, sustanciada conforme
a derecho y declarada CON LUGAR en la definitiva con todos los
pronunciamientos de Ley.
En Guatire, en la fecha y lugar de su presentación.

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