Bosquejo Parasha 14 Vaerá
Bosquejo Parasha 14 Vaerá
Bosquejo Parasha 14 Vaerá
BOSQUEJO
PARASHÁ 14
VA'ERA
VaErá Significa: y me mostré
Shemot - Éx_6:2–9:35
Haftará Va'era Iejezkel Eze_28:25 - 29:21
Brit Hadashá: Ap 15: 1–16: 20, Lc_2:21–5:11; Ro_9:14-17; 2Co_6:14-7:1
Ex-Shemot 6:2-3
[2]Elohím habló a Moshéh מֹשֶׁ ה, Él le dijo: "Yo soy Adonái יהוה.
[3]Yo me aparecí a avraham אַ בְ ָרהָ ם, Itzjak יִצְ חַ קy Iaakov ַי ֲעקֹבcomo El Shaddai, pero con Mi
Nombre (esencial) יהוהno me di a conocer a ellos.
En el estudio de Torá de la semana pasada, Elohím se apareció a Moshéh al pie del monte Sinaí
en una zarza ardiente, instruyéndole para sacar a los israelitas de la esclavitud del faraón.
Debido a que Moshéh se percibía a sí mismo como lento para hablar, Elohím designó a su
hermano Aarón para que fuera su portavoz.
Cuando los hermanos fueron ante el faraón, este se negó a dejar ir a los israelitas. En lugar de
mejorar la situación, la esclavitud de los israelitas se volvió más opresiva. El faraón les pidió
que recogieran su propia paja (mientras que antes se les había proporcionado) y aún así
producían la misma cantidad de ladrillos.
Por supuesto, los hijos de Israel se quejaron con Moshéh, así que él llevó su sufrimiento ante
Elohím, quien le aseguró que las cosas cambiarían. Elohím le dijo que no solo salvaría a los
israelitas con una poderosa liberación, sino que Faraón los expulsaría de Egipto.
Yeshua. A veces, deben observarnos caminar en el poder de Elohím, ver señales y maravillas
antes de escuchar y creer.
A veces, debemos sembrar semillas fielmente, esperando pacientemente a que Elohím las
cultive.
1Co-Korintyim 3:6 א
[6]Yo planté la semilla y Apolos regó, pero fue Adonái יהוהquien la hizo crecer.
Como Elohím les había ordenado, Moshéh y su hermano Aharón regresaron a Faraón una y
otra vez, exigiéndole que dejara ir al pueblo de Elohím para que pudieran servirle en el
desierto.
Todo este relato de la redención de Israel de Egipto por parte de Elohím tiene un paralelo
espiritual en nuestra salvación del reino de las tinieblas, gobernado por haSatan (literalmente,
el Adversario) y el Reino de la Luz, gobernado por Elohím.
Somos liberados por la fe en Yeshua, el Cordero de la Pascua, no simplemente para irnos y
"hacer nuestras propias cosas". Como lo fue para los israelitas, el propósito de nuestra libertad
es servir al Elohím vivo.
“Porque nos rescató del dominio de las tinieblas y nos llevó al reino del Hijo que ama, en
quien tenemos redención, el perdón de pecados”. (Colosenses 1: 13-14)
[19]Entonces los magos dijeron a Far´óh: "Este es el dedo de Elohím." Pero Far´óh fue
vuelto de duro corazón, así que él no les escuchó, así como Adonái יהוהhabía dicho que
sucedería.
El faraón había endurecido su corazón y no quiso escuchar la voz de la razón, uno de los
signos más seguros de orgullo. Un hombre humilde recibirá corrección de buena gana, pero
una persona orgullosa se pondrá inmediatamente a la defensiva y no escuchará a los
demás. Esto puede provocar su caída.
Pr-Mishle 16:18
[18]La soberbia va delante de la destrucción, y la insensatez antes del fracaso.
Tenga en cuenta el contraste entre el faraón y Moshéh, quien incluso hoy en día es
considerado el hombre más humilde que ha caminado sobre la tierra. Cuando Jetro, el suegro
de Moshéh, lo corrigió sobre su enfoque para resolver disputas entre los israelitas en el
desierto, Moshéh escuchó y prestó atención.
Ex-Shemot 18:24
[24][Aliyá 3] Moshéh מֹשֶׁ הprestó atención al consejo de su suegro e hizo todo lo que él dijo.
Aunque el faraón prometió dejar ir al pueblo tras la plaga de piojos, endureció su corazón y no
cumplió su promesa. Como resultado, Elohím envió enjambres de moscas (arov) que
cubrieron la tierra, luego una enfermedad (dever) que mató a todo el ganado.
Elohím hizo una distinción entre Israel y Egipto. Si bien todo el ganado de Egipto murió, ni
uno solo del ganado de Israel cayó a la enfermedad.
Ex-Shemot 9:4
[4]Pero Adonái יהוהhará maravillosas distinciones entre el ganado de Mitsraim ִמצְ ַריִםy el de
los hijos de Israel – ישראלnada perteneciente a los hijos de Israel ישראלmorirá.'"
Esto subraya la importancia y la confiabilidad de estar en una relación de pacto con el Elohím
Todopoderoso. Ninguno de los mejores hechiceros y maestros de lo oculto de Egipto pudo
salvarlos de la mano de Elohím.
En la sexta plaga, cuando Elohím convirtió el polvo en furúnculos dolorosos (shejin) sobre el
hombre y la bestia, incluso los magos sufrieron y no pudieron pararse ante Moshéh a causa de
ellos.
Ex-Shemot 9:9-11
[9]Se convertirá en polvo fino sobre toda la tierra de Mitsraim ִמצְ ַריִםy se hará llagas
infecciosas sobre ambos hombres y bestias por todo Mitsraim מצְ ַריִ ם."
ִ
[10]Así que ellos cogieron cenizas de un horno, se pararon delante de Far´óh y las tiraron al
aire; y se convirtieron en llagas infecciosas sobre ambos hombres y bestias.
[11]Los magos no podían ni pararse en la presencia de Moshéh מֹשֶׁ הa causa de las llagas que
estaban en ellos como también en los otros Mitsraimim.
[26]Pero en la tierra de Goshen, donde estaban los hijos de Israel ישראל, no hubo granizo.
Esta semana, Elohím le dice a Moshéh que después de que termine de tratar con el faraón, el
faraón obligará a los israelitas a salir de Egipto.
6
Pero cuando Moshéh le dice al pueblo que Elohím está a punto de redimirlos con “un
brazo extendido y grandes juicios”, están tan desanimados por el aumento del trabajo
forzoso que no lo escuchan.
Ex-Shemot 6:9
[9]Moshéh מֹשֶׁ הdijo esto a los hijos de Israel ישראל. Pero ellos no querían escucharle, porque
estaban tan desanimados y la esclavitud de ellos era tan cruel.
Aunque Elohím ha escuchado el gemido de los hijos de Israel y está en el proceso de tomar
medidas para liberarlos, los israelitas tienen dificultades para recibir el mensaje, aunque
inicialmente lo habían recibido con gozo.
Como los hijos de Israel, algunos de nosotros podemos estar en situaciones desesperadas. Es
posible que inicialmente hayamos recibido la promesa de que nada es imposible para Elohím
con la esperanza y la confianza de que Él actuará en nuestro nombre para librarnos de
circunstancias difíciles.
Pero cuando continuamos experimentando esas circunstancias después de recibir la promesa, e
incluso encontramos que nuestra situación realmente empeora, es posible que nos sintamos
abandonados mientras clamamos a Elohím día y noche en busca de alivio.
Podríamos desanimarnos tanto que ya no queremos oír hablar de la liberación de Elohím.
En momentos como estos, debemos recordar que, aunque Elohím envió a Moshéh para liberar
a los israelitas, ellos no vieron los resultados de inmediato. Tomó tiempo.
Nuestra percepción del tiempo a menudo está en desacuerdo con la perspectiva eterna de
Elohím: "Mil años ante tus ojos son como ayer". (Sal 90: 4)
A menudo queremos ver resultados inmediatos y estamos impacientes cuando Elohím emplea
un proceso.
Elohím creó circunstancias que produjeron una liberación tan grande que nadie podía negar
que Su "brazo extendido y grandes juicios" fueron los responsables de los cambios en el
estado de los israelitas.
En esta Parashá, los egipcios son testigos de cómo Elohím se mueve a favor de los israelitas
con las primeras siete de las 10 plagas, todas las cuales también son juicios contra sus dioses:
1. Dam ( דָ ם/ sangre), juicio contra Hapi, el dios del Nilo (Éx 7: 14-24)
2. Tzefardea (ַ צְּ פ ְַּרדֵּ ַע/ ranas), el juicio contra Heket, la diosa de la fertilidad (Éx 7: 25-8: 15)
3. Kinim ( כִּ נִּ ים/ lice), juicio contra Ged, el dios de la Tierra (Éx 8: 16-19)
4. Arov ( עָרֹוב/ moscas o animales salvajes), juicio contra Khepri, dios de la creación / señor de
las moscas (Éx 8: 20–32)
5. Dever ( דֶּ בֶּ ר/ pestilencia), juicio contra Apis, dios de los animales (Éx 9: 1-7)
6. Sh'chin ( ְּשחִּ ין/ furúnculos), juicio contra Isis, la diosa de la curación, la naturaleza y la
paz (Éxodo 9: 8-12)
7. Barad ( בָ ָרד/ granizo), juicio contra Nut, diosa del cielo (Éx 9: 13–35)
A pesar de todos los milagros que realiza Moshéh y las plagas que caen sobre Egipto, el
corazón de Faraón permanece endurecido y se niega a dejar ir al pueblo de Elohím, tal como
Elohím le había advertido a Moshéh:
Ex-Shemot 7:3-5
7
[1]¡Eli! ¡ אליEli, ( אליmi Todopoderoso, mi Todopoderoso) ¿Por qué te separas de mi? Lejos
estás de mi salvación y de las palabras de mi angustioso clamor. Elí Elí lemaná shavactáni,
rajóq mishu'atí dibré shaagatí.
[2]Mi Elohím אֱ ֹלהִ ים, en el día clamo a ti, pero Tú no respondes; asimismo por la noche, y no
tengo alivio.
Estas fueron las mismas palabras que Yeshua gritó en el madero de ejecución romano: "¿Elí
Elí lemaná shavactáni?" (Elohím mío, Elohím mío, ¿por qué te separas de mi?)
No hay nada de infiel en clamar a Elohím cuando estamos siendo oprimidos o en una situación
desesperada. Más bien, es apropiado hacerlo, porque solo Él tiene el poder para librarnos.
Yeshua vio esta impotencia en el pueblo judío y envió a sus discípulos para que fueran los
obreros que devolvieran las ovejas al rebaño.
Al final, sin embargo, no solo el pueblo judío es como ovejas. Toda la humanidad es así,
incluso aquellos que parecen tenerlo todo. De hecho, a veces las personas que lo tienen todo
son las más angustiadas, desanimadas y vacías.
Todos necesitamos al Buen Pastor.
Desde el norte, el sur, el este y el oeste, el pueblo de Elohím está regresando a la Tierra de
Israel desde todas las direcciones.
Pero Elohím no se contenta con devolver a su pueblo a la tierra que les prometió.
Su intención es que todo Israel more con seguridad en la Tierra y lo conozca:
Ez-Iejezqel 28:26
[26]Ellos tendrán seguridad cuando vivan allí, edificando casas y plantando viñas; sí, ellos
vivirán en seguridad, una vez Yo haya ejecutado juicios contra todos sus vecinos
escarnecedores. Entonces ellos sabrán que Yo soy Adonái su Elohím."
Esta profecía no se ha cumplido en su plenitud. Estamos construyendo casas y plantando
viñedos en la Tierra, pero los terroristas continúan conspirando para derramar la sangre
inocente de los hijos de Jacob.
Todavía no vivimos en seguridad y protección.
Hoy, la comunidad internacional parece empeñada en dar Tierra Prometida a aquellos que
intentan reclamar la Tierra como propia.
Adonái ejecutará juicio sobre aquellos que se esfuercen por hacerlo.
¡Fueron necesarias diez terribles plagas antes de que el faraón estuviera dispuesto a dejar ir al
pueblo de Elohím! Egipto fue casi destruido para sacar a los hijos de Israel del exilio y
llevarlos a su propia tierra.
Estas plagas no fueron desastres naturales aleatorios, sino el juicio de Elohím sobre cada uno
de los dioses falsos de Egipto. Con cada plaga, Elohím demostró Su poder supremo para que
supieran que Él, Adonái, es el Único Elohím Verdadero.
Es más, estas plagas también se parecen a las plagas del tiempo del fin que se derramarán
sobre la tierra.
Ap-Jazón 8:7-8
[7]El primero sonó su shofar; y hubo granizo y fuego mezclado con sangre, y fueron lanzados
a la tierra. Una tercera parte de la tierra se quemó, una tercera parte de los árboles fue
quemada, y toda la hierba verde fue quemada.
[8]El segundo malaj sonó su shofar, y lo que lucía como una enorme montaña ardiendo fue
arrojada al mar. Una tercera parte del mar se convirtió en sangre,
Y como la octava y la novena plaga, también habrá plagas de langostas
Ap-Jazón 9:3
[3]Entonces del humo de la tierra salieron langostas, y les fue dado poder, como el poder que
los escorpiones tienen en la tierra.
y oscuridad profunda
Ap-Jazón 8:12
[12]El cuarto malaj sonó su shofar, y la tercera parte del sol fue dañada, también la tercera
parte de la luna y la tercera parte de las estrellas; así la tercera parte de ellas fue oscurecida,
el día tuvo un tercio menos de luz, y asimismo la noche.
Sin embargo, así como el faraón no se arrepintió debido a la dureza de su corazón, incluso
después de severos juicios, las personas que no son destruidas en estas plagas del tiempo del
fin no se apartarán de sus pecados:
Ap-Jazón 9:20-21
10
[20]El resto de la humanidad, aquellos que no fueron muertos por las plagas, ni aún se
volvieron de lo que habían hecho con sus propias manos; no dejaron de adorar demonios e
ídolos hechos de oro, plata, bronce, piedra y madera, los cuales no pueden ver, ni oír, ni
caminar. Sal 115:4-7; 135:15-17; Dan 5:23
[21]Y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de hacer brujerías; tampoco dejaron de robar
ni de tener relaciones sexuales prohibidas.
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