Relación Cliente Consultor
Relación Cliente Consultor
Relación Cliente Consultor
4 La relación cliente-consultor
La relación entre ambas partes, no es fácil de lograr. Para que sea efectiva, tanto los
consultores como los clientes, deben de conocer a fondo todos los factores que están en juego
en la situación a atender, tanto los humanos, como los administrativos y los técnicos, al igual que
los posibles errores que se llegan a presentar durante el trabajo conjunto. Es por ellos que es
menester, el que ambas partes, deban lograr generar confianza en la relación, de lo contrario, no
se logrará el conjuntar el esfuerzo y dedicación necesarios para que la relación posibilite que la
intervención llegue a buen puerto.
Este apartado trata uno de los aspectos más importantes para cualquier empresa de
consultoría, conseguir clientes, se abordarán no sólo los métodos convencionales de
comercialización y obtención de clientes, sino también algunos aspectos que pueden no ser tan
obvios. Llamamos a estos "métodos indirectos” o “contacto en frío”, y puede llegar a despertar el
interés del cliente y éste posiblemente retendrá el nombre del consultor para el futuro. Es raro
que un contacto en frío dé origen inmediatamente a la asignación de una tarea de consultoría.
La práctica indica que se deben integrar tanto los métodos directos como los indirectos para
obtener clientes y acercarse a ellos.
Una vez realizado el contacto, y que el cliente llama al consultor, se generan una serie de
reuniones; la primera de ellas debe considerarse como una breve oportunidad para conquistar la
confianza del cliente y causarle una impresión favorable.
Cuando se trata de una firma de consultoría, quienes deben de asistir, por regla general,
son los asociados o los miembros de más alto nivel. Este mismo grupo debe de estar presente en
la firma del contrato, una vez que el cliente ha decidido que la consultoría se lleve a cabo en su
organización. Para la realización de las tareas se debe organizar otro grupo conformado por
subalternos.
En esta fase inicial es en donde el consultor debe lograr hacer ver al cliente que el trabajo
de consultoría requiere de colaboración entre las dos partes, explicándole los beneficios de la
colaboración en este proceso, por las siguientes razones:
Quién tiene el poder real para adoptar decisiones relacionadas con la consultoría en
todas sus etapas.
Los preparativos son, en gran parte, una etapa de adaptación, el consultor ha de estar
convencido de que es la persona idónea o que su empresa de consultoría es competente para
abordar los problemas de ese cliente en particular. Es en esta etapa en donde se debe gestar
una confianza mutua así como empatía, en donde también se acuerden plenamente las reglas
del juego y se dé comienzo al cometido, con optimismo compartido y una visión de lo que se
puede conseguir.
Una vez que la primera reunión da como resultado el convencimiento por ambas partes
para seguir adelante, es preciso examinar las condiciones de la colaboración. El consultor se
debe dar a la tarea de realizar un primer diagnóstico, cuyas actividades deben incluir: