Csj. 1ra Fase

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FUNDAMENTOS DE LA CONSEJERÍA PSICOLÓGICA Y HABILIDADES BÁSICAS

DEL CONSEJERO

CONSEJERÍA VS. PSICOTERAPIA:


Los autores coinciden en: Tanto la consejería como la psicoterapia tienen efectos terapéuticos
El fin de ambos es brindar ayuda al cliente/paciente
La diferencia se centra en: El nivel de especificidad (la formación del consejero y el terapeuta
son diferentes) El fin de la consejería es ayudar a las personas con problemas adaptativos o
situacionales (personas “normales”) El fin de la psicoterapia es ayudar a las personas a
conseguir un cambio en la personalidad y conducta del cliente (implica la noción de
enfermedad mental)

¿Tenemos una clara delimitación?


En muchos terrenos la aplicación de consejería y de psicoterapia no es excluyente sino
complementaria, sin llegar a establecerse una delimitación precisa “La psicoterapia se
relaciona con la psicología clínica y sus ramas afines mientras que el asesoramiento tiene
que ver con psicología organizacional, educativa y otras ramas relacionadas con estos
campos. Sin embargo, el asesoramiento también puede ser utilizado en el campo clínico.”

Definiendo la Consejería:
El término “counseling” es, en inglés, un gerundio, que como tal indica una noción de proceso,
una acción temporal de continuidad y despliegue. La traducción no es precisa y pueden
usarse diversos términos para referirse a ella: orientación, consejo, consultoría, asesoría…
hasta tutoría. La palabra consejo proviene del latín “consilium”, parecer o dictamen que se da
o toma acerca de una cosa. Significa también la unión de “con” o “juntos” más “tomar” o “asir”
lo que integrado sería algo así como “tomar juntos”.
El counseling es un proceso de apoyo, es una filosofía que trata de definir un saber estar con
las personas. Son técnicas de apoyo emocional, que con su manejo adecuado en manos de
profesionales, son capaces de ayudar a las personas a resolver sus propios conflictos, si se
les da la oportunidad”. Es una profesión que promueve el autoconocimiento necesario para
producir cambios, tomar decisiones, resolver conflictos en función de elaborar nuevas
alternativas e incorporar recursos internos que favorezcan su desarrollo personal y cooperar
en una búsqueda de lo trascendental”. Es el proceso mediante el cual el consultor ayuda al
consultado a interpretar hechos relacionados con una elección, un plan o ciertos ajustes que
necesita hacer".

DIFERENTES TIPOS DE CONSEJERÍA O COUNSELING

- El método sintomático-sugestivo: La función del terapeuta, según el método


sintomático sugestivo, consiste en distraer al paciente del problema que le obsesiona,
aconsejándole técnicas, medidas o soluciones referidas a los síntomas, sin
preocuparse de que quizás el problema sintomático sea solamente el aspecto
manifiesto de una frustración o conflicto latente
- El método del counseling directivo: El consejero directivo se dirige principalmente
a la razón del paciente, y se ocupa ante todo de responder al contenido conceptual
de las preguntas que se le hacen en relación a los padecimientos del sujeto, o de sus
síntomas.
- El metodo counseling no directivo: Este tipo de intervención sistemática supone
una actitud básica, caracterizada por el hecho de centrarse sobre la persona del
paciente, y no sobre sus síntomas, ni incluso sobre sus problemas. El consejero
adopta una actitud de respeto positivo incondicional hacia la persona del paciente, con
la convicción de que en él existen todos los recursos necesarios para su propia
reconstrucción y orientación. Por lo tanto el consejero no introduce nuevas ideas,
dejando en manos del paciente la responsabilidad de toda iniciativa en la conducción
de la entrevista. • Postulados fundamentales de la actitud no directiva y
centrada en la persona de Carl Rogers

Factores comunes:

• Persona en condición de paciente, cliente, asesorado o consultante • Persona en


condición de terapeuta, asesor o consejero • Recolección de información •
Establecimiento de una relación positiva: empatía, calidez, tolerancia, aceptación,
comprensión y comprehensión… • Utilización de técnicas específicas • Entender el
tratamiento o asesoramiento como proceso • La existencia de metas autopropuestas
por el cliente

LA RELACIÓN DE AYUDA

Actitudes básicas del terapeuta que favorecen la relación:

1. Escucha Activa: Recibir mensajes/ Procesar datos aprendidos / Emitir respuestas de


Escucha
2. Empatía: La escucha activa → Respuestas de escucha “ya veo”, “sí”, “entiendo”,
“uhm”. Tratar aquellos aspectos que son importantes para el cliente. Clarificación
Paráfrasis y síntesis o recapitulaciones. Reflejo del sentimiento.
3. Aceptación incondicional: Compromiso hacia el cliente / Esfuerzo por comprender
4. Autenticidad: Conductas no verbales / Poco énfasis de su rol, autoridad o estatus por
parte del terapeuta/ Espontaneidad o capacidad para expresarse con naturalidad /
Autorrevelación.
Características del terapeuta que favorecen la relación: Cordialidad / Competencia /
Confianza / Atracción / Grado de Directividad
Otros factores:
- Lo que se debe evitar:
Exclamaciones de sorpresa negativa, expresiones de excesiva preocupación, • juicios
moralistas, afirmaciones dogmáticas, manifestaciones de intolerancia •
manifestaciones de impaciencia, cansancio, aburrimiento • falsas promesas,
tranquilizaciones innecesarias • discusiones políticas o religiosas, disputas o
polémicas con el cliente • agobiar al cliente con sus propias dificultades, • quitar
importancia a los aspectos positivos del cliente, culpar al cliente por sus fallos, •
explorar material traumático cuando existe una gran resistencia, hacer
interpretaciones profundas prematuras • criticar, amenazar, ridiculizar o rechazar al
cliente.

- Lo que se debe procurar


mantener una mentalidad abierta, incluso hacia las actitudes irracionales, • respetar
el derecho del cliente a expresar valores y preferencias diferentes de los del terapeuta
• hacer comentarios amables o comprensivos cuando esté indicado. • El humor es
también una habilidad importante. Empleado con medida y adaptado a la situación y
al cliente es muy útil para reducir el nivel de tensión y salvar momentos de apuro

HABILIDADES DE COMUNICACIÓN
HABILIDADES DE ESCUCHA
- Actitud general de escucha
Supone una disposición a recibir la comunicación proveniente del paciente y se
traduce en unas manifestaciones físicas, en forma de posturas, gestos, movimientos,
miradas, expresiones faciales, tono, volumen o ritmo de la voz, ritmo de la respiración,
indumentaria... A través de esta actitud el entrevistador intenta concentrarse en el
mundo de significados del paciente y manifestar su interés por él.
- Postura física del terapeuta/consejero
- Actitud interna del entrevistador:
Silencio intrapsíquico: El entrevistador se compromete a dedicar sus reflexiones
al paciente durante la entrevista y no dedicarse a pensar en otras cosas.
Suspensión del juicio El entrevistador se prepara para intentar comprender el
mundo de valores y significados de paciente. Debe comprender cómo estos se
manifiestan en su comportamiento. Juzgar el comportamiento del paciente según
los propios valores del terapeuta, no sólo no ayuda, sino que impide hacer esta
operación.

ATENCIÓN A LO NO EXPLÍCITO
Discurso incompleto
En una conversación con un interlocutor habitual, no es necesario explicar muchas
cosas que, por la relación anterior, o por la cultura del microgrupo, pueden darse por
sobreentendidas. En la conversación terapéutica, con mucha frecuencia, son
precisamente estos sobreentendidos los que hay que convertir en objeto de discusión.
• La detección de estos fenómenos ayuda a abrir campos de conversación que de otro
modo no se hubieran producido.
Contenido implícito
Se habla de significados que no están explícitamente dichos pero que pueden
deducirse de lo que el entrevistado dice Estos significados pueden ser más o menos
conscientes para el paciente y su exclusión del discurso explícito puede ser más o
menos deliberada. • El contenido implícito acá también incluye el contenido latente o
inconsciente.
Discurso evasivo
En ocasiones la narración del paciente parece evitar selectivamente determinados
temas. La indagación de esa evitación puede ser crucial para la entrevista.
Omisiones
El paciente se ha referido con detalle a aspectos de alguna parte de su vida, pero no
ha mencionado personajes o hechos que pudieron ser relevantes.
Discurso recurrente (temas repetidos)
En ocasiones hay temas que aparecen reiteradamente bajo la forma de diversas
escenificaciones en el relato que un paciente hace de su vida. • Entre los relativamente
frecuentes está el haberse sentido despreciado o maltratado, el haber fracasado, el
no haber sido recompensado como se merecía, el haber sido incapaz de algo...
Discurso recurrente (temas repetidos) • En ocasiones hay temas que aparecen
reiteradamente bajo la forma de diversas escenificaciones en el relato que un paciente
hace de su vida. • Entre los relativamente frecuentes está el haberse sentido
despreciado o maltratado, el haber fracasado, el no haber sido recompensado como
se merecía, el haber sido incapaz de algo

ATENCIÓN A LA COMUNICACIÓN NO VERBAL


Apariencia general • Autocuidado • Actitud corporal • Expresión facial • Voz • Reacciones
neurovegetativas • Características físicas
ATENCIÓN A LA RESPUESTA EXPERIMENTADA POR EL TERAPEUTA
- Utilización del Yo Observador
- Observación de la contratransferencia: El terapeuta/consejero debe prestar atención,
a las emociones y pensamientos que experimenta en la consulta. En primer lugar,
debe reconocerlos. En segundo lugar debe plantearse en que medida tales
sentimientos se corresponderían con la respuesta que probablemente hubieran
experimentado la mayoría de las personas si se encontraran en esa situación y en
que medida responde a algo más personal
FACILITACIÓN DE LA ACTIVIDAD NARRATIVA DEL PACIENTE
Facilitadores no verbales y de intervención verbal mínima: • En la conversación terapéutica,
como en las conversaciones ordinarias, fijar la mirada en la del interlocutor, levantar las cejas,
hacer un movimiento con la mano, inclinarse hacia el que habla, emitir un sonido inarticulado
(ahá...) o una palabra como “ya”, “si” o “comprendo”, actúan como señales del que escucha
para animar al que en ese momento habla, a seguir haciéndolo.
- Paráfrasis:
La paráfrasis es una repetición de la idea que acaba de expresar el paciente (aunque
no necesariamente de lo último que ha dicho). Para ello el terapeuta, utiliza las mismas
palabras u otras, que permiten una formulación que al terapeuta le parece más clara
o que pueda transmitir al paciente la idea de que el terapeuta se ha interesado por lo
dicho y lo ha comprendido. La paráfrasis ayuda al paciente a centrarse en un tema o
un aspecto del mismo • Se trata de un tipo de intervención que es especialmente útil
con los pacientes a los que les cuesta centrarse en el relato de acontecimientos (a
veces porque se ven desbordados por las emociones implicadas en ellos) o a los que
les cuesta reconocer la naturaleza de éstos acontecimientos y utilizar el término más
frecuente
La paráfrasis puede emplearse con diversos propósitos: a. Comunicar al cliente que
se ha comprendido su mensaje y permitirle expresar su posible desacuerdo sobre lo
que se le dice. b. Reforzar ideas expresadas por el cliente. c. Animarle a profundizar
en ciertas ideas o pensamientos o a centrarse en determinada situación, suceso o
conducta. d. Clarificar la esencia de un problema y ayudar así a tomar decisiones. e.
Enfatizar el contenido cuando se considera prematuro o contraproducente centrarse
en los sentimientos. • Sin embargo, un uso excesivo puede dar la impresión al paciente
de que el terapeuta no aporta nada a lo que él está contando.
A diferencia del reflejo, se centra en los acontecimientos, comportamientos y
pensamientos, y no en las emociones que podemos suponer implicadas en ellos. •
PARAFRASIS: → Una formulación en palabras del terapeuta de un contenido ya
expresado por el paciente

- El reflejo empático:
El término empatía se refiere a la capacidad de ponerse en el lugar de otro y darse
cuenta de cuáles son sus sentimientos y cómo es su experiencia de esa situación. •
Términos relacionados • Aptitud empática -→ Capacidad • Actitud empática →
Disposición • Intervenciones empáticas • Escucha empática → Disposición para
escuchar • Repuesta empática →Hacer ver esa disposición. El reflejo de sentimientos
o respuesta empática es una de las habilidades más importantes para el
entrenamiento de consejeros/psicoterapeutas • Es uno de los tipos de intervención
más frecuentes • Su uso se relaciona con buenos resultados en la terapia • La
respuesta empática es muy infrecuente en las situaciones cotidianas

Formula del reflejo: Paráfrasis (Una formulación en palabras del terapeuta de un


contenido ya expresado por el paciente) MAS Reflejo (Aseveración que pone en
relación esta situación con un sentimiento o emoción que, generalmente, no ha sido
explícitamente referido por el paciente pero que el terapeuta puede intuir en base a
expresiones previas, a la observación de la conducta no verbal o su conocimiento
previo del paciente o de la situación)
El reflejo empático estaría integrado por dos términos. • El primero hace mención a
una emoción. • El segundo a una situación, unos acontecimientos o unos
pensamientos. • Ambos están unidos por un elemento de conjunción que suele tener
la forma de cuando o porque

El reflejo puede emplearse con diversos propósitos: ayudar al cliente a sentirse


comprendido y permitirle expresar su posible desacuerdo sobre lo que se le dice; b.
animarle a centrarse en los sentimientos y, de este modo, percatarse de su ocurrencia,
intensidad o importancia; c. animarle a expresar más sentimientos sobre personas,
sucesos o situaciones; d. permitirle discriminar entre diferentes tipos de sentimientos;
e. no entrar en conflicto con un cliente que expresa sentimientos negativos sobre la
terapia o el terapeuta con los pacientes que narran multitud de hechos pero como sino
les concernieran personalmente • es un instrumento poderoso para conseguir
actualizar experiencias en la consulta y poder trabajar con sentimientos que están
siendo experimentados en el aquí y ahora. Las dificultades para la construcción de
respuestas empáticas emanan muchas veces de la propia dificultad del terapeuta para
reconocer y nombrar emociones

Imagen emociones
- Recapitulación:
Es un resumen o síntesis que hace el terapeuta de algo que ha sido comunicado
previamente por el paciente, generalmente a través de una intervención más larga o
intercalada con otra información. • Se compone de un conjunto de dos o más
paráfrasis o reflejos empáticos. • Es frecuente al inicio y, especialmente, al final de las
sesiones. • Al igual que la paráfrasis y el reflejo, da la oportunidad al cliente de corregir
la percepción del terapeuta. La recapitulación puede emplearse con diversos
propósitos: a. Unir los múltiples elementos (p.ej., afectivos, cognitivos,
comportamentales, interpersonales, etc.) que ha ido comunicando el cliente para
darles una estructura y/o clarificar la información; b. Identificar temas comunes que se
ponen de manifiesto después de diversas intervenciones del cliente o, incluso, de
varias sesiones; c. Hacer resúmenes de aspectos importantes; d. Resumir el progreso
logrado. e. Volver a centrar la conversación en un tema del que ha empezado a
apartarse. f. Puede servir para interrumpir un discurso que tiende a perderse en
detalles irrelevantes
- Las Preguntas
Las preguntas pueden hacerse con distintos propósitos. • Por una parte, las preguntas
pueden emplearse con fines de evaluación para solicitar nueva información sobre los
problemas y características del cliente o sobre factores relacionados con dichos
problemas. • Por otra parte, y con una finalidad de cambio terapéutico, pueden
hacerse preguntas para hacer reflexionar al paciente sobre algún aspecto o facilitarle
la consideración de nuevas perspectivas sobre sus problemas Las preguntas
constituyen el tipo de intervención más frecuente para los terapeutas de todas las
orientaciones, incluidas las más prescriptivas. • La pregunta no sólo sirve para recabar
información. Es un instrumento poderoso de guía del proceso conversacional La
pregunta puede ser vivida por el paciente como una exigencia o una intromisión, lo
que convertiría la entrevista en un interrogatorio. Por ello se recomienda formular la
pregunta de modo que vaya precedida de una paráfrasis o reflejo empático que sirvan
para señalar la pertinencia de la pregunta.
o Preguntas Abiertas: • Una pregunta abierta es una invitación a desarrollar un
tema, y se caracteriza por solicitar una respuesta que no puede reducirse
fácilmente a un sí, o un no o a la aportación de un dato concreto. • En
psicoterapia las preguntas no tienen por qué tener gramaticalmente la forma
de pregunta. • Frases que comienzan con: “Cuénteme algo acerca de...”, “me
gustaría que me dijera algo más sobre...” o “no me ha quedado claro...”, son,
en la conversación terapéutica, funcionalmente preguntas (aunque las dos
últimas tienen también un componente de autorrevelación). Las preguntas
abiertas suelen comenzar con las partículas ¿qué...?, ¿cómo...?, o ¿por
qué…? Más que por ¿quién…?, ¿dónde...?, o ¿cuándo...? (Sevel, Cumminns
y Madrigal, 1999). • En general, las preguntas que empiezan con “¿por
qué...?”. Son más problemáticas y deben ser utilizadas con cautela. • Parecen
alentar la búsqueda de causalidades lineales simples, que son infrecuentes en
lo relativo al comportamiento humano, y más al que motiva la demanda de
psicoterapia. • Lo frecuente es que el paciente no pueda precisar con
seguridad las motivaciones de sus actos. • Las preguntas que comienzan con
“¿Por qué?” resultan más fácilmente acusatorias, lo que no sólo no favorece
el flujo de la conversación terapéutica, sino que puede poner en marcha
maniobras defensivas que lo entorpezcan seriamente.
Las P. Abiertas puede emplearse con diversos propósitos: • Iniciar la entrevista,
• Introducir nuevos temas, • Lograr mayor amplitud de información, • Solicitar
ejemplos específicos y • Motivar al cliente a comunicarse.
o Preguntas cerradas • Son preguntas que, a diferencia de las anteriores,
solicitan una respuesta que puede proporcionarse fácilmente a través de un sí
o un no, la aportación de un dato concreto como un número, el nombre de un
lugar o de una persona, o una oración breve. • Son más frecuentes en las
entrevistas iniciales. • Incrementan la precisión en la información que se
recolecta. • Limitan las posibilidades de evolución de la conversación
terapéutica (lo que, a veces, como con un paciente evasivo, puede ser algo
buscado, pero generalmente no lo es) y reducen la capacidad de decisión del
paciente sobre la misma. • El abuso de este tipo de preguntas por parte del
terapeuta puede traducirse en que temas de importancia, no anticipados por
él, queden excluidos de la conversación. Las P. Cerradas puede emplearse
con diversos propósitos: • Precisar o cuantificar la información obtenida. •
Identificar parámetros de un problema y contrastar hipótesis formuladas. •
También son una de las estrategias disponibles con clientes que divagan o
hablan demasiado o con pacientes a los que les cuesta inicialmente hablar de
sus problemas
Algunas pautas: • Tener claro el propósito que se persigue • No generar y
comprobar hipótesis demasiado rápidamente • Emplear un lenguaje que sea
comprensible para el paciente • En el caso de facilitar alternativas de respuesta
en las preguntas cerradas, hay que procurar que no sea sólo una, sino varias,
de modo que se eviten las sugerencias de respuesta. • Tener en cuenta
también la forma en que se formula una pregunta “¿le fue bien ese
tratamiento?” “¿cómo le fue ese tratamiento: mal, regular, bien?”.
- Clarificación
La ignorancia del terapeuta, su incapacidad de conocer el significado de las cosas sin
ayuda del paciente es el auténtico motor de la conversación terapéutica. • Solicitar
clarificación no es técnicamente difícil. • Lo que es preciso adiestrar es la habilidad de
detectar sobreentendidos y requerir que se aclaren con un significado personal. Y la
capacidad de detectar el grado de personalización que puede lograrse en un momento
dado.
Aquellas intervenciones del terapeuta por las que éste, solicita del paciente que
especifique (que aclare) el significado en concreto de una palabra o algún aspecto de
su narración, que, generalmente implica un sobreentendido o se refiere con términos
ambiguos o convencionales que no permiten precisar su significado personal. •
Generalmente la clarificación se busca a través de una pregunta. “¿qué quiere decir
cuando...?”, “¿puede aclarar qué...?”, “¿a qué se refiere con…?” o “¿quiere decir
que...?”, “¿está diciendo que...?”
Algunas pautas: Si una persona no clarifica lo que quiere decir, puede solicitarse una
nueva aclaración y emplear, si es preciso, preguntas cerradas para concretar el
posible significado de la información. • Si un cliente muestra renuencia a clarificar algo,
puede restársele dramatismo al tema o posponer el abordaje de este. • Cuando un
cliente está exponiendo un problema por primera vez, conviene dejarle hablar y no
interrumpirle solicitando clarificaciones frecuentes; estas pueden hacerse más
adelante una vez que ha tenido la oportunidad de explayarse y ser escuchado.
- Silencio
El silencio es un instrumento poderoso. • Da tiempo y espacio para la construcción de
experiencias por parte del paciente. • Es una invitación a seguir hablando o una
demostración de interés. Pero puede ser otras muchas cosas…. • Puede ser
interpretado como una muestra de desinterés o desorientación, por ejemplo. Por ello
el uso del silencio es una de las habilidades a incluir en el entrenamiento de todo
terapeuta

FACILITACIÓN DE LA GENERACIÓN DE NARRATIVAS ALTERNATIVAS ESPECÍFICAS O


COMPETENCIAS DE ACCIÓN

- Confrontación
La confrontación consiste en que el terapeuta describa específicamente (y no en
términos vagos) al cliente una posible discrepancia entre: • dos de sus mensajes
verbales, • su comunicación verbal y no verbal, l • o que dice y lo que hace o • lo que
dice el cliente y lo que afirman otras personas. Posibles finalidades de la confrontación
son aclarar posible discrepancias que se consideren importantes y ayudar al cliente a
ser más consciente de las mismas, explorarlas y resolverlas. • Tanto el momento de
su utilización, como sus efectos, deben ser cuidadosamente evaluados en términos
de la alianza terapéutica • Suele ser preferible evitar términos como “pero” o “sin
embargo”. • En su lugar puede emplearse la conjunción “y” o expresiones del tipo: “por
un lado…; por otro…”, “por una parte…; al mismo tiempo…”. • Conviene añadir al final
de la formulación algún tipo de pregunta para facilitar que el cliente se centre en la
discrepancia señalada y responda a la misma. “¿qué te parece esto?”, “¿cómo
relacionas estas dos cosas?”, “me gustaría que me dijera algo sobre esto”.
Reacciones típicas ante una confrontación a) Aceptación auténtica. b) Aceptación
aparente: el cliente reconoce verbalmente la discrepancia, pero no profundiza en ella;
persigue que el terapeuta no insista. c) Confusión o desconcierto: el cliente no parece
entender lo que plantea el terapeuta, ya sea porque este ha sido poco específico o
porque el cliente busca una vía de escape. d) Negación: el cliente no reconoce la
discrepancia o no está de acuerdo con ella. Esto puede deberse, por ejemplo, a que
no está preparado para aceptarla o a que el terapeuta la ha planteado de modo
culpabilizador o se ha equivocado.
La negación se puede manifestar de diversas maneras: • Desacreditar al terapeuta
(“¿cómo lo sabes tú que nunca has pasado por esto?”). • Persuadir al terapeuta de
que su punto de vista es erróneo (“yo no quería decir eso”). • Quitar importancia al
tema (“no vale la pena detenerse en esto”). • Buscar apoyo en otras fuentes (“he
comentado con mis amigos lo que me dijiste y ninguno de ellos ha notado nada”). •
Aceptar el reto, pero no actuar en esa dirección (“tienes razón, debería hablar de esto,
pero no puedo hacerlo”). La respuesta del terapeuta a las reacciones de los clientes
a la confrontación depende de las respuestas específicas de estos y puede incluir la
paráfrasis, el reflejo, la aportación de nuevos datos, la formulación de preguntas que
hagan reflexionar o esperar a que el paciente esté más preparado para aceptar la
confrontación.
- Interpretación
Consiste en comunicar al cliente las posibles relaciones entre sus conductas,
emociones, pensamientos y acontecimientos con el fin de proporcionar una
explicación a sus problemas y comportamientos. Para que el paciente tenga una
nueva perspectiva sobre sus problemas que le sirva de ayuda para cambiar. • La
naturaleza de las interpretaciones depende de la orientación teórica del terapeuta.
Cualquier intervención del terapeuta que apunta a un significado de un elemento
narrativo que no es, en ese momento, accesible para el paciente. • Cualquier
intervención del terapeuta que otorgue un significado nuevo a una narrativa del
paciente • La intervención inicial que abre la posibilidad de una modificación de
conducta. • Una explicación de un problema en términos del sistema de relaciones.
Intervención psicoanalítica: La interpretación es una intervención compleja
en la que un síntoma se presenta al paciente como el resultado de una defensa
ante la ansiedad que provoca la irrupción de un determinado impulso o deseo
inconsciente que resulta conflictivo por ser incompatible con la idea que el
paciente tiene de sí mismo o de lo que él mismo debería ser, o por entrar en
conflicto con otros deseos o impulsos que tiene simultáneamente”
IMÁGENES 3 TRIANGULOS
Existe una relación entre la estructura de la paráfrasis, el reflejo empático y la
interpretación. • El reflejo comprendería una paráfrasis y la puesta en relación de lo
afirmado por el paciente con una emoción vinculada a ello. • La interpretación añadiría
a esta construcción un elemento más que sería el de un posible significado alternativo.
El resultado de las interpretaciones depende de: • Que sean interpretaciones poco
profundas • Que sean interpretaciones centradas en causas que puede controlar el
cliente • Que sean interpretaciones con connotación positiva
Otras reglas básicas: a) hacer la interpretación cuando se disponga de información
suficiente y datos que la avalen, b) comprobar que el cliente parezca estar
emocionalmente preparado para asimilarla o reflexionar sobre la misma, c) asegurarse
de que habrá tiempo suficiente para discutir la interpretación, d) emplear un lenguaje
asequible, e) buscar la colaboración del cliente a la hora de hacer la interpretación y/o
sus opiniones y reacciones no verbales a la misma si se le ha formulado directamente
f) si la interpretación se formula directamente, hacerlo de forma tentativa (esto suaviza
la resistencia) y de modo aceptable para el paciente, de modo que este no se sienta
acusado o enjuiciado, g) minimizar la influencia de los propios sesgos, problemas y
valores a la hora de interpretar. Las reacciones del cliente a la interpretación pueden
ser mayor comprensión de sus problemas (inmediata o mediata) y facilitación del
cambio conductual, pero también resistencia, menor comunicación y hostilidad.
Cuando el paciente parece estar de acuerdo con el terapeuta, una posibilidad que
conviene tener en cuenta es que lo haga sólo para agradarle o para no enfrentarse a
él….
- Dar Información
La información consiste en la comunicación de datos o hechos sobre aspectos que
supuestamente desconoce el cliente • Informar no es lo mismo que aconsejar. • El
consejo pretende no sólo incrementar el conocimiento del paciente sobre las opciones
a las que se enfrenta, sino también que conozca cuál es la opinión del entrevistador
sobre cuál de ellas es la que más le conviene • Aconsejar no es una habilidad
terapéutica • El terapeuta debe dar sólo información relevante para la terapia y sólo
aquella de la que esté seguro. • En caso de no saber algo cuyo conocimiento puede
ser importante para el paciente, es preferible reconocerlo abiertamente.
D'Augelli et al) dicen que la información eficaz se presenta como algo que el cliente
podría hacer, pero no lo que debería hacer, como lo que el cliente podría considerar,
pero no lo que debe tomar en cuenta. • Informar se considera preferible ya que respeta
y fomenta la independencia del paciente y genera mucha menos resistencia por parte
de este. • Algunos clientes dependientes pueden necesitar cierto grado de
aconsejamiento en las fases iniciales de la terapia para que continúen con la misma y
se pueda ir facilitando poco a poco una mayor toma de responsabilidades por parte
de los mismos.
Las metáforas: Las metáforas son parábolas o historias breves mediante las
que se comunica un mensaje al cliente de forma indirecta y análoga, por lo que
el mensaje transmitido puede ser aceptado más fácilmente. • Las metáforas
son tanto más útiles cuanto más próximas estén a las experiencias,
conocimientos e intereses del cliente, y cuanto menos se tratan de imponer
Pasos para trabajar con metáforas: a) Tener claro el concepto que se desea
comunicar. b) Atender al lenguaje que emplea el cliente y buscar un terreno
que domine. c) Buscar un constructo análogo en ese terreno que incluya los
elementos centrales de lo que se desea comunicar. d) Si estos no se
encuentran o no vienen a la mente, emplear un ámbito nuevo del que el cliente
tenga cierto conocimiento
Dar información es útil para: • Facilitar al paciente la identificación de las
opciones de que dispone, • El tener conocimiento de los elementos que le
permiten evaluar las razones para escoger entre una y otra, o • Cuestionar
concepciones erróneas sobre la naturaleza de las mismas.
Dar malas noticias
Estar seguro de que la noticia es cierta antes de comunicarla, • dotarse del
tiempo necesario para exponerla con tranquilidad, • comprobar que ha sido
entendida, • corregir las malas interpretaciones y • trabajar la repercusión
emocional que tiene sobre el paciente • mostrarse, en la medida de lo posible,
tranquilo, sin prisas, sin temores ni vergüenzas, y dispuesto a responder
preguntas. Es recomendable averiguar lo que el paciente sabe, lo que espera
y lo que teme, antes de emitir la información y partir de allí. • Presentar el
mensaje de forma inteligible. Si es necesario emplear ciertos términos
desconocidos para el cliente, hay que explicarlos. • Es importante ofrecer algo
positivo, aunque sólo sea el apoyo del terapeuta para afrontar la experiencia •
La aparición de defensas como la negación debe ser abordada en esos
términos y no confrontada reiterando la información. • Debe evitarse dar
marcha atrás o decir cosas que no son ciertas para tranquilizar • Lo que se
habla después de una información de gran impacto emocional se retiene con
dificultad y se olvida fácilmente. No dar nuevas informaciones después de que
suceda esto
- Dar Instrucciones:
Se trata de una intervención por la que el terapeuta proporciona al paciente una
información que tiene cómo objetivo indicarle el modo en el que puede realizar una
determinada tarea. Son inevitables al menos para establecer el encuadre de la terapia:
• De modo que nos veremos aquí, durante cincuenta minutos a la semana en los que
usted se sentará allí e irá comentando lo que le venga a la cabeza, sin preocuparse
de si parecen o no tonterías, ni si tiene o no que ver con lo que le trajo a consulta
• Se puede referir a actividades a realizar en la consulta. • Cierre los ojos y concéntrese
en su respiración. Fíjese en cómo el aire entra y sale lentamente... • O a actividades
a realizar en casa: • Cada vez que tenga una crisis va a rellenar este registro. En la
primera columna va a apuntar la hora a la que tuvo lugar y lo que duró. En la segunda...
• En este caso, como en cualquier tipo de información es importante buscar feed-back
sobre: • La comprensión del paciente de lo enunciado, • Su repercusión emocional
(¿Qué le hace sentir que le proponga esto y cómo cree que se sentiría si lo hiciera?)
• Y cognitiva (¿Qué piensa de ello?), • Así como de su disposición a seguirlas.
Errores frecuentes:
- Convertir la entrevista en un interrogatorio • Hacer juicios críticos • Aceptar toda la
responsabilidad en el trabajo terapéutico • Dar consejos • Proponer objetivos no
suscitados por el paciente • Ofrecer falsas seguridades • Respuesta desde la persona
y no desde la persona en el rol del terapeuta • Preguntas inapropiadas o irrelevantes
• Uso inadecuado del humor • Utilización improcedente del pudor o las buenas
maneras • Minimización • Uso extemporáneo del consuelo o tranquilización •
Autorrevelación inapropiada • Pasar por alto las emociones • No personalizar •
Intervenciones generadoras prematuras • Abrumar con excesiva información • Dejar
pasar por alto comentarios negativos sobre la terapia o el terapeuta • Perder el foco

CONCEPTUALIZACION DE CASOS
Formular un caso clínico en consejería y/o psicoterapia es un modo de organizar la
información de un paciente y su situación de padecimiento para poder así brindar información
de modo tal que permita al profesional realizar una hipótesis acerca de: • las causas, • los
precipitantes y • los agentes de mantenimiento de los problemas psicológicos, interpersonales
y conductuales de una persona o grupo de personas Debe también permitir al profesional
contar con la información necesaria para pensar al paciente desde: • su contexto, • su
psicopatología o problema generador de su padecimiento y • posibles estrategias y
planificación de los pasos a seguir para su asistencia psicoterapéutica
Formular un caso es parte de un programa que guía el tratamiento y las posibles decisiones
psicoterapéuticas que el profesional deberá llevar adelante para asistir más eficientemente al
paciente • La formulación de casos debe señalar cómo los síntomas de una persona, su
estado mental, su tipo de personalidad, su historia personal y sus circunstancias forman un
conjunto de sentido. • Es el punto de partida para la toma de decisiones en la clínica. Se
requiere para poner en marcha un tratamiento psicológico y es la base de cualquier tipo de
supervisión • La formulación de casos es fundamental en el proceso de admisión para decidir
si se indica o no comenzar un tratamiento, frente a una situación crítica en el curso del mismo,
diferentes momentos del proceso o ante la supervisión clínica, incluso la finalización del
tratamiento. • Es deseable en la formulación de los casos respetar el principio de economía
de la información (información breve y de utilidad clínica y psicoterapéutica). La información
que debe tener la formulación de un caso debe consignar los siguientes datos resguardando
la confidencialidad del paciente de acuerdo a la ley , en nuestro cáso al código deontológico
del psicólogo peruano

Información a consignar:
Datos de filiación: -Nombre -Edad -Nacionalidad -Ocupación/Estudios -Grupo familiar
• Fuente de la derivación
• Contexto de la consulta (ámbito privado, público,condiciones preestablecidas para el
encuadre –cantidad de sesiones, duración, honorarios- etc). Aclarar si se trata de una
entrevista de admisión o psicoterapéutica (persiguen diferentes objetivos)
Tipo de consulta (demanda espontánea, derivación, interconsulta, ámbito clínico médico,
escolar, judicial, etc.) • Breve resumen de la historia vital del paciente: acontecimientos
significativos o traumáticos, duelos, separaciones, migraciones, enfermedades, etc.
• Momento actual del paciente: ciclo vital en el que se encuentra y tarea que tiene por resolver
(a qué se enfrenta, ej. cambio de trabajo, parentalidad, etc.)
• Nivel de malestar subjetivo. Grado de urgencia representado por el paciente
Motivo de consulta: qué busca el paciente y qué espera del tratamiento. Identificar objetivos.
• Sistema atributivo: identificar a qué atribuye el paciente lo que le ocurre
• Estrategias de afrontamiento (qué ha intentado el paciente para enfrentar lo que le pasa) y
evaluar factores de mantenimiento.
• Grado de disfuncionalidad del paciente (evaluado por el psicoterapeuta) a) Severidad
sintomática y urgencia clínica. b) Complejidad (cantidad de variables involucradas, distinguir
para planificar lo ideal de lo viable). c) Cronicidad (hace cuánto le ocurre lo que está
padeciendo)
Red social de apoyo: evaluar red de apoyo y si la misma es amplia o escasa, fuerte o débil. •
Antecedentes clínicos y terapéuticos (enfermedades anteriores o actuales y si realizó
tratamientos anteriormente y qué valoración hace de ellos)
• Modos de comunicación (verbal y paraverbal) . Aspectos semiológicos significativos. •
Diagnóstico situacional y categorial (DSM V o CIE-10 dependiendo de la institución).
• Diferenciar aspectos situacionales o de estado de aquellos rasgos de personalidad que
persisten como característica del paciente a lo largo de su vida y en la actualidad.
La información en su conjunto debe permitir hacer un diagnóstico del paciente y su situación,
un pronóstico de la posible alianza y evolución del proceso terapéutico y debe facilitar la toma
de decisiones psicoterapéuticas en la clínica.
Análisis funcional / Esquema:
1. Problemas en la vida diaria: Son los problemas que el cliente presenta en su vida diaria,
conceptualizados por el terapeuta.
2. Historia relevante: En este apartado se describen los hechos relevantes en la vida de la
persona que estén implicados en la etiología y el mantenimiento de los problemas.
3. Problemas en la sesión. Serían las CCR tipo 1 y como se ha indicado son equivalentes
funcionalmente a los problemas que se dan en la vida diaria.
4. Los conceptos cognitivos del paciente que interfieran con el tratamiento (pensamientos
automáticos, código de creencias, ideas, asunciones) que deben ser objeto de la terapia.
Entre estos conceptos están los valores que trae el cliente en relación con los más diversos
temas que afectan de algún modo con el problema y su solución. Entre otros podríamos
incluir: el concepto de bienestar psicológico, la felicidad, la justicia de la propia vida, etc.
También en este apartado se incluyen lo que en la Terapia Cognitiva de Beck (Beck, Rush,
Shaw y Emery, 1979) se denominan distorsiones cognitivas (sobregeneralización,
magnificación, abstracción arbitraria, etc.)
5. Objetivos en la vida diaria: Es decir, lo que se pretendería conseguir y generalizar a la vida
de esa persona, y los cambios progresivos que pretende alcanzar el cliente, conceptualizados
por el terapeuta.
6. Objetivos en sesión. Los o bjetivos que se marcaría el terapeuta en la propia sesión . Es
decir, las CCR 2, los cambios que se quieren conseguir en la sesión clínica
IMAGEN DE CUADRO

Fierberg and McClure (2010): La conceptualización del caso es una guía o borrador inicial del
funcionamiento psicológico del paciente. En general, se trata de un conjunto de hipótesis
derivadas empíricamente que proveen un modelo de trabajo con el paciente. Estas hipótesis
conceptuales explican las características actuales del paciente tomando en cuenta su historia
de desarrollo y su contexto cultural
Nos debemos preguntar… ¿Qué pasó? ¿Por qué pasó? ¿Cuál es el rol que juega la cultura
en ésta situación? ¿Qué podría hacerse acerca de ésta situación?
Siguiendo a Sperry and Sperry (2012), una correcta formulación de caso se encuentra
comprendida por cuatro componentes:
1. Formulación diagnostica: Descripcion del problema por el paciente, permiten arribar
un diagnostico en el DSM
2. Fomulacion Clinica: Explicación de los patrones de conducta (Porque)
3. Formulación Cultural: El rol de la cultura en el problema
4. Formulación Terapéutica: Planificar la intervención
Variables a tomar en cuenta: Presentacion / Patrones desadaptativos / Factores
Predisponentes / Perpetuantes / Identidad Cultural / Cultura: aculturación / Explicación
cultural / Cultura y personalidad / Patrones de tratamiento / Objetivos de tratamiento / Foco
del tratamiento / Estrategias de tratamiento / Intervencion / Obstáculo / Tratamiento cultura /
Prognosis del tratamiento
Factores de vulnerabilidad y mantenimiento
• La razón por la que un problema psicológico se desarrolla generalmente no es por la misma
razón por la que se mantiene. • Un elemento estresor puede ocasionar diferentes efectos en
diferentes personas. • Si el estresor se encuentra asociado a un problema psicológico
específico tiene que ver con la vulnerabilidad de la persona en desarrollar ese problema. •
Predisposición genética? • La epigenética sugiere que las experiencias medioambientales
pueden llevar a la activación o suspensión de ciertos genes, y estos cambios no solamente
pueden conducir a modificaciones de largo plazo, sino que también podrían ser transmitido
en futuras generacione

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