Mantis
Mantis
Mantis
Mantis, un insecto
peculiar
Texto y fotografías: Jesús Quintan° Sánchez
Un depredador inofensivo
Iris oratoria
en una
plantación de Las mantis son insectos depredadores no específicos.
naranjos Esto quiere decir que se alimentan, con gran avidez,
(Sevilla). de todo tipo de insectos que habiten donde ella. Los
El abdomen insectos pequeños constituyen la dieta de las ninfas y
abultado de esta
de algunas de las especies de menor porte. Cuando son
hembra delata
que la puesta adultas el tamaño de sus presas aumenta. No caigamos
está próxima en el error de pensar que, por no ser específica, puede
perjudicar a la comunidad de insectos beneficiosos.
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Nuestros aliados
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Mantis, un insecto peculiar
Lugares insólitos
religiosa están vacías, puede observarse que la banda está En principio, cualquier medida que fomente la heteroge-
formada por una serie de escamas. Al pasarles el dedo a lo neidad de la finca estimulará la presencia de mantis y favo-
largo notaremos al tacto como si fuera una baraja de car- recerá su permanencia, ya que multiplicaremos los lugares
tas. Si se trata de una puesta de Iris o Empusa observare- de alimentación, puesta y protección. Por ello, conservare-
mos en esta banda dos filas paralelas de agujeros abiertos. mos e instalaremos zonas con la vegetación adecuada: ár-
Estas ootecas se degradan con el tiempo. Al cabo de un boles, arbustos y plantas herbáceas que mantengan su es-
par de años la superficie comienza a pudrirse por efecto de tructura seca durante el invierno.
la lluvia, granizo, humedad, sol... y va adquiriendo una co- Es más fácil y rápido evaluar su presencia a través de las
loración más oscura. La parte central, donde se localizan ootecas que por la observación de los dispersos y camufla-
los huevos, es la más dura, pudiendo encontrarse ootecas dos adultos. Por ejemplo, en los tarajes (Tamariz sp.) es
de varios años oscurecidas e incluso colonizadas por líque- muy habitual observar sus ootecas en las ramas cuando és-
nes. Sabiendo esto podemos evaluar si en nuestra zona hay tas pierden las hojas.
presencia activa de mantis sólo con observar las puestas. También vamos a encontrar mantis en los cultivos. En
No hemos de confundir los efectos del paso del tiempo con los frutales, cuando estemos podando y veamos que la
los producidos por la depredación o parasitismo. Los pája- puesta queda en la rama podada, podemos volver a ponerla
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Nuestros aliados
Nuestro catálogo
de mantis
En la península ibérica somos afortunados por poder
contar con un buen número de especies, incluso con varios
endemismos. Veamos cuáles son las que podemos encon-
trar con mayor frecuencia en nuestros agroecosistemas y
cómo podemos diferenciarlas a simple vista:
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Muntis, un insecto peculiar
Zona de olivar
y almendro
en Málaga,
abajo a la
derecha un
mojón de piedra
señalizando
la linde.
Si nos
acercamos,
veremos en
la piedra varias
puestas de
mantis
en el árbol, amarrándola a otra rama. Podemos recolectar Nos encontramos, por ejemplo, en una zona de olivar y
ootecas del entorno y colgarlas de los árboles, utilizando almendro. Aquí en diciembre veremos en primera línea
por ejemplo esas bolsitas de malla en las que vienen a ve- una linde de hinojos y cardos secos. También se ve un mo-
ces las patatas o las nueces. Cuando eclosionen los huevos, jón de señalización formado por cuatro piedras. Si quere-
podrán salir por la malla y trepar al árbol. De hecho este mos saber si en esta zona hay presencia de mantis (es in-
mismo formato lo podemos encontrar en los Garden Cen- vierno) ¿dónde miraríamos primero? Acerquémonos a este
ter de países como Inglaterra o Estados Unidos, donde las montón de piedras y ¿qué vemos?: podemos contar hasta
compras y te las llevas de la tienda a la huerta... cinco ootecas de mantis. Hay viejas y nuevas, por lo que
Es mejor fomentar las que ya tenemos y, por supuesto, es podemos deducir que la presencia es continua. Además,
necesario conservar e incluso multiplicar cualquier ele- vemos ootecas tanto de Mantis religiosa como de Iris orato-
mento del entorno en el que veamos sus puestas. na, dos especies que suelen alimentarse en alturas distin-
Por último, comentar que todo lo anterior se comple- tas. Seguramente de año en año las veremos por las copas
menta con medidas que reduzcan o hagan innecesaria la de los árboles o en las cubiertas y lindes, siempre y cuando
aplicación de cualquier biocida. En este sentido las prácti- no se apliquen biocidas en estos lugares..
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