FINAL La Relación Entre El Arquitecto y La Sociedad
FINAL La Relación Entre El Arquitecto y La Sociedad
FINAL La Relación Entre El Arquitecto y La Sociedad
A medida que pasan los años, todo cambia, las personas cambian, los
pensamientos cambian, los gustos cambian y como resultado las exigencias de los
consumidores, dueños y habitantes de casa también cambian. Esto es algo
normal, que se llama evolución. Y así como todo evoluciona, la arquitectura
también debe de evolucionar, para cumplir las nuevas necesidades que van
surgiendo. Es responsabilidad del arquitecto de cambiar sus ideologías, sus
métodos de diseño, los materiales que se usan, etc. También es una tarea del
arquitecto aprender y adaptarse a lo nuevo, para así encontrar lo mejor para los
consumidores de estas nuevas generaciones. Muchas veces es un poco más
difícil esta tarea para los arquitectos, debido a que muchas veces las exigencias
de los consumidores no tienen nada que ver con las verdaderas necesidades de
una vivienda.
Sin embargo, hoy en día el mundo está repleto de arquitectos que su único
propósito es ganar dinero, así que deja de preocuparse de temas sociales y
construye lo que sea únicamente por generar ingresos. Este arquitecto deja de
hacer cosas que se diferencian y resaltan sobre lo demás, y copia referencias de
otros edificios ya construidos. O en el sentido opuesto crean viviendas de un nivel
tan alto, que terminan siendo extremadamente caras, que muy poca parte de la
población podría tener. El arquitecto no está cumpliendo con su profesión si este
no se preocupa y mantiene al tanto de lo que necesita la sociedad. La arquitectura
que no se basa en las necesidades de las personas, que no tiene funcionalidad
alguna y que solo se preocupa por hacer algo estéticamente “bello” es una
arquitectura pobre. Es deber del arquitecto de evitar este tipo de arquitectura.
En mi opinión, la figura del arquitecto es una figura de gran importancia en una
comunidad, me atrevo a decir que es tan importante, que sin esta figura no
existiría el mundo de ahora. Esto se ha podido evidenciar durante muchas épocas,
como lo fue por ejemplo en el antiguo Egipto, cuando el rey encargo su tumba a
Imhotep, el primer gran arquitecto egipcio. Imhotep utilizo todo su ingenio para
satisfacer las necesidades del rey y a cambio el rey le otorgo el privilegio de
formar parte de su corte. También sucedió lo mismo con Dédalo, el primer
arquitecto de la mitología griega, quien encontró un nuevo protector capaz de
apreciar sus dotes como Arquitecto después de tener que escapar de Grecia. y lo
mismo con muchos más arquitectos a lo largo de la humanidad. Ya podemos ver
que el arquitecto no iba en busca de “clientes” sino que ha tenido protectores que
valoran sus dotes como arquitectos. Así mismo pasa en la actualidad, un
arquitecto seduce a las personas por su destreza y sus dotes. Volviéndose tan
importante para la sociedad que ya no se pueden separar. Y su rol en una
comunidad pasa a ser indispensable.