Problema de Investigación
Problema de Investigación
Problema de Investigación
Estudios previos que han realizado algunos investigadores acerca de los trastornos de la
conducta alimentaria:
Una investigación realizada en Argentina en el período 1995/1997, señala que la
prevalencia de los TCA alcanzó un porcentaje del 13% en adolescentes mujeres (Quiroga,
Zonis & Zukerfeld, 1998). Otro estudio más reciente realizado con una muestra de 1971
mujeres y varones, entre 10 y 19 años de Argentina, muestra que el 6.95% de los
adolescentes que concurren al consultorio del pediatra, presenta algún TCA (Bay et al.,
2005). Si bien este último estudio se realizó con una muestra muy específica, utilizó una
metodología de doble fase al incluir además de los cuestionarios autoadministrables, un
cuestionario completado por el pediatra en el contexto de una entrevista diagnóstica.
Diversos estudios hallaron que la prevalencia de TCA difiere según el sexo. Mientras que la
prevalencia estimada de anorexia nerviosa en mujeres jóvenes y adolescentes de países
desarrollados es de 0.5% a 1%, la de bulimia nerviosa es de 1% a 3% y la de los trastornos
de la conducta alimentaria no especificados es de 3%, se calcula que entre los varones la
prevalencia sería nueve veces menor (Peláez et al., 2005). Para explicar estas diferencias,
algunos autores (Strober, Freeman, Lampert, Diamond & Kaye, 2001) han sugerido que las
mujeres presentan una mayor predisposición genética así como también una mayor
exposición a factores socioculturales para desarrollar un TCA. Por otra parte, se han
planteado ciertas dificultades en la detección de los TCA en población masculina. Esto
podría deberse en parte, a que los hombres no suelen hacer explícito el deseo de estar más
delgados (Keel, Baxter, Heatherton & Joiner, 2007).