Capitalismo
Capitalismo
Capitalismo
Su principal aportación teórica es el análisis del mecanismo mediante el cual el libre juego de
mercado (tanto escala interna como en las relaciones comerciales con otros países) entre los
diversos sectores de la economía genera el máximo beneficio económico del conjunto. Como
consecuencia, se mostró siempre contrario a cualquier intervención o regulación de la
actividad económica, reduciendo el papel del Estado al de garante de las reglas del juego.
Se opuso al mercantilismo al considerar la riqueza de una nación como la producción
anual de bienes y servicios («las cosas necesarias y útiles para la vida»), en lugar de las
reservas de metales preciosos, y a la escuela fisiócrata al descartar la tierra como el origen de
toda riqueza y proponer en su lugar el factor trabajo. A este respecto, Smith incidió en la
especialización como el determinante de la capacidad de una sociedad para aumentar su
productividad, y en consecuencia, su crecimiento económico.
Estableció una teoría del valor de un bien que distinguía entre su valor de cambio
(capacidad de ser intercambiado por otros bienes) y su valor de uso (utilidad que aporta). Con
respecto al valor de cambio, su medida era el trabajo útil incorporado en su obtención; es
decir, que una mercancía tiene un precio natural determinado por el coste de producción
medido en trabajo, y un precio de mercado. En situación de libre competencia, este último
convergería hacia el primero. Completó su análisis con una teoría sobre la distribución de la
renta que distinguía entre tres categorías de rentas (salarios, beneficios del capitalista y rentas
de la tierra), para sostener a continuación que los salarios eran fijados por las leyes de la
oferta y la demanda, aunque reconoció la existencia de un valor mínimo de subsistencia por
debajo del cual ya no podían descender. (Escocés)
El capitalismo del Siglo 21 se caracteriza por una creciente diferenciación entre centro
y periferia, con esta última creciendo más rápido que el centro y con fortalezas en su
capacidad de generar ahorros exportables. Este “nuevo” capitalismo, de variante neoliberal,
también muestra una alta frecuencia de crisis económicas, seguida de costosas políticas de
austeridad junto a una tendencia a la acentuación de la desigualdad de ingresos y riquezas; en
este contexto destaca el fortalecimiento de pequeñas pero poderosas elites económicas. Estas
tendencias globales tienen implicancias geopolíticas y económicas importantes. Una de estas
es sobre el carácter de la democracia la que se ha vuelto de baja intensidad y poco
participativa dada la brecha existente entre la enorme influencia de las elites económicas que
movilizan sus amplios recursos para influir, unilateralmente, en las decisiones políticas de las
sociedades capitalistas y el escaso poder e influencia de las clases medias y los sectores
populares y menos favorecidos de la población. Asimismo, este capitalismo del siglo 21 ha
traído consigo un déficit democrático no solo a nivel nacional sino también a nivel global. Un
ejemplo reciente de lo anterior es que varias economías europeas se han transformado en
verdaderos “Protectorados” del FMI, Banco Central Europeo y la Comisión Europea, la
llamada Troika. En efecto, este conjunto de instituciones dicta las políticas públicas de los
países europeos en crisis con evidente menoscabo de su soberanía y autonomía nacional y del
derecho a decidir sus propias políticas económicas y sociales. (providencia, 2014)
A partir del 2010 la prioridad de las políticas económicas de las economías centrales se
como las que inicialmente impulsó el mismo FMI, desde fines de 2008 hasta inicios del 2010,
Por otra parte, varios países junto con reducir el empleo, los salarios y las prestaciones
sociales en el sector público han acelerado las privatizaciones de actividades como los
aeropuertos, los correos, el agua y la energía. En Grecia, la Troika exigió, en el 2013, incluso,
el cierre de la Televisión Pública, ERT, uno de los iconos de la democracia griega. Además,
algunos países han introducidos cambios constitucionales (caso español) para que el
Una de las causas del aumento en la desigualdad en Estados Unidos y el Reino Unido en las
décadas de 1990 y 2000, se relaciona a los enormes incrementos en los ingresos de los
gerentes generales y los ejecutivos de empresas grandes y de bancos comerciales y fondos de
inversión. Previo a los años ochenta, en Estados Unidos la relación entre el ingreso de
por las compañías) y el salario del trabajador medio se ubicaba en el rango de 30 a 40 veces.
relación a los salarios medios de los trabajadores alcanzó 273 veces. (Ver Pizzigati, 2013)
del trabajo en el ingreso nacional de alrededor de cinco puntos porcentuales entre 1975 y el
mencionado y en las cuatro economías más grandes del mundo: Alemania, China, Estados
Unidos y Japón. Es interesante notar que en Estados Unidos, uno de los países ricos más
desiguales del mundo, esta disminución de la participación del trabajo es mayor al promedio
internacional, alcanzando el seis por ciento para el promedio de todos los grupos de ingreso y
10 por ciento en los últimos 25 años si se considera el 99 por ciento de la población, es decir
excluyendo el uno por ciento más rico que, como hemos visto, ha aumentado sus ingresos y
salarios en forma notable en las últimas décadas y que tiende a compensar la reducción
violento. Un renovado modelo que, para que la rueda no se detenga, busca nuevas formas
preparando en este siglo una nueva forma de organización social a nivel planetario, como
respuesta a la crisis civilizatoria en ciernes. En esta línea, quienes detentan el poder ya están
décadas— para enfrentar tanto el colapso ecológico como, sobre todo, las perspectivas de un
bronco y violento. En síntesis: un renovado modelo económico que, para que la rueda no se
político, se apuesta por una gobernanza corporativa global; esto es, un gobierno de facto de
las grandes empresas que, sin eliminar a las instituciones, ampute sus capacidades en favor de
deslegitimada agenda de colores en favor de una dinámica de fascismo social, más adecuada
a una realidad donde se hace patente que no todas las vidas tienen valor, ni siquiera son
estos retos (de generar alternativas" parecería sugerir que si tuviéramos un capitalismo
"rupturas democráticas diversas" se dan tanto aquí como en Alemania. No alcanzo a ver en
qué sentido una 'mejor' estructura capitalista nos ayudaría, puesto que en buena medida se
trata de desmontar el tinglado existente (pues supongo que la propuesta no pasa por poner a
los mandos de la máquina infernal a gente maja, sea la clase obrera u otro agente social).
(Vásquez, 2017)
Si hay países con el sistema capitalista que son ricos es por mera corrupción y
países a flote, es la pura aplicación de ricos más ricos, pobres más pobres; y no, un pobre no
se puede hacer rico por medio del capitalismo, hay denigración y plusvalía, lo que no le
permite salir de la pobreza mágicamente solo por laborar, si para una persona universitaria es
difícil, imaginen para alguien que quizá y no tenga una educación suficiente. (Soto, 2023)
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Bibliografía
Latina (OMAL) - Paz con Dignidad. ¿Hacia dónde va el capitalismo del siglo XXI?
capitalismo-del-siglo-xxi.
Unidos.
desigualdad-y-deficit-democratico/#.
Soto. (2023).