Luz Continua
Luz Continua
Luz Continua
La luz continua es, seguramente, la que más utilizamos cuando nos iniciamos en el mundo de la
fotografía. Ahora bien, ¿sabes utilizarla correctamente?, ¿sabes qué características tiene o cuál es el
mejor momento del día para aprovechar su potencial?
La luz continua es la luz del sol o de una bombilla. Es decir, aquella luz que, como dice su nombre, se
proyecta de forma continua. Ésta puede ser artificial (la que proviene de los diferentes tipos de
bombillas) o natural (la luz del sol o la luna).
La luz continua natural es aquella que proviene de una fuente natural como el sol, las estrellas o la
luna.
La luz continua natural tiene muchas ventajas, su riqueza de tonalidades, está disponible de forma
gratuita y no ocupa lugar, por ejemplo. Su único inconveniente es que no puedes controlarla. Solo
puedes modificarla con reflectores o difusores, por lo demás, tienes que adaptarte a ella.
A continuación, te dejo algunos consejos para fotografiar con este tipo de iluminación:
Los mejores momentos para fotografiar con luz natural continua son los amaneceres y
atardeceres, donde la luz es suave, cálida y lateral.
Las horas centrales del día encontrarás luz dura, que podrás aprovechar para crear retratos
más dramáticos o para cualquier tipo de fotografía a la que le favorece la luz dura.
La luz continua artificial, es aquella que proviene de una bombilla del tipo que sea. Cada tipo de
bombilla puede tener unas características diferentes tanto en lo que se refiere a potencia como a
tonalidad. Es la más sencilla de utilizar ya que nos permite ver en directo el resultado final de la
iluminación (no como el flash).
CARACTERÍSTICAS DE LA LUZ CONTINUA ARTIFICIAL
La luz continua artificial depende de la propia bombilla que ilumina la escena. A diferencia del flash,
que es estándar y proporciona una luz blanca o neutra, las bombillas pueden ser cálidas, frías o
neutras.
Debes tener especialmente en cuenta la temperatura de color de la luz que estés utilizando. Si
utilizas las luces que tienes por casa, es muy posible que tus fotografías adopten un tono
anaranjado. Las luces tipo fluorescentes, proporcionan una luz verdosa.
Bombilla de tungsteno. Son las que tenemos en casa. A nivel fotográfico no son muy
potentes y, como ya te he comentado, proyectan una luz cálida o anaranjada en la escena.
Si quieres invertir en una buena fuente de luz, te dejo con varias opciones muy interesantes.
Este tipo de focos LED permiten ajustar el brillo, tienen un sistema de refrigeración para disipar el
calor, control remoto y son de bajo consumo.
Aquí tienes un modelo que cumple con estos requisitos por unos 243,99 €.
Otro tipo de foco LED es el panel, montado en la cámara o por separado. Se utiliza habitualmente
para vídeo, pero también puedes usarlo como fuente de luz para fotografía.
SOFTBOX
Si quieres montar un pequeño estudio en casa basado en luz continua, este kit de luz tipo Softbox es
una opción interesante por su relación calidad-precio. Además los encuentras de muchos tamaños y
formas.
LUME CUBE
Esta opción te va a sorprender. Es una luz increíble de pequeño tamaño, tan pequeña que cabe en la
palma de tu mano. Se trata de Lume Cube 2.0. Tiene el tamaño aproximado de una cámara de acción
y es extremadamente potente.
Para obtener los mejores resultados, ten en cuenta los siguientes aspectos:
Fotografía en RAW.
El balance de blancos.
El tamaño con respecto al sujeto, cuanto más pequeña es la fuente de luz respecto a este,
más dura será la luz, y al revés, cuanto más grande, más difusa.
¿Debes escoger entre flash y luz continua? Con el tiempo, aprenderás a jugar con ambas, incluso a
combinarlas pues son perfectamente complementarias. De momento, te presento las ventajas de
cada tipo de luz.
Tenemos fuentes de luz continua caseras que pueden funcionarnos para empezar (vigilando
mucho el balance de blancos y el calor ).
Consume menos.
No se calienta en exceso.
¿Te habías planteado las ventajas de la luz artificial continua? Es muy interesante aprender a
aprovecharla, tanto en su versión natural como en su versión artificial, ya que es una luz fácil de
encontrar en todas sus versiones y dominarla supone saber fotografiar un gran número de instantes
posibles .