Los Onas
Los Onas
Los Onas
Los Onas son un pueblo amerindio, que vivió hasta principios del siglo XX en el
norte y centro de la isla Grande de Tierra del Fuego, ("Kárwkènká" en lengua
selknam) en el extremo austral del continente americano, en Argentina y Chile.
Originalmente eran nómadas terrestres, cazadores y recolectores. Luego de un
genocidio a principios del siglo XX y un proceso de transculturación que operó
por más de un siglo, los selk'nam se dispersaron a través del continente, un
número de niños fueron vendidos en puertos continentales y la lengua estuvo
extinta durante algunas décadas. Sin embargo, actualmente hay esfuerzos por
parte de los descendientes Selk'nam de recuperación cultural y revitalización
de la lengua.
EL lenguaje de los ONAS
El idioma selk'nam o Selk'nam chan, pertenece a la familia chon que incluye
también al idioma tehuelche y al idioma haush, este último más cercano al
selk'nam que el tehuelche.
La Religión, ritos y creencias de los ONAS
Los onas celebraban ritos de iniciación masculina durante los cuales los
ancianos revelaban los secretos tribales a los jóvenes o klóketen. Tal rito
iniciático era llamado h'ain; realizado alrededor de los 18 años, daba a los
jóvenes la categoría de adultos. Los ritos se basaban en un mito que narraba
cómo en un tiempo mítico las mujeres mantenían dominados a los hombres
disfrazándose de espíritus y cómo Sol descubrió la impostura y todas las
mujeres, excepto su esposa Luna, fueron asesinadas y que desde entonces los
hombres se apropiaron del engaño y continuaban representándolo para
dominar a su vez a las mujeres.
La vestimenta de los ONAS
Los selknam se cubrían con una capa, que a veces podía ser de guanaco,
zorro o cururo, al igual que para el calzado, que los cubría desde el cuello
hasta las rodillas.3 La empleaban con el pelo hacia fuera y la llamaban
chonhkoli. Bajo esta capa los varones no llevaban otra vestimenta y las
mujeres usaban una prenda para cubrirse los genitales. Usaban mocasines,
calzado fabricado con la piel de las extremidades del guanaco, cosidos con el
pelo hacia fuera. Durante la cacería, los hombres solían llevar un triángulo de
piel de guanaco atado a la frente, con propósitos mágicos.
La pintura corporal era muy importante en la ceremonia del hain y en la vida
cotidiana se empleaba pintura facial. La utilización de la pintura corporal tenía
una doble finalidad: por una parte, protegía al cuerpo de los rigores del clima y,
por otra, era un adorno que reflejaba un estado de ánimo.
Las construcciones de casas
Los selknam habitaban dos tipos de viviendas temporales, llamadas kawi, una
de forma semicircular y la otra en forma de cono. Medían aproximadamente
entre 3,5 a 4,5 m. Eran construidas por las mujeres, en una depresión del
terreno o excavando entre 25 a 40 cm y clavando palos con los que formaban
una estructura que cubrían con pieles de animales cosidas entre sí. En el
centro estaba el fuego y en los bordes se ubicaban pieles con pastos aislantes
por debajo que servían para dormir. Los grupos familiares se desplazaban por
el territorio en busca de recursos y eran las mujeres quienes se encargaban
también de transportar las viviendas que eran fáciles de acarrear e instalar.
Organización territorial y social
Hombres selknam cazando. A la izquierda de la imagen se observan perros
fueguinos, los que eran empleados como ayuda en la cacería.
Los selk'nam estaban divididos en dos grandes grupos: las tribus de las
planicies del norte de la Tierra del Fuego, cazadores de cururos y ñandúes, y
las de la zona más montañosa del sur de la isla. La base de la organización de
los selknam era la familia, padre, madre, hijos, pero a esta se incorporaban los
parientes que ocupaban el mismo territorio, unidad social llamada haruwenh.
Estas unidades se establecían en muchos territorios perfectamente
delimitados, cuyas fronteras eran respetadas usualmente por los haruwenh
vecinos
Formaban clanes patrilineales (familias extendidas que podían tener 3 o 4
generaciones)3 de 40 a 120 miembros con jurisdicción sobre un territorio de
caza. Los hombres tomaban esposas de otros clanes. Eran generalmente
monógamos, aunque había empezado a difundirse la poligamia. Era práctica
común el casamiento con dos o más hermanas, o con una viuda y su hija.
También se aplicaba el levirato, es decir, la costumbre de heredar la viuda del
hermano.
Dada las características insulares del territorio fueguino, el espacio fue
organizado en función a su división, por medio de los haruwenh que
constituyeron la base de la organización social de los selknam. Cada haruwen
se organizó en función a linajes patrilineales exogámicos y patrilocales, y sus
límites estaban fijados por la tradición.
La alimentación de los ONAS
Los selknam se alimentaban de aves, guanacos, y tucutucus, lo que los
habitantes de haruwen costeros complementaban con la recolección de
productos marinos, como mariscos que encontraban en la playa o alguna
ballena varada; y de frutos silvestres como los del calafate y la chaura. 16
La búsqueda de alimento significaba la vida cotidiana. Conseguir comida era
tarea de los varones, quienes se volvieron diestros en el uso del arco y la
flecha, necesario para cazar el esquivo guanaco. Como ellos debían andar
siempre al acecho, las mujeres cuidaban la casa, consumían mariscos si el
hambre obligaba a hacerlo y, durante los traslados, cargaban las tiendas en
bolsas de cuero y cestos de juncos, junto con los utensilios y los hijos que aún
no caminaban.
Las herramientas de los ONAS
Los selknam fabricaban herramientas de piedra, hueso y madera. Su principal
arma eran el arco y la flecha. También empleaban la honda y el arpón.
La presencia de los ONAS en la actualidad
Actualmente esta raza ya no existe. Hace pocos años murió el último de los
onas de ascendencia directa.