La Familia

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SEMINARIO BAUTISTA INTERNACIONAL

“Preparando Siervos Para Servir”

RESUMEN DEL LIBRO


LA FAMILIA CRISTIANA

Tarea
Presentada en Cumplimiento de la Materia
Familia Cristiana

Rodrigo Gutiérrez Velasco

2019
LA FAMILIA CRISTIANA
Este libro, escrito por Larry Christenson, está completamente dedicado a mostrar un
panorama bíblico de la familia, mostrando de manera sólida, el lugar y el rol que debe
desempañar cada miembro de esta. Para este resumen, solo nos enfocaremos en la primera
parte del mismo (el orden de Dios para la familia), ya que la segunda parte hace más énfasis
en la forma en que la familia debe reflejar el evangelio en cada uno de sus miembros y
como un todo.

PRIMERA PARTE
EL ORDEN DE DIOS PARA LA FAMILIA
Existe un orden establecido por Dios, que, de manera práctica y funcional debe reflejarse
en la familia. No es una sugerencia dada por Dios, es un mandato. Él como creador de la
familia, fijo posiciones y roles en esta para que pueda desarrollarse de forma tal que él
pueda ser glorificado en ella. Este orden es el siguiente:
- El Esposo vive bajo la autoridad de Cristo y es responsable ante él en cuanto al
cuidado y dirección la familia.
- La Esposa vive bajo la autoridad de su esposo y es responsable ante él por la manera
en que ordena su casa y cuida de los hijos.
- Los Hijos viven bajo la autoridad de ambos padres.

CAPÍTULO 1
EL ORDEN DE DIOS PARA LOS CÓNYUGES
Luego que Dios hubo creado al hombre, notó que faltaba, entonces dijo: le haré una ayuda
idónea para él. Fue entonces que la mujer fue creada, manifestando así, el ideal de lo que
Dios consideraba completo. La unión entre cónyuges es tan fuerte, que la biblia lo describe
que ambos son una sola carne. Dios creó el matrimonio para que este fuera indisoluble por
norma general (habiendo excepciones, como las que encontramos en Mateo 5:32 y 1
Corintios 15), por tanto, ha capacitado al hombre y a la mujer para que puedan desarrollar
de tal manera su vida conyugal. Para este efecto, es muy importante la estimación mutua
entre ambos. El esposo debe ver y darle a la esposa el lugar que a esta le corresponde y
viceversa, incluso más allá de las emociones que puedan sentir al respecto. El Esposo debe
amar y cuidar a su esposa y esta debe respetarlo y reconocer su rol de autoridad en el hogar.
CAPÍTULO 2
EL ORDEN DE DIOS PARA LAS ESPOSAS
En una familia, la esposa es el eslabón entre el esposo y sus hijos. Su rol dentro del hogar
es muy importante y su actitud puede definirse en una sola palabra: sumisión. La Escritura,
en numerosos pasajes muestra que el orden de la esposa es de sumisión para con su marido.
Esto, lejos de degradarla, la enaltece. No significa que la mujer es menor que el hombre,
sino, simplemente, que Dios le dio al hombre un rol de autoridad sobre ella. La mujer debe
de someterse al hombre por voluntad propia, así como el Cristo se somete a la autoridad de
Dios. Esta disposición de sumisión voluntaria por parte de la esposa, refleja a Cristo y al
evangelio, por eso es muy importante.

CAPÍTULO 3
EL ORDEN DE DIOS PARA LOS HIJOS
Si en el caso de la esposa, resumimos su orden en la palabra sumisión, en lo que a los hijos
se refiere, podríamos también resumirlo en esta sola palabra: obediencia. Es en el hogar,
bajo la autoridad de los padres, que los hijos aprenden como se desarrolla la familia, lo
importante de la autoridad de los padres y de la obediencia de los hijos; el amor y ayuda
mutua en el seno familiar. Todo esto, si es bien inculcado en la familia, será un plus para
el en su vida cristiana, ya que pasará a formar parte de la familia cristiana, teniendo a un
Padre celestial al que sabrá respetar y obedecer de la misma manera, y reflejará el amor y
ayuda mutua entre sus hermanos de la fe. La obediencia de los hijos hacia los padres no es
una opción, es un mandato claro. Para esto, es muy importante que los padres reflejen una
autoridad clara y firme.

CAPÍTULO 4
EL ORDEN DE DIOS PARA LOS PADRES
El orden de Dios para los padres, aunque engloba muchos aspectos, podríamos resumirlos
en tres palabras extraídas de lo dicho por Pablo en Efesios 6:4: amar, disciplinar y enseñar.
En cuanto a enseñar, se refiere a prepararlos para la vida. Los padres son los primeros
maestros del niño. Es muy importante que sus palabras vayan acompañadas con su ejemplo,
ya que los niños se dan cuenta cuando un padre dice algo y luego hace lo contrario de lo
que dice. El ejemplo es la primera forma de enseñanza de los padres. En cuanto a la
disciplina, los padres deben entender que Dios les ha dado plena autoridad sobre sus hijos
para que ellos puedan ejercerla. Vemos muchos casos en las Escrituras de padres que
supieron hacerlo y padres que descuidaron esta área. Vemos también que Dios
responsabilizó tanto a unos como a otros del actuar disciplinado o indisciplinado de sus
hijos. Los padres deben entender que la disciplina es una manifestación de amor. La
Palabra nos habla de usar la vara para criar a los hijos cuando esta es necesaria. Por último,
amor. Los niños tienen la necesidad de sentirse amados. Es importante que los padres pasen
tiempos con ellos, que jueguen juntos, los escuchen, etc., que sepan satisfacer esta
necesidad en la vida de sus hijos, para que estos no busquen satisfacerla fuera del hogar.

CAPÍTULO 5
EL ORDEN DE DIOS PARA LOS ESPOSOS
Amor. Amor es la palabra que resume la actitud del esposo. No nos referimos a ese
sentimiento que siente cuando ve a su esposa bañada, bien arreglada, maquillada y
perfumada; nos referimos a un acto de sacrificio, nos referimos a que el esposo debe amar
a su esposa, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó a sí mismo por ella. ¡Qué
privilegio y qué gran responsabilidad a la vez! La vara para medir este amor, no son otros
esposos u otros matrimonios, es Cristo. El marido debe amar a su mujer cuando sienta
hacerlo… y cuando no lo sienta. No es opcional u emocional, es un mandamiento. Este
amor se manifiesta mediante el servicio de este hacia ella. De ser necesario, el marido
debería estar dispuesto a dar su propia vida por su esposa. Debe amarla procurando su
bienestar físico, pero también su bienestar espiritual. Debe ser el guía espiritual de ella.
Debe ejercer su autoridad, pero con humildad. Un marido que cumple bien su rol, ayudará
a que la esposa pueda cumplir bien su rol también. Si el marido refleja su autoridad en
amor sobre la esposa, ella respetará con gozo su liderazgo y se someterá con ánimo pronto
ante él.

BIBLIOGRAFÍA
CHRISTENSON, Larry. La Familia Cristiana. Editorial Caribe. Nashville, TN. 1970.

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