La participación ciudadana

La “participación ciudadana” en la coyuntura juvenil se refiere a la participación activa y

significativa de los jóvenes en los asuntos públicos que prosperarán a su comunidad, ciudad o país.
Es un concepto que se basa en el reconocimiento de que los jóvenes tienen derecho a participar
en la toma de decisiones y contribuir al desarrollo y mejoramiento de la sociedad en la que viven.

La participación ciudadana juvenil implica que los jóvenes tengan la oportunidad y los espacios
para expresar sus opiniones, ideas y preocupaciones, así como para influir en las políticas y
acciones que les sobrevengan. Se busca que los jóvenes sean tomados en cuenta como actores
fundamentales en la construcción de una sociedad más inclusiva y democrática.

Existen diferentes formas en las que los jóvenes pueden participar ciudadanamente en la
coyuntura actual. Algunas de ellas incluyen:

Organización y activismo: Los jóvenes pueden unirse a organizaciones, grupos o movimientos

juveniles que trabajan en temas de interés común, como el medio ambiente, los derechos
humanos, la igualdad de género, la educación, entre otros. A través de estas organizaciones,
pueden participar en campañas, manifestaciones, eventos y actividades para promover cambios
positivos en la sociedad.

Voluntariado: Los jóvenes pueden dedicar parte de su tiempo a realizar actividades de

voluntariado en su comunidad. Esto les permite involucrarse de manera directa en la solución de
problemas y contribuir al bienestar de los demás.

Participación política: Los jóvenes pueden ejercer su derecho al voto en elecciones, así como
involucrarse en procesos políticos a través de la afiliación a partidos políticos, el seguimiento de
políticas públicas, la presentación de propuestas o la participación en debates y foros.

Uso de la tecnología: Los jóvenes pueden utilizar las herramientas digitales y las redes sociales
para expresar sus opiniones, difundir información relevante, crear conciencia sobre problemas
sociales y promover acciones de cambio.
Participación en espacios de diálogo y consulta: Los jóvenes pueden participar en mesas de
diálogo, foros, consultas públicas y otros espacios donde se discuta y tomen decisiones sobre
políticas y programas que les afecten directamente. Es importante que estos espacios sean
inclusivos y garanticen la participación genuina de los jóvenes.

La participación ciudadana juvenil no solo beneficia a los propios jóvenes, sino que también
enriquece la democracia al promover la diversidad de perspectivas y contribuir a la construcción
de soluciones más inclusivas y sostenibles. Además, empodera a los jóvenes, fortaleciendo su
sentido de pertenencia y responsabilidad hacia su comunidad y sociedad en general.

La “participación ciudadana” en la coyuntura política se refiere a la implicación activa de los

ciudadanos en los asuntos políticos de su comunidad, país o región. Es un concepto fundamental
en una democracia, ya que implica el derecho y la responsabilidad de los ciudadanos de
involucrarse en la toma de decisiones políticas y contribuir al desarrollo y la gobernanza de su
sociedad.

La participación ciudadana en la coyuntura política puede manifestarse de diferentes maneras:

Voto: El voto es una de las formas más básicas de participación ciudadana en la política. Mediante
el ejercicio del sufragio, los ciudadanos eligen a sus representantes y líderes políticos en elecciones
periódicas.

Participación en partidos políticos: Los ciudadanos pueden afiliarse a partidos políticos y participar
activamente en sus actividades internas, como reuniones, debates y campañas. Esto les permite
influir en las agendas políticas y la selección de candidatos.

Activismo político: Los ciudadanos pueden involucrarse en movimientos sociales y manifestaciones

relacionadas con temas políticos específicos. El activismo político implica la organización de
protestas, la participación en campañas de sensibilización y la promoción de cambios en las
políticas públicas.

Iniciativas de base: Los ciudadanos pueden impulsar iniciativas ciudadanas y recolectar firmas para
presentar propuestas legislativas o referéndums sobre temas de interés público. Esto permite que
las sospechas de los ciudadanos sean abordadas directamente en la agenda política.
Participación en debates y consultas públicas: Los ciudadanos pueden participar en debates y foros
públicos, donde pueden expresar sus opiniones, plantear preguntas y brindar aportes sobre
políticas y decisiones que afectan a la comunidad.

Uso de las redes sociales y la tecnología: La participación ciudadana en la coyuntura política

también puede tener lugar en el entorno digital. Las redes sociales y otras plataformas en línea
ofrecen espacios para el intercambio de ideas, la difusión de información política y la organización
de movimientos ciudadanos.

Marco legal
La participación ciudadana en la coyuntura política es esencial para una sociedad democrática y
pluralista. Permite que los ciudadanos se involucren activamente en la toma de decisiones,
influencien las políticas y ejerzan su responsabilidad cívica. Además, fortalece la transparencia, la
rendición de cuentas y la legitimidad de los procesos políticos, al tiempo que fomenta un sentido
de pertenencia y compromiso con la comunidad y el país

En Guatemala, la participación ciudadana está respaldada por diversos marcos legales que afirman
y promueven el derecho de los ciudadanos a participar en los asuntos públicos. A continuación, se
mencionan algunas leyes y disposiciones relevantes:

Constitución Política de la República de Guatemala: La Constitución establece el marco jurídico

fundamental del país y garantiza los derechos y libertades de los ciudadanos. Reconoce el derecho
de los guatemaltecos a participar en la vida política, económica, social y cultural del país.

Ley Electoral y de Partidos Políticos: Esta ley regula los procesos electorales en Guatemala,
incluyendo el ejercicio del sufragio, la creación y funcionamiento de partidos políticos, y la
participación ciudadana en el sistema electoral.

Ley de Consulta Popular: Esta ley establece los procedimientos para la realización de consultas
populares, que son mecanismos de participación ciudadana para que los ciudadanos puedan
pronunciarse sobre asuntos de interés público.

Ley de Acceso a la Información Pública: Esta ley garantiza el derecho de los ciudadanos a acceder a
la información pública y promueve la transparencia en la gestión gubernamental. Permite a los
ciudadanos obtener información relevante para participar de manera informada en la toma de
decisiones.

Ley de Participación Ciudadana: Esta ley establece los mecanismos y procedimientos para la
participación ciudadana en la gestión pública. Reconoce la importancia de la participación
ciudadana en el diseño, implementación y evaluación de políticas y programas públicos.

Además de estas leyes específicas, existen otras normativas y regulaciones que también pueden
ser relevantes para la participación ciudadana en distintos alrededores, como la Ley de
Asociaciones y Fundaciones, que regula la creación y funcionamiento de organizaciones de la
sociedad civil, y la Ley de Descentralización , que promueve la participación ciudadana en la toma
de decisiones a nivel local.

Es importante destacar que, si bien existen marcos legales que respaldan la participación
ciudadana en Guatemala, la implementación efectiva y el fortalecimiento de estos mecanismos
requieren un compromiso constante por parte de las autoridades y la sociedad civil para garantizar
que los ciudadanos puedan ejercer plenamente su derecho a participar en los asuntos públicos.

Tener un "voto consciente" en la coyuntura política en Guatemala significa tomar decisiones

informadas y reflexivas al ejercer tu derecho al voto. Implica estar consciente de los problemas y
desafíos que enfrenta el país, comprender las plataformas y propuestas de los diferentes partidos
políticos y candidatos, y evaluar críticamente su idoneidad para abordar esos problemas.

Para emitir un voto consciente, es importante informarse sobre los antecedentes y las trayectorias
de los candidatos, sus posturas en temas clave, sus planes de gobierno y cómo han demostrado su
compromiso con la democracia y el bienestar de la población. Esto implica investigar fuentes
confiables de información, participar en debates políticos, asistir a mítines o eventos políticos para
escuchar directamente a los candidatos y discutir con otras personas para obtener diferentes
perspectivas.

Además, un voto consciente también implica considerar el contexto político y social en el que se
desarrolla la elección. Es importante estar al tanto de las estructuras que emergen a Guatemala,
como la corrupción, la pobreza, la desigualdad, la inseguridad y la falta de acceso a servicios
básicos. Evaluar cómo los candidatos y los partidos proponen abordar estos problemas y si sus
propuestas son realistas y viables es crucial para tomar una decisión informada.

En resumen, tener un voto consciente implica informarse, reflexionar y evaluar críticamente a los
candidatos y las propuestas políticas, considerando tanto los problemas y desafíos del país como
las capacidades y antecedentes de quienes buscan el cargo. Es una forma de ejercer el derecho al
voto de manera responsable y contribuir al fortalecimiento de la democracia en Guatemala.

Actividades rompe hielo

1 Verdades y mentiras

Es un juego muy sencillo, enfocado a nuevos grupos que apenas se conocen. Reúne a todas las
personas del grupo y forma un corro. Cada uno tendrá que pensar 3 verdades y una mentira sobre
sí mismo. Simplemente deberás ir yendo dando la palabra de uno en uno para que expongan estas
4 cosas sobre ellos y que haya un debate para descubrir la mentira.

2 Rompehielos con una palabra

Esta dinámica para romper el hielo sirve para introducir a las personas en el equipo y ver como van
interactuando y se van conociendo poco a poco:

Debes hacer varios equipos de 4 o 5 personas de manera aleatoria.

Actuarás como iniciador del juego y propondrás el tema: pensar una frase muy corta (o una o dos
palabras) con el motivo de la reunión, de manera individual.

Tras unos minutos de pensar y meditar, se pondrá en común la idea de cada uno.

Finalmente, cada grupo elige una frase o palabra que presentará al resto de los grupos y entre
todos debatirán y valoran las opciones eligiendo la mejor de ellas. Si no se llega a un quórum,
habrá que valorar por qué.

3 El juego de las posibilidades

Este es un juego sencillo (en grupo o individual) en el que quedará patente la innovación y
creatividad de cada individuo. El juego consiste en que una persona debe explicar para qué sirve
un objeto determinado. El resto del equipo deberá adivinar de qué objeto se trata. La
complicación reside en que el jugador principal no puede hablar...
4 Búsqueda del tesoro

Otra de las dinámicas para romper el hielo es la “búsqueda del tesoro”. Haz grupos de 2 personas
(o más si sois muchos). Tendrás que elaborar una lista con cosas para hacer en el entorno, tareas
poco habituales. Gana el grupo que antes complete la lista de tareas, por muy “locas” que
parezcan, en el menor tiempo posible.

5 Citas rápidas

Seguro que has visto películas en las que se llevan a cabo citas rápidas… En esta dinámica para
romper el hielo los participantes se van juntando de dos en dos y tienen un tiempo limitado para
hablar sobre un tema. Una vez pasado este tiempo (2-3 minutos por ejemplo), suena un timbre y
una persona de la pareja rota. Puedes proponer tú mismo el tema para que vaya todo más fluido.

Existen numerosas actividades o dinámicas para romper el hielo: Son muy útiles para que el grupo
se vaya conociendo y empiecen a hacer piña. Fomentando estas y otras muchas actividades se
logra una mejor cohesión de los equipos y una mayor facilidad para trabajar por un mismo
objetivo