Cien Años de Soledad

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Cien años de soledad

Gabriel García Márquez


Se narra la historia de siete generaciones de la familia Buendía, familia condenada
a la soledad. Son cuatro etapas que identifican, a grandes rasgos, los pasajes más
emblemáticos. La historia de esta novela relata una serie de sucesos insólitos,
insospechados, pero ni el narrador ni los personajes se asombra ante estos
sucesos. En el universo de la narración, lo maravilloso se comporta como parte de
la realidad cotidiana, como algo que no requiere explicación. Se trata, por tanto, de
una trasgresión literaria y quién sabe si del orden cartesiano de pensamiento.
Cada uno de los hechos narrados en la novela se relaciona con una lectura sobre
el tiempo histórico, sobre la construcción de la memoria y el paso del olvido. El
autor dialoga con la historia e identidad de su Colombia natal que es, de algún
modo, una imagen donde América Latina puede reconocerse.
Macondo no es solo una palabra sonora: es imagen de un árbol familiar que
extiende sus ramas para cobijar toda suerte de mitos, prejuicios, anécdotas,
valores, sueños y voluntades destinadas al olvido, a la transformación del tiempo.
La intrahistoria de la familia de los Buendía es a la vez un guiño de ojo a la
infancia de García Márquez y a la Historia con mayúsculas.
I ETAPA: FUNDACIÓN Y PRIMEROS AÑOS DE MACONDO
Desde que Úrsula Iguarán se casó con su primo José Arcadio Buendía, teme
engendrar un niño con cola de cerdo como consecuencia del parentesco. Por ello,
se niega temporalmente a consumar el matrimonio. Esto es causa de que
Prudencio Aguilar se burle de José Arcadio Buendía quien, ofendido, lo mata en
duelo para salvar su honor. Desde entonces, el fantasma de Aguilar lo persigue y
José Arcadio decide irse del pueblo.
Inspirado por un sueño durante su travesía en la selva, José Arcadio Buendía
decide quedarse en ese punto del camino y fundar Macondo, pueblo que crece
poco a poco.
El pueblo recibe con frecuencia las visitas de los gitanos. Su líder, Melquíades,
trae siempre artefactos y objetos que obsesionan a José Arcadio Buendía.
Para entonces, el joven matrimonio ya ha concebido a tres hijos: José Arcadio,
Aureliano y Amaranta. Además, adoptan a Rebeca, la hija de unos parientes. El
incesto es una preocupación constante en Úrsula, quien con los años observa
cómo Receba y su hijo José Arcadio se enamoran y se casan.
A Macondo llega la peste del insomnio, la cual trae consigo la del olvido. Un
brebaje de Melquíades pone fin a la peste. El éxito es tal que el gitano se queda a
vivir en Macondo, tiempo en el cual escribe unos pergaminos que solo serán
descifrados muchos años después.
El patriarca, José Arcadio Buendía, vuelve a encontrarse con el fantasma de
Aguilar y enloquece. La familia, entonces, lo amarra a un árbol del patio trasero,
donde morirá de un infarto.

II etapa: la guerra civil y el coronel Aureliano Buendía


Al estallar la guerra civil, Aureliano Buendía lucha contra los conservadores,
comandando un grupo de soldados de Macondo. Nombra a su sobrino Arcadio
como jefe civil y militar del pueblo.
Arcadio había sido el fruto de una relación de amantes entre José Arcado hijo y
Pilar Ternera, regente de un prostíbulo. Fue criado en casa de sus abuelos a
condición de que se le ocultara su origen. Creció pensando ser hijo del gran
patriarca. Cuando es nombrado jefe de Macondo, Arcadio se vuelve un dictador y
tiraniza el pueblo. Muere fusilado por los conservadores.
Durante su actividad como líder de los liberales, el coronel Aureliano Buendía
enfrenta un total de 32 batallas, de las cuales sale siempre perdedor. Cansado,
pronto el coronel comprende que la lucha armada no tiene sentido.
Con el tiempo, Aureliano firma un tratado de paz, tras el cual intenta suicidarse.
Regresa a Macondo, donde pasará el resto de su vida haciendo y rehaciendo
pescaditos de oro.

III etapa: la fiebre bananera


Aureliano concibe 17 hijos de madres diferentes. Uno de ellos, llamado Aureliano
Triste, promueve el tren a Macondo, lo que activa el comercio y permite la llegada
de inventos como el telégrafo y el cine. Esto atrae la inversión de un grupo
extranjero en una plantación de bananos.
La plantación genera la ilusión de prosperidad del pueblo, pero una huelga de
trabajadores hará que todo esto acabe en una auténtica masacre. Los
inversionistas, luego de haber explotado el pueblo, se retiran con su dinero y
Macondo vuelve a la pobreza.
A partir de ese momento, el pueblo sufre lluvias constantes por casi cinco años.
Úrsula, la matriarca centenaria que ha cuidado de toda la familia, espera el fin de
las lluvias para morir y descansar el paz.
Durante los últimos tiempos de Úrsula, nace Aureliano (Babilonia), el último
descendiente de los Buendía. Aureliano es hijo natural de Meme y Mauricio
Babilonia, un aprendiz de mecánico que siempre es perseguido por un enjambre
de mariposas amarillas.
La religiosa y tiránica madre de Meme, Fernanda del Carpio, se opone a la
relación, saca a Mauricio del camino, manda a Meme a un convento, le quita al
niño y lo cría haciéndole creer que ha sido encontrado en una canastilla.

IV etapa: el fin de Macondo


Pasan los años y poco a poco el pueblo se va vaciando. Aureliano Babilonia, que
se caracterizaba por ser sabio, pasa la vida descifrando los pergaminos que había
escrito Melquíades.
Entre tanto, regresa de Europa su tía Amaranta Úrsula, casada con Gastón. Sin
saber de su parentesco, ambos se enamoran, Gastón se va pero ella queda
embarazada.
Durante el parto, en el que ella muere, da a luz a un niño con cola de cerdo.
Aureliano intenta buscar ayuda, pero al no encontrar más que a un cantinero, se
emborracha y se queda dormido. Cuando despierta y regresa, el niño ha sido
devorado por las hormigas.
Finalmente, Aureliano logrará descifrar los pergaminos de Melquíades: «porque
las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda
oportunidad sobre la tierra». Entonces, todo Macondo será arrasado y sepultado
por un huracán.
CRITICA
Es una de las cuatro o cinco grandes obras de la humanidad. Y de las dos en
castellano. Creo que no es de ninguna época. Creo que es la misma que antes de
ser publicada y la misma, incluso, que antes de que se hubiera escrito (pues ya
estaba en Hesíodo, en Lucrecio y en la Biblia). Creo que su único contexto es la
condición humana y la sociedad humana.
Es extraño que Cien años de soledad esté cumpliendo cincuenta: su logro
principal, su logro más extraño al menos, es justamente el de habernos
convencido desde la primera vez que fue publicado de que había existido siempre,
como la Biblia o Las mil y una noches, y desconcierta, por decir lo menos, la
noticia de que se trata de una novela que apenas tiene medio siglo. Cien años de
soledad no ha envejecido ni un solo día porque nació vieja, única, sin rastros de
los sesenta ni tics del siglo XX. Habría que agregarle un cero a su edad para que
su influencia sobre la literatura que le siguió sea verosímil.
NOMBRE DE LA ALUMNA:
SOFIA ESMERALDA BOLAÑOS DE LA
CRUZ
GRUPO: 211
“CIEN AÑOS DE SOLEDAD”

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