Cómo Orar en El Espíritu

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¿Cómo orar en el Espíritu?

Versículo:

orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu

Efesios 6:18
Introducción:
La oración debe ser en el Espíritu, no es para satisfacer nuestras necesidades y
tampoco es un momento en el día, debe ser un estilo de vida, nuestras vidas son el
resultado de nuestra oración,
la oración en el Espíritu nos enseña fidelidad e integridad no solo en la iglesia, en
todas partes. ¿como aprender a orar en el Espíritu Santo? dejemos que la biblia
nos enseñe a hacerlo.
PUNTOS PRINCIPALES

 Los resultados de la oración

Hay quienes buscan eventos, campamentos y convenciones, esperando que todo


mejore en la congregación, esperan ver familias restauradas, personas llenas del
Espíritu santo y convertidas, aunque hubieron danzas y lenguas,

al final todo vuelve a ser lo mismo, Dios no es de eventos es de procesos, aunque


el proceso duele, al atravesarlo aprendemos nuevas cosas en Dios y obtenemos
resultados.

 Avanzar en la Oración

Cuando oramos en el Espíritu, oramos en secreto, nos deleitamos en Dios,


morimos a nuestra voluntad y solo queda la de él, cuando no es así, solo pedimos y
eso es tan solo una parte de la oración.
Para avanzar en la oración, necesitamos disciplina, constancia, y dedicación, es la
única forma para alcanzarlo.
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.”
Mateo 7:1

 ¿Por qué debemos orar en el Espíritu?

Los discípulos fueron hombres que compartieron mucho tiempo con Jesús,
cenaron con él, vieron sus milagros, escucharon sus enseñanzas.
Ellos querían que, así como Juan había enseñado a orar a sus discípulos, él les
enseñara, ellos no pidieron saber predicar, o saber enseñar,y mucho menos hacer
sus milagros, ellos querían aprender a orar, Jesús les enseña los fundamentos de
la oración; reconocer, exaltar, aceptar su voluntad, y por ultimo pedir.
Jesús sabía que si los discípulos aprendían a orar en el Espíritu, aprenderían a
predicar, enseñar, cantar, sobre todo, a vivir en el Espíritu.
“Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus
discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar, como también Juan enseñó a sus
discípulos.
Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así
también en la tierra.
El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
Y perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a
todos los que nos deben. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal.”
Lucas 11:1-4

 La oración en el Espíritu nos liberta y transforma

En el antiguo testamento, todo nombre tenía un significado, por el lugar,


condición, o situación, en la que se había dado, el nombre nos hablaba de quien lo
llevaba,

Jacob quien era hijo de Isaac y Rebeca llevaba como nombre: usurpador,
ladrón, mentiroso, engañador, quien suplanta, ya que en el momento del
parto, tomo del calcañar (tobillo) a su hermano Esaú.
Génesis 25:21-26

 La lucha de Jacob por Israel

Jacob sin importar donde estuviera o con quien estuviera siempre seria conocido
como el usurpador por causa de su nombre, él quería cambiar su situación, estaba
avergonzado de su nombre, no quería seguir siendo conocido de esa forma.

Había luchado con los hombres en muchas ocasiones saliendo vencedor, aun así
no había podido cambiar su situación.

Decide estar solo y «luchar con Dios», era la única oportunidad de cambiar su
historia.

Jacob durante toda una noche lucha con un varón de Dios (que en realidad era una
teofanía: manifestación de Dios visible y temporal) sin importar el tiempo, el lugar,
o el contendiente, estaba dispuesto hacerlo todo por cambiar su nombre, aun
cuando el varón de Dios le había desencajado el muslo, seguía luchando.

Él quería cambiar su vida para siempre, por esto no dejaba de luchar, y la única
opción para el varón de Dios fue bendecirlo.

Esto genero que preguntara por su nombre, la causa de la pregunta estaba en que
la vergüenza de Jacob se encontraba en su nombre, el cual fue cambiado a Israel:
porque lucho con Dios y con los hombres y venció.

Jacob fue libertado de su error, y ahora ha sido transformado por Dios, la oración
en el Espíritu nos ayuda afrontar nuestros errores y convertirlos en las mayores
experiencias y victorias en Dios.

Génesis 32:24-28

 La oración en el Espíritu nos fortalece

Elías después de tener una gran victoria en el monte Carmelo, al derrotar los
profetas de Baal y de Asera, huye ante las amenazas de una mujer, Jezabel,

la causa de que Elías huyera al desierto estaba en que sus fuerzas espirituales se
habían desgastado, Elías se duerme debajo de un enebro, y un ángel le toca y le
despierta diciéndole: levántate y come,

Elías se levantó y comió y bebió, pero volvió a dormirse, el ángel le volvió a


despertar y Elías comió y bebió por segunda vez, en esta ocasión fortalecido con
aquella comida caminando durante cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb.

Después de todo servicio en la iglesia, necesitamos refugiarnos en la oración del


Espíritu, buscando llenarnos nuevamente de fuerzas, para poder estar en pie antes
los continuos ataques de satanás.
“Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó,
y le dijo: Levántate, come.
Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una
vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse.
Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come,
porque largo camino te resta”
1 Reyes 19:5-7
“Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.”
Efesios 6:10
Conclusión:
5. El mundo necesita una iglesia que ore en el Espíritu

Encontramos en muchas ocasiones a hermanos quejándose de sus problemas y


dificultades, nunca han podido avanzar en sus vidas espirituales, viven de fracasos y
de derrotas, su problema ha sido que nunca han aprendido a orar en el Espíritu, el
mundo entero está segado por satanás.

en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que
no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de
Dios

2 Corintios 4:4

La única forma de que esto cambie es a través de una iglesia que ore en el Espíritu;
cuando lo aprendamos hacer, veremos la gloria de Dios en nuestras iglesias y en
nuestras vidas.

“Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero

Está bajo el maligno.” 1 Juan 5:20

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