Reporte 2. Comportamiento y Salud

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 5

COMPORTAMIENTO Y SALUD

EMILIA SOFIA VILLALBA RAMIREZ


Introducción
No escapa a la evidencia la forma en que algunas personas se recuperan con cierta
rapidez de las mismas enfermedades y trastornos que a otras causan largos periodos de
convalecencia y/o inconveniencias familiares y laborales. Tampoco es extraño encontrar
personas que a lo largo de su vida manifiestan una sorprendente predisposición a
padecer enfermedades víricas como gripe, sinusitis, hepatitis o herpes, por citar sólo las
más comunes, mientras que otras, a pesar de estar expuestas a los mismos virus, no
sucumben a tales infecciones y permanecen completamente sanas.
Comportamiento, Estilos de Vida y Salud.
Estilos de Vida. Definición.
Se pueden detectar tres aproximaciones al concepto de estilo de vida. Se le considera en
primer lugar, de una forma genérica en la que se le conceptualiza como una moral
saludable que cae bajo la responsabilidad del individuo o bajo una mezcla de
responsabilidad del individuo y la administración pública, según el ámbito cultural.
Desde esta misma perspectiva, algunos autores han propuesto la idea de dos estilos de
vida:
1) Estilo de Vida Saludable: con dos dimensiones que califican como:
a) sobriedad, definida por comportamientos que implican no fumar, tomar alimentos
saludables, abstinencia del alcohol, etc., y
b) actividad o dimensión definida por la participación en deportes y ejercicio regular,
mantenimiento de un bajo índice de masa corporal, etc.
2) Estilo de Vida Libre: caracterizado por comportamientos totalmente contrarios al
anterior: consumo de alcohol, toma de alimentos no saludables y despreocupación por
la apariencia física.
En este punto de vista genérico se engloba el trabajo de la OMS cuyo objetivo principal
es la promoción de estilos de vida saludables, esto es, una forma de vivir que tanto
individual como colectivamente y de forma cotidiana, permitan una mejora de calidad de
vida.
Modelos de Relación entre Personalidad y Salud
Los modelos centrados en los rasgos de personalidad propuestos por Suls y Rittenhouse,
que intentan explicar la relación entre comportamiento y salud a partir de los rasgos
temperamentales y de carácter que determinan la forma de actuar de los individuos.
Básicamente, son tres los modelos que proponen una explicación causal entre
personalidad y salud:
1. la personalidad induce hiperactividad: Ciertas personas, en virtud de su
constelación de rasgos, responden de forma aguda y/o crónica, esto es, de forma
puntual y/o permanente, con una reactividad fisiológica exagerada a los
estresores. Según este modelo, la reactividad fisiológica está determinada por la
evaluación de las situaciones como más estresantes de lo que en realidad son, o
bien porque las conductas realizadas por estos individuos producen elevadas
respuestas simpáticas o neuroendocrinas.
2. predisposición conductual: Este modelo, mucho menos estudiado que el anterior,
sostiene, básicamente, que las disposiciones de personalidad asociadas con
riesgo de enfermedad pueden ser sólo marcadores de alguna debilidad física
innata o anormalidades orgánicas que aumentan la susceptibilidad a la
enfermedad. Asimismo, el estilo de personalidad puede ser por sí mismo
inofensivo (desde una perspectiva de la enfermedad física), pues puede servir
meramente para indicar la presencia de alguna anormalidad subyacente que crea
el riesgo de enfermedad.
3. la personalidad como determinante de conductas agresivas: Este tercer modelo
propone que los rasgos de personalidad confieren mayor riesgo de enfermedad
pues exponen a los individuos a situaciones y circunstancias riesgosas.
PSICONEUROINMUNOLOGÍA COMO DISCIPLINA INTEGRADORA.
Conceptualización del sistema inmunológico. Generalidades.
En el mundo en que vivimos prolifera tal cantidad de agentes infecciosos y de tan
variadas formas, tamaños, composición y carácter agresivo, que si no desarrolláramos
una serie de mecanismos de defensa tan eficaces e ingeniosos como ellos acabarían por
usurpar y devastar todo nuestro organismo. Estos mecanismos de defensa son los que
pueden establecer un estado de inmunidad contra la infección, y cuyas operaciones
proporcionan la base de esa disciplina llamada inmunología.
Tipos de respuesta inmune
El organismo ha desarrollado dos formas de reaccionar a los antígenos:

• Inmunidad innata o inespecífica: constituye la primera barrera de defensa.


• Inmunidad específica o adaptativa: constituye un sistema complejo y elaborado
constituido por células con receptores específicos capaces de reconocer el
universo de agentes extraños que rodean nuestro organismo.
En función de las células que participan en esta última forma de defensa pueden
distinguirse dos tipos de respuesta inmunitaria específica:

• Inmunidad humoral mediada por moléculas específicas para el antígeno, los


llamados anticuerpos, producidos, a veces, lejos del lugar donde actúan, los
cuales intervienen, por ejemplo, combinándose directa mente con toxinas
bacterianas y neutralizándolas, recubriendo a las bacterias y promoviendo su
fagocitosis, etcétera.
• Inmunidad celular mediada por células que, específicamente sensibilizadas, se
acumulan en el tejido implicado en la reacción y liberan a nivel local mediadores
farmacológicamente activos.
Personalidad Y Respuesta Inmune: Evidencia Empírica.
La relación entre variables de personalidad y respuesta del sistema inmunitario puede
darse a través de las diferentes vías que integran el sistema que podríamos denominar
psico-neuroendocrino-inmunitario, lo expusimos debido a que el análisis de tal
interrelación es el objeto de estudio de la psiconeuroinmunología, consideramos
necesario revisar los estudios que en esta nueva disciplina han intentado constatar la
asociación que pueda existir entre diversas variables psicológicas y la actividad del
sistema inmunitario.
Personalidad y Afecciones Virales
Una de las primeras referencias a este tipo de trabajos la encontramos a principios de la
década de los setenta en un estudio de Roark (1971), quien comparó las características
psicológicas y de personalidad de un grupo de estudiantes diagnosticados con
mononucleosis infecciosa (trastorno provocado por el virus de Epstein-Varr), con las
correspondientes características psicológicas y de personalidad de diferentes grupos
control diagnosticados con otro tipo de enfermedades. Los resultados mostraron
escasas diferencias en cuanto a medidas de personalidad (valorada con el California
Personality Inventory) y estado de ansiedad (registrada con la escala de Ansiedad Estado
de Spielberger) entre los sujetos con mononucleosis y el resto de los grupos, por lo que
no se pudo determinar ninguna asociación entre la enfermedad vírica y características
de personalidad.
Personalidad Y Diferencias Individuales En Parámetros Del Sistema Inmunitario
Los trabajos que podemos incluir en esta área de estudio muestran una gran
heterogeneidad tanto por lo que respecta a las medidas de personalidad empleadas
como por los indica - dores del sistema inmunitario registrados. Así, por ejemplo,
utilizando el MMPI como medida de personalidad, Heisel, Locke, Krau y Williams (1986)
compararon la actividad de las células Natural Killer (NK) con las puntuaciones obtenidas
en dicho cuestionario por 111 estudiantes universitarios. Los resultados muestran
correlaciones bajas, pero estadísticamente significativas entre algunas de las escalas y la
actividad de las NK, pero diferentes en función del sexo.
Personalidad Y Diferencias Individuales En Respuesta Inmune Específica
El único trabajo que pensamos podría incluirse en este apartado es el de Sokhey,
Vasudeva y Kumar (1989), mediante el cual intentaron averiguar cuáles eran las
características de personalidad asociadas con un grupo de sujetos con alergia
respiratoria (asma y rinitis) y con distintos grados de reactividad cutánea.
Relaciones Entre Comportamiento Y Salud Desde Una Perspectiva
Psiconeuroinmunológica.
Los factores psicosociales están muy relacionados con el estrés que un individuo
experimenta. Se cree que tales factores afectan también a la función inmunológica. Por
ejemplo, diversas investigaciones han demostrado que los individuos bajo un estrés de
larga duración e intensidad, que gozan de una fuerte red de apoyo social, presentan un
sistema inmune más eficaz en comparación con otros individuos que soportan el mismo
tipo de estrés pero que no gozan de ella.
Uno de los factores psicosociales estudiados en los últimos años es el que implica
describir los sentimientos propios acerca de los acontecimientos estresantes.
La relación entre la personalidad y la salud física es compleja y multifacética. Hay
evidencia que sugiere que ciertas características de personalidad pueden influir en la
salud física de las personas. Además, la personalidad también puede influir en los
comportamientos de salud. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la
personalidad no es el único factor que influye en la salud física. Otros factores, como la
genética, el entorno y el estilo de vida, también pueden desempeñar un papel
importante. Por lo tanto, la personalidad no debe ser vista como un factor determinante
de la salud física, sino como un factor que interactúa con otros factores para influir en la
salud general de una persona.

También podría gustarte