Isaías 64
Isaías 64
Isaías 64
Introducción:
Cuando escribe Isaías el problema era identificar al Dios verdaderon dentro el panteón de Dioses. Ahora
insisto es el mismo problema pero del otro lado de la moneda, es identificar a Dios en un mundo que no cree
en Él. Es decir en ambos casos hay que decir que hay un Dios verdadero que sí existe.
Ahora bien, la ciencia, la filosofía, los teólogos y otras muchas más ramas, hay dado argumentos no solo
encontra de la existencia de Dios, sino también a favor de ella. Les comparto algunos.
¿Cómo explicar que todo tuvo un pricicipio? A la respuesta de esta pregunta se le conoce como argumento
cosmológico Kalám. Según la ciencia nada llegar a existir sin una causa. Algo lo causo. No aparece un reloj
de pronto, tuvo que haber un relojero. Del mismo modo los científicos aceptan que el universo tuvo un inicio
es decir un comienzo. Lo hacen a través de las leyes de la termodinámica, la matemáticas y otras ciencias.
Así que si tiene un comienzo alguien tuvo que hacerlo comenzado. Algo o alguien en algún punto tuvo que
echar andar la maqunaria que llamamos universo.
Argumento de la contingencia. Este responde a la pregunta. ¿Por qué existe algo en lugar de nada? El
Diccionario Filosófico de Cambridge, define lo contingente como aquello que no es ni imposible ni necesario.
El término contingencia se refiere, por tanto, a aquello que, pese a reunir todas las condiciones necesarias
para suceder, puede acabar por no ocurrir.
Para entenderlo mejor aclaremos lo siguiente:
Formalmente, la lógica diferencia entre:
Necesidad: Lo necesario es lo que, dadas determinadas circunstancias, ocurre en todos los casos.
Posibilidad: Lo posible es lo que es factible de convertirse en realidad.
Contingencia: Lo contingente es aquello que bien puede o no ser, si llegan a darse las condiciones
de una cosa o de la otra.
De este modo, todo lo que es contingente es a la vez posible (dado que existe la posibilidad de que llegue a
ser), pero no todo lo posible es contingente, ya que todo lo necesario es posible, pero no contingente (puesto
que podría no llegar a ser). Lo imposible, por su parte, no es ni contingente, ni necesario.
Aquí entra la existencia el universo. No es imposible porque existe. Pero si decimos que no tienen necesidad
de existir, pudiera o no pudiera haber universo. Entonces esa contingencia nos hace preguntarnos porque
sucedió? ¿Cuál es la razón? Por supuesto la respuesta es Dios.
Si el universo tiene una razón para existir, la razón es Dios”.
Y si alguien dice es que no hay ninguna razón para que exista el universo, y ese es el punto. Porque sí existe.
Y si todo tiene una razón para existir, entonces Dios existe porque Dios lo hizo.
Uno más. El argumento del diseño matemático. Las matemáticas nos dicen que la naturaleza toda ella está
escrita en lenguaje matemático. Es decir, el universo tiene una estructura matemática. La pregunta aquí esto
es una coincidencia? Todo este diseño exacto es solo azar. Es producto del caos, que por cierto aún allí hay
orden. Si el mundo esta diseñado de manera tan exacta que se puede notar en la matemáticas, entonces n
gran diseñador debe existir.
Perdón toda esta revoluntar filosófica. Pongo esto en la mesa porque en este pasaje, es precisamente lo que
busca Isaías que vean que el Dios verdadero existe. 1 -3
Para este profeta no hay duda Dios existe. Él pide al Señor que se muestre.
Mi papá me decía si Dios se muestra yo creería en Él, yo le contesté, ya vino y lo matamos.
Eso me lleva a la segunda verdad.
Esto debería preocuarnos, porque sí existe Dios. Entonces el nos pedirá cuentas de lo que hacemos, o no
hacemos.
Jesús enseñó eso muchas veces. Dio varias parabolas al respecto.
Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al
esposo. 2 Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. 3 Las insensatas, tomando sus lámparas, no
tomaron consigo aceite; 4 mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. 5 Y
tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron. 6 Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el
esposo; salid a recibirle! 7 Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. 8 Y las
insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan. 9 Mas las
prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que
venden, y comprad para vosotras mismas. 10 Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que
estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta. 11 Después vinieron también las otras
vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! 12 Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os
conozco. 13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir
Todos nos hemos alejado de Dios. Todos somos esas vírgenes imprudentes.
Todos somos hijos prodigos que hemos gastado la herencia.
Todos somos esos que no hemos dado fruto de nuestro talento.
Todos hemos fallado.
Este pasaje lo usa Pablo en su segunda carta a los corintios para hablano sde Jesús.
Dios ha revelado a su hijo, y ese conocimiento es dado a través del Espíritu.
Si tu estás ecuchadno esto, esto es para ti. Cree.
Arrepientenete, tomo ucruz y sigule.