Cultivo de Uva
Cultivo de Uva
Cultivo de Uva
CURSO:
AGROMETEOROLOGIA
TEMA: FENOLOGIA CULTIVO
DE UVA
PRESENTADO POR:
• ROBERTO CARLOS QUISPE YUNGA
DOCENTE:
ING. TAPIA AGUILAR BERNARDINO
GRUPO: B
PUNO – PERÚ
2021
INTRODUCCION
MINAGRI (2019) menciona que el Perú posee las condiciones agroclimáticas naturales para la
producción de la vid, cuya producción en los últimos años ha sido expansiva y dinámica y el
crecimiento de las exportaciones ha aumentado, beneficiándose principalmente en el periodo de
noviembre a marzo, periodo en la que se obtiene ventajas al disminuir la oferta mundial. Un
factor muy importante para el desarrollo dinámico de exportador ha sido la apertura de nuevos
mercados internacionales, producto de la firma de tratados comerciales del Perú con EEUU,
Unión Europea y China.
Al ser la vid una planta leñosa perenne, su desarrollo se produce a través de los años siguiendo
un ciclo vegetativo interanual, pero también en su hábitat natural, de clima templado
mediterráneo, sigue un ciclo vegetativo anual propio, que no se corresponde en situaciones más
cálidas tropicales, en las que la planta permanece constantemente en vegetación (Hidalgo 1993).
Hidalgo (1993) menciona 4 periodos en el ciclo de vida de la vid que constan del crecimiento y
formación hasta llegar a una fase adulta (3 años), desarrollo de la planta con producción
creciente de cantidad y calidad (7-10 años), Periodo productivo donde hay producción estable
(40 años o más) y periodo de envejecimiento.
El ciclo reproductivo de la vid ocurre en forma paralela con el ciclo vegetativo, y hace referencia
a la formación y desarrollo de las inflorescencias, flores, bayas y semillas, y a su maduración
(Salazar y Melgarejo 2005). Entre los procesos más importantes están: La floración (Inducción e
iniciación), cuajado y formación del fruto, crecimiento y madurez del fruto (Etapa en verde-
envero, inicio de maduración, madurez).
Figura 1.- Grafico de los estados fenológicos de la vid según Baggiolini (1952)
Brote 10- Brote Inicio Plena Bayas 12- Cierre Pre Post
Receso Brotacion 20 cm 50 cm flor flor 15 mm racimo Pinta cosecha cosecha
Oídium
Mildiu
Botritis
Pudrición
Acida
Ácaros
Chancho
blanco
Pulgones
Nematodos
Cuadro 1.- Plagas según estado fenológico (Fuente: Propia basada en Syngenta)
Es importante mencionar que para un óptimo control de las plagas y enfermedades en la vid,
además de conocer cuáles son (morfología y biología), la época del año en que se presentan o la
etapa fenológica en la que suelen atacar, es importante tener en cuenta el umbral de daño
económico para conocer la cantidad de daño que se puede tolerar sin que ello suponga una
merma en los ingresos. Conociendo eso, se podrá tomar decisiones y medidas oportunas. En
caso de que estos umbrales sean superados, se procede al uso de todas las medidas de control
posibles, peor siembre teniendo en cuenta el punto de vista económico, ambiental y sanitario.
La filoxera, Daktulosphaira vitifoliae (Fitch, 1854), ahora conocido como Phylloxera vitifoliae está
considerada como la plaga más global, devastadora y decisiva de la historia de la viticultura
mundial. Y es que ningún evento, plaga o enfermedad, se propagó tan rápido e impulsó el
cambio de los ejes de producción de uva de nuestro planeta como lo hizo la llegada de este
insecto a Europa desde Norteamérica a finales del siglo XIX. Actualmente está presente en todos
los continentes (Moreno Pérez 2002).
Figura 2.- Ciclo reproductivo completo de filoxera vitícola (No Title s. f.)
Su ciclo de vida es similar al de otros miembros de la superfamilia Aphidoidea como los ciclos
partenogenéticos con temporadas de polifenismo (Downie y Granett 1998). Esta plaga prospera
mejor en suelos arcillosos o pesados y en condiciones de suelos secos (Chávez 2004). En
primavera y verano se reproducen partenogenéticamente en hojas y raíces de vides
susceptibles. Finalizada esta temporada, la población se incrementa y el estado nutricional de la
planta cambia, es ahí cuando comienza la reproducción sexual de los áfidos. Explicado de otra
manera, el ciclo comienza en la parte aérea al inicio de la primavera cuando eclosiona el huevo
de invierno, la larva se alimenta de las reservas de la hoja y forma una agalla, muda de 3 a 4
veces antes de convertirse en hembra adulta o “fundadora”. Pasados 25 dias empieza a poner
huevecillos en forma concéntrica (unos 500 aproximadamente). Esta progenie se propaga en las
hojas y toma el nombre de galliciolas. Las hembras no aladas pasen a la zona radicular
generando nódulos en raíces jóvenes y tuberosidades en raíces lignificadas. En la zona radicular
se forman generaciones de hembras ápteras hasta finales de verano o inicio de primavera
cuando se empiezan a producir hembras aladas que emergen del suelo y producen descendencia
que no se alimenta, solo se reproducirán de manera sexual: Un macho y una hembra ovípara que
producirán un huevo sexual para la próxima temporada del cual saldrá una hembra
partenogénica vivípara (Forneck y Huber 2009).
Existen 4 estadios ninfales previas al adulto sin alas que se dan mientras la filoxera se va
alimentando de la parte foliar. Los alados se generan en las raíces donde también pasan por 4
estadios ninfales antes de la eclosión. Una vez fuera del suelo, los alados no se alimentan, solo se
dispersan y colocan huevos femeninos y masculinos de manera asexual. Estos últimos mudan 4
veces también hasta dejar un huevo finalmente que eclosionara la siguiente temporada (Granett
et al. 2001).
El holociclo o el cambio entre reproducción partenogenética y sexual se dice que se presenta por
distintos factores ambientales que no se han determinado aún con precisión. Dixon (1987)
Menciona que los de reproducción sexual aparecen en condiciones de días cortos y
temperaturas bajas como en otoño. Sin embargo otros afidos responden a estas características
ante el cambio de alimentación.
Dada esta alta variación y cambio genético de la filoxera, esta ha logrado romper la resistencia
de algunos patrones y tiene l potencial de poder hacerlo en otras (Powell 2008).
Síntomas
Inicialmente se ve un crecimiento decreciente del tallo seguida de una clorosis de las hojas y
síntomas de deficiencia de potasio. Luego de un tiempo colapsa el sistema radicular. Inicia
con epicentros de unas 10 vides y luego se expande radialmente.
La manera en la que causa daños se da en 3 formas: La remoción de fotosintatos que causa
la perdida de vigor, muerte radicular por la entrada de patógenos secundarios que ingresan
por las heridas hechas por filoxera, generando la deficiencia de nutrición y absorción de agua
por la planta provocándole la muerte y disrupción fisiológica (Granett et al. 2001).
Chávez (2004) menciona que la filoxera se alimenta del jugo de las células de las hojas y las
raíces de la vid. Para identificarla debemos observar (Figura 6 y 7):
Figura 4 y 5.- Signo de daño en hojas y raices por phylloxera (Chávez 2004)
Control genético
La mejor forma de erradicar o evitar el daño de esta plaga hasta ahora es el uso de patrones
de variedades resistentes para sembrar en suelo (Cuadro 1). Esto es mencionado por varios
autores. Chávez (2004) menciona a los patrones: Poulsen, 1102, 5-BBT, Riparia; R-99, Salt
Creek u otros pertenecientes a las vides americanas.
Patrones Variedad
V.riparia x V. rupestris ´3309´, ´101-14´, ´Schwarzmann´
V.rupestris ´Saint George´
V.riparia ´Gloire de Montpelier´
V.Berlandieri x V.riparia ´161-49´, ´Teleki 8 B´, ´5 BB´, ´420 A´
V.Berlandieri x V.rupestris ´99 R´, ´110 R´, ´1103 P´
V.riparia x V.cordifolia x V.rupestris ´44-53M´
V.rotundifolia La más resistente (Hidalgo 1993)
Control biológico: Se han hecho distintas pruebas con B.bassiana y M. anisopilae sin
embargo los resultados no han sido concluyentes (Powell 2008).
Control químico: No es recomendado por el variado ciclo de vida de la plaga, la cual será
difícil de controlar una vez este bajo el suelo. Se han probado neonicotinodes sistémicos
como Imidacloprid sin embargo esta en dudo su buen efecto en el campo sin mencionar la
alta contaminación de suelo que pueda generar (Powell 2008). Aunque D. Johnson et al.
(2004) mencionan que si es una infestación inicial se pueden hacer aplicación al momento de
ver a la plaga caminando por la parte foliar o al ver agallas recién abriéndose.
Chanchito de la vid (Pseudococcus viburni)
Acaro de la yema (Colomerus vitis)
Arañita roja (Tetranychus urticae)
Thrips de la vid (Frankliniella occidentales)
Otras plagas de importancia
Los nematodos son pequeños gusanos con un tamaño próximo al milímetro, que viven y se
desarrollan a costa de las raíces de la vid y de otras especies vegetales. Según Hidalgo (1993) se
identifican dos órdenes principales, Tylenchidos y Dorylaimidos.
Los tylenchidos son en su mayoría endoparásitos que penetran enteramente en las raíces, donde
viven, se nutren y se reproducen. Contiene 4 familias que parasitan la vid, entre ellas:
Heteroderidae (Meloidogyne), Hoplolaidae (Pratylenchus), Criconematidae y Tilenchulidae.
Meloidogyne: Entre las especies más corrientes en los viñedos esta M. incognita y M.
arenaria. La hembras son redondeadas en forma de pera, partenogeneticas y de color
blanco (0.5 mm) y los machos son filiformes también partenogenéticos (1.5 mm). Tienen
un ciclo que dura de 25-90 días y de 5 a 10 generaciones por año. Penetran las raicillas
con su estilete bucal y sus secreciones causan la hipertrofia de las células de la corteza
provocando agallas o nodosidades que persisten en la planta perturbando la absorción
radicular y consecuentemente debilitando la planta y generándole una clorosis.
Lo ideal si un terreno está infectado es sembrar vides con portainjertos resistentes a los
nematodos. Para ello existen variedades como Ugni Blanc, Malbec, Cabernet franc,
Merlau blanc, Pinot blanc, entre otras. Pero además de esto, se recomienda sembrar con
cereales cerca, inundar el terreno antes de siembra, realizar barbechos de 7 u 8 años.
Adicional a ello se puede realizar un tratamiento químico de desinfección con
nematocidas y se puede utilizar: Diclopropeno (600 L. /ha) o Diclobromoetano (750 L.
/ha).
Estilete característico del género Meloidogyne (FertiLab 2014)
Raíces infectadas con especies de nematodo Meloidogyne spp. Foto A: indica masa de huevo formada,
Foto B: raíces de soja resistentes (B1) y susceptibles (B2) al ataque de nematodos
formadores de agallas (CDFA – California Departamento of Food and Agriculture, 2007)
Los Dorylaimidos son ectoparásitos emigrantes de las raíces que viven en el suelo y se alimentan
y se alimentan de las extremidades de estas. Su daño es de poca importancia, sin embargo lo
preocupante son los efectos secundarios que causa, que es la transmisión de virosis. Consta de
los géneros:
Por otro lado, Bustamante (2000) menciona a las mismas 3 familias de nematodos que atacan a
la vid:
Manejo:
El uso de patrones resistentes es una de las mejores formas de controlar a los nematodos, al
igual que a la filoxera. Entre los patrones que tenemos en Perú, “Freedom” (Híbrido de 1613
C (V. solonis X Othello) X Dog Ridge) es bastante resistente al Melidogyne aunque tiene poca
resistencia a Filoxera, “Harmony” tiene buena resistencia a nemátodos del nudo de la raíz
(algunas especies y razas) y Xiphinema sp pero baja resistencia a Pratylenchus sp, “Ramsey”
que pertenece a las variedades de V. champinii que resisten sequias y también nematodos,
“Mgt 101-14” tiene tolerancia media (Huaroto Varas 2018).
Virus
Virus de la hoja de abanico (Grapevine fanleaf virus -GFLV): Se dice que es una de las
enfermedades de la vid más devastadoras. Los cultivares sensibles muestran un rápido
decaimiento, baja calidad de fruta y descenso del rendimiento. Las vides afectadas son
más chicas que las vides sanas. Se puede esperar más del 80% de perdida de producción en
infecciones severas (Monis 2006).
Andret-Link et al. (2004) mencionan que los síntomas que se producen es una distribución
desigual de plantas en el viñedo como resultado de una transmisión planta a planta por el
nematodo X. index. Las hojas se vuelven distorsionadas y asimétricas con márgenes muy
dentados, venas primarias más cercanas y un seno peciolar abierto. Estos síntomas foliares
típicos se parecen a un abanico, de ahí el nombre del virus y la enfermedad. Otros síntomas
focales incluyen moteado clorótico, mosaico amarillo con hojas parcialmente o
completamente de color amarillo cromo y bandas de venas con bandas cloróticas de color
verde claro a amarillo cromo a lo largo de las venas.
Las estructuras tubulares endocelulares son fácilmente visibles en brotes lignificados e
internodos basales. Por lo tanto, son buenos indicadores de la presencia de GFLV (G.P. y V.
1990).
Manejo:
BIBLIOGRAFIA
AGROCEREVAL. 2015. Los nematodos en la vid y sus consecuencias (en línea, sitio web). Disponible en
http://www.agrocereval.com/blog/entry/los-nematodos-en-la-vid-y-sus-consecuencias-transmision-de-
virus.html.
Almanza-Merchán, PJ; Serrano Cely, PA; Fischer, G. 2012. Viticultura Tropical (en línea). Tunja, s.e. 114 p.
Disponible en https://www.researchgate.net/publication/256842704_Manual_de_viticultura_tropical.
Andina. 2019. Perú se convierte en el tercer exportador mundial de uva fresca (en línea). Lima, Peru, s.e.;
21 mar. Disponible en https://andina.pe/agencia/noticia-peru-se-convierte-el-tercer-exportador-
mundial-uva-fresca-746136.aspx.
Baggiolini, M. 1952. Les stades repéres dans le developpement annuel de la vigne. Romande Arbor. Vitic.
Huaroto Varas, N. 2018. “CARACTERIZACIÓN DE POBLACIONES PERUANAS DEL NEMATODO DEL NÓDULO
DE LA RAÍZ (Meloidogyne spp.) EN VID (Vitis vinífera L.) ”. s.l., UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA LA
MOLINA. 8 p.
MINAGRI. 2019. La Uva Peruana: Una oportunidad en el mercado mundial (en línea). Lima, Moreyra
Muñoz, Juan Carlos. p. 51 DOI: https://doi.org/10.2775/29823.
Monis, J. 2006. DETERMINACIÓN DE LAS ENFERMEDADES DE LA VID CAUSADAS POR VIRUS Parte II (en
línea). Enologia 3. Disponible en
https://www.researchgate.net/publication/309618850_DETERMINACION_DE_LAS_ENFERMEDADES_DE
_LA_VID_CAUSADAS_POR_VIRUS_Parte_II.
Pino Torres, CA. (2013). Manual de Vitivinicultura Organica (en línea). Chile, Chile, s.e. Disponible en
https://www.socla.co/wp-content/uploads/2014/Manual-de-vitivinicultura-organica_pino.pdf.
Rivera, C. Devoto, L. 2003. Desarrollo Fenológico de 20 clones de Vitis vinífera. s.l., Pontificia Universidad
Católica de Chile. 72 p.