Manifestemos A Cristo en Toda Nuestra Vida
Manifestemos A Cristo en Toda Nuestra Vida
Manifestemos A Cristo en Toda Nuestra Vida
Por el contrario, todo aquello que está limpio y libre de toda turbia afección tiene por objeto al autor
y príncipe de la tranquilidad, que es Cristo; él es la fuente pura e incorrupta, de manera que el que bebe y
recibe de él sus impulsos y afectos internos ofrece una semejanza con su principio y origen, como la que
tiene el agua nítida del ánfora con la fuente de la que procede.
Gregorio redacta que para poder ser limpio tenemos que acudir al autor de la pureza y consumación
de la vida, el origen de esa fuente donde emana vida y justificación solo la adquirimos cuando creemos en
él, en cristo y podemos estar y vivir seguro con la plena confianza que somos limpios y libres de toda
porquería que haya en nuestras vidas pasadas ese revestimiento ayudara a mejorar las condiciones de
vida, pues Dios nos enseña para nuestro propio bien a ser santos y limpios en todos nuestros caminos.
nosotros somos llamados a ser libres.
Dios es perfecto y por tanto no hay injusticias en él, por la misma razón, quien lo recibe nos
transforma y nos hace más clara su palabra.
En efecto, es la misma y única nitidez la que hay en Cristo y en nuestras almas. Pero con la diferencia
de que Cristo es la fuente de donde nace esta nitidez, y nosotros L la tenemos derivada de esta fuente. Es
Cristo quien nos comunica el adorable conocimiento de sí mismo, para que el hombre, tanto en lo interno
como en lo externo, se ajuste y adapte, por la moderación y rectitud de su vida, a este conocimiento que
proviene del Señor, dejándose guiar y mover por él. En esto consiste (a mi parecer) la perfección de la vida
cristiana: en que, hechos participes del nombre de Cristo por nuestro apelativo de cristianos, pongamos de
manifiesto, con nuestros sentimientos, con la oración y con nuestro género de vida, la virtualidad de este
nombre.
en efecto al ser revestido de la pureza de cristo, somos visto limpios como lo es el , a diferencia que
esa pureza no la obtenemos de ninguna forma u otra si no proviene de cristo Jesús, es a través de Jesús que
dios nos ve con la misma pureza rectitud y nos reconcilia con el padre, atreves de él es que podemos tener
una vida recta al segur e imitarlo.
BIBLIOGRAFIA
Patrología II
La edad de oro
de la literatura patrística griega.
Prof. Johannes Quasten,
B.A.C. Madrid 1962.
Para Usos Internos y Didácticos Solamente
https://mercaba.org/TESORO/niseno_gregorio.htm