Analisis Del Ix Pleno Casatorio
Analisis Del Ix Pleno Casatorio
Analisis Del Ix Pleno Casatorio
El IX Pleno Casatorio Civil no solo fijó precedentes vinculantes para los procesos de
otorgamiento de escritura pública y la potestad del juez de determinar la nulidad
manifiesta del negocio jurídico, sino que también modificó las sentencias del Primer y
Cuatro Pleno Casatorio. El autor explica los fundamentos y consecuencias de estas
modificaciones.
Mediante sentencia de Casación de fecha 18 de enero de 2017, se ha emitido el IX
Pleno Casatorio Civil sobre otorgamiento de escritura pública, y se estableció como
precedente judicial que en un proceso de otorgamiento de escritura pública el juez
puede declarar de oficio, la nulidad manifiesta del negocio jurídico que se pretende
formalizar, pero siempre que, previamente, haya promovido el contradictorio entre las
partes. Si el juez considera que el negocio jurídico que se pretende formalizar es
manifiestamente nulo, lo declarará así en la parte resolutiva de la sentencia y
declarará, además, infundada la demanda de otorgamiento de escritura pública.
En el Cuarto Pleno Casatorio Civil (Casación 2195-2011, Ucayali), uno de los temas
controvertidos fue el de conceptualizar la figura de poseedor precario, en base a lo
regulado en el artículo 911 del Código Civil, que señala: “la posesión precaria es la que
se ejerce sin título alguno o cuando el que se tenía ha fenecido”.
En ese Pleno se estableció como precedente que “una persona tiene la calidad de
precaria cuando ocupe un inmueble ajeno, sin pago de renta o sin título para ello, o
cuando dicho título no genere ningún efecto de protección para quien lo ostente,
frente al reclamante, por haberse extinguido el mismo”.
En la sentencia del IV Pleno, se hace referencia que el hecho que la persona no tenga
título para poseer o que este ha fenecido, “se puede establecer como consecuencia de
la valoración de las pruebas presentadas, de dicha valoración es que surge en el juez la
convicción de la no existencia del título o que el acto jurídico que lo originó contiene
algún vicio que lo invalida, como es la nulidad manifiesta prevista por alguna de las
causales del artículo 219 del código civil, o en todo caso, cuando siendo válido el
negocio jurídico, éste ha dejado de surtir efectos por alguna causal de resolución o
rescisión, pero sin que el juez del desalojo se encuentra autorizado para declarar la
invalidez, nulidad, ineficacia, etc. de dicho acto jurídico, por cuanto ello corresponde al
juez donde se discuta tal situación” (fundamento 56).
Los fundamentos para la modificación del Cuarto Pleno Casatorio, han sido los
siguientes (fundamento 65 y 66 del IX Pleno):
1) En nuestro sistema jurídico, respecto a la forma en que el Juez debe ejercer el poder
que le confiere el artículo 220 del Código Civil, en el Cuarto Pleno Casatorio Civil
(Casación 2195-2011-Ucayali), se estableció que el Juez no “declarará” la nulidad
manifiesta, es decir, no emitirá pronunciamiento sobre el particular en la parte
resolutiva de la sentencia, sino que sólo la analizará en la parte considerativa, lo que
conlleva a que aquello que se decida no tendrá la calidad de cosa juzgada, dejándose
abierta la posibilidad de que se inicie un nuevo proceso en el que se peticione que se
declare la validez del negocio jurídico que otro órgano jurisdiccional ya consideró
manifiestamente nulo; asimismo, no se supedita el ejercicio del poder en cuestión a la
promoción del contradictorio entre las partes.
Finalmente, como indica la Corte Suprema, “los precitados cambios en los precedentes
vinculantes serán de aplicación para los casos en los que aún no existe cosa juzgada, es
decir, no afectarán lo decidido conforme a los precedentes vinculantes preexistentes”.