Política Monetaria
Política Monetaria
Política Monetaria
El objetivo primario de la política monetaria es alcanzar y mantener una tasa de inflación baja y
estable, y lograr que el producto crezca alrededor de su tendencia de largo plazo.
Esta es la única manera de lograr un crecimiento sostenido que genere empleo y mejore el nivel de
vida de la población. Por el contrario, si la economía crece a un ritmo que no es sostenible, tarde o
temprano se generará una crisis con consecuencias graves para la economía, deterioro de los
indicadores sociales, pérdida de confianza de la población y caídas en la inversión y en el empleo.
La política monetaria debe evaluar el estado de la economía en cada momento del tiempo y su
posible evolución en los siguientes cuatro a ocho trimestres. Este es el horizonte de tiempo en el
cual los cambios en las tasas de interés de intervención se transmiten a las otras tasas de interés e
impactan la economía. Por lo tanto, la política monetaria opera necesariamente bajo un ambiente
de incertidumbre. A ello contribuyen los siguientes factores:
1. La información sobre un buen número de variables económicas (por ejemplo, el PIB) está
disponible con rezago y, en muchos casos, es sujeta a importantes revisiones y errores de
medición.
Las expectativas de los agentes sobre el comportamiento futuro de las tasas de interés, la
tasa de cambio, la actividad económica y la inflación.
El tiempo que toma en surtir efecto la política monetaria. La transmisión de las decisiones
de política al resto de la economía ocurre con rezagos largos y variables, que pueden oscilar entre
12 y 24 meses.
No siempre operan los mismos canales de transmisión, ni su potencia es constante.
Adicionalmente, en una economía cambiante pueden surgir nuevos canales que antes no existían.
En el Informe sobre Inflación, el equipo técnico del Banco presenta un análisis sobre la economía y
la situación inflacionaria y sus perspectivas en el mediano y largo plazo y, con base en él, hace una
recomendación a la Junta Directiva sobre la postura de la política monetaria.
El Informe al Congreso
Cumpliendo con lo estipulado en el artículo 5 de la Ley 31 de 1992, la Junta Directiva del Banco de
la República presenta dos veces al año, un informe al Congreso de la República en el cual da
cuenta del comportamiento de la economía y de sus perspectivas. También se presenta una
descripción de los lineamientos de las políticas monetaria y cambiaria durante cada período, el
nivel de las reservas internacionales y la situación financiera del Banco de la República.
El Informe al Congreso se presenta dentro de los diez días hábiles siguientes a la fecha de inicio
de las sesiones del Congreso (en los meses de marzo y julio).
Inflación Básica
Las medidas de inflación básica (ver adjunto) buscan eliminar los movimientos y choques
temporales en los precios.
Se excluyen de la canasta de precios aquellos ítems con comportamientos muy volátiles ó que
están fuera del control de la política monetaria. Por ejemplo:
Proveen una medida de la tendencia de largo plazo de los precios. Esta es la inflación que es
directamente afectada por las decisiones de política monetaria.
Cuando el Banco de la República altera sus tasas de intervención, afecta las tasas de interés de mercado, la
tasa de cambio y el costo del crédito, poniendo en marcha una serie de mecanismos que influyen sobre:
Esta sucesión de mecanismos se conocen con el nombre de Mecanismos de Transmisión. Estos se refieren a
los procesos o canales mediante los cuales las decisiones de política monetaria se transmiten al producto y la
inflación.
Cuando la inflación proyectada se ubica por debajo del rango meta:
Cuando la inflación proyectada se ubica por encima del rango meta:
¿Por qué es importante tener una inflación baja y estable?
Una inflación baja y estable mejora el bienestar de la población. Esto tiene lugar de varias
maneras:
Una inflación baja promueve el uso eficiente de los recursos productivos. Por el contrario,
cuando la inflación es alta una parte del tiempo de los individuos y una parte de los recursos de la
economía se invierten en la búsqueda de mecanismos para defenderse de la inflación. Así por
ejemplo, cuando la inflación es alta las empresas deben destinar más recursos al manejo de su
portafolio para evitar pérdidas financieras. Estos son usos improductivos que no generan riqueza a
la sociedad.
Una inflación baja disminuye la incertidumbre. Se ha observado que las economías con
alta inflación también padecen de una inflación más variable. La incertidumbre puede afectar
negativamente la rentabilidad esperada de la inversión y por lo tanto el crecimiento en el largo
plazo. La mayor incertidumbre implica también incertidumbre en los precios relativos, de tal manera
que los precios pierden su contenido informativo sobre los precios futuros y los márgenes de
comercialización aumentan. Todo esto afecta la asignación eficiente de los recursos y disminuye el
crecimiento económico.
Una baja inflación incentiva la inversión. Las decisiones económicas más importantes que
toman los individuos y las empresas son, usualmente, decisiones de largo plazo: las decisiones de
hacer una fábrica, de constituir una empresa, la decisión de educarse, de comprar vivienda. Estas
decisiones dependen crucialmente del grado de incertidumbre sobre el futuro. Una inflación baja y
estable es un indicador de estabilidad macroeconómica que contribuye a que las personas y las
empresas tomen decisiones de inversión con confianza.
Una inflación baja evita redistribuciones arbitrarias del ingreso y la riqueza, especialmente
contra la población más pobre. Los asalariados y las personas jubiladas tienen menos mecanismos
para protegerse de la erosión inflacionaria de sus ingresos. Las cláusulas de indización de ingresos
no existen o son muy infrecuentes. En Colombia, por ejemplo, los salarios y las pensiones de los
jubilados se reajustan una vez al año. Además, entre menor sea el ingreso de las personas, es
más probable que tengan menos mecanismos de defensa contra la inflación, como ahorros o
propiedades inmuebles. Por esta razón, una inflación creciente significa una redistribución del
ingreso en contra de la población más pobre.