2 El-Vapor-Amadeo-y-el Genocidio Selknam. CASALI-GERRARD.2
2 El-Vapor-Amadeo-y-el Genocidio Selknam. CASALI-GERRARD.2
2 El-Vapor-Amadeo-y-el Genocidio Selknam. CASALI-GERRARD.2
[1]
-FUNDAMENTACIÓN-
[2]
Fig. 1. Catastro rural, 1917. Gentileza Leonardo Collado.
[3]
parlamentarios y políticos (Martinic, 1973:13; Durán, 1945) que se manejaron
libremente sin el más mínimo respeto por las autoridades nacionales. Además,
Menéndez nunca cumplió con la normativa que lo obligaba a “poner tierras a
disposición de los indígenas para facilitar su integración (Marchante, 2014: 146). Es
decir que, en todo sentido, el inicio y el desarrollo de las actividades ganaderas y
comerciales de los Braun-Menéndez-Behety no necesariamente pueden calificarse de
legítimos.
Sobre esta ilegitimidad de los orígenes de estos supuestos “pioneros” en Tierra
del Fuego, se erigió además el genocidio selk’nam.
En 1948, la ONU estableció, mediante el artículo N° 2 de la Convención para la
Prevención y la Sanción del delito de Genocidio que se entiende por genocidio cualquiera
de los actos mencionados a continuación, perpetrados con la intención de destruir,
total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal:
a) Matanza de miembros del grupo;
b) Lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo;
c) Sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de
acarrear su destrucción física, total o parcial;
d) Medidas destinadas a impedir los nacimientos en el seno del grupo;
e) Traslado por fuerza de niños del grupo a otro grupo.”
09-1911 “ Llega el vapor Amadeo, en el que viene el Sr. Bertilla Bruno con Sor
Sabina Gajardo, esta última destinada a esta casa. Con ellos viene el coadjutor
[5]
Miniggio y todos los indios y las indias con varios muchachos de la misión San
Rafael en Dawson, porque el gobierno chileno vendió aquella misión y los pobres
indios tuvieron que salir. Por orden de Monseñor Fagnano se recibieron en esta
misión.Las mujeres llegadas son: Letizia Gama, Rachele Blanchard, Catalina de
Brasito, Candelaria Brasito, María Esperanza, Paola Silva, Petronilla Silva,
Dorotea Navarro, Giuseppa Ferri, Alessandra Peña, María Nicolini, Elisa Chiesa,
Letizia Esperanza, Emma Guajardo. Los hombres son: Lorenzo Brasito, Michele
Brasito, Eliseo Esperanza,Paolo Blanchard,Antonio Esperanza, Juanito
Esperanza, ed Antonito. Pietro Gama marito di Letizia”
28-3-1904 “(...) el Amadeo tiene mucha carga también por nosotros (...)”
21-5-1904 “(...) hai mucha carga. Antonio se fue a recibirla. Dicen que por cuatro
meses el Amadeo no vendría (...)”
28-11-1905“(...) Antonio estuvo al puerto recibiendo la carga traída por el Amadeo
(...)”
26-12-1906 “(...) y vuelve con mercadería llegada ayer con el Amadeo (...)”
[6]
conocimiento del pasado, y no son pocos los escenarios donde el genocidio fueguino
es y ha sido objeto de análisis y denuncia. Sin embargo, muchas veces el
reconocimiento del genocidio fue acompañado por sucesivos decretos de “extinción”,
que pretendieron borrar de la historia a los selk´nam y ubicarlos en la prehistoria3;
discurso que vino acompañado del despojo del territorio, los niños, la lengua y la
memoria de la comunidad.
Lo que recordamos y lo que olvidamos, se expresa en nuestro paisaje urbano, en
la ciudad y sus signos; las calles, monumentos y espacios públicos condensan el
pasado de las poblaciones y crean una atmósfera de identidad compartida, es decir,
proveen de un pasado común significante indispensable para que sus habitantes se
imaginen como comunidad (Anderson, 1993)
Es por todo lo anterior que se hace apremiante la necesidad de hacer
participativa la instancia de denominación de espacios públicos, siendo este un
antecedente fundamental en ese sentido, para construir una sociedad más justa e
inclusiva.
-ANEXO DOCUMENTAL-
Los que siguen son tan sólo algunos de los fragmentos -de entre los tantos posibles-
útiles en la fundamentación de la participación de la Sociedad Explotadora de Tierra del
Fuego (SETF) y, por ende, del vapor Amadeo en el genocidio selk’nam. Los
correspondientes a fuentes secundarias fueron expresamente extraídos de la obra del
historiador chileno Mateo Martinic, quien no sólo se autodefinió como amigo personal
de su colega Armando Braun Menéndez, descendiente directo de los colonizadores en
cuestión, sino que además utilizó los archivos privados de la familia. A su vez, las citas
extraídas de fuentes primarias corresponden en su totalidad a los Diarios de la Misión
Salesiana Nuestra Señora de La Candelaria (Crónicas de las Hijas de María
Auxiliadora [CMA] y Crónicas de los Salesianos [CS]) y a documentos dirigidos al
Ministerio del Interior de la Nación Argentina. De este modo, queda descartado
cualquier tipo de desviación subjetiva o arbitrariedad en la selección de los datos.
Las fuentes historiográficas dejan testimonio de la responsabilidad de los Braun-
Menéndez-Behety en el genocidio selk’nam. Aquí transcribimos tan sólo algunos de
los fragmentos en los que aparece explícitamente la figura de Menéndez, pero los
escritos salesianos dejan en evidencia cómo la presencia de a SETF en la estepa
fueguina argentina convulsionó movilidad selk’nam. Es inconmensurable la cantidad
de citas en los diarios salesianos que dejan en claro la llegada constante de selk’nam a
la misión, ya sea de modo “voluntario” o traídos por la policía, coincidentemente con
la instalación de dichos ganaderos en la región.
3
Ver el detalle y el desarrollo en Vidal, 1993; Rodríguez, 2010 y Gerrard, 2015.
[7]
“Varios empleados de la hacienda de Menéndez mataron una escuadra de hombres indios
y las mujeres las condujeron a la Misión: bautizamos las muchachas, ya tenemos 39
muchachas en casa y los Salesianos tienen ya 42 muchachos.” (CMA, enero 1897).
“El mayordomo de los Menéndez trajo hoy a la Misión 30 indios entre esos se recogieron
en casa 10 niñas y 2 niños” (CS, enero 1897).
“El mayordomo de Menéndez pasó hoy 4 mujeres y 5 niñas” (CS, marzo, 1897).
“salió el Director (a la una p.m.), acompañado por D. Dalmasso y el indio Benito, para el
puesto Repetto con el fin de juntarse allá con las autoridades del Puerto y con Menéndez
e ir a buscar los indios del bosque cercano. Veremos el resultado, aunque las intenciones
(se comprende!) no sean las mismas en todos (…) A las 6 p.m. volvió el P. Director de su
Misión a los indios. No consiguieron nada, ni los vieron. Lo que ya se decía!... Se quedó
allá con Peduzzi Don Dalmasso, pero es de dudar más buen resultado (…) Volvió
también D. Dalmasso y vino a la Misión Peduzzi, sin resultado, como ya se preveía, de
acercarse a indios” (CS, abril 1904).
“Que persiguiendo a unos indios ladrones que se tenía conocimiento habían invadido
el establecimiento Primera Argentina del Señor José Menéndez en el Departamento de
Río Grande, se les alcanzó por la policía que mandaba mi persona el jefe de la misma,
quitándole trescientas ovejas que arreaban. Para restituir dicha hacienda hubo que
sostener combate con ellos del cual resultó un indio muerto y herido de flecha, de
gravedad., el jefe mencionado, el señor Mc Lennan mayordomo del Señor
Menéndez (…) en ese encuentro que tuvo lugar el día 17 de febrero ppdo. se pudieron
tomar prisioneros después de una resistencia tenaz cinco indios de pelea, cuatro
mujeres y dos criaturas, los que serán remitidos al Señor Juez letrado del Chubut por
el primer transporte con el sumario correspondiente” (AGN, carta al Ministerio del
Interior, 26-3-1897. exp. 1385)
La cualidad “pacífica de los onas” fue parte del relato de viajeros, exploradores,
científicos, autoridades y colonizadores.4 A su vez, la reacción indígena vía “robo” de
ganado ovino en sí misma no amerita la masacre, pero además es incluso relativizada
por el mismo Martinic:
[8]
Martinic deja en claro que las acciones violentas de los selk´nam sólo comenzaron
cuando la colonización ovejera no les dejó margen de maniobra y sobrevivencia. Más
aún, que fue recién con la llegada de la SETF que la violencia entre “blancos” e
“indios”, en sus palabras, dejó de ser “normal”:
La SETF se propuso desde los primeros momentos repeler a los indígenas y contrató
empleados con ese fin específico. También se proveyó del armamento necesario. Ya en
el primer “robo” de ganado ovino por parte de los selk’nam, accionaron en
consecuencia. En palabras de Braun, había que “extirpar a los indios y llevarlos todos
a Dawson”:
[9]
Así, “sucesivas partidas de indígenas fueron siendo capturadas y remitidas a la misión
salesiana”. Incluso Martinic se asombró de la crudeza de las palabras del
administrador de la SETF, Mc Lenan, más conocido como “el chancho colorado”:
A fines de julio de 1895, los empleados de la SETF capturaron 165 selk’nam y durante
un mes se los mantuvo encerrados como ganado en un galpón; esperando, como
convenido, la ocasión de deportarlos. A partir de este hecho se inició un Sumario por
vejámenes inferidos a indíjenas de Tierra del Fuego.5 Al respecto, dice Martinic:
5 Ver detalles de este Sumario y del destino de los capturados en Bascopé, 2011.
[10]
Es importarte remarcar que eran los contemporáneos quienes se hablaban en términos
de “cacerías de indios”. El mismo Martinic se ocupa de enfatizar la idea:
Mr. Rigby, capataz de San Sebastián escribía de julio de 1900 a Mauricio Braun: “no
hemos enviado más expediciones a cazarlos”:
Puntualmente, respecto al rol del vapor Amadeo, el cuadro que sigue -elaborado por
Martinic a partir de la documentación del archivo de “don Mauricio Braun”, de los
libros de contabilidad de las estancias y de las informaciones tomadas de “El
Magallanes”- demuestra su partición en las deportaciones de selk’nam a Dawson:
[11]
Para finalizar, adjuntamos una foto de selk’nam prisioneros, cobijada en el álbum
de la señora María Menéndez Behety y uno de los párrafos más elocuentes
narrados por el historiador chileno respecto al genocidio selk’nam.
[12]
Bibliografía consultada
[13]
Bascopé, J. 2011. Bajo tuición. Infancia y extinción en la historia de la colonización
fueguina. (Sentidos coloniales II). Corpus. Archivos virtuales de la alteridad
americana, Vol. 1, N° 1, 1er semestre. En http://ppct.caicyt.gov.ar/index.php/corpus
Bou, M. L., & Repetto, E. 1995. A hacha, cuña y golpe. Recuerdos de pobladores de
Río Grande. Tierra del Fuego. Argentina.
Gerrard, Ana C. (en prensa) “Ya no saben cómo extinguirnos” Tesis de Licenciatura
en Antropología Social, DAS/ FHyCS/ UNaM. Defendida en el 2015.
Massone, M. 1987. Los cazadores paleoindios de Tres Arroyos (Tierra del Fuego).
Anales del Instituto de la Patagonia, 17: 47-60. Punta Arenas.
[14]
Pérez, P. 2011. “Historia y silencio: La Conquista del Desierto como genocidio no-
narrado”. Corpus. Archivos virtuales de la alteridad americana, Vol. 1, N° 2, 2do.
semestre 2011. URL: http://ppct.caicyt.gov.ar/index.php/corpus
Roulet, Florencia y Garrido María Teresa 2011. “El genocidio en la historia: ¿un
anacronismo? Corpus. Archivos virtuales de la alteridad americana, Vol. 1, N° 2: 1-
9. URL: http://ppct.caicyt.gov.ar/index.php/corpus
[15]