Este documento presenta las nueve bienaventuranzas dadas por Jesús a sus discípulos en el Sermón del Monte. Cada bienaventuranza es explicada brevemente, destacando quienes serán bendecidos y por qué razón. El documento también incluye citas bíblicas para respaldar cada bienaventuranza.
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Este documento presenta las nueve bienaventuranzas dadas por Jesús a sus discípulos en el Sermón del Monte. Cada bienaventuranza es explicada brevemente, destacando quienes serán bendecidos y por qué razón. El documento también incluye citas bíblicas para respaldar cada bienaventuranza.
Este documento presenta las nueve bienaventuranzas dadas por Jesús a sus discípulos en el Sermón del Monte. Cada bienaventuranza es explicada brevemente, destacando quienes serán bendecidos y por qué razón. El documento también incluye citas bíblicas para respaldar cada bienaventuranza.
Este documento presenta las nueve bienaventuranzas dadas por Jesús a sus discípulos en el Sermón del Monte. Cada bienaventuranza es explicada brevemente, destacando quienes serán bendecidos y por qué razón. El documento también incluye citas bíblicas para respaldar cada bienaventuranza.
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IGLESIA BIBLICA BAUTISTA FE
SEMINARIO BIBLICO BAUTISTA FE
SAN JUAN DE LOS MORROS- GUÁRICO
LAS BIENAVENTURANZAS
P. Guillermo Camejo Seminarista.
Hernan Martinez Las Bienaventuranzas dadas por el Señor a sus discipulos son la apertura al tan conocido sermon del monte, donde basicamente puede decirse que fueron planteadas las bases de la vida que a Dios agrada. La Palabra Bienaventurado se refiere a ser supremamente bendecido, dichoso o en resumidas cuentas, ser completamente feliz.
1. Bienaventurados los pobres en espiritu, porque de ellos es el
reino de los cielos (Mt. 5:3)
Los que reconocen ente Dios su pobreza. Para estar en esta
completa felicidad es fundamental reconocer la propia realidad.Es decir, reconocer y aceptar la pobreza en el hecho de que ante el Señor no tenemos nada ni somos capaces de ofrecer nada aceptable para nuestra entrada en el cielo. Esto constituye la aceptación y el reconocimiento de que Dios nos es absolutamente necesario Solo en él podemos tener, ser alguien. Por tanto, puede decirse que dicha pobreza es la única forma de la salvación... Por ejemplo tenemos al publicano en el templo, golpeando su pecho y diciendo, “Dios, ten piedad de mí, pecador” (Lc 18:9–14). Este hombre si que reconocia su condicion y practicamente por asi decirlo era un mendigo ante el Señor, por otra parte estaba el fariseo alardeando y por su oracion cualquiera habria pensado maravillas de lo espiritual (riqueza) de este hombre, pero el Señor es claro y permite ver quien fue escuchado y quien no.
2. Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibiran
consolacion (Mt. 5:4)
Al comprender como este mundo esta bajo el maligno (Jn. 5:19) y
ver dia a dia el avance de la maldad, sufrir por causa de la debilidad de la carne llega a ser desconsolador y traer tristeza a la vida del creyente, pero aquel que sufre (llora) por estas cosas alcanza la felicidad plena en el Señor, pues el Bendito Espíritu consolador(Jn. 14:26) hace su obra en él... Da gran consuelo de que el Señor esta con nosotros todos los dias hasta el fin del mundo (Mt. 28:20)
3. Bienaventurados los mansos, porque ellos recibiran la tierra por
heredad (Mt. 5:5)
En el Antiguo Testamento, Moisés fue descrito como el hombre
más humilde (o manso) de la tierra (Nm 12:3). Jesús se describió a Sí mismo como “manso y humilde” (Mt 11:29). Pudiese señalarse que para alcanzar esta felicidad hay que rehusarse a inflar el autoestima y a renuencia a reivindicarnos a nosotros mismo. Pablo Señala el primer aspecto perfectamente en Romanos 12:3: “Porque en virtud de la gracia que me ha sido dada, digo a cada uno de vosotros que no piense más alto de sí que lo que debe pensar, sino que piense con buen juicio, según la medida de fe que Dios ha distribuido a cada uno”. En base a ello es de enmarcar que las personas humildes se ven a sí mismas como siervas de Dios y no piensan más alto de ellas mismas de lo que deben pensar. Ser humilde es reconocer nuestras fortalezas y limitaciones como lo que realmente son, en vez de tratar constantemente de mostrarnos a nosotros mismos a la mejor luz posible, reconocer esto y ponerlo por obra es igual a recibir de parte del Señor lo que a el le ha placido, hacernos coherederos juntamente con El Manso Y Humilde De Corazon.
4. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque
ellos serán saciados (Mt. 5:6) A primera instancia se pudiese decir que alcanzará dicha felicidad todo aquel que ande recta y moralmente, aquel que vea por el necesitado o por el que es acusado injustamente... Pero la palabra Justicia acá proviene del Griego: Dikaiosúne, cuyo significado inmediato es justificacion (especificamente la que ofrece Cristo). Por tanto, todo aquel que este hambriento (desee fervientemente) de esta justificación que esen Cristo Jesus (Ro. 3:25, 10:4) será saciado por el msmo Señor. Es de resaltar tambien que puede mostrarse de manera “indirecta” dicha hambre y sed al llevar el evangelio a otros.
5. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzaran
misericordia (Mt. 5:7)
Es quizas una de las maneras de saber si habita el Señor o no en
una persona, pues no podemos dar lo que no hemos recibido, por tanto, si de parte del Señor hemos recibido su salvacion, hemos sido alcanzados por su gracia a causa de su infinita misericordia, podremos ser misericordiosos con otros. El mismo Señor en la oracion modelo dice “Perdonanos como tambien nosotros perdonamos a los que nos deben...” (Lc. 11:4). La felicidad plena de la misericordia se haya dandola, pues del Señor la hemos recibido en GRAN MANERA y dia tras dia él las hace nuevas. Mas alla del hecho de querer alcanzar tal dicha, se trata de una orden que el ha dado y es lo qe él espera de todo aquel que dice conocerle (Ef. 4:32)
6. Bienaventurados los de limpios corazon, porque ellos verán a
Dios (Mt. 5:8)
¿Quién subirá al monte del Señor?
¿Y quién podrá estar en Su lugar santo? El de manos limpias y corazón puro; el que no ha alzado su alma a la falsedad, ni jurado con engaño. Ese recibirá bendición del Señor, y justicia del Dios de su salvación. (Sal. 24: 3-5)
El Señor muestra cual es su estandar para poder verle tal
como el es... cosa que por nuestra justicia seria imposible, pues ningun ser humano (solo Cristo) lograría tener un corazon 100% limpio o estar al margen de lo que señala el salmo 24. Pero ahi es donde vuelve a glorificarse el Señor dando un corazon nuevo y limpio (Ez. 36: 26- 27), haciendonos puros e el y “capacitandonos” para poder verle... Esto mencionado de por si no opaca la demanda del Señor de vivir en santidad y guardar nuestro corazón (1 P. 1: 15-16; Pr. 4:23)
7. Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados
hijos de Dios (Mt. 5:9)
Que mayor acto de pacificacion que el que hizo el Señor
reconciliandonos consigo mismo (Col. 1:21; 2 Co. 5:18), siendo él el ofendido vino a hacer la paz y a perdonar, por tanto, amar a nuestros enemigos, orar por los que desean nuestr mal y llevar el evangelio es lo mas parecido que podemos hacer respecto a la obra del Señor y así mostrar que alcanzamos dicha felicidad gloriosa de los hijos de Dios.
8. Bienaventurados los que padecen persecusion por causa de la
justicia, porque de ellos es el reino de elos cielos (Mt. 5:10)
Esa Justicia que no es otra que la justificacion en Cristo Jesús (Ya
mencionada un poco a detalle en la 4ta bienaventuranza). El Señor habla de la felicidad que inmediatamente vendrá sobre aquellos que sean perseguidos por causa del Señor... quizas un poco contradictorio pero no es mas que el privilegio de unos condenados al infierno los cuales por gracia han sido rescatados que ahora padecen por causa del Señor. Siendo pues que el Señor ya antes padeció por nosotros (Jn. 15:18). Los primeros en mostrar dicha felicidad manifiesta en su vida fueron los Apostoles Juan y Pedro (Hch. 5:41)
9. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os
persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardon es grande en los cielos: porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros (Mt. 5:11-12)
Dios deja muy en claro que muchos en el pasado han llegado a
gozar de dicha bienaventuranza (He. 11) Esta bienaventuranza se asemeja en cierta manera a la anterior, pero el Señor es muy especifico respecto a que la persecusion o acusaciones del mundo al creyente deben ser porque mienten o exageran, no porque el creyente incurra en diversos pecados (1P. 3:16-17)