Descargue como PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 12
dan expresar 10 que s610 se podia dedudr de los documentos de la his la historia nacional.
acional. Pues solo quien no puede menos que hacer un metO'
toria poHtica. La literatura se convirti6 en el maximo medio en el que do propio y una categoria meta-historica de la comparad6n, ve esos obje· 10 nadonal podia llegar hacia si mismo, desde sus inicios casi miticos tos comparados nuevamente como esencias -como esendas que estan bajo hasta el cumplimiento de un dasicismo nadona!. EI apogeo nadonal de Ieyes autoctonas de desarrollo y con ello s610 pueden ser comparadas para la literatura apareci6 -como el momento politico de auta-realizad6n fijar la esencia diferentes sustandal y seres siempre diferentes y, por con nacional- como un resultado que debi6 haber sido puesto en germen ya siguiente, 10 espedficamente "aleman" 0 10 espedficamente "frances" de en los comienzos. una manifestaci6n-. La literatura comparada tuvo que inventarse para A partir de aqui se explica la extrafia fascinaci6n por hip6tesis de ori relacionar nuevamente entre sf las entidades, diferentes en su esencia, de gen que, tambien hoy, exduyen una parte de los estudios sobre literatura las literaturas nacionales. Se pasaba a ser un especialista de la compara medieval de la investigaci6n mas prometedora. Una buena tercera parte ci6n, 10 que uno mismo ya no podia conservar con una condenda tran de todas las investigaciones se ocupa aqui -segttn mi apreciacion- de los quila. Pues a mas tardar desde la primera guerra mundial ninguna cabeza antecedentes, nunca aclarables del todo, de la Cancidn de Rolando, de pensante pudo creer mas en serio que la unidad substancial de una lite la Hrica de los Trovadores 0 de las NoveIas del Rey Arturo y no de las ratura nadonal desde la Edad Media hasta la actualidad fuera mas que mismas obras conservadas. Las obras mas tempranas de este y de otros una ideologia del siglo XIX y que la relacion literario-hist6rica entre Santa generos, siguen absorbiendo, de una manera tan total, a la mayoria de los Eulalia y entre el 110 santo Paul Valery se basara en otra cosa que en 1a investigadores de la literatura medieval, (y no raramente por problemas sintesis de un encuadernador. aparentes, como por ejemplo la "Unidad de la Candon de Rolando", Hace mucho que esta relad6n se ha convertido para nosotros en una sobre la que mejor no se deberia haber investigado durante 50 aDos), que ficci6n, la cual, a pesar de eso, todavfa tiene una validez incuestionabIe la demas historia y en especial la de la Edad Media tardia se encuentra en los reglamentos de exa.menes de todos los estados alemanes, en la todavia en tinieblas. La fascinaci6n por los comienzos corresponde en ese forma utilizada por la central de examenes: "Visi6n de la literatura fran· paradigma a la ceguera 0, dicho en forma mas bella: a la renuncia al cona cesa, aleman a, etcetera, uesde la Edad Media hasta la actualidad". Los dmiento frente a la literatura actual. De aqui surge la limitad6n prin. reglamentos estatales de examenes proveen los ejemplos mas bellos para cipal de la obra de Gustav Grobers, Grundriss der romanischen Philologie: la tesis de que las revoludones cientificas son captadas s6Io paulatinamente de que cientfficamente solo se podia tratar 10 que se hubiera conservado y aparentemente al ultimo por los ministerios de cultura. El reglamento el discurso romano del pasado; toda la demas literatura es asunto de la de examenes v.Hido ahora para el magisterio en las escuelas superiores, critica (no dendfica). Al agotamiento del segundo paradigma historico vive todavfa del paradigma cientifico de anteayer. De aqui todavia no Ie agradecemos la gran historia literaria: Gervinus, Scherer, de Sanctis, se ha sacado la consecuenda de que entre la Cancion de Rolando y Racine Lanson; a su mecanizacion Ie debemos los grandes manuales. Generadones no exista una continuidad investigable y ensefiable, como entre la Can de investigadores se confiaron, en la fase normal de este paradigma, com cion de los Nibelungos y la lfigenia de Gcethe. Por el contrario, hay pletamente a la garanda del metodo historico-critico y mas tarde del relaciones hist6ricas todavfa poco investigadas, pero muy instructivas. 0 metodo positivista. SOlo soludonaron entonces enigmas con formulas ase analogias condidonadas por la epoca entre la Cancidn de Rolando y guradas, convirtieron en tabu la pregunta por los Hmites de 10 digno de entre la Cancion de los Nibelungos, por un lado y entre Racine y Gcethe, saberse por nosotros y ya no plantearon mas las preguntas por la validez del c1asicismo frances y del aleman, por otro lado, a partir de 10 que de sus premisas (por ejemplo la pregunta de si la Iiteratura no es otra se hace claro que se deberia cambiar todo en el sistema de ensefianza cosa que la manifestadon de 10 nadonal). de la universidad, asi como en el reglamento estatal de examenes, para sustituir las exigencias ideologicas de una paradigma caido en desuso hist6ricamente por nuevas planteamientos, que son mas adecuados al 2.2.1. La literatura comparada nuevo concepto moderno de literatura e historia.
EI surgimiento de un metodo que ahora se considera nuevamente moder·
no, pertenece en realidad todavia a este paradigma: la literatura compa 2.3. Estilistica y estetica inmanente de la obra (tercer paradigma) rada. Frente a la antigua historia literaria de caracter nacionaIista, el metodo comparativo no trae ningttn progreso verdadero, que tambien aqui Llego al tercer gran paradigma de la cienda Iiteraria, que se puede hubiera exigido primero un cambio de paradigma. Mas bien se tuvo que ver a comienzos de nuestro siglo en el arribo y en la marcha triunfaJ inventar ese metodo para asegurar el antiguo paradigma conveniente de de la estilistica. Un impulso principal de este cambio de paradigma fue.