Morales Cs
Morales Cs
Morales Cs
TESIS
AUTOR
Siever Miguel MORALES CAUTI
ASESOR
Amanda Cristina CHÁVEZ VELASQUEZ
Lima, Perú
2017
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Referencia bibliográfica
A la Virgen de las Nieves, fuente necesaria de fe que me permite cumplir sueños, metas y
propósitos.
i
AGRADECIMIENTOS
i
INDICE
CARATULA i
DEDICATORIA ii
AGRADECIMIENTOS iii
INDICE iv
RESUMEN v
ABSTRACT vi
I. INTRODUCCIÓN 1
II. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA 4
IV. RESULTADOS 45
V. DISCUSION 51
VI. CONCLUSIONES 62
VII. BIBLIOGRAFIA 63
VIII. ANEXO 72
i
RESUMEN
La crianza de cuy (Cavia porcellus) es una alternativa viable para incrementar el consumo de
proteína animal, generar empleo y disminuir la migración interna de la población; sin embargo,
esta actividad pecuaria se ve afectada principalmente por la presencia de enfermedades
infecciosas y parasitarias. El presente estudio tiene por objetivo determinar los patógenos
bacterianos y parasitarios más frecuentes en cuyes de crianza familiar-comercial en tres distritos
de la Provincia de Bolognesi, Departamento de Ancash. El estudio se realizó en todas las granjas
de cuyes de crianza familiar-comercial de los distritos de Aquia, Pacarenca y Pampam de la
provincia de Bolognesi, en Ancash, entre los meses de junio a setiembre del 2012, cuyos
propietarios había o No participado en un programa de capacitación para la crianza de estos
animales. Muestras de animales con signos compatibles a los agentes en evaluación, fueron
recolectadas en el periodo del estudio. Además, se colectaron muestras de heces de camas de una
población representativa. Los factores de riesgo evaluados fueron: tipo de crianza (productor
capacitado y No capacitado), sexo (macho, hembra), raza (mejorado y criollo), grupo etareo
(recría y reproductores), y localidad de origen (Aquia, Pacarenca y PamPam). La necropsia y
obtención de muestras bacteriológicas, se realizó en 51 animales que mostraron signos
compatibles con las enfermedades en estudio, la toma de muestras de los órganos afectados se
realizó con hisopos estériles y transportados en medio Stuard. Posteriormente se realizó el
cultivo, aislamiento e identificación bacteriana a través de pruebas bioquímicas. Para el muestreo
parasitológico, se recolectaron muestras de heces frescas de 262 pozas, 131 pozas de
reproductores y 131 pozas de recría; analizados por exámenes coprológicos cualitativos y
cuantitativos (sedimentación y flotación, y McMaster modificado, respectivamente). Se aislaron 12
agentes infecciosos bacterianos, resaltando Streptococcus zooepidermicus (19.61%); Salmonella
Typhimurium O , ,i: ( .9 % ; y Eimeria caviae (8.78%). No se halló asociación (Chi
cuadrado; p>0.05) con el tipo de crianza practicada, ni factores de riesgo (Odds ratio) a la
infección por S. zooepidermicus, S. Typhimurium, y Eimeria caviae (p>0.05).
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ABSTRACT
The breeding of guinea pig (Cavia porcellus) is a viable option to increase consumption of animal
protein, generate employment and reduce internal migration of the population alternative;
however, this livestock activity is mainly affected by the presence of infectious and parasitic
diseases. This study aims to determine the most common bacterial and parasitic pathogens in
guinea pigs family - commercial breeding in three districts of the province of Bolognesi, Ancash
Department. Animal samples were taken with compatible evaluation bacterial agents signs.
Samples were collected monthly between June and September 2012. They were performed stool
samples collected from a representative population beds in September. The study was conducted
on family - commercial farms of guinea pigs on three districts (Aquia, Pacarenca and Pampam) in
the province of Bolognesi, Ancash. The risk factors evaluated were: type of parenting, sex, race,
age, and place of origin. Bacteriological sampling was performed in 51 animals showing signs
compatible with the disease under study, being necropsied, With Sampling of affected organs with
sterile swabs and transported in the medium Stuard. Later isolation and bacterial identification
through biochemical tests performed. For parasitological sampling, samples of fresh faeces of 262
ponds, 131 and 131 breeding pools rearing ponds were collected; analyzed by qualitative and
quantitative stool tests (sedimentation and flotation, and modified McMaster, respectively). 12
bacterial infectious agents were isolated, highlighting Streptococcus zooepidemicus (19.61 %);
Salmonella Typhimurium " O4, 12, i: H2" (3.94 %); and Eimeria caviae (8.78 %). No association
with the type of parenting practiced or risk factors for infection with S. zooepidemicus, S.
Typhimurium, and Eimeria caviae (p > 0.05) was found.
i
i
i
I. INTRODUCCIÓN
1
bacterianas, virales, parasitarias, y/o metabólicas que afectan negativamente la
producción de la granja, ocasionando serias pérdidas económicas. Pérdidas, que no sólo
se muestran como causantes de mortalidades y morbilidades, sino que afectan el
desarrollo poblacional de forma importante, sobre todo cuando el sistema de producción
tiende a adoptar tecnologías, que representan mayores exigencias productivas y
reproductivas para los animales.
2
rápidamente de un cuy a otro, sobre todo cuando hay rupturas de abscesos, los cuales
contienen una gran cantidad de la bacteria.
Debido a que los cuyes criados a nivel familiar-comercial son los principalmente
afectados por patógenos bacterianos y parasitarios, ocasionando índices de mortalidad
variable, impidiendo el desarrollo poblacional y el éxito económico del sistema de
producción (Chauca, 1997; Castro, 2002; Morales, 2013); Por lo que, se hace necesario
determinar los patógenos bacterianos y parasitarios más frecuentes en cuyes de crianza
familiar-comercial en tres distritos de la Provincia de Bolognesi, Departamento de
Ancash.
3
II. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
El cuy (Cavia porcellus), es una especie versátil presentando utilidad diversa, como:
animal de experimentación, mascota, fuente de proteína animal; esta última muy
difundida en el Perú y países andinos (Colombia, Ecuador, y Bolivia), convirtiéndose en
una fuente de vital importancia nutricional para muchas familias (crianza familiar) e
importancia económica (crianza familiar-comercial y crianza comercial). Líneas nativas y
razas obtenidas por mejoramiento genético son utilizadas para la producción comercial,
aunque las líneas nativas corresponden a animales pequeños con parámetros productivos
pobres en comparación con líneas mejoradas o razas obtenidas (Perú, Inti, Andina); estos
son capaces de transmitir adaptabilidad y resistencia a enfermedades. La línea de
mascotas es inapropiada para la producción, pues se caracteriza por pobre crecimiento y
baja productividad (Burgos-Paz et al., 2011).
5
en zonas alto andinas y coincidentemente estas se encuentran en áreas menos favorecidas
a nivel socio-económico del país. Diferentes reportes, muestran una producción en el
Perú de 17,000 toneladas de carne al año, sin embargo esta es principalmente destinada
al autoconsumo (Zevallos, 2001).
2.3.1. Perú
2.3.2. Andina
2.3.3. Inti
Ésta línea se caracteriza tanto por ser de doble propósito, como por tener un gran
potencial para la sierra, por su rusticidad y adaptabilidad a la altura. Alcanzan un
promedio de 800 g a las 10 semanas de edad, con una prolificidad de 3.2 crías por parto
(Fano, 1999).
2.3.4. Inca
7
La Estación Experimental Agraria (EEA) Baños del Inca de Cajamarca, tras evaluar
cuyes de esa región, así como de La Libertad y Amazonas, consiguieron esta variedad cuya
característica más resaltante es su alta capacidad reproductiva. Cada hembra puede
obtener en promedio unas 3.3 crías por parto en los valles interandinos. Otra cualidad
importante es la habilidad materna de esta especie que puede mantener una alta tasa de
sobrevivencia de sus crías, y con ello reducir las pérdidas económicas de los criadores.
Las hembras también presentan una tasa probada de fertilidad de 98% y pueden tener,
según los expertos, hasta un promedio 3.5 partos por año (Florián, 1998).
2.3.5. Criolla
En los países andinos, abundan los cuyes nativos y/o criollos que son animales
pequeños rústicos con bajos niveles productivos, pero que usados junto con líneas
mejoradas producen cuyes con mayores índices de prolificidad y precocidad (Fano,
1999).
Desarrollada por INIA Santa Ana se caracteriza por presentar una roseta en la
cabeza, pelaje lacio, prolificidad y precocidad en la ganancia de peso (Gil, 2007).
8
especializados en producción de carne, evidenciado en su alto índice de productividad, se
han desarrollado cuatro líneas de abuelos reproductores, dos paternas (Precoz y Cárnica)
y dos maternas (Prolífica y Lechera) (Jiménez y Huamán, 2010). En una evaluación
preliminar se obtuvieron los parámetros de fertilidad del 92%, tamaño de camada de
3.75, sobrevivencia al destete de 85%, número de partos al año de 4.2, y productividad
anual referidas a las crías logradas al destete de 12.32. Los cuyes RG fueron desarrollados
en la Estación Experimental IVITA El Mantaro, ubicada en el distrito de El Mantaro,
provincia de Jauja, región Junín, país Perú; a una altitud de 3,320 msnm (Jiménez y
Huamán, 2010).
9
La crianza que se da en la región de Cajamarca, en la sierra norte del Perú, el 44,6%
la producción de cuyes es exclusivamente para autoconsumo, para disponer de una fuente
proteica de origen animal; y cuando disponen de excedentes, se comercializan para
generar ingresos a la familia (49,6%); es bajo el porcentaje de criadores, cuya actividad es
exclusivamente para ser comercializado. El hato de cuyes en esta región consta, en
promedio, de 25,6 unidades, tratándose de un número mayor al encontrado en la sierra
central, donde en promedio por familia es de 20,5 unidades (Zaldívar, 1990).
Este tipo de crianza de cuyes nace siempre de una crianza familiar organizada, y
aplicación de conceptos tecnológicos de crianza, está circunscrita al área rural en lugares
cercanos a las ciudades donde se puede comercializar su producto (Castro, 2002). No
siempre esta última alternativa es la mejor ya que casi siempre ofrecen precios bajos. Por
lo general, los productores de cuyes invierten recursos económicos en infraestructura,
tierra para la siembra de forrajes y mano de obra familiar para el manejo de la crianza.
Éstos productores que desarrollan la crianza familiar inicial, disponen de áreas para el
cultivo de forrajes o usan sus subproductos de otros cultivos agrícolas que les permite
disminuir los costos de producción y tener un cierto desarrollo poblacional (Chauca,
1997).
10
2.4.3. Crianza comercial (intensivo).
11
2.5.1. Temperatura
12
2.5.2. Humedad
La humedad relativa óptima para los cuyes está alrededor del 50%. En la crianza
desarrollada en animales con humedad relativa mayor a 50% se presentan problemas
respiratorios más frecuentemente, puesto que esto favorece la sobrevivencia de
microorganismos ambientales potencialmente patógenos para los cuyes. Incrementando
de forma directa la carga microbiana infectante, que favorecerá la infección. En nuestro
país, los meses de julio y enero son considerados períodos epizoóticos de enfermedades
infecciosas debido a la humedad relativa alta (Ramírez, 1972; Bustamante y Bustamante,
2009; Morales, 2013).
2.5.3. Ventilación
2.5.4. Alimentación
2.5.5. Hacinamiento
En los cuyes, se ve con frecuencia que cualquier alteración del orden normal de
estos componentes, favorece la presentación de un brote infeccioso que puede ser muy
difícil de erradicar si no se corrige a tiempo. Por lo que dichos aspectos deben ser
verificados con frecuencia en sus instalaciones a través de servicios del personal técnico
calificado (Zaldívar et al., 1989; Morales, 2013).
a. Etiología
b. Epidemiología
c. Signos Clínicos.
d. Diagnóstico.
19
2013). La identificación del serovar se realiza con serología para antígenos somáticos,
flagelares y capsulares; que permita la caracterización del patógeno (OIE, 2008).
e. Tratamiento.
20
Esta aparente actividad antimicrobiana fue confirmada en el laboratorio, al
comprobar que de 150 UFC, al momento de la presentación de los signos diarréicos, éstas
se redujeron a 30 UFC, lo cual representa una actividad del 80%. Según algunos autores,
la actividad antimicrobiana del género Tagetes se debe a la presencia de flavonoides, en
particular de un derivado 7-monoglicosilado de quercetagetina, el cual fue aislado de
Tagetes minuta, conocido en el Perú como "huacatay" (Pineda et al., 2007). Mattos et al.
(2013), demostró el efecto de la Muña (Satureja parvifolia) en la dinámica de la infección
por S. enterica. Por último, en un estudio realizado por Matsuura et al. (2010) en cepas
aisladas de casos clínicos de tejidos de cuyes en la provincia de Carhuaz, se llegó a
concluir que el 100% de los aislamientos de S. enterica resultaron sensibles a
enrofloxacina, sulfatrimetoprim y estreptomicina.
g. Prevención y Control
Es importante tener en cuenta que los animales que son positivos al cultivo de
Salmonella spp., deben ser removidos, recomendándose la eliminación del plantel si son
identificados por pozas, lotes, y/o galpones, debido a la condición de portadores (Percy y
Barthold, 2001; Morales, 2012). Las salmonelas son bacterias muy sensibles a las altas
temperaturas, pH menor a 4 y desinfectantes como el hipoclorito de sodio al 1% y etanol
al 70%. Por ende, estas alternativas se convierten en alternativas validas de control. Para
la prevención, es importante utilizar alimentos no contaminados, prevenir el decaimiento
de los animales, control de la temperatura y humedad del galpón, organizar actividades
de manejo sanitario de las pozas y desinfecciones periódicas de las instalaciones, evitar la
introducción de nuevos animales sin antes haberlos sometido a un periodo de
observación (cuarentena) no menor de 20 días, y evitar la presencia de portadores,
vectores y fómites (Morales, 2013).
a. Etiología
b. Epidemiología
c. Signos Clínicos.
Es importante recalcar que los animales afectados no suelen mostrar otros signos,
como de pirexia o anorexia inmediatamente antes de fisurarse los abscesos; sin embargo,
en algunos casos puede haber también descarga nasal, ocular, disnea y cianosis; también
tortícolis (desviación de la cabeza) debido a otitis media o interna. Ocasionalmente, puede
presentarse con una diseminación sistémica y causa neumonía, metritis y septicemia; los
animales identificados con signos típicos de linfadenitis cervical, también pueden
presentar parálisis del tren posterior aguda, diseminación del compromiso nodular,
metritis, abortos (O´Rouque, 2004; Hawkins y Bishop, 2012).
23
d. Patología.
A la necropsia, la infección puede variar de una septicemia aguda fatal a una crónica
con procesos supurativos en los ganglios linfáticos, torácicos y abdominales, vísceras,
útero y oídos. El exudado purulento es de color blanco nacarado y en casos de epizootia se
puede producir septicemia y neumonías agudas fatales. A la microscopía se puede
evidenciar neumonía, pleuritis, miocarditis, pericarditis, peritonitis, otitis media, nefritis,
artritis, celulitis y todas estas caracterizadas por la inflamación supurativa necrotizante o
fibrino-supurativa. También se pueden evidenciar cadenas de cocos grampositivos en
frotis directo o cortes de tejido (Wagner, 1999).
e. Diagnóstico.
f. Tratamiento.
Los animales infectados deben ser aislados de la colonia y deben ser tratados con
lavado quirúrgico de los abscesos, y terapia de antibiótico por 7 a 10 días (Percy y
Barthold, 2001). En casos de epizootias se recomienda el sacrificio de todo el plantel o
camadas en contacto, pues la posibilidad de diseminación del patógeno es muy alta,
sumado a ello se debe realizar el manejo sanitario de las pozas comprometidas, a través
de procesos de desinfección minuciosa y descanso de pozas prolongados.
g. Diagnóstico.
La enfermedad rara vez ocurre con una buena gestión de las instalaciones, y puede
ser llevada como una infección inaparente en hasta 50% de los animales (Hanes, 1999).
Los factores predisponentes incluyen la preñez, cambios ambientales de temperatura,
embarque, deficiencia subclínica de vitamina C, malas prácticas de manejo y
procedimientos experimentales estresantes (Percy y Barthold, 2001).
La transmisión es por contacto directo, las ratas y los humanos también pueden
servir de vectores. Los signos respiratorios pueden incluir descarga nasal, rinitis,
conjuntivitis, tortícolis, disnea y muerte súbita. Los cuyes pueden estar letárgicos,
anoréxicos y además pueden tener el pelo hirsuto. Por otro lado, las hembras preñadas
pueden abortar; durante las epizootias, donde las tasas de mortalidad son muy altas,
sobre todo en animales inmunológicamente inmaduros (Percy y Barthold, 2001).
Pasteurella multocida.
Las Eimerias en general pueden producir serias pérdidas económicas, como ejemplo
se tiene que en la industria avícola ascienden a más de 1.5 millones de dólares al año. La
especie de parásito económicamente importante, es la E. caviae, siendo el estrato etáreo
más susceptible los cuyes jóvenes, durante la recría. Muchos parásitos entéricos,
incluyendo las coccidias invaden la mucosa intestinal e inducen a diverso grado de
inflamación y daño de las células epiteliales (Yun et al., 2000).
a. Etiología
b. Ciclo Biológico
La Eimeria sp., ingresa al hospedero por penetración de las células epiteliales a nivel
de la mucosa del intestino, ocasionalmente causa serio daño sobre la integridad física del
intestino. El parásito es de distribución cosmopolita, el ciclo se divide en tres fases:
esporogonia, merogonia, y finalmente gametogonia (Yun et al., 2000), su ciclo de vida
incluye tanto la multiplicación sexual como asexual. La formación sexual termina con la
formación de ooquistes que se eliminan con las heces y el desarrollo de ocho organismos
infectantes (esporozoitos) en cada uno de estos ooquistes (Urquhart et al., 2001).
29
inmediatamente después de la invasión dentro de las células epiteliales (Urquhart et al.,
2001).
31
c. Inmunogenicidad de la Eimeria
d. Diagnóstico
32
Fox et al. (2002), recomienda el uso de medios de flotación, con una gravedad
especifica de 1.33. El periodo prepatente de E. caviae es de 11 – 12 días, pudiendo
presentarse la diarrea después de los 11 días, por lo que una evaluación fecal por
flotación en el inicio de la diarrea puede resultar en un falso negativo, siendo
recomendable evaluaciones repetidas cada 4 a 5 días por varias semanas (Fox et al., 2002;
Percy y Barthold, 2007).
e. Lesiones
33
f. Signos Clínicos
Generalmente no son evidentes a menos que la infección sea grave, por lo general
está ausente en cuyes adultos. La enfermedad clínica es más común en animales jóvenes y
en aquellos con deficiencia de vitamina C; cuando está presente, ocurre con frecuencia en
forma de brotes explosivos. Además, se ha reportado la variación estacional en la
incidencia de la enfermedad y las tasas de mortalidad, incrementándose los parámetros
en la primavera (Baker, 2003).
Al igual que con otras infecciones entéricas como las coccidiales, la diarrea es de los
primeros signos clínicos observados, anorexia, encorvamiento, pérdida de peso, pelo
áspero y ocasionalmente la muerte. Estos signos clínicos suelen comenzar alrededor de
11 días después de la infección y reducir en una semana. Sin embargo, en casos graves, se
puede observar diarrea mucosa con estrías sanguinolentas y puede producir la muerte
repentina sin la presentación de signos clínicos (Chauca, 1997; Baker, 2003; Baker, 2007).
A veces se producen coccidiosis graves e incluso fatales durante las primeras fases
asexuales de la infección, antes del desarrollo de los ooquistes. En estos casos la
enfermedad es manifiesta, sin la exposición de ooquistes en las heces. La diarrea crónica
es el principal signo de la coccidiosis, que produce la destrucción del epitelio intestinal
provocada, a su vez por hordas de microorganismos que se van multiplicando. La diarrea
tiene muchas causas y la infección por coccidios es sólo una de ellas, por lo que el
diagnóstico de coccidiosis siempre es incierto en cada caso. En otras palabras, la suma de
diarrea más liberación de ooquistes no siempre significa coccidiosis (Bowman, 2004).
g. Tratamiento y Control
Los huevos de nematodos son más o menos de forma redondeada u oval, con
algunas diferencias tanto en forma y tamaño (no sólo de unas especies a otras, sino
también dentro de las mismas especies). La cubierta del huevo es de espesor variable,
está formada por tres capas: La membrana interna es delgada, impermeable y lipídica. La
capa media es dura y quitinosa, lo que le proporciona rigidez y cuando es gruesa adquiere
35
una apariencia amarillenta, en algunas especies como Trichuris sp. y Capillaria sp., esta
capa media está interrumpida en los dos polos por un opérculo o tapón; La tercera capa,
la más externa es llamada vitelina, de composición proteica. La supervivencia potencial
del huevo fuera del cuerpo es variable, pero parece estar relacionada con el espesor de la
cáscara que protege la larva de la desecación, como en Paraspidodera uncinata, Trichuris
sp. y Capillaria sp. (Urqhuart et al., 2001).
Las especies de Trichuris sp., son de color blanco a rosado. Miden 4-6 cm de
longitud, su extremo posterior es grueso y bruscamente se estrecha hasta el extremo
anterior, que es largo y filamentoso y está embebido en la mucosa. Debido a su apariencia,
los vermes de este género se denominan frecuentemente vermes látigo . La cola del
macho está enrollada en espiral y posee una sola espícula rodeada por una vaina; la cola
de la hembra está simplemente curvada (Urquhart et al., 2001; Barriga, 2002).
36
Los huevos eliminados con las heces, bajo condiciones ideales (22°C de temperatura,
>80% de humedad y oxígeno) en el suelo desarrollan una larva infectante de primer
estadio en 35 a 54 días según la especie, si la temperatura fuera de 30°C pueden
desarrollarse en tan sólo 11 días, mientras que a 15 °C pueden desarrollarse en 4 a 6
meses, el hospedero ingiere los huevos maduros que contienen L1 al consumir alimentos
contaminados, luego los tapones se digieren y las L1 se liberan y penetran en las
glándulas de la mucosa cecal. Posteriormente las cuatro mudas se producen en estas
glándulas y los adultos emergen a la superficie de la mucosa, introduciendo su extremo
anterior en ella. El periodo de prepatencia oscila entre 6 y 12 semanas dependiendo de la
especie (Mehlhorn y Piekarski, 1993; Urquhart et al., 2001; Barriga, 2002).
Las especies de Passalurus sp., poseen la boca simple con un corto vestíbulo, con tres
dientes en su base que redondean la abertura del esófago. Está constituido de un corpus,
un corto istmo y un bulbo, son de color semitransparente. Miden de 4-11 mm, los machos
miden entre 4-5mm y las hembras entre 9-11mm. La cola del macho es muy larga, el
cuerpo está ligeramente aplanado y termina en una larga punta, posee unas alas caudales
estrechas en porción ancha de la cola, la espícula es relativamente corta. La cola de la
hembra es alargada y termina en una aguda punta, y el esófago tiene el típico bulbo
esofageal de los oxiuroideos (Quiroz, 2005; Taylor et al., 2007).
37
Los huevos embrionados son puestos en el recto, en estado de blástula, en donde
evolucionan al estado infectante en 18-24 horas, son eliminados por las heces y
permanecen viables durante algún tiempo. La infección se realiza por medio de la
ingestión de huevos con L2, estos eclosionan al llegar al intestino delgado. La muda de
larvas a L3, L4, así como la madurez sexual del parásito se realiza en las criptas, mucosa
del ciego y el intestino grueso. El periodo prepatente es de 56 a 64 días (Baker, 2003;
Quiroz, 2005)
Epidemiología
38
Las especies de tricuros, han sido reportadas como parásitos de diferentes
mamíferos., donde Trichuris leporis, ha sido identificado en conejos, liebres y cuyes en la
localidad de Lima (Sarmiento et al., 1999), y Trichuris gracilis reportado en cuyes
silvestres (Cavia aperea) en un estudio a nivel de las regiones de Cusco, Junín y Cajamarca
(Dittmar, 2002). Sin embargo, en la mayoría de los estudios, rara vez se han identificado
las especies (Barriga, 2002; Baker, 2007). Las especies de Capillaria sp., parasitan a las
aves (gallinas, pavos, patos, palomas) causando patología, y en mamíferos (rumiantes,
carnívoros, roedores, humanos), donde con excepción del humano rara vez producen
signos clínicos (Urquhart et al., 2001; Barriga, 2002).
39
III. MATERIALES Y MÉTODOS
Las granjas son de crianza tipo familiar comercial, donde el uso de las tecnologías es
escasa, con el objetivo de producción de autoconsumo y cierto porcentaje para la
comercialización local, fueron diferenciadas según el tipo de manejo brindado por sus
propietarios, así como: criadores capacitados y los criadores no capacitados, según su
participación o no en las actividades del proyecto Fortalecimiento de capacidades en la
producción pecuaria impartida por los profesionales de la ONG SEPAR por un periodo de
dos años; donde en base a talleres y charlas, se desarrolló capacidades de crianza en
instalaciones, producción, selección y mejoramiento genético, criterios de alimentación y
aspectos de bioseguridad.
40
registrándose datos como grupo etario (recría y reproductores), sexo (macho y hembra),
raza (mejorado y criollo), procedencia (Aquia, Pacarenca y PamPam), y tipo de crianza
(criador capacitado y criador no capacitado).
Monitoreos mensuales fueron realizados a todos los productores del estudio (56
criadores capacitados y 115 criadores no capacitados); donde luego de la evaluación de
los animales de cada granja, se seleccionaron los animales que mostraban signos clínicos
compatibles con alguna de las enfermedades en estudio, signos que no son
patognomónicos de ninguna enfermedad, sin embargo son signos generales como:
depresión, diarrea, disnea, pelo hirsuto, baja condición corporal, aborto, parálisis de
miembros, incrementos de tamaño de área cervical, aislamiento del animal, siendo estos
41
los criterios de inclusión para la toma de muestra de tejidos, remitidos para aislamiento
bacteriológico, sin considerar el tipo de patología encontrada.
42
3.5. SEROTIPIFICACIÓN DE CEPAS DE SALMONELLA
Las muestras de heces fueron tomadas de las pozas de crianza, de forma pareada
(reproductores y recría), rotuladas con los datos: granja de procedencia, tipo de crianza y
fecha de colección. Dichas muestras fueron tomadas en una sola oportunidad, en las
primeras horas del día y cuyo criterio de inclusión fue el hallazgo de heces frescas en la
poza, con una cantidad aproximada de 20 gramos, lo que redujo la posibilidad de un
muestreo mayor debido al número reducido de animales en algunas granjas, siendo
muestreadas 262 pozas, según el manejo de las granjas (131 pozas de recría y 131
muestras de pozas de reproductores), de un total de 171 productores de cuyes,
constituyendo cada poza una unidad sanitaria-productiva , al evidenciar un íntimo
contacto entre los animales de una misma poza; con una densidad en promedio entre 5 a
7:1 de hembras y macho, respectivamente.
43
3.7. PROCESAMIENO PARASITOLÓGICO
44
IV. RESULTADOS
45
Cuadro 1. Porcentaje de animales positivos a agentes infecciosos bacterianos según tipo de
crianza practicada, mediante la prueba estadística exacta de Fisher (n = 51).
Se estableció el modelo logit para las variables: crianza, edad, raza, y poblado de
Pacarenca y Pampam, tomando como referencia al poblado de Aquia. El cuadro 2, muestra
los coeficientes de regresión logística calculados con su respectivo intervalo de confianza
al 95% y el valor de z de Wald, el cual en todos los casos resultó ser mayor a 0.05; es decir,
los coeficientes no fueron estadísticamente significativos (p>0.05).
46
Cuadro 2. Estimación del Modelo Logit de las variables del diseño de estudio para
S. zooepidermicus.
[Intervalo de confianza
S. zooepidermicus Coef. Z p>|z| al 95%]
En el Cuadro 3, se muestra los valores de Odds ratio (OR) calculados para S. zooepidermicus,
resultando no significativo (p>0.05).
Cuadro 4. Determinación del Modelo Logit de las variables del diseño de estudio para S.
Typhimurium
Por lo que el modelo logit establecido a partir de los datos analizados no permite
determinar la presencia de S. Typhimurium según las variables involucradas, es decir no se logró
determinar un modelo como una herramienta predictiva, debido a que sus resultados son no
significativos (p>0.05).
48
Cuadro 6. Proporción de parasitosis con su respectivo intervalo de confianza al 95% (IC) según la
fase de producción a nivel de las granjas.
Condición
Eimeria caviae Trichuris sp. Paraspidodera sp.
\Parasito
n 12 14 16
Reproductor
% 9.16 10.69 12.21
(n=131)
IC 4.2 – 14.1 5.4 – 16 6.6 – 17.8
n 11 17 9
Recría
% 8.4 12.38 6.87
(n=131)
IC 3.6 -13.1 6.7 - 18 2.5 – 11.2
N 23 31 25
Total
% 8.78 11.83 9.54
(n=262)
IC 3.9 – 13.6 6.3 – 17.4 4.5 – 14.6
Sub total
Reproductor Recría
Endoparásitos Total P
(n=131) (n=131) n (%)
Como puede observarse en la determinación del Odds Ratio (OR), no se pudo determinar
un factor de riesgo (p>0.05) para la presentación de las parasitosis evaluadas (Cuadro 8).
49
Cuadro 8. Determinación de Odds Ratio para parasitosis según fase de crianza (reproductores)
[Intervalo de
Endoparásitos Etapa Odds Ratio Chi2 p>chi2 confianza al 95%]
Reproductor 1.000000 - - - -
Trichuris sp.
Recría 0.802413 0.33 0.5668 0.377205 1.706942
Reproductor 1.000000 - - - -
Paraspidodera sp.
Recría 1.885990 2.16 0.1418 0.797550 4.459855
Reproductor 1.000000 - - - -
E. caviae
Recría 1.100076 0.05 0.8275 0.466329 2.595097
50
V. DISCUSION
51
encontrar que esta sea significativo (p>0.05); esto podría ser explicado por la
susceptibilidad de esta especie a múltiples patógenos, al margen del sistema de crianza y
otros factores.
También resalta la no existencia de algún animal positivo a los agentes patógenos más
frecuentes (S. Typhimurium, Pasteurella sp. y Bordetella sp.) en la condición de crianza del
denominado productor no capacitado (cuadro 1), esto podría estar vinculado a la mayor
exigencia productiva a los que son sometidos (estrés) los animales de los productores
capacitados (Chauca, 1997), a pesar de que esta diferencia no es significativa (p>0.05),
debido potencialmente al bajo número de muestras evaluadas. También, podría
explicarse por el uso de criterios de crianza por parte de los productores capacitados por
el proyecto de fortalecimiento de capacidades desarrollados durante 2 años como se
indica en la metodología, sin que esto necesariamente haya logrado condiciones óptimas
de crianza. También puede estar relacionado con el número de animales y la condición
intensiva de crianza, pues existen reportes en diferentes regiones del país.
52
procesos inflamatorios, trastornos circulatorios, degenerativos y de adaptación,
resaltando la inflamación como el trastorno no patológico más frecuente (177/408).
A su vez, Matsuura et al. (2010), reporta al hígado como el órgano más afectado
con 87.5% y bazo con 92.5% por la S. enterica. Esta diferencia se explica, posiblemente
por las funciones que cumplen los órganos y lo variado de los aislados bacterianos
reportados (cuadro 1), que no muestran las características propias de un brote infeccioso;
donde la prevalencia de un patógeno es sobresaliente y por ende la patogenia también
está normalmente asociada a un determinado órgano.
Una granja comercial reportó para el año 2007 una tasa de mortalidad de 2.5%
mensual, siendo la salmonelosis responsable del 20% de estas muertes (Ortega et al.,
55
2015). En el presente estudio y bajo las condiciones de crianza que lo caracteriza, se
encuentra este mismo comportamiento de frecuencias de presentación bajas, las cepas
aisladas de Salmonella enterica a partir de órganos como hígado, bazo, intestino, pulmón,
entre otros, fueron serotipificados reportándose por primera vez a partir de animales en
producción el serotipo Typhimurium, cuya fórmula antigénica es: O4,12:i:1,2 , como
único serotipo relacionado a esta especie (Delli, 2014).
57
Otro aspecto importante son las características biológicas propias de la especie
como la coprofagia, mecanismo de compensación biológica, que favorecería la infección y
reinfección de los animales. Es así que encontramos últimos estudios como el de Sánchez
(2013) quien reporta 82.46% de animales procedentes de la provincia de Huancayo con
algún tipo de endoparásitos en épocas de seca (mayo – agosto); García et al. (2013)
utilizando la metodología de necropsias de animales encontró 89% en el distrito de Caraz,
Ancash; Vargas et al. (2014), a través de las técnicas de Flotación, Sedimentación y Mc
Master reportó un 90% de parasitismo gastrointestinal en épocas de lluvias y 63.5% en
época seca en el distrito de Oxapampa; Aquino et al. (2010) reportó un 72.42% de
prevalencia de endoparasitosis desarrollado en 20 comunidades del distrito de San
Marcos, Ancash.
Otro aspecto que podría estar favoreciendo estos niveles bajos, podrían estar
relacionados a la época del año (seca), según reporta Vargas et al. (2014), este factor
influye directamente en la menor presentación de la parasitosis, la época lluviosa tiene
5.7 veces más riesgo de presentar endoparasitosis que la época seca, ligada
potencialmente a una menor humedad, mayores niveles de radiación que no permitirían
58
la viabilidad de las formas infectivas de cada uno de los parásitos normalmente
reportados (Rojas, 1990; Urqhart, 2001; Barriga, 2002; Vargas et al., 2014). A pesar de
este conocimiento de la epidemiologia de la endoparasitosis, la intervención de proyecto
en la región se originó, debido a los índices de mortalidad muy alto que se daba a nivel de
todos los productores, por ello se estableció el objetivo de determinar bajo esas
condiciones, el comportamiento de estos patógenos de importancia.
59
lámina propia con células polimorfonucleares y mononucleares; siendo manifiesto
clínicamente cuando la infección es masiva (Percy y Barthold, 2007).
61
VI. CONCLUSIONES
62
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71
VIII. ANEXO
Aislamiento de Órganos n % p
Negativo 39 76.5
Ganglio
0.001
cervical Positivo 12 23.5
Negativo 35 68.6
Bazo 0.000
Positivo 16 31.4
Negativo 39 76.5
Pulmón 0.001
Positivo 12 23.5
Negativo 41 82.0
Otros
0.009
ganglios Positivo 8 18.0
Negativo 47 92.0
Hígado 0.110
Positivo 4 8.0
72