Diagrama esfuerzo (σ) - deformación (ε)

Introducción

Dos conceptos fundamentales muy importantes en el mundo de la mecánica de

materiales como son: Esfuerzo y deformación normales. Estos dos temas tienen un punto
en común cuando hablamos de un diagrama particularmente importante en mecánica de
materiales, dicho diagrama tiene el nombre de Diagrama Esfuerzo (σ) - Deformación (ε).
Particularmente en este diagrama interviene un nuevo concepto que agregaremos a este
curso, que es el módulo de Young o zona elástica de los materiales. Además, para
obtener este esfuerzo, es necesario seguir una serie de normas que ayudan a
estandarizar el proceso en cualquier parte del mundo.
El estudio de las propiedades de los materiales nos ayuda a entender el comportamiento
de estos en situaciones de esfuerzo. Sin estas propiedades no sería posible el diseño
ingenieril de las piezas y éstas se harían a prueba y error.

Comprenderás la diferente terminología que se les da a las propiedades de los materiales,

en cuanto a esfuerzos se refiere. En esta actividad sólo trataremos con las propiedades
mecánicas de los materiales que nos sirven en diseño mecánico. Hay que estar
conscientes que los materiales tienen más propiedades que no se verán aquí, ya que son
parte del estudio de la ciencia de materiales.

Explicación
La mayoría de los materiales sufren distintos tipos de deformaciones como pueden ser
deformación normal y deformación cortante. En este tema sólo nos enfocaremos en la
deformación normal, ya que gran parte de los elementos diseñados se usan para soportar
tipos de cargas axiales.
El concepto de deformación estaba asociado a una carga, si a algún elemento se le aplica
una carga, éste tiende a deformarse; el cuánto se deforma se estudia mediante el
diagrama esfuerzo - deformación, que no es otra cosa más que una prueba empírica para
un elemento en específico. De esta prueba se pueden extraer elementos importantes que
nos darán las características particulares del elemento de estudio.
Los datos obtenidos de una prueba de tensión de laboratorio se utilizan para trazar el
diagrama esfuerzo deformación (figura 1) donde se relaciona la deformación unitaria
contra el esfuerzo unitario, ubicando los valores respectivamente en las abscisas y
ordenadas del eje coordenado.

En esta gráfica puedes observar diferentes zonas correspondientes a propiedades

asociadas al material: la línea recta OA representa una relación proporcional o lineal entre
el esfuerzo y la deformación, el valor de la pendiente representa al módulo de
elasticidad o módulo de Young y el punto donde termina esta línea se le conoce
como límite de proporcionalidad, que es la transición entre la zona elástica y plástica.
En la zona elástica el material tiene la característica de que al ser liberado de la carga
regresa a sus condiciones iniciales, cosa que no sucede en la región plástica donde la
deformación es permanente.
En el ensayo, al incrementarse la fuerza se genera un mayor esfuerzo sobre la probeta y
puedes observar que la relación deja de ser lineal, definiendo el siguiente punto
importante B, conocido como esfuerzo de fluencia o cedencia, que representa el límite
donde el material comienza a ceder y se deforma fácilmente; por eso, la línea BC es casi
horizontal donde al menor cambio en la carga se produce una deformación considerable
en el espécimen de prueba.
En algunas ocasiones al realizar la prueba, debido a las características del material, no se
tiene bien definida la zona de transición elástica plástica y es necesario tener una
herramienta que permita cuantificar el esfuerzo de fluencia; para ello, se aplica una
paralela de la línea tangente que pasa por el origen desplazada 0.2 % o en el eje de las
abscisas.
Los materiales al deformarse cambian su estructura interna, incrementado su dureza y
son, por consecuencia, más resistentes a mayores esfuerzos, como podemos ver en la
sección CD; pero sólo resisten hasta el punto D, llamado el esfuerzo último o máximo,
donde a partir de este valor el material continuará deformándose hasta romperse en el
punto E.
En la gráfica se ve que el esfuerzo disminuye a pesar de que se le aplica mayor fuerza;
esto se debe a la reducción del área transversal que se da en el material antes de la
fractura.
El esfuerzo último y el esfuerzo de fluencia marcan la resistencia de un material; es
decir, la capacidad de un material de soportar cargas en condiciones controladas. En
diseño de elementos mecánicos es muy importante considerar estos valores, asegurando
que la pieza no alcance una deformación permanente o llegue a la ruptura, según sea el
caso del esfuerzo utilizado. Más adelante podrás observar cómo un ingeniero protege sus
diseños considerando la resistencia de cedencia o fluencia y la resistencia máxima, o
última, a través de factores de trabajo o seguridad.

La ductilidad es la propiedad que hace que un metal pueda ser deformado plásticamente
antes de romperse; un ejemplo serían los alambres de cobre. La ductilidad puede
determinarse mediante dos maneras: por su alargamiento o debido a la reducción de área
en su sección transversal donde sucede la fractura.
La medición de la ductilidad por alargamiento equivale a calcular el porcentaje de
elongación, el cual se determina mediante:

Donde:
%el: Porcentaje de elongación o alargamiento.
L0: Longitud inicial o calibrada.
Lf : Longitud final entre marcas.
Hay que notar que el alargamiento no es uniforme en todo el espécimen, por lo que hay
que definir la longitud de calibración junto con el porcentaje de alargamiento. Por otro
lado, para medir el estrechamiento en el área de la probeta, tenemos el porcentaje de
reducción de área, cuya fórmula es:

Esta fórmula la utilizaremos cada vez que tengamos una probeta o un elemento al que se
le haya hecho alguna elongación y se requiera validar si tuvo algún cambio de longitud,
para lo cual se valida su deformación o índice de alargamiento.

Donde:
%AR: Porcentaje de reducción de área.
A0: Área transversal original.
Af : Área transversal final en la zona de la fractura.
Los materiales que fallan a tensión con valores de deformación bajos, se les conoce
como frágiles. Este tipo de materiales tienen una curva CD corta. Algunos ejemplos de
materiales frágiles son el vidrio, el concreto y aceros con alto contenido de carbón.
Con ayuda de diagramas podemos obtener otro tipo de propiedades en los materiales,
como la elasticidad, que se refiere a la capacidad de un material de ser cargado y
deformarse. Cuando la carga desaparece, éste vuelve a su tamaño original.
Esta elasticidad la encontramos cuando trabajamos con esfuerzos menores al límite de
proporcionalidad; es decir, cuando trabajamos sobre la recta OA. Este límite es conocido
como límite elástico, el cual es muy cercano al límite de proporcionalidad. Cuando la
carga puesta en el material, pasa el límite elástico, éste se deforma permanentemente en
cierta proporción, ya que el material tiene cierta recuperación elástica. A esta deformación
que se presenta al retirar la carga, se le conoce como deformación residual o
permanente.
A la propiedad del material que sufre deformaciones inelásticas o permanentes se le
conoce como plasticidad; cuando este material es cargado hasta su región plástica y se
presentan grandes deformaciones, se le conoce como flujo plástico.

Es importante tomar en cuenta que cuando se está cargando y descargando un material

en su región elástica, éste no sufre ninguna modificación interna; sin embargo, al entrar
en el área plástica, el material sufre cambios en su estructura, por lo que la curva de
esfuerzo-deformación ya no es la misma, aumentando la región elástica, pero reduciendo
su ductilidad.
En todos estos conceptos no estamos tomando en cuenta el comportamiento del material
cargado por un tiempo. Cuando un material es cargado dentro de sus límites elásticos por
un largo periodo, éste tiende a deformarse gradualmente; a este proceso se le
llama relajación. Un ejemplo de esto es cuando atamos un alambre tensionado a las
paredes, con el paso del tiempo este alambre ya no va a estar tensionado, porque sufrió
una deformación gradual o relajación.
Propiedades mecánicas de los materiales
Las propiedades de los materiales varían enormemente dependiendo de los procesos de
manufactura, composición química, defectos internos, temperatura, antecedentes de
carga, tiempo de uso, dimensión de las probetas de prueba y muchos otros factores. Los
valores tabulados son representativos del material, pero no deben usarse para propósitos
específicos de ingeniería o de diseño. Es preciso consultar a los fabricantes y a los
distribuidores de los materiales respecto a productos específicos.
Excepto que se trate de comprensión o reflexión, el módulo de elasticidad (E), esfuerzo de
fluencia (σy) y esfuerzo último (σu) son para materiales en tensión.
Actualmente existen diversos materiales que pueden ser utilizados en ingeniería, entre los
que podemos mencionar a los metales y sus aleaciones, plásticos, madera, vidrio y
cerámicos; diferentes o similares entre sí, dependiendo de las diversas propiedades que
posean, entre las que podemos destacar las físicas, químicas, térmicas, eléctricas,
acústicas, ópticas, mecánicas, etc.
Dependiendo del uso y servicio, será el criterio para elegir un material, buscando aquel
que cumpla las necesidades de diseño y costo. En el caso de esta materia, se toman en
cuenta las propiedades mecánicas, destacando la dureza, elasticidad, plasticidad,
maleabilidad, ductilidad, tenacidad y otras más que serán descritas a lo largo de este
curso.
Para cada uno de los materiales de ingeniería hay tablas donde se tienen los valores
característicos para cada una de sus propiedades. En el caso de no conocer los valores
de dichas propiedades, éstas se pueden determinar mediante pruebas normalizadas,
siendo uno de los principales el ensayo de tensión, para el cual se recomienda seguir los
lineamientos de la norma ASTM E8 / E8M-09.
La ASTM (American Society for Testing Materials, por sus siglas en inglés), el cual es un
organismo certificador y desarrollador de estándares internacionales para la prueba de
diversos materiales, para determinar las propiedades mecánicas de algunos materiales
realizó el estándar ASTM E8, el cual homologó el tamaño de algunas probetas para
determinar así su comportamiento mecánico.
En este caso, es posible que las pruebas que se hagan en cualquier país del mundo
arrojen resultados que se puedan comparar y, con base en eso, se pueda homologar la
calidad de los materiales de los que estamos definiendo sus características mecánicas.
Las pruebas de tensión nos proporcionan información sobre la resistencia y la ductilidad
de los materiales bajo cargas axiales. Esta información puede ser útil en las comparaciones
de los materiales, el desarrollo de la aleación, control de calidad, diseño de estructuras y
para determinar su comportamiento bajo ciertas circunstancias de operación.
La norma ASTM, muestra métodos de ensayo que cubren las pruebas de tensión de los
materiales metálicos en cualquier forma a temperatura ambiente, específicamente los
métodos de determinación de la resistencia a la fluencia, el rendimiento de punto de
elongación, resistencia a la tracción, elongación y la reducción de área conforme a las
pruebas universales de tensión de materiales a probetas.
Las longitudes de las probetas redondas para la mayoría de los criterios de prueba de
materiales están obligadas a ser 4D para E8 y 5D para E8M (estas medidas son las siglas
estándar de tamaño de las probetas). La longitud de referencia es la diferencia más
significativa entre E8 y E8M y para analizar las muestras correspondientes.
Para que veamos un ejemplo de cómo son las gráficas que se mencionan a continuación,
que son las que usaremos en la mayoría de los estudios que realicemos, necesitamos ver
primero las propiedades de algunos de los materiales (Tabla 1).
Es muy importante recalcar lo que se mencionó inicialmente: que estos valores son de
referencia con base en los materiales característicos. Es necesario considerar que existe
variación entre lote y lote de producción de material, por lo que se tiene que validar las
propiedades mecánicas de cada material a usar. En la industria del acero, por ejemplo,
cada una de las coladas de material tiene un rango para que el material se considere
dentro de una especificación de acero.
Sin embargo, al momento de realizar las pruebas de laboratorio, puede existir una
variación aceptable que, para efectos de cálculos ingenieriles, podrían representar un
menor coeficiente de seguridad, por lo que vale la pena realizar una prueba previa al
utilizar cierto material; esta prueba previa puede ser una prueba de tensión al utilizar una
máquina universal para obtener la zona elástica, plástica y punto de rotura del material.
Importante: Los conceptos anteriormente estudiados de esfuerzo y deformación se
conjuntan en este tema para conocer este importante diagrama que nos ayuda a conocer
la naturaleza de los diferentes materiales usados en ingeniería.
El diagrama nos muestra cuatro partes que debemos conocer muy bien y saber qué es lo
que pasa en cada una de ellas.
Esfuerzo normal y deformación unitaria

El esfuerzo normal (esfuerzo axil o axial) es el esfuerzo interno o resultante de las

tensiones perpendiculares (normales) a la sección transversal de un prisma mecánico.
Los esfuerzos normales pueden ser de tensión o compresión. Un esfuerzo de compresión
es aquel que tiende a aplastar el material del miembro de carga, y a acortar el miembro en
sí. Un esfuerzo de tensión es aquel que tiende a estirar al miembro y romper el material.

La deformación unitaria (δ) se define como el cambio de longitud, por unidad de longitud,
debido a una carga normal sobre un material, (ver Figura 1). Esta se puede relacionar
directamente con el esfuerzo generado sobre el material al dividir la carga que genera la
deformación entre el área transversal del material.

Figura 1. Genere 2004.

Propiedades mecánicas de los materiales

En la Figura 2 se muestra la relación que existe entre la deformación de un material y el

esfuerzo que produce dicha deformación. La gráfica es representativa de cualquier
material dúctil y los valores específicos para cada tipo de material son obtenidos
experimentalmente y están ampliamente reportados en la literatura alusiva a la resistencia
de materiales. Las secciones en las que se divide la gráfica se muestran a continuación.
 Figura 2. Singer, 1990.

OA: sección de proporcionalidad.

El punto A es el límite de elasticidad, después de este punto el material no recupera su

forma original al ser descargado.

El punto B es el límite de fluencia, en este punto aparece un considerable alargamiento

sin el correspondiente aumento de carga.

El punto D es el esfuerzo último o límite de resistencia, es la máxima ordenada en el

diagrama esfuerzo-deformación.

El punto E es el punto de ruptura, el material se alarga muy rápidamente y se estrecha al

mismo tiempo hasta romperse.

Ley de Hooke

En la gráfica se muestra que la parte rectilínea corresponde a la ley de Hooke indicando

que el módulo de elasticidad es la pendiente de la recta, es decir la relación entre el
esfuerzo y la deformación.
Figura 3. Singer, 1990.

Relación entre esfuerzo (𝜎) y alargamiento (𝛿)

Nota: Para que la expresión anterior se use adecuadamente se debe considerar lo

siguiente:

1. La carga ha de ser axial.

2. La barra o placa debe ser homogénea.
3. El esfuerzo no debe sobrepasar el límite de proporcionalidad.
LA LEY DE HOOKE
La ley de Hooke es un principio vinculado a la elasticidad que está presente en el campo
de la Física y resulta muy útil, por ejemplo, dentro de los ámbitos de la construcción,
la ciencia de los materiales y la ingeniería.

En un primer momento, este postulado que lleva el apellido de un prestigioso científico

inglés llamado Robert Hooke hizo foco en procesos asentados en
un estiramiento longitudinal. Su contenido indica que, en un cuerpo de características
elásticas, el alargamiento a nivel unitario resulta proporcionalmente directo a la fuerza o
carga que se aplica sobre él. Cuanto más es la fuerza empleada, mayor será el
desplazamiento, extensión o deformación del objeto o sólido involucrado. Con todos los
datos que se obtienen en base a la ley de Hooke se facilitan los procesos de medición de
propiedades elásticas y el análisis de oscilaciones, por ejemplo.

Conociendo el contenido de la ley de Hooke es posible comprender, entre otros fenómenos,

cómo es el funcionamiento y la esencia de trampolines, resortes y otros elementos.

ELEMENTOS Y CONCEPTOS DE LA LEY DE HOOKE

La ley de Hooke involucra en su enunciado a diferentes conceptos y elementos cuyas

particularidades hay que conocer e interpretar correctamente a fin de dominar bien la teoría
y la aplicación práctica de este postulado.

Son clave en este principio la constante elástica de un resorte (se habla asimismo
de constante de resorte), el límite de proporcionalidad que se determina desde la teoría
como el valor que se le asigna a la tensión debajo de la cual resulta proporcional el
alargamiento de un material respecto a la carga en juego.

Hay que tener presente, asimismo, qué y cómo es el límite elástico aparente, expresión que
identifica a qué nivel de tensión puede aguantar la probeta al producirse el fenómeno
conocido como fluencia o cedencia. Explicado de otro modo quizás más sencillo de
comprender por el común de la sociedad: el límite de elasticidad da cuenta de cuánta
tensión toleran los materiales plásticos sin experimentar una deformación de carácter
permanente que le impida recuperar su aspecto original de manera espontánea al quitarle
las cargas.

Los expertos en sismología clásica llevan años aplicando la ley de Hooke en sus
investigaciones y análisis.

DEFORMACIÓN Y ELASTICIDAD

Deformación y elasticidad son dos nociones de mucha relevancia dentro del ámbito de
la Física. El primero de estos vocablos alude a un fenómeno centrado en la transformación,
ya sea reversible o invariable, de un elemento (objeto o cuerpo) al aplicar sobre él
un esfuerzo. La palabra también se asocia a un proceso de raíz termodinámica en el cual
tiene lugar la acumulación de energía potencial elástica dentro de la energía que lleva en
su interior un cuerpo. De superarse los límites máximos previos a una deformación,
entonces los materiales sufren modificaciones y su energía se desperdicia generando
fracturas, endurecimientos o fatiga de materiales.
Cabe señalar que existen múltiples clases de deformaciones: hay deformaciones unitarias
o axiales (presentes en el rubro de la ingeniería), deformaciones plásticas (bautizadas
asimismo como permanentes o irreversibles) y deformaciones elásticas (no permanentes o
reversibles).

La elasticidad, por otra parte, está muy tenida en cuenta, específicamente, en la mecánica
de sólidos. Da identidad a una propiedad que ciertos elementos poseen (como el caso de
las llantas, los botones de un control remoto y los resortes, los cuales pueden ser resortes
en serie o resortes en paralelo), la cual los lleva a deformarse temporalmente como
consecuencia de una fuerza que se les imprime para luego recobrar su formato original.

Existe un parámetro, llamado módulo de elasticidad longitudinal o módulo de Young, para

marcar cómo se comporta un determinado material elástico. Esta medida, en materiales
elásticos lineales e isótropos, mantiene un valor idéntico tanto en una compresión como en
una tracción: de no sobrepasar el límite elástico se erige como una constante autónoma del
esfuerzo.

APLICACIONES DE LA LEY DE HOOKE

Entre las aplicaciones prácticas de la ley de Hooke figuran cuestiones propias de la

construcción (como el cálculo de la resistencia de materiales), la ingeniería y la arquitectura.
También es útil para la labor de expertos en química y biología.

En acústica y sonido (contemplando en este contexto a instrumentos musicales que llevan

cuerdas que al ser frotadas y pulsadas tienen deformaciones y vibraciones), así como en
estudios inherentes a la sismología y al análisis de terremotos, es sumamente valiosa la ley
de Hooke.
La ley de Hooke se conecta, por ejemplo, con el sonido y con instrumentos de cuerda como
el caso de la guitarra.

Al profundizar los saberes en torno a los alcances de este principio salen a la luz cómo se
llega a aprovechar el contenido del enunciado al efectuar un ensayo de resistencia o
una prueba de materiales.

Es un gran recurso, incluso, para diseñar dispositivos claves para el bienestar humano en
materia de salud e instruirse acerca de la deformación y recuperación de tejidos del
organismo humano cuya estructura resultó modificada como consecuencia de la aplicación
de una fuerza externa.

La suspensión de un vehículo y un trampolín son otros ejemplos de aplicación de la ley de

Hooke, un enunciado de enorme antigüedad que, conjugado con las bondades de la
tecnología, se traduce en el desarrollo de materiales inteligentes que tienen memoria de
forma, por sumar más datos concretos sobre el tema.

Conclusión
En resumen, los materiales tienden a deformarse cuando se les aplica un esfuerzo normal
o tangencial. La deformación unitaria generada por un esfuerzo normal puede calcularse
de acuerdo a la ley de Hooke siempre y cuando la deformación no sobrepase el límite
elástico. La deformación ya sea a tensión o a compresión de un esfuerzo normal siempre
se genera de forma axial al área transversal del objeto. El cálculo de la deformación unitaria
tiene una amplia aplicación en el diseño de estructuras.