Resumen Frente A La Practica Educativa
Resumen Frente A La Practica Educativa
Resumen Frente A La Practica Educativa
EPISTEMOLOGIA DE LA
EDUCACIÓN.
RESÚMEN
Teoría frente a práctica educativa: algunos problemas y
propuestas de solución
En el campo de la educación la teoría y la práctica sufren desencuentros; al
respecto, destaca la importancia de la distancia que existe entre la producción de conocimiento y su
puesta en práctica en los centros escolares (Porlán y Rivero, 1999; Korthagen, 2007, 2010;
Clemente, 2007; Rozada, 2007; Allen, 2009; Elliott, 2010; Álvarez, 2013). Entre teoría y práctica,
podemos señalar que la universidad y la escuela son instituciones que se ocupan principalmente de
los conocimientos que se ponen en Practica.
Klein afirma que los términos teoría y práctica son polisémicos, lo cual es una de las causas de la
ruptura teoría-práctica: "Ninguno de los términos denota un significado claro en cualquier forma
cuidadosa y consistente.
Por otro lado. Podemos entender por práctica "el cuerpo a cuerpo" del trabajo
cotidiano del profesorado en los centros educativos de los diferentes niveles, sobre todo en las
aulas, pero también fuera de ellas.
Entendemos la teoría educativa como el conocimiento formal que se produce sobre la educación, y
la práctica educativa como la actividad que se desarrolla en los centros educativos en general. La
teoría remite a una elaboración sistemática de ideas contrastadas por las comunidades científicas, y
la práctica al conjunto de actividades desarrolladas en la realidad concreta de las aulas.
La difusión de unos saberes para aprender a enseñar fue lenta; de hecho, bien entrado
el siglo XX todavía se podían encontrar maestros sin título. Es a partir de ese momento cuando se
comenzó a visualizar una ruptura teoría-práctica, y se inició tímidamente una situación de
alienación profesional del profesorado.
Hoy día es posible hablar de una profunda fragmentación de la realidad educativa que se ha venido
fraguando históricamente. Ante este panorama cabe plantearse cuál será la respuesta más adecuada
para favorecer las relaciones teoría-práctica.
Por lo que respecta al acceso al puesto de trabajo, el profesorado de secundaria debe superar una
oposición que no exige el desarrollo de investigación, sino más bien el dominio de un temario.
El maestro que trabaja en un centro de educación infantil o primaria tiene una mayor carga docente
que los profesores universitarios y de secundaria, lo que repercute en mayores dificultades a la hora
de afrontar la profesión con un compromiso investigador y reflexivo: un docente de educación
infantil o primaria dedica alrededor de 25 horas semanales a dar clase, mientras que en secundaria
ese número de horas es menor, y en la universidad el profesorado no suele superar las 240 horas
docentes anuales.
Si tenemos en cuenta que la finalidad última de unos y otros es mejorar la enseñanza, parece
evidente que hay que tratar de hacerles confluir de algún modo.
Diversos autores preocupados por esta ruptura teoría-práctica han realizado esfuerzos para clarificar
modelos concretos de relación entre esos dos ámbitos, tanto en el espacio nacional como en el
internacional, a lo largo de las últimas décadas.
• La simplificación y el reduccionismo.
En cambio, el nuevo conocimiento profesional que demandan se caracteriza por las siguientes
notas:
Entre estas cuatro variables se configura el conocimiento del profesorado (el saber académico, los
principios y creencias, las teorías implícitas y las rutinas y guiones de acción):
Este autor plantea algunas causas de esta ruptura que pretende superar con su
modelo (Korthagen, 2007; Korthagen y Kessels, 2009):
• La cantidad de estímulos que pautan la acción docente: el contexto del centro, el currículo, el
grupo de alumnos, etc.
Dentro de este enfoque crea el modelo ALACT de relación teoría-práctica, que toma el nombre de
las iniciales de sus cinco fases principales.
• La quinta guarda relación con la emisión de un juicio sobre la acción nueva y, por lo tanto, es el
punto de partida de un nuevo ciclo.
Para superar la ruptura teoría-práctica el autor plantea que es necesario emprender varios caminos
de encuentro entre ambas realidades, es decir, construir una "pequeña pedagogía": "la región" a
medio camino entre la práctica docente en la escuela y la teorización académica; un lugar fronterizo
y complejo recorrido por múltiples caminos de ida y vuelta.
Las relaciones entre la teoría y la práctica educativas son posibles, si bien suelen ser más difusas de
lo deseado. En la superación de la ruptura teoría-práctica no hay recetas. Son muchas las causas de
la ruptura, no todas se conocen todavía y se encuentran relacionadas dialécticamente entre ellas
(Klein, 1992).
El problema de que la universidad y la escuela sean contextos que cultivan la teoría ola práctica
respectivamente, puede ser superado a través de la propuesta de Huberman y Levinson (generar
acuerdos entre instituciones y profesionales de las mismas) y de Korthagen (buscar asesoramiento
en la universidad para el desarrollo de procesos de autoevaluación en centros).