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Doctrinas Informe de Lectura

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DOCTRINAS FUNDAMENTALES DE LA

FE
TRABAJOS
Trabajo a entregar

- D e b e r á hac er l e c t u r a de los l i b r os m e n c i o n a d o s y

c o m e n - tar uno de e l l o s en no m e n o s de 800 p a l a b r as.

CRISTIANISMO BÁSICO DE JOHN STOTT –Informe-

En este libro John Stott tiene el propósito es sentar las bases del cristianismo centrado en la

figura de Jesús a través de la evidencia histórica apelando a razonamiento del lector. Este

libro es pues, una guía para quienes buscan entender la fe cristiana de forma clara y objetiva.

Es Dios y no el hombre quien toma el primer paso, pues “la religión de la Biblia es la religión

de la iniciativa de Dios” Si bien la necesidad de la naturaleza del ser humano finito es

entender y conocer las cosas. Es Dios quien se da a conocer a través de la creación,

revelación y salvación. El autor se centra en la figura de Jesucristo, ya que no basta que Dios

se haya revelado. Dios habló y actuó en Jesucristo a favor del ser humano pecador y de esto

trata el evangelio. Esta iniciativa de Dios en Cristo demanda una respuesta del hombre, que

el hombre busque a Dios con sinceridad, con razón, humildad, no solo para creer, sino para

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obedecer.

LA PERSONA DE CRISTO

En esta parte, se enfoca en

ver el carácter de su persona y establecer su divinidad como Dios y Mesías, tanto en su

naturaleza divina como humana.

Mientras que los maestros del mundo o fundadores religiosos no pretendían ser el centro del

mensaje, Jesús hablaba de sí mismo como la verdad y el mensaje. Jesús tomaba todas estas

atribuciones porque “Jesús estaba convencido de su propio lugar central en el propósito de

Dios” (pág.27).

Esta parte trata de la pretensión clara de Jesús de identificarse como Hijo de Dios, es decir al

mismo nivel que el Padre, siendo Dios mismo. Tambien Jesús asumió prerrogativas

exclusivas de Dios, como perdonar pecados, otorgar vida, enseñar la verdad con autoridad

propia y juzgar al mundo.

Las vemos a través de milagros que son “parábolas actuadas de Jesús” (pág.34) de forma

que dramatizan su divinidad y su condición de Mesías.

El carácter de Cristo: El autor dice “La convicción del cristiano acerca de Cristo recibe fuerza

del hecho de que él parece ser lo que pretende ser” (pág.37). El autor habla del carácter de

Cristo y sus pretensiones que son confirmadas por la impecabilidad de Cristo.

Jesús se mostraba en una condición singular y única, libre de pecado y en perfecta voluntad

al Padre, a diferencias de la clara condición pecaminosa de la humanidad.

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John Stott concluye con estas palabras “La conclusión final de todo el asunto es esta: Jesús

fue sin pecado porque estuvo libre del egoísmo. La ausencia del egoísmo es amor. Y Dios es

amor.” (pág.47)

La resurrección de Cristo: En esta parte, se examina la evidencia de la resurrección histórica

de Cristo. El autor trata con el hecho de que el cuerpo muerto de Jesús había desaparecido

del sepulcro y nos presenta algunas teorías que tratan de explicar el hecho desde otras

perspectivas. Aquí el autor debate estas teorías una a una.

John Stott considera el cambio de actitud de los discípulos, de hombres temerosos y

desilusionados tras la muerte su maestro, emergen en los Hechos como hombres dispuestos

a morir y dispuestos a transformar el mundo entero por Cristo. Tal cambio es imposible solo

por fuerza humana, a no ser que el mismo Cristo resucitado se les apareciera, como lo

confirma las Escrituras.

LA NECESIDAD DEL SER HUMANO. En esta parte, el autor nos lleva a considerar a partir de la

obra de Cristo como Salvador de los pecadores, nuestra condición “quienes somos así como

quien es él” (pág.67). La impecabilidad de Jesús radica en que él es Dios y nosotros los

humanos somos pecadores.mResume que el pecado es universal, todos somos pecadores. La

Biblia describe el pecado “desde el punto de vista negativo, es una omisión” (pág.70) un

error, es la maldad interna del hombre que nos condena a nosotros mismos. “Desde el punto

de vista positivo, el pecado es una transgresión” (pág.70). También advierte que pueden

existir personas que esto les cause sorpresa, porque “nuestro sentido de fracaso depende de

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la altura a que hemos colocado nuestras normas” (pág.71).

LA OBRA DE CRISTO,

John Stott comienza con una excelente frase, “El cristianismo es una religión de rescate”

(pág.91) Es la iniciativa de Dios en Cristo para salvar a los pecadores, por lo que el tema

central de la Biblia trata de la salvación del hombre a través del sacrificio de Cristo.

“prefiguraron el sacrificio de Cristo en un símbolo visible” (pág.93), es a través de la muerte

que Dios perdona pecados, por eso era necesario la muerte de Cristo porque su sacrificio era

necesario para la salvación.

Esto implica que debemos tomar la cruz de Cristo como inspiración y a su muerte como

nuestro ejemplo para nosotros mular una vida de sacrificio hacia él. Jesucristo nos ofrece

cambiar no solo nuestra posición delante de Dios, también lo hace con nuestra naturaleza

pecaminosa, a través del poder del Espíritu que derrota el poder de la carne.

El autor se centra en afirmar que el cristianismo no es solo meras afirmaciones, tenemos la

responsabilidad de entregarnos a la salvación en Cristo, pero también a la exigencia de Cristo

“Si él ofrecía a los hombres su salvación, también exigía su sumisión” (pág.120). Debemos

calcular el costo del llamado de ser discípulos de Cristo, ya que Cristo nunca rebajo sus

normas y condiciones.

El llamado a seguir a Cristo. Cristo lo dijo en una palabra “Sígueme” (pág.121) lo que

involucra obedecerle e identificarse con su causa. Significa poner a Jesús en primer lugar en

la vida, sobre todo y todos. Esto es en primer lugar, es renunciar al pecado. Es decir, tener

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arrepentimiento (fe en Cristo). En segundo lugar, es una renuncia al ego. Es decir, todos los

derechos sobre nuestra vida (incluido el hogar, el matrimonio, el dinero y el tiempo),

renunciar a nosotros mismos y a nuestras pretensiones egoístas. De esta manera,

reconocemos a Cristo como nuestro Señor ya que es evidencia de conocerlo como nuestro

Salvador. Haciendo esto somos siervos de Cristo, para servir en toda área de nuestra vida.

Ser hijo de Dios involucra ciertas obligaciones, como crecer en entendimiento y santidad a

través de una vida de rectitud. Para crecer en la vida espiritual, el autor considera que hay

tres secretos; Nuestro deber para con Dios, crecer en conocimiento y la autodisciplina de leer

la Palabra y orar. Para con la iglesia, es bautizarte y unirte a una iglesia local. Para con el

mundo, es apoyar a los necesitados y evangelizar. “Esta es la vida del discipulado a la cual

nos llama Jesucristo” (pág.155)

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