El documento analiza la condición de la mujer y cómo ha sido definida históricamente como 'el Otro' en relación al hombre. Plantea que la feminidad es un constructo socio-cultural y no una esencia inmutable, y que la mujer sufre opresión al verse limitada a la inmanencia mientras se le niega la trascendencia.
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El documento analiza la condición de la mujer y cómo ha sido definida históricamente como 'el Otro' en relación al hombre. Plantea que la feminidad es un constructo socio-cultural y no una esencia inmutable, y que la mujer sufre opresión al verse limitada a la inmanencia mientras se le niega la trascendencia.
El documento analiza la condición de la mujer y cómo ha sido definida históricamente como 'el Otro' en relación al hombre. Plantea que la feminidad es un constructo socio-cultural y no una esencia inmutable, y que la mujer sufre opresión al verse limitada a la inmanencia mientras se le niega la trascendencia.
El documento analiza la condición de la mujer y cómo ha sido definida históricamente como 'el Otro' en relación al hombre. Plantea que la feminidad es un constructo socio-cultural y no una esencia inmutable, y que la mujer sufre opresión al verse limitada a la inmanencia mientras se le niega la trascendencia.
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Simone de Beauvoir
Qué es ser una mujer?
Agnes Garda -Ser mujer es nacer de sexo femenino -Vivir en cuerpo de mujer -Soy un cuerpo de mujer -Tener una cabeza de mujer-pensar diferente que el hombre -No soy un hombre sin pies ni cabeza -Soy única pero soy todas las mujeres -No todas quieren ser madres -Cómo ser mujer más allá de la opinión de los hombres -Qué es el cuerpo de la mujer? -Cómo vivir el sexo? Contradicción (cúbrete/expon)
Si quiero definirme, estoy obligada antes de nada a declarar: Soy una mujer. Un hombre jamás comienza por preguntarse como individuo de un determinado sexo, ser hombre lo da por supuesto. Señala que a las mujeres se les denomina el sexo y se las identifica como un ser sexuado, la mujer se determina y diferencia con relación al hombre, la mujer es lo inesencial frente a lo esencial. Él es el sujeto, él es lo absoluto, ella es lo Otro.
ALTERIDAD/ SER EL OTRO
Señala la importancia de la alteridad, concebida como una categoría fundamental del
pensamiento humano, ninguna colectividad se define jamás como Una sin colocar inmediatamente frente a otra. Se pregunta cómo la reciprocidad no se haya planteado entre los dos sexos, que uno de los términos haya afirmado como el único esencial, negando toda relativadad con respecto a su correlativo. Porqué no se pone en discusión la soberanía masculina? De dónde le viene a la mujer esta sumisión? Siempre ha habido mujeres, si remontamos a la historia siempre la veremos subordinadas al hombre, su dependencia no es el resultado de un acontecimiento o de un devenir no es algo que haya llegado, algo accidental. Las mujeres no son una comunidad, no se congregan en una unidad a diferencia de los proletarios, pues carecen de una historia común, de un pasado, de una religión propia, una solidaridad, trabajo, intereses, promiscuidad espacial. La división de los sexos es un hecho biológico, no un momento en la historia. La mujer es lo otro en el corazón de una totalidad cuyos dos términos son necesarios el uno para el otro. AMO-ESCLAVO
Utiliza el concepto del amo-esclavo para explicar que las mujeres siempre han sido sino la esclava del hombre al menos su vasalla, los dos sexos jamás han compartido el mundo en pie de la igualdad. Encuentra dificultades en el reconocimiento igualitario de sus derechos, a nivel económico constituyen dos castas distintas (hombres situaciones más ventajosas, salarios elevados, ocupan más puestos, prestigio a través de la educación del niño). Cuando las mujeres empiezan a participar en el mundo, es mundo pertenece a los hombres, ellos no lo dudan, ellas lo dudan apenas. COMPLICIDADES
Las mujeres no se niegan a ser el Otro, porque sería renunciar a las complicidades con el hombre, y las ventajas que la alianza con la casta superior. El hombre soberano protegerá materialmente a la mujer-ligia y se encargará de justificar su existencia. Así evita ella el riesgo metafísico de una libertad que debe inventar sus fines sin ayuda, se evita la angustia y tensión de una existencia auténticamente asumida. La mujer experimenta el lazo necesario que le une al hombre sin plantearse reciprocidad alguna y se complace en su papel del Otro. La cuestión de las mujeres es ociosa porque la arrogancia masculina la ha convertido en disputa, ya no razona bien. Es necesario rechazar las vagas nociones de superioridad, inferioridad o igualdad que han alterado las discusiones y empezar de nuevo Cómo plantear la cuestión? Quiénes somos nosotros para plantearla
Manifiesta que algunas mujeres están mejor situadas, se les han restituido los privilegios del ser humano, muchas ya no sienten la feminidad como un estorbo o un obstáculo Qué oportunidades nos han sido dadas? Cuáles nos han sido denegadas?
Es imposible no tomar partido, la forma de plantear las cuestiones suponen jerarquías
de intereses, no hay descripción supuestamente objetiva. MORAL EXISTENCIALISTA/ TRASCENDENCIA/IMANENCIA
Se plantea la perspectiva de la moral existencialista. Todo sujeto se plantea
concretamente a través de proyectos, como una trascendencia, no alcanza su libertad sino por medio de su perpetuo avance a otras libertades. Cada vez que la trascendencia recae en imanencia hay degradación de la existencia en sí. Es una falta de moral si es consentida por el sujeto; si le es infligida toma la figura de frustración u opresión. Todo individuo que tenga la preocupación de justificar su existencia experimenta esta como una necesidad indefinida de trascenderse. La mujer se descubre y se elige en un mundo donde los hombres le imponen que se asuma como lo Otro se pretende fijarla en objeto y consagrarla a la imanencia, ya que su trascendencia será perpetuamente trascendida por otra conciencia esencial y soberana. El drama de la mujer consiste en ese conflicto entre la reivindicación fundamental de todo sujeto que se plantee siempre como lo esencial y las exigencias de una situación que la constituye como inesencial. Cómo puede realizarse un ser humano en la situación de la mujer? Qué caminos tiene abiertos? Cómo encontrar la independencia en el seno de la dependencia? Qué circunstancias limitan la libertad de la mujer? Puede superarlas?
Definirá las oportunidades no en términos de felicidad sino de libertad.
HERRAMIENTAS
Analiza la biología, el psicoanálisis y el materialismo histórico sobre la mujer. Analiza
la realidad femenina y por qué ha sido definida como lo Otro y cuáles han sido las consecuencias desde el punto de vista de los hombres, luego analizará desde el punto de vista de las mujeres el mundo como se les propone. Su herramienta de investigación es el hecho de ser mujer. Segundo la herramienta hermenéutica en su forma de entender las nociones libertad/situación. Hay situaciones constrictivas que sistemáticamente impiden el ejercicio de la trascendencia, que constriñen a caer a la imanencia, a este tipo de mal moral la autora lo denomina “opresión”. Las mujeres sufren opresión de diferentes escalas e instancias, ocupan un lugar subordinado, las mujeres están del lado de los que tienen que obedecer las normas morales y jurídicas creadas por hombres, se nos describe como pasivas, inconstantes, todo sentimiento y sensibilidad. Se nos atribuyen roles: cocinera, cuidadora de la familia, se nos asigna cánones de belleza y moda. Tercera herramienta: el cuerpo como elemento de la situación. El cuerpo de la mujer está más atado que el de los hombres al rol de la reproducción, se vuelve un obstáculo para la trascendencia pero no determina nuestro destino (anticonceptivos, leyes despenalizadoras del aborto). CONCLUSIONES
La mujer se construye, lo femenino no es una esencia, “el eterno femenino” es un
mito masculino. La feminidad es un constructo socio-cultural. La feminidad es algo artificial no natural. No es la esencia inmutable ni la elección culpable lo que han condenado a la mujer a la imanencia, son cuestiones impuestas, toda opresión crea un estado de guerra, cada libertad quiere dominar a la otra (los hombres conceden la libertad a las mujeres pero de mala gana, y las mujeres replican esa desconfianza con actitud agresiva). Son dos trascendencias que se enfrentan. Se educa a la mujer sin enseñarle la necesidad de asumir por sí misma su existencia, y ella se abandona de buen grado contando con la protección, el amor, la ayuda y la dirección de otro. La disputa durará en tanto hombres y mujeres no se reconozcan como semejantes. Con mala fe, los hombres consideran que tienen autoridad para establecer que la mujer ha querido el destino que le han impuesto.
