Tema 12. Pavimentos de Hormigón
Tema 12. Pavimentos de Hormigón
Tema 12. Pavimentos de Hormigón
Pavimentos de hormigón
Los primeros tramos españoles datan de 1915 y se encontraban en Canarias y Barcelona. Hubo
algunas realizaciones en las décadas de 1920 y 1960, es a partir de 1970, con la construcción de la
autopista Sevilla-Cádiz, cuando los pavimentos de hormigón empiezan a emplearse con
continuidad en las carreteras españolas. Un hito fue la construcción, en 1975, del pavimento
continuo de hormigón armado de la autopista Oviedo-Gijón-Avilés.
El hormigón constituido por los áridos adecuados, 300-350 kg/m3 de cemento, una relación
agua/cemento relativamente baja y los aditivos necesarios, se fabrica, transporta, extiende,
compacta y cura. Debe resistir a la fatiga por flexión, al desgaste por el tráfico y efectos de la
helada y de las sales fundentes.
Rigidez
Son estructuras muy rígidas con gran capacidad de disipación de las tensiones verticales.
No precisa de una base o una explanada con tanta calidad como en los bituminosos
Juntas
Características superficiales
Durabilidad
Apertura a la circulación
En general, no debe realizarse antes de 7 días al tráfico de obra, y 14 al tráfico general (se
exige que la resistencia alcanzada será al menos el 80 % de la exigida a 28 días.
Conservación y rehabilitación
Son, en general, los de construcción más sencilla y de menor coste. Tienen juntas longitudinales y
transversales con o sin barras de unión.
En las juntas longitudinales se disponen con frecuencia unas barras de unión de acero corrugado
para mantener unidas las losas contiguas. Permiten el alabeo debido al gradiente térmico, pero
impiden la abertura de la junta y su escalonamiento bajo la acción del tráfico.
Las juntas transversales suponen una solución de continuidad del pavimento. El método más
usual para mejorar la transmisión de cargas entre losas contiguas consisten en disponer unos
pasadores, que son barras lisas de acero no adheridas al hormigón situadas a la mitad del espesor
de la losa, paralelas entre sí y al eje de la vía
En cambio, el llamado diseño californiano prescinde de los pasadores. Se disponen unas bases no
erosionables hormigón magro, gravacemento), unos sistemas de drenaje y unas losas cortas (de
unos 4 m) y juntas inclinadas.
Una vez compactado y protegido con un riego, se puede abrir al tráfico. Se disponen juntas
transversales formadas en fresco, cada 3 metros de distancia, para que abran un poco, mejore la
transferencia de cargas en las juntas sin pasadores y así no se reflejen a través del eventual
pavimento bituminoso.
A este grupo pertenecen los pavimentos de hormigón armado con juntas constituidos por losas,
los pavimentos continuos de hormigón armado y los pavimentos armados con fibras de acero.
Los pavimentos de hormigón armado con juntas fueron concebidos en una época en la que las
juntas constituían la zona más débil y un problema de conservación, por lo que parecía
conveniente reducir el número aumentando la longitud de las losas. La misión de las armaduras,
que se colocan en la mitad superior de la losa, no es estructural, sino la de mantener cosidas las
fisuras transversales que inevitablemente aparecen en las losas largas. Este tipo de pavimentos ha
caído prácticamente en desuso debido a que su mayor coste no está compensado por una mayor
calidad.
Los pavimentos de hormigón armado con fibras de acero se empezaron a emplear hace algunas
décadas en aplicaciones en las que el elevado coste de este tipo de material es compensado por
sus características: aumento de la resistencia a tracción y a la fatiga, mejor comportamiento a
flexotracción, resistencia al impacto, durabilidad, etc. Con este material se puede reducir el
espesor del pavimento del orden de un 30% y aumentar el espaciamiento de las juntas, por lo que
en algunos casos puede resultar competitivo: pavimentos de puentes y pavimentos sometidos a
cargas muy pesadas (industriales y portuarios).
Gracias a la compresión que se introduce, se pueden construir losas de 120 m de longitud o más y
reducir el espesor del orden del 50%. Se han ensayado varios sistemas de pretensado interno
mediante cables o alambres (postesado) y de pretensado externo mediante gatos hidráulicos y
juntas neumáticas. Sólo en pistas de aeropuertos esta técnica ha encontrado alguna aplicación
debido seguramente a que no presentan curvas ni en planta ni en alzado como las carreteras, ya
que existen una mayor posibilidad de ahorro en el espesor de la losa y, finalmente, a la diferente
organización de la conservación.
12.3.5. Adoquinados
Los adoquines o bloques de hormigón tienen unas dimensiones que permiten ser manejados con
una sola mano, con forma muy variadas, pudiendo haber o no un cierto encaje entre los bloques,
el cual puede ser a su vez horizontal o vertical. Se apoyan en una capa de nivelación de arena de
unos 30 mm, que tiene asimismo una función drenante. Normalmente, se dispone una base de
hormigón magro o suelocemento para tráficos pesados y de zahorra para tráficos medios y
ligeros. En las juntas entre bloques se introduce arena por vibración con la que se consigue cierta
imbricación, incluso en el caso de bloques sin encaje. Los adoquinados de hormigón se emplean
fundamentalmente en zonas urbanas, portuarias, industriales, etc. Tanto para tráfico ligero
(peatonal incluso) como para el más pesado que pueda existir.
Los áridos no necesitan ser triturados, por lo que con frecuencia son gravas y arenas naturales,
con lo que se mejora la trabajabilidad del hormigón. El tamaño máximo de los áridos no debe
superar los 40 mm para evitar segregaciones.
12.5. Proyecto
Debido a su rigidez, bajo un pavimento de hormigón no es imprescindible en principio un cimiento
de elevada capacidad soporte. Las presiones verticales bajo la losa son muy pequeñas: las
máximas no suelen superar los 0,035 MPa con una carga interior de 56 kN sobre una losa de 20
cm, aunque son algo mayores en los bordes y en las esquinas.
Por tanto, se le pide a la explanada, o en general a la capa de apoyo del pavimento, que sea
uniforme en su capacidad de soporte y estable en el tiempo bajo la acción del tráfico y de los
agentes atmosféricos. Los principales problemas relacionados con la explanada son:
b) Acción de la helada, en zonas muy frías (con temperaturas medias diarias del aire
inferiores a 0ºC durante varias semanas o meses al año) y con suelos susceptibles a ella:
limos, arenas limosas y arenas muy finas.
los bordes del pavimentos, es necesario que el tráfico sea pesado y haya agua bajo la losa,
además de un suelo fino que tenga un elevado porcentaje de partículas inferiores a 80
mm y un índice de plasticidad apreciable.
En lo referente a las subbases, deberían disponerse siempre que la explanada fuera plástica (IP >
10) y para asegurar además una adecuada compactación de la base en tiempo lluvioso. Se
emplean materiales granulares no triturado o suelocemento donde los materiales locales son
demasiado finos o plásticos o bien se estabiliza la capa superior del cimiento. Si la intensidad de
los vehículos pesados es baja, las subbases se denominan bases, dado que el pavimento se apoya
directamente sobre ellas.
12.6. Ejecución
La ejecución de un pavimento de hormigón consta esquemáticamente de las siguientes fases:
Transporte
Puesta en obra
Todas estas fases deben someterse a unos procesos de control de calidad, que igualmente deben
aplicarse al pavimento ya terminado.
Es esencial una buena regularidad de la superficie, no dañada por el tráfico de obra y poco
erosionable.
Para el buen funcionamiento del proceso de fabricación del hormigón es preciso contar con unos
acopios suficientes de los diferentes componentes.
Las centrales de fabricación son de mezcla discontinua. Su capacidad de producción debe ser tal
que pueda alimentar sin interrupción al equipo de extendido.
12.6.3. Transporte
La puesta en obra de los pavimentos de hormigón vibrado se realizaba hasta hace unos años con
trenes de hormigonado constituidos por unas máquinas que ruedan sobre encofrados metálicos
afianzados y nivelados.
Las máquinas modernas están dotadas de unos dispositivos para la introducción semiautomática
de los pasadores en las juntas, sin que la pavimentadora tenga que detenerse. También colocan
automáticamente las barras de unión.
Figura 12.4. Pavimentadora de encofrados deslizantes: elementos para la colocación del hormigón
EL acabado del hormigón fresco suele requerir el empleo de unos fratases ancho de mango largo
para la eliminación de la lechada superficial. En carreteras de alta velocidad de circulación, la
macrotextura superficial más frecuente en España se obtiene mediante un estriado longitudinal,
por el paso de unos cepillos metálicos o de plástico.
Si las juntas no son premoldeadas, se forman por serrado de una ranura con sierras
autopropulsadas, las cuales están dotadas de discos de diamante o de carborundo, cuya elección
y rendimiento están relacionados con el tipo de árido utilizado en el hormigón.
Por un lado, en el artículo 550, se engloban los pavimentos formados por un conjunto de losas de
hormigón en masa o los de losa continua de hormigón armado.
Con respecto a los tipos que propone, en función de la resistencia a flexotracción, son los
siguientes:
Este tipo de hormigón se corresponde al descrito en el tema 10 en el apartado 10.9.5. Otras capas
tratadas, dentro del punto Hormigón magro, bajo el nombre de Hormigón magro vibrado. Se
trata, en esencia, de una capa de base sobre la que se extenderá el pavimento de hormigón. No
se establecen tipos, pero sí entre que valores a alcanzar por la resistencia a compresión simple a
28 días, no inferior a 15 MPa.