Fotosintesis
Fotosintesis
Fotosintesis
Fot
osín
tesi
s
INTRODUCCIÓN
¿Has abrazado a un árbol últimamente? Si no, quizás sea buena idea que lo consideres:
tú, junto con el resto de la población humana, debes tu existencia a las plantas y a
otros organismos que capturan energía de la luz. De hecho, gran parte de la vida en la
Tierra es posible debido a que el sol proporciona energía de forma continua a los
ecosistemas.
Todos los organismos, incluidos los seres humanos, necesitan energía para provocar
las reacciones metabólicas del crecimiento, desarrollo y reproducción. No obstante, los
organismos no pueden utilizar energía de la luz directamente para sus necesidades
metabólicas, ya que esta primero debe convertirse en energía química mediante el
proceso de fotosíntesis.
¿Qué es la fotosíntesis?
Energía. Las moléculas de glucosa sirven como combustible para las células: su
energía química puede obtenerse a través de procesos como la respiración
celular y fermentación, que genera trifosfato de adenosina —una molécula
pequeña portadora de energía— para las necesidades de energía inmediatas de
la célula.
Las plantas son los autótrofos más comunes en los ecosistemas terrestres.
Todos los tejidos verdes de las plantas pueden fotosintetizar pero, en la mayoría de las
plantas, la mayor parte de la fotosíntesis ocurre en las hojas. Las células de una capa
intermedia de tejido foliar llamada mesófilo son el principal lugar donde ocurre la
fotosíntesis.
En casi todas las plantas hay unos pequeños poros llamados estomas en la
superficie de las hojas, los cuales permiten que el dióxido de carbono se difunda hacia
el mesófilo y el oxígeno hacia el exterior.
La fotosíntesis en las hojas de las plantas implica muchos pasos, pero puede
dividirse en dos etapas: las reacciones dependientes de la luz y el ciclo de Calvin.