Análisis Documental I

Apunte de Clase 1
1
Temas. Definiciones de:

o 1. Cadena Documental
o 2. Análisis Documental
o 3. Organización del conocimiento

Objetivos:

- Incorporar las definiciones de Cadena Documental, Organización del

Conocimiento y Análisis Documental
- Reconocer las tareas que se realizan en la Cadena Documental
- Identificar las tareas puntuales del Análisis Documental: clasificación,
indización
- Introducir vocabulario técnico referido a la asignatura Análisis Documental I

Tema 1.
A modo de introducción…
La Bibliotecología (también denominada Biblioteconomía o Documentación)
forma parte de las Ciencias de la Información.
Para Shera (1968) “es una actividad profesional que comprende el conjunto de
organismos, operaciones técnicas y principios que dan a los documentos gráficos
el máximo de utilidad humanamente posible, es decir, la utilidad social máxima en
beneficio de la humanidad”

El diccionario ODLIS (2004), define la Bibliotecología (librarianship) como “la

“profesión” dedicada a aplicar la teoría y la tecnología a la creación, selección,
organización, administración, preservación, diseminación y utilización de
colecciones de información en todos sus formatos. En EEUU es sinónimo de
ciencia bibliotecaria (library science)”

¿Sabe usted qué otras disciplinas forman parte de las Ciencias de la Información?

Biblioteca = Unidad de Información

Se utiliza el concepto de Unidad de información por considerarlo más abarcativo,
ya que se puede aplicar a varias organizaciones dedicadas a gestionar
información en diferentes soportes para hacerla accesible a quien/es la necesite/n.
Entonces serán unidades de información las bibliotecas, los museos, archivos,
centros de documentación, centros de información, etc.
Pero ¿cuáles son las tareas que se realizan en una Unidad de información
(Biblioteca) para que la información esté accesible a cualquier persona que la
requiera?

Veámoslo analizando la cadena productiva de esta organización (Biblioteca)

La Cadena Documental

Llegada del recurso Consulta del recurso

por parte
(documento) del usuario

La Cadena o proceso documental comprende toda el área productiva de una

Unidad de Información y contempla una serie de tareas básicas, cuyo fin último
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será poner al alcance de los usuarios los recursos de información de la biblioteca

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(unidad de información). Por tanto, es una cadena que finalmente agrega valor a lo
que produce y a lo que brinda como servicio

La podemos encontrar con diferentes denominaciones. Aquí tenemos un cuadro

similar al que propone la autora Claire Guinchat:

Veamos una a una las tareas de la Cadena Documental (sistema).

En la fase 1, de recogida o Gestión de la colección (éste último es la forma más

utilizada en la actualidad), encontramos las tareas de localización y selección de
los recursos de información.

La localización: de acuerdo al tipo de unidad de información, las necesidades de

sus usuarios y la política de gestión de colecciones de la biblioteca, se trata de
ubicar los recursos de información que se desean añadir a la colección. Para esto
se pueden utilizar varias herramientas, tales como:

a. Catálogos comerciales de editoriales, distribuidoras y librerías.

b. Bases de datos de publicaciones de distinta naturaleza.
c. Contacto con las entidades o personas que producen literatura gris.
d. Bibliografías nacionales o temáticas.
e. Repertorios bibliográficos.
f. Peticiones de usuarios.

La selección: se trata de la toma de decisiones acerca de qué recursos añadir a

la colección y/o qué recursos expurgar o retirar de la colección. (Selección positiva
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/ selección negativa). El expurgo o selección negativa puede consistir en retirar de

3
forma temporaria o permanente determinado material. Esta tarea deberá
realizarse con criterios previamente consensuados y establecidos en el documento
denominado “Política de gestión de colecciones”. El objetivo siempre será brindar
a los usuarios los recursos que necesiten, ofrecer una colección viva.

¿Cuáles pueden ser algunas de las razones por las que se realiza el expurgo o
selección negativa?

1. Mantener la pertinencia de la colección eliminando los documentos no

utilizados. Criterios de pertinencia, obsolescencia, etc.
2. Evitar la duplicidad de recursos o formatos
3. Favorecer un mejor manejo de la colección
4. Solucionar problemas de espacio
5. Eliminar ejemplares deteriorados y envejecidos

¿Cuál es el destino del material expurgado?

Si el expurgo es temporal, el material se retirará de la colección abierta al público y

se ubicará en un depósito.

Si el expurgo es definitivo, podrá tener diferentes destinos de acuerdo a lo que

disponga la Política de Gestión de Colecciones. Puede ser canjeado por otro
recurso, vendido como papel para comprar recursos necesarios, donado,
obsequiado, etc.

Adquisición: es un proceso administrativo que permite adquirir los recursos que

han sido seleccionados.

Hay varias maneras de adquirir recursos:

● Compra directa al editor, por ejemplo

● Compra indirecta a librerías, distribuidores o cualquier otro intermediario.
● Donación
● Canje
● Depósito legal (bibliotecas nacionales)
● Adquisición compartida entre varias unidades de información (redes,
consorcios)
Una vez que el recurso es adquirido por la Unidad de Información, se llevan
adelante algunas tareas tales como.

✓ Identificación del pedido

✓ Verificación del estado del documento
✓ Acuse de recibo o reclamo
✓ Registro de las peticiones satisfechas
✓ Control de facturas y pagos
✓ Inscripción en un registro de entrada
✓ Asignación del número de inventario
✓ El documento pasa al área de procesos técnicos o tratamiento

La fase 2, denominada “Tratamiento” o “Procesos técnicos” nos permitirá tomar

algunos datos de los recursos para poder identificarlos, reunirlos y localizarlos.
Aquí se ubican las tareas de:

Descripción Documental: Amat Noguera Nuria entiende que es el conjunto de

información destinada a proporcionar una referencia única y no ambigua que

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permita identificar y localizar un documento. (Documentación científica y nuevas

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teorías de la información)

Para María Rosa Garrido Arilla es una operación descriptiva en la que se exponen,
de acuerdo a determinados estándares, todas aquellas unidades informativas que
permiten identificar e individualizar formalmente cualquier tipo de documento, bajo
referencias bien precisas, que contienen los datos externos del recurso, que le
distinguen de los restantes.

El proceso de descripción reúne algunas etapas que pueden sintetizarse en las

siguientes:

-Examen previo del documento

-Definición del tipo de documento y elección de las normas adecuadas para su

descripción (esto tiene que ver con una política de gestión previamente
establecida por la Unidad de Información)

-Concreción del nivel de descripción que se requiere teniendo en cuenta que

oscilará desde el más elemental al más completo

-Identificación de los elementos necesarios para cada nivel de descripción

-Trasladar los resultados de la información al sistema informacional (catálogo,

base de datos) en el soporte elegido (manual o automatizado)

-Comprobar la exactitud de los datos extraídos

Tema 2: Análisis Documental: ésta será la tarea que nos ocupará todo el año en
nuestra asignatura. En el presente apunte ofrecemos una definición escueta ya
que en próximas clases profundizaremos y desarrollaremos el concepto.

Según Virginia Fox (2005, 24) se puede resumir como “la operación que consiste
en seleccionar las ideas informativas relevantes de un documento (o recurso de
información) a fin de expresar su contenido sin ambigüedades para recuperar la
información en él contenida”. Ya veremos que para poder realizar esta operación
existen técnicas tales como la clasificación, la indización y la condensación.

Entre los objetivos del Análisis Documental (también llamado Descripción de

contenido) se incluyen:

∙ Precisar el campo temático del documento.

∙ Clasificar los diversos temas que incluye el documento.
∙ Expresar dichos temas en términos precisos y sin ambigüedades.
∙ Traducir dichos términos a las expresiones del lenguaje documental.

De las dos operaciones (Descripción Documental y Análisis Documental) se

obtiene un producto secundario con valor agregado: el registro catalográfico, que,
junto con otros, conformará el catálogo de la unidad de información.

Condensación: es otra de las formas de describir el contenido de un recurso. Se

trata de una representación sucinta pero exacta del contenido del documento.

Almacenamiento: Es la operación consistente en ordenar los documentos en las

mejores condiciones posibles para su conservación y uso. Todo documento mal
ordenado es un documento virtualmente inexistente. En general hay dos
modalidades diferentes de almacenamiento: la primera es un sistema numérico
por el cual se asigna un número diferente a cada documento y se ordenan
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correlativamente; la segunda modalidad se basa en una clasificación sistemática

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por la cual se ordenan los documentos en función de su contenido. Para definir la
modalidad de almacenamiento y el mobiliario necesario habrá de tenerse en
cuenta la frecuencia y tipo de uso que se haga de los documentos, el espacio del
que disponemos y los agentes de deterioro que actúen sobre los documentos.
(Fuente: http://pendientedemigracion.ucm.es/info/multidoc/prof/fvalle/tema4.htm)

En la fase 3, denominada “Difusión”, aparecen las tareas de:

Búsqueda: muchas veces estará a cargo principalmente de los referencistas, es

decir, de los bibliotecarios que tienen como función la atención al público para
obras como mediadores entre los usuarios y la colección de la biblioteca. Otras
veces la búsqueda será realizada directamente por el usuario.

La búsqueda en el catálogo de la biblioteca se puede realizar gracias a todas las

tareas previas que organizan los recursos de información de modo que podamos
identificarlos y localizarlos con facilidad, gracias a un sistema de catálogo, ya sea
manual o automatizado.

La búsqueda de información forma parte del proceso de la referencia, que se inicia

con la demanda de necesidad del usuario. Luego de una entrevista se obtiene la
demanda de información exacta del usuario y se procede a realizar una estrategia
de búsqueda que suele iniciarse en la colección propia, de la biblioteca, pero que
no se limita solo a ella. Se utilizan fuentes externas, tales como catálogos de otras
bibliotecas con las que trabajemos en red, por ejemplo, y puedan facilitarnos un
préstamo interbibliotecario o en repositorios o bases de datos a texto completo,
etc.

Una vez ejecutada la búsqueda de información se evaluarán los resultados en

base a reconocer si la información es
- Pertinente: se adecua exactamente a lo que el usuario necesita
- Se produjo ruido documental, es decir, la información recuperada no se
corresponde con las necesidades informativas, tal vez se acerca, pero no es
exactamente lo que el usuario busca. Aquí tendremos que reformular la estrategia
de búsqueda.
- Silencio documental: no se recuperó nada de lo que el usuario necesita.
Difusión: en esta etapa se realiza la difusión de los productos y servicios que
ofrece la biblioteca o unidad de información.

¿Cuáles pueden ser algunos de estos productos o servicios?

Referencia rápida

Provee información precisa en un corto periodo de tiempo, utilizando una cantidad

mínima de fuentes. El servicio de referencia rápida es frecuente en todo tipo de
bibliotecas, sin embargo, constituye la mayor parte de las solicitudes recibidas en
bibliotecas públicas, populares y escolares.

Responde preguntas de información factual, como la identificación y localización

de una persona, organismo o institución, la definición de una palabra o término, el
lugar o fecha de un acontecimiento, algún dato sobre la vida o profesión de una
persona determinada, datos estadísticos, modo en que se realiza un proceso
simple, etc. También responde a preguntas breves sobre la biblioteca, sus
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orígenes, horarios, actividades, personal, etc. Que pueden bien ser contestadas
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en el área de informes, mediante algún folleto, cartelera, página web, facebook,
blog, etc. La clara señalización de la biblioteca y sus sectores contribuye a aliviar
la demanda sobre el servicio de referencia.

Las fuentes utilizadas para satisfacer este tipo de demanda forman parte de la
colección de referencia y específicamente son las obras de referencia no
bibliográficas: directorios, diccionarios, guías, almanaques mundiales,
enciclopedias, repertorios biográficos, fuentes estadísticas, entre otras.

Preguntas frecuentes (FAQs – Frecuently Asked Questions)

En el servicio de referencia se pueden identificar con anticipación algunas

preguntas que se reiteran a lo largo de la jornada de trabajo. Estas preguntas
frecuentes en general se refieren a datos de la biblioteca: horario, uso, tipo y
alcance del servicio, colección, localización de las secciones, políticas, etc.

El referencista puede anticipar y determinar las posibles preguntas, formularlas de

manera clara y sencilla, con sus respectivas respuestas completas, en un lenguaje
coloquial y directo, de fácil comprensión para el usuario. Estas preguntas y
respuestas se compilan en una lista estructurada y organizada desde las más
frecuentes hasta las esporádicas que se reiteren, o bien por el nivel de
complejidad que ofrecen sus respuestas. Estas listas deberían estar presentes en
cualquier tipo de biblioteca. El listado de FAQs cumple por lo menos tres
funciones: informar a los usuarios, ahorrar tiempo y facilitar el trabajo de los
referencistas.

Aunque lo más habitual sea hacerlas accesibles en la página web de la biblioteca,

también pueden presentarse en folletos. Se recomienda revisar y actualizar las
FAQs a medida que se presentan nuevos interrogantes.

Lo/a invito a que vea un ejemplo de FAQs en el siguiente sitio:

http://www.bibliotecaspublicas.es/murchante/pregunte.htm

Verificación de citas bibliográficas

Pretende identificar y localizar cualquier tipo de documento de forma completa en

cualquier formato o soporte, incluido en la colección de la biblioteca o fuera de
ella.

En general, los hábitos del público, de los estudiantes, docentes e investigadores

no conducen a la obtención de citas bibliográficas completas, por lo tanto los datos
brindados por el usuario pueden ser exactos, incompletos, aproximados o
erróneos y dará por resultado una búsqueda de resolución simple o compleja, en
lo que se refiere a tiempos y cantidad de fuentes consultadas.

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La verificación bibliográfica requiere que el referencista consulte las obras de

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referencia bibliográficas clásicas, tales como catálogos locales o colectivos,
índices, bibliografías, bases de datos con resúmenes, etc., con el fin de comprobar
que la cita es correcta y completa.

Este proceso de verificación de citas bibliográficas tiene por objetivo que el usuario
tenga todos los datos necesarios para localizar la obra en la biblioteca, pedirla en
préstamo interbibliotecario, consultarla en otra biblioteca o adquirirla. Si bien
ocurre en todo tipo de bibliotecas, es más frecuente en las universitarias,
especializadas y nacionales.

Obtención y suministro de documentos

Dado que uno de los propósitos de la biblioteca es dar acceso al documento, el

servicio de referencia debe, una vez realizada la verificación bibliográfica, en
primer lugar facilitar su localización y obtención mediante la consulta de su
catálogo y de los recursos disponibles en ella. Cuando el material no se encuentra
en la biblioteca es necesario recurrir a otras instancias que nos lo puedan proveer.
Estas instancias son: el servicio externo de obtención de documentos, el préstamo
interbibliotecario o la derivación de la solicitud o del usuario a otra biblioteca.

El servicio externo de obtención de documentos consiste en suscribir el servicio de

proveedores nacionales e internacionales de información que ofrecen, mediante el
pago anticipado y la firma de la licencia correspondiente, obtener el documento. El
costo del servicio dependerá del canal por el que e envíe, el volumen de
información y la rapidez que se pretenda. Este servicio se presta especialmente en
bibliotecas universitarias, especializadas y nacionales. Por ejemplo: British Library
Document Suplí Centre (BLDSC).

El préstamo interbibliotecario constituye otra elección posible y consiste en

establecer el intercambio recíproco de documentos, en general mediante
convenios formales o informales entre bibliotecas- El documento será solicitado
mediante nota, fax o correo electrónico, requiriendo completar un formulario. La
biblioteca proveedora del documento podrá suministrar el original o su copia, los
cuales serán enviados por distintos medios, como por ejemplo correo electrónico,
fax, correo postal, etc.

Con el objetivo de facilitar la implementación del servicio de préstamo

interbibliotecario se presentan aquí algunos criterios a tener en cuenta:

 Establecer un procedimiento en el marco de las políticas de la biblioteca

suministradora, las de la institución mayor y acorde a la legislación vigente
en materia de propiedad intelectual.
 Determinar los plazos del préstamo.

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 Determinar el tipo de material que se suministra y el que se excluye (obras

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de referencia, bibliografía básica/obligatoria de cátedra, material antiguo, de
difícil reposición, edición agotada, recursos electrónicos, etc.)
 Fijar políticas diferenciales para el préstamo nacional e internacional.
 Puntualizar los compromisos que tomará la biblioteca peticionaria:
presentar la cita bibliográfica correcta y completa, respetar los plazos de
devolución, hacerse cargo de los gastos ocasionados y responsabilizarse
por daño o pérdida.
 Puntualizar los compromisos que tomará la biblioteca suministradora:
informar previamente de todas las condiciones y normas involucradas en el
préstamo, responder a las solicitudes en tiempo y forma tanto por la
aceptación o el rechazo.
El préstamo interbibliotecario se presenta en todo tipo de bibliotecas, pero en
las universitarias y especializadas es más frecuente. En las redes de
bibliotecas es una constante y en el caso de las bibliotecas nacionales el
intercambio es a nivel nacional.

Cuando la biblioteca no posee el material solicitado, no suscribe un servicio

externo de obtención de documentos o no dispone del préstamo
interbibliotecario, dirigir la demanda o al propio usuario hacia otra biblioteca,
constituye otra alternativa.

Verificada la cita y localizado el material en alguna biblioteca será necesario

establecer el contacto y solicitar las instrucciones para gestionar la demanda o
derivar al usuario, quien contará con los datos necesarios para concretar la visita.

Alerta de novedades

Este servicio también es conocido con el nombre de alerta informativa, boletín de

novedades, sumarios, newsletter, entre otros. Informa a todos los usuarios acerca
de la incorporación de las adquisiciones, nuevos servicios, lecturas
recomendadas, reseñas, novedades del mercado editorial, información
institucional sobre eventos propios o externos de interés para la comunidad de la
biblioteca. El alerta de novedades debería estar presente en todo tipo de
bibliotecas. Se distribuye sin distinción a todos los usuarios por medio del correo
electrónico, se accede a través de la página web de la biblioteca y puede
presentarse impreso como folleto o incluido en la publicación institucional.

Para desarrollar este tipo de servicio es conveniente considerar la periodicidad de

entrega que puede ser a intervalos regulares, o sólo cuando alguna novedad
acontece.

Sólo por indicar un ejemplo: http://www.santurtzi.net/es-

ES/Servicios/Cultura/Paginas/BibliotecaNewsletter.aspx
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Diseminación Selectiva de la Información (DSI)

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A diferencia del servicio anterior que va dirigido a todos los usuarios, la DSI
distingue su distribución de acuerdo a los perfiles de interés previamente
definidos. Se puede llamar también difusión selectiva de la información o servicio
de puesta al día, ya que está destinado a facilitar la actualización del campo de
interés de los usuarios involucrados. Es común que lo utilicen investigadores y
docentes en bibliotecas universitarias y especializadas.

La DSI comprende la entrega de las citas bibliográficas, las tablas de contenido,

los resúmenes o los artículos en texto completo de acuerdo al perfil de interés de
cada usuario/a. Antes de la aparición de los recursos electrónicos en línea, el
servicio se realizaba en forma manual.

En algunos sistemas de gestión bibliotecarios, el referencista ejecuta

periódicamente el perfil definido con antelación para cada usuario y hace que éste
reciba el resultado obtenido por correo electrónico.

En los recursos en línea, el referencista o el propio usuario pueden definir la

estrategia de búsqueda y luego determinar la periodicidad de actualización
automática del perfil. El resultado de búsqueda renovado será enviado por correo
electrónico a la dirección seleccionada. La modificación del perfil requiere la
definición de nuevos parámetros y para la interrupción de este tipo de servicio es
necesario cancelar la DSI establecida. Antes de que el perfil se actualice existe la
posibilidad de ingresar al servicio, ejecutarlo y recibir anticipadamente un
resultado.

Podemos ver un ejemplo:

http://bibliotecanacional.gov.co/content/diseminaci%C3%B3n-selectiva-de-
informaci%C3%B3n-dsi

Guía de lectura

Surge a finales del siglo XIX sobre la base del concepto amplio de la asistencia
personal a los lectores promovida por los pioneros de la bibliotecología en los
Estados Unidos. Involucraba sin distinción servicios que hoy son conocidos con el
nombre de referencia general, formación de usuarios, DSI y compilación de
bibliografías sobre un autor o tema específico. Este tipo de guía de lectura tuvo su
auge en la década de 1930 y con esa diversidad desapareció en la década de
1950.

En la actualidad su alcance se limita al asesoramiento para graduar la lectura de

un autor o de un tema que es de gusto o interés personal de un usuario.

Se desarrolla con más frecuencia en las bibliotecas públicas, populares, escolares

y especiales, donde el bibliotecario identifica materiales de ficción para satisfacer
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Análisis Documental I

necesidades de recreación. En las bibliotecas académicas y especializadas se

10
relaciona con el asesoramiento para el trabajo intelectual y la investigación.

Los materiales identificados pueden ser transmitidos al usuario en forma verbal o

plasmados en un listado, en ese sentido se aproxima a la compilación bibliográfica
pero con menor rigurosidad. Así entendido, es un servicio que requiere tiempo y
atención personal de parte del bibliotecario y un conocimiento profundo de la
colección, del usuario y su nivel de lectura. Aunque existen listados de los “libros
más leídos”, “los mejores libros de la literatura universal”, etc., estos recursos
pueden ayudar al bibliotecario en la selección, pero lejos están de cubrir las
necesidades particulares de cada usuario.

Puede encontrar un ejemplo de guías de lecturas en el siguiente sitio:

http://www.fundaciongsr.com/539/

Biblioterapia

La biblioterapia, también conocida como lectura dirigida o autoayuda guiada,

considera a los libros como potenciales medios para apoyar tanto el crecimiento
personal, como la rehabilitación de pacientes con problemas emocionales o
conductuales.

Así como la musicoterapia se vale de la música, otros recursos también podrían

contribuir al fin terapéutico, tales como películas, documentales, literatura de
ficción, didáctica, poesía, compilaciones de citas y frases, entre otros.

Desde la Antigüedad se asoció la lectura con el tratamiento médico y en la Edad

Meda se amplió a la órbita espiritual. En la actualidad, la biblioterapia es una
práctica interdisciplinaria, aplicada a individuos o grupos, pequeños y
homogéneos. Sienta sus bases sobre la logoterapia (corriente humanista-
existencial), que la plantea como una técnica ordenada en torno a un recurso
potencialmente terapéutico -el libro- que encierra un contenido convocante para la
persona que lo recibe, quien se apropia de este sentido y lo recrea1.

Su objetivo es ayudar en un proceso de curación físico o emocional y dependiendo

de quien la aplique tomará la modalidad de:

 Biblioterapia clínica o clásica: es utilizada por facultativos médicos, psicólogos,

psicoterapeutas y el bibliotecario, como asistente del especialista en las
bibliotecas especiales, en hospitales, clínicas u organizaciones de salud mental;
con personas que presentan dificultades emocionales o de conducta (víctimas de
violencia, abuso o maltrato, por ejemplo), a fin de alentar la toma de conciencia o
el cambio de comportamiento.

1
Arias, M. L. [et. Al.] (2000). Biblioterapia En Información, cultura y Sociedad, Nº2 pp. 85-93.
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 Biblioterapia de desarrollo: es utilizada por docentes, psicopedagogos,

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asistentes sociales en colaboración con los bibliotecarios. Se emplea en escuelas,
centros comunitarios, bibliotecas escolares y públicas para promover el
autoconocimiento, el crecimiento personal y contribuir al desarrollo en las distintas
etapas de la vida.
La biblioterapia es un tipo de intervención no invasiva pero quienes la desarrollen
deben ser conscientes de los efectos que la lectura puede provocar en niños y
adultos para ayudarlos a resolver problemas, para aliviar o acompañar como
sostén en situaciones angustiosas. Favorece el proceso de cambio y reduce el
nivel de resistencia, ofrece, ante situaciones similares, respuestas alternativas,
promueve el rol activo y la independencia del paciente para recibir, descubrir el
mensaje del texto, inferir y pasar a la acción. La catarsis, el humor, la
identificación, la proyección, la transferencia y la introspección son momentos y
experiencias que puede deparar la terapia.

Ya sea en forma clínica o de desarrollo, el bibliotecario siempre cumple el rol de

asistente, no ejerciendo directamente la biblioterapia. El especialista diagnostica,
comunica las necesidades y le indica las acciones a seguir. En función de ello y
teniendo en cuenta las características del usuario, el rango erario, su formación, la
conducta informativa y sus gustos de lectura, el bibliotecario busca y selecciona
los recursos adecuados.

En este sentido y desde la perspectiva del servicio de referencia, se relaciona con

los servicios de DSI y alerta de novedades, ya que el bibliotecario colabora con los
profesionales a cargo de la biblioterapia para identificar, localizar y actualizar
información periódicamente de acuerdo a sus perfiles. Asimismo, se relaciona con
el servicio de guía de lectura cuando el bibliotecario sugiere materiales de interés.

Servicio de información y referencia comunitaria

También conocido como servicio de información local (SIL)2, servicio de

información a los ciudadanos o servicio de información para la comunidad local.
Consiste en reunir, organizar, difundir y promover los recursos de información de
una comunidad perteneciente a una localidad geográfica determinada. Son
generados por la propia administración pública, organizaciones no
gubernamentales (ONGs), por particulares o grupos referentes de la comunidad y
bibliotecas.

Dirigido a toda la comunidad, sirve a personas de todas las edades, profesiones y

condiciones: ciudadanos, turistas y personas que sin formar parte de la comunidad
local requieren información sobre la misma; grupos con necesidades especiales;

2
Díaz Grau, A. y García Gómez, F. J. (2005) Desarrollo y gestión de la colección local en la
biblioteca pública. Buenos Aires: Alfagrama.
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minorías étnicas; organizaciones educativas, culturales, sociales, políticas; al

12
sector empresarial; grupos de opinión y a la propia administración local.

La colección se compone de documentos que ofrecen los siguientes tipos de

información o datos:

 Información factual: horarios de transporte, direcciones de hospitales,

guías, mapas, agenda, acontecimientos locales, etc.
 Información administrativa: generada por la administración local,
presupuestos, normativas, edictos, bandos, informes y estudios sobre
inmigración, juventud, medioambiente, salud, educación, etc.
 Información sobre la comunidad: grupos de autoayuda, organizaciones
políticas y sociales, derechos del consumidor, minorías étnicas, servicios
para los ancianos, información turística, periódicos locales, servicios de
salud, educación, integración social, planificación familiar, empleo, planes y
ofertas de trabajo, etc.
 Recreación y ocio: televisión, cine, teatro, literatura, música, danza, ferias,
etc.
El servicio de información y referencia comunitaria contribuye a la memoria del
pueblo, preserva el acervo histórico cultural, fortalece la identidad y difunde la
cultura local. Es importante para la toma de decisiones, reduce los costos en la
administración pública, dinamiza la actividad económica para los ciudadanos y
el comercio y tiende a reducir las diferencias económico-sociales dentro de la
comunidad.

Debería presentar una estructura sencilla y de fácil consulta con información en

línea, actualizada en forma permanente. La biblioteca pública, en caso de no
ser la generadora de este tipo de servicio, sí debería cumplir con la finalidad de
promoverlo y difundirlo a todos los sectores de la comunidad, en ese sentido, el
recurso ahorrará tiempo en la búsqueda de este tipo de información.

Los bibliotecarios al frente de este tipo de servicio leerían desarrollar la

capacidad para comunicarse positivamente y cooperar con miembros de la
comunidad, reflejar la diversidad cultural en el servicio y en la colección local,
abogar por los principios del servicio público y el libre acceso a la información.

Vea este ejemplo en línea:

http://www.comfenalcoantioquia.com/Bibliotecas/ServiciodeInformaci%C3%B3nLo
cal.aspx

Formación de usuarios

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Análisis Documental I

En el ámbito bibliotecológico la formación de usuarios fue conocida originalmente

13
como instrucción de usuarios. La formación involucra un proceso integral que
permite que los usuarios usen de manera eficaz los recursos y servicios de las
bibliotecas y en un plano más amplio desarrollen competencias y habilidades para
buscar, recuperar, seleccionar, evaluar, utilizar y producir nueva información o
conocimiento. Se la debería considerar un objetivo trascendente del servicio de
referencia.

En el servicio de referencia se pueden distinguir algunas modalidades de

formación como la orientación, instrucción/capacitación y alfabetización
informacional o competencia informativa.

Orientación: el servicio de orientación puede ser considerado como el nivel de

formación más elemental. Guía al usuario en los recursos y servicios disponibles
en la biblioteca o fuera de ella de acuerdo a sus necesidades manifiestas. Se
desarrolla en un lapso temporal breve y se diferencia de la referencia rápida en
que no sólo informa, sino que además aconseja la mejor utilización del servicio y
cuáles son los recursos que más se adecuan a su perfil.

Ejemplos:

 Un usuario con cierto grado de conocimiento realiza una consulta

temática en una biblioteca pública. El bibliotecario busca las obras de
referencia pertinentes a las que tiene acceso, respondiendo la pregunta.
Además aconseja al usuario consultar la colección de una biblioteca
especializada donde podrá profundizar la búsqueda.
 El usuario intenta buscar un americanismo en un diccionario normativo 3.
Al no encontrar el vocablo, se dirige al bibliotecario quien lo orienta
hacia la utilización del diccionario adecuado, explicándole la diferencia
entre uno y otro.

Instrucción / Capacitación: la instrucción consiste en una serie de sentencias,

reglas, órdenes, que se imparten a los usuarios con el fin de que conozcan el
modo en que se utiliza un determinado recurso (sus características, accesos,
ventajas y desventajas, etc.) o bien, para esclarecer alguna problemática
resolución inmediata.

La acción de instruir implica la prolongación en el tiempo de la entrevista. En el

marco de la formación de usuarios se espera que éste, al finalizar la instrucción,
esté capacitado en el conocimiento y manejo de una herramienta específica.

3
Un diccionario normativo es aquel que refleja el punto de vista de sus autores sobre la corrección
o incorrección de los términos, excluyendo en su caso palabras que no se consideran correctas,
como sí incluye un diccionario descriptivo. Fuente:
http://www.wikilengua.org/index.php/Diccionario_normativo
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Análisis Documental I

Debido al carácter pragmático de la instrucción, el saber adquirido es mecánico y

14
efímero. Para que éste sobreviva al a inmediatez, será indispensable que el
bibliotecario produzca ayudas que contribuyan a la visualización e
internacionalización de las sentencias para transformarlas en experiencia
adquirida.

Ejemplos:

 Instrucciones para la búsqueda y recuperación de un autor en el

catálogo de la biblioteca.
 Manejo del sistema de búsqueda en una base de datos biográficos
en línea
 Cómo citar un acta de conferencia en un artículo a publicarse
 Cómo usar el Science Citation Index.

Alfabetización informacional o competencia informativa: en el pasado, la

alfabetización consistía sólo en el aprendizaje de la lectura y escritura y estaba
íntimamente ligada al lenguaje escrito y a los medios impresos. Aquél que no
supiera leer ni escribir era considerado un analfabeto, refiriéndose esta condición
a los jóvenes y adultos que no alcanzaban el nivel elemental y básico de
enseñanza. Circunscripta al aprendizaje de la lengua escrita incluida en los dos
primeros años de la escuela primaria, la alfabetización era sinónimo de
escolaridad. El analfabetismo era considerado un estigma individual asociado a la
marginalidad y la responsabilidad de educar recaía únicamente en el Estado sin
existir conciencia social en este sentido.

Con el advenimiento de una sociedad cada vez más tecnologizada, con una
economía basada mayormente en actividades de servicios y un campo laboral
exigente y flexibilizado, la alfabetización (vocablo adoptado en la década de 1980)
registró un cambio de paradigma. Actualmente es entendida como desarrollo de la
expresión y la comunicación tanto oral como escrita (hablar, escuchar, leer,
escribir, entender, interpretar) y asociada no sólo con instrumentos convencionales
sino con otros que depara la tecnología (computadora, programas de software
educativos, Internet, etc.). Esa capacidad se ha extendido a desarrollar
habilidades y competencias indispensables para resolver problemas en cualquier
ámbito y situación de la vida individual y social. La noción de alfabetización como
destreza simple y elemental, se transformó en un concepto complejo y dinámico
cuyos contextos y aplicaciones están en continua revisión y expansión.

La alfabetización informacional o competencia informativa se desarrolla en la

sociedad de la información y no se puede pensar en ella sin asociarla a otros tipos
de alfabetización como son la tecnológica y la digital.

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Análisis Documental I

Alfabetización tecnológica: se asocia a la capacidad de utilizar hardware y

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software de computadoras (correo electrónico, procesador de texto, planilla de
cálculo, procesador de imágenes, programas multimedia, entre otros)

Alfabetización digital: se relaciona con Internet y consiste en las habilidades

requeridas para navegar a través de las páginas webs, dominar los motores y
estrategias de búsqueda, publicar contenidos, conocer y diferenciar los distintos
tipos de contenidos, su calidad y fiabilidad.

Alfabetización informacional: es el desarrollo de las habilidades para encontrar,

localizar, recuperar, comprender, evaluar, utilizar y producir nueva información o
conocimiento, desde una postura ética, independiente de los soportes, los tipos de
información o la organización de los contenidos. La adquisición de destrezas
informativas forma usuarios cada vez más autónomos.

Según Tuckett4, las habilidades en alfabetización informacional aparecen

graduadas de la siguiente manera:

Destrezas de información sencillas: uso de una herramienta de información

simple, por ejemplo, el uso del catálogo de una biblioteca.
Destrezas de información compuestas: combinación de destrezas y herramientas
de información, por ejemplo, la compilación de una bibliografía mediante la
búsqueda en varias bases de datos.
Destrezas de información complejas/integradas: uso de una variedad de redes de
información, evaluando y reorganizando la información.

Búsqueda de información
El servicio de búsqueda de información se diferencia de la referencia rápida por la
complejidad y tiempo que requiere dar respuesta a la demanda. Implica la
identificación, localización y entrega de información concreta al usuario. El
referencista ejecuta la búsqueda, obtiene los resultados y luego prepara un
documento que contenga la información y las citas correspondientes. La
información entregada en cualquier formato o soporte puede estar acompañada de
la estrategia de búsqueda. Demanda dedicación y tiempo por parte del
referencista, quien además de conocer en profundidad los recursos deberá ser un
experto buscador. Este servicio se brinda frecuentemente en bibliotecas
especializadas, nacionales, universitarias.

Compilación de bibliografías

4
Tuckett, H. E. (1989). Computer literacy, information literacy and the role of the instruction
librarian. En Mensching, G. E.; Mensching, T. B. (eds.) Coping with information illiteracy:
bibliographic instruction for the information age and Ann Arbor. MI: Pieran Press. Pp. 21-31
37 Pinto, M.; Sales, D.; Martínez Osorio, P.; Planelles, E. (2009) Alfabetización múltiple desde la
Biblioteca Publica. Buenos Aires: Alfagrama.
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Análisis Documental I

Las bibliografías, como producto de la búsqueda de información en el servicio de

16
referencia se compilan con el objetivo de satisfacer una demanda puntual. El
referencista puede recibir un pedido expreso de compilación acerca de un tema o
autor. Otro propósito de la bibliografía es la difusión de un acontecimiento o un
aniversario, relacionados con hechos, lugares, personas, etc. Por ejemplo: una
bibliografía realizada en conmemoración de la Reconquista de Buenos Aires. El
producto, a diferencia de la demanda puntual, se distribuye entre todos los
usuarios o se expone en la biblioteca para que ellos mismos, si es de su interés, la
retiren.
Toma la forma de una lista ordenada de citas bibliográficas de fuentes
documentales al as cuales la biblioteca puede o no tener acceso. Las citas
bibliográficas pueden estar acompañadas de anotaciones descriptivas
(comentarios objetivos sobre el contenido o características destacables) o críticas
(juicio de valor acerca del contenido). En general, se compilan con material
localizable en la biblioteca, sin embargo, dependiendo de la demanda, el servicio
puede confeccionar bibliografías que incluyan documentos publicados no
disponibles in situ. En este último caso se sugiere señalizar la localización o bien,
las formas de consulta o adquisición.
Una entrevista de referencia exhaustiva ayuda a determinar los parámetros que
más se aproximan al a demanda del usuario, facilitando la tarea de compilación
bibliográfica. Éstos pueden ser: tema o autor, lengua, cobertura geográfica y
temporal, tipo de fuentes documentales, soportes, tipo de usuario, finalidad. Es
importante conocer la premura con la que se debe entregar la bibliografía y el
modo de entrega. La bibliografía puede realizarse de manera manual o
automática. En la actualidad existen diferentes software específicos para
compilarla. Con estos software es posible manipular, almacenar, ordenar y buscar
las citas bibliográficas allí guardadas. Ejemplos de software: Referente Manager,
Procite, EndNote,Zotero.

Elaborar una bibliografía siempre requiere de tiempo, más allá de que ésta sea
voluminosa o no. Este servicio es más común en bibliotecas universitarias,
especializadas y nacionales.

Asesoría de información para la investigación

Se desarrolla generalmente en las bibliotecas universitarias y especializadas,

donde el bibliotecario asesora al estudiante o investigador en la búsqueda de
información para la elaboración de tesinas, informes de investigación, tesis de
licenciatura, maestrías, doctorados y proyectos de investigación. Las bibliotecas
nacionales, como centros de control bibliográfico son de consulta obligada al
iniciar una investigación cuyo tema sea de alcance nacional, algunas de ellas
tienen servicios de asesoramiento especialmente organizados. En las bibliotecas

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Análisis Documental I

escolares la asesoría se brinda a los alumnos y docentes con menor grado de

17
complejidad,
A través de una entrevista pormenorizada, el bibliotecario considera las
necesidades particulares de cada usuario, teniendo en cuenta su nivel de
formación general, las técnicas de trabajo intelectual básicas y necesarias para
desarrollar la investigación que se propone, el uso que éste hace de la biblioteca,
las estrategias de búsqueda de información que emplea y su habilidad en el
manejo de las tecnologías de la información.
El bibliotecario debería estar capacitado para asistir al usuario en la identificación
y localización de documentos sobre su tema de investigación, ayudar en la
delimitación del marco teórico, los antecedentes, la introducción y herramientas
para la elaboración de accesos como tablas de contenido e índices, apéndices,
bibliografía, notas al pie, etc.
Este tipo de servicio demanda una colección in situ de referencia completa y
actualizada con énfasis en las fuentes secundarias y terciarias, con acceso a
colecciones, recursos y servicios de otras bibliotecas, y a una red de contactos
expertos.
Requiere de tiempo, encuentros individuales y sucesivos de ambos actores en
sesiones pautadas. En algunas bibliotecas el servicio se ofrece durante todo el
año o bien, en determinadas épocas relacionadas con la currícula.
Al principio puede desarrollarse en pequeños grupo, tendiendo al servicio
personalizado a medida que se avanza en la elaboración final del trabajo. Estos
programas deben ser flexibles, se recomienda mantener la privacidad de las
consultas y establecer una comunicación cara a cara.

Tema 3

El análisis documental forma parte de la organización del conocimiento. Por eso

es importante que antes de definir al Análisis Documental definamos la
Organización del Conocimiento.

Según Mario Barité (2000) la organización del conocimiento es una “disciplina de

formación reciente, que estudia las leyes, los principios y los procedimientos por
los cuales se estructura el conocimiento especializado en cualquier disciplina. (…)
El objeto de estudio de la organización del conocimiento es el conocimiento
socializado o registrado, y en lo que hace a Bibliotecología y Documentación, da
cuenta del desarrollo teórico práctico para la construcción, la gestión, el uso y la
evaluación de clasificaciones científicas, taxonomías, nomenclaturas y lenguajes
documentales”.

La autora Ingetraut Dahlberg desarrolló un sistema de clasificación que describe el

alcance de la organización del conocimiento por áreas:

1. Fundamentos teóricos y problemas generales de la organización del

conocimiento
2. Sistemas de clasificación y tesauros: estructura y construcción
3. Metodología de la clasificación y la indización
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Análisis Documental I

4. Sistema de clasificación y tesauros universales

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5. Taxonomías
6. Sistemas de clasificación y tesauros especializados
7. Representación del conocimiento por lengua natural y terminología
8. Clasificación e indización aplicada
9. Ambiente de la organización del conocimiento.
Basándonos en esta clasificación, podemos afirmar que la organización del
conocimiento se ocupa de:

● Los fundamentos teóricos y las aplicaciones prácticas del diseño y

construcción de sistemas de organización del conocimiento.
● Los fundamentos teóricos y las aplicaciones prácticas de las técnicas de
organización del conocimiento, incluyendo aquellas que usan la lengua
natural
● La influencia de otras disciplinas en la organización del conocimiento
(lingüística, terminología, etc.) y la influencia de la organización de
conocimiento en otras disciplinas y productos.
● Investigación, educación, entrenamiento, normalización, cuestiones éticas y
legales, gestión, tecnología, etc., referidos a la organización del
conocimiento, sus especialistas y organizaciones.
A esta definición, sin embargo, se le cuestiona el término “conocimiento”.

La realidad es que los datos estructurados de determinada manera, con cierta

relevancia y pertinencia pueden conformar información. Si esa información se
registra, por ejemplo en un documento impreso, estaremos hablando de
información registrada. El conocimiento, en cambio es un proceso subjetivo y
complejo que se produce en la mente de las personas. Si una persona escribe
un libro, por ejemplo, podemos decir que registró algo de su conocimiento,
pero nunca será exactamente la representación de todo el universo intelectual,
emocional, personal, vinculado a ese producto, a esa información registrada.

Quizá sería más adecuado denominarla organización de la información

registrada.

Pero lo cierto es que el término organización del conocimiento es el que se

utiliza en la actualidad por su amplia difusión y aceptación.

Existe una institución internacional, la ISKO: International Society for

Knowledge Organization (Asociación Internacional para la Organización del
Conocimiento) que lidera las investigaciones y el intercambio de experiencias
en relación a esta temática. Su propósito es “constituir un enlace de conexión -
tanto a nivel internacional como a nivel nacional- entre las diferentes
instituciones preocupadas por los problemas conceptuales que plantean la
organización y el procesamiento del conocimiento” (Fuente:
http://www.ugr.es/~isko/asociacion.htm)

Fue fundada en 1989, concebida como un círculo internacional de todos los

colegas -especialmente de aquellos procedentes de las Ciencias de la
Documentación- que trabajan en problemas relacionados con la organización
conceptual del conocimiento. Sus bases científicas residirán en el metódico
conocimiento acumulado en los campos de la Lógica, la Teoría de Sistemas, la
Ciencia de la Organización, la Psicología, la Teoría de la Ciencia, la Informática, la
Semiótica, la Lingüística y la Filosofía, especialmente la Epistemología. Por ello, la
pertenencia a ISKO es buscada por y ofrecida a representantes de estos campos
del Conocimiento, así como a quienes cultivan sus campos de aplicación.
En sus estatutos, ISKO se ha planteado las siguientes tareas: Promoción de la
investigación, desarrollo y aplicación de todos los métodos existentes para la
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Análisis Documental I

organización del conocimiento en general o en sus campos concretos,

19
especialmente mediante la integración de la investigación realizada desde
aproximaciones conceptuales a la clasificación y desde la inteligencia artificial.
ISKO hace igualmente hincapié en los acercamientos filosóficos, psicológicos y
semánticos a la ordenación conceptual de la realidad. En concreto, ISKO:

1. mantendrá al tanto de y apoyará las actividades dirigidas a promover una

mejor comprensión de la utilidad práctica y heurística de dicha organización del
conocimiento.

2. promover en un nivel nacional e internacional el intercambio de información y

experiencias entre los científicos y profesionales de este área del conocimiento,
especialmente mediante el asesoramiento en la construcción, perfeccionamiento
y aplicación de las distintas herramientas organizacionales, a saber, de los
sistemas de clasificación, tesauros, terminologías, nomenclaturas y de las
herramientas sintácticas que las acompañan.

3. observar a nivel internacional los progresos que se van realizando en el área;

4. concentrarse mediante grupos de trabajo especiales en los puntos claves de

este campo del conocimiento;

5. mantener reuniones periódicas de cara a promover estas actividades.

(Fuente: Carta fundacional, art. 4,1)

Para mayor información, visite el sitio oficial de ISKO: http://www.isko.org/ko.html

¿Por qué cree que la organización del conocimiento es importante para el

campo bibliotecológico?

Bibliografía

- Barité, M. (2000). Diccionario de organización y representación del

conocimiento [en línea]. Montevideo: El Autor. [Consulta Ene. 2017].
Disponible en la World Wide Web:
http://archivos.liccom.edu.uy/diccionario/Diccionario%20Definitivo%20%5B3
-11-13%5D.html
- Fox, V. (2005). Análisis documental de contenido. Buenos Aires: Alfagrama.
- García, I. L; Portugal, M. (2009). Servicios de referencia. En El servicio de
referencia: una propuesta integradora. Buenos Aires: Alfagrama, pp. 141-
160
- Martínez, AM y Valdez, JC (2009). Indización y clasificación en Bibliotecas.
Buenos Aires : Alfagrama. Cap. 1
- Reitz, J. M. (2004). ODLIS: Online Dictionary for Library and Information
Science Disponible en: www.lu.com/odlis/
- Shera, J. H. (1968). Sobre bibliotecología, documentación y ciencia de la
información. Boletín De La Unesco Para Bibliotecas, 22(2), 62-70
- Stubbs, E. (2016). La cadena documental. Apunte elaborado para la
cátedra Introducción a la Bibliotecología y Ciencia de la Información. La
Plata: UNLP.

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