Célula Vegetal

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Célula vegetal

Una célula vegetal es un tipo de célula eucariota que constituye los tejidos de
las plantas. Posee características como una pared celular rígida compuesta
principalmente de celulosa, que proporciona protección y soporte, además de
una membrana plasmática que rodea y controla el paso de sustancias hacia el
interior y exterior de la célula.
Según las funciones en las que se especialicen, podemos distinguir los tipos de
células vegetales.

Células del parénquima


Forman el tejido principal de los tejidos vegetales y las células que lo
componen se denominan células parenquimáticas. Son las estructuras
celulares más abundantes en las plantas, ya que puede llegar a representar el
80% de las células vivas de la misma.
Las funciones del tejido parenquimático son, dependiendo dónde se encuentre:
● Realización de la fotosíntesis.
● Almacenamiento o regeneración de tejidos.
Podemos encontrar este tejido en la mayoría de las partes de organismo
vegetal, como por ejemplo la corteza o en la pulpa de los frutos.

Células del colénquima


Forman el tejido colenquimático caracterizado por su resistencia y flexibilidad.
Las células del colénquima están vivas, tienen paredes primarias engrosadas
de forma desigual, lo que facilita su diferenciación con las células del
parénquima.
No son células tan ampliamente distribuidas por los organismos vegetales, sino
que más bien se encuentran en órganos de crecimiento, tallo y hojas de lagunas
herbáceas.

Células del esclerénquima


A diferencia de las células del colénquima, estas presentan pared secundaria
engrosada y lignificada y además, se caracterizan por ser células muertas. Su
función fundamentalmente es la de sostén en órganos que han dejado de
crecer en la planta, como el tallo u hojas.
Como curiosidad, decir que un ejemplo de células esclerenquimáticas son esos
gránulos que notamos al comernos una pera, concretamente, son esclereidas,
un tipo de células esclerenquimáticas.

Células de floema. Son células que conducen materiales alimenticios, esto


es, carbohidratos en disolución que se forman en la fotosíntesis a lo largo de la
planta y brindan sostén estructural. Pueden ser de dos tipos: elementos de tubo
criboso y células acompañantes. Los elementos de tubo criboso están unidos
extremo con extremo para formar largos tubos cribosos. Los elementos de tubo
criboso están vivos en la madurez pero muchos de sus organelos, incluidos
núcleo, vacuola, mitocondrias y ribosomas, se desintegran o encogen conforme
maduran. Los elementos de tubo criboso están entre las pocas células
eucariotas que pueden funcionar sin núcleos. Adyacentes a cada elemento de
tubo criboso hay una célula acompañante que ayuda al funcionamiento del
elemento de tubo criboso. La célula acompañante es una célula viva, completa,
con un núcleo. Se cree que este núcleo dirige las actividades tanto de la célula
acompañante como del elemento de tubo criboso.

Células de epidermis. En la mayoría de las plantas, la epidermis consiste en


una sola capa de células aplanadas. Las células epidérmicas usualmente no
contienen cloroplastos y, por lo tanto, son transparentes, de modo que la luz
puede penetrar en los tejidos interiores de tallos y hojas. Tanto en tallos como
en hojas, los tejidos fotosintéticos se encuentran debajo de la epidermis. Las
células epidérmicas de las partes aéreas segregan una cutícula cerosa sobre la
superficie de sus paredes exteriores; esta capa cerosa restringe enormemente la
pérdida de agua de las superficies vegetales.

Células de peridermis. Son las células que forman varias capas celulares de
grosor debajo de la epidermis para ofrecer una nueva cubierta protectora
conforme la epidermis se destruye. A medida que una planta leñosa sigue
aumentando en circunferencia, muda su epidermis y expone la peridermis, que
forma la corteza exterior de los tallos y raíces más viejos. Forman estructuras
complejas compuestas de células de corcho y células parenquimatosas de
corcho. Las células de corcho mueren en la madurez, y sus paredes están
cubiertas con una sustancia llamada suberina, que ayuda a reducir la pérdida
de agua. Las células parenquimatosas de corcho funcionan principalmente
como almacenamiento.

Partes y funciones de una célula vegetal:


Una célula vegetal típica se compone de:

Membrana plasmática. Como todas las células, las vegetales tienen una
membrana compuesta por una doble capa de lípidos y proteínas que distingue
el interior de la célula de su exterior, y les permite mantener sus márgenes de
presión y pH. Además, la membrana plasmática regula la entrada y la salida de
sustancias entre el interior y el exterior de la célula.

Núcleo celular. Como todas las células eucariotas, las células vegetales
poseen un núcleo celular bien definido, donde se encuentra el material genético
(ADN) organizado en cromosomas. La función principal del núcleo es proteger
la integridad del ADN y controlar las actividades celulares, por lo que se dice
que constituye el centro de control de la célula.
Pared celular. Las células vegetales tienen una estructura rígida que recubre la
membrana plasmática, compuesta principalmente de celulosa, cuya función es
brindar protección, rigidez, sostén y forma a la célula. Se pueden distinguir dos
paredes: una primaria y una secundaria, separadas por una estructura llamada
laminilla media. La presencia de la pared celular impide el crecimiento como tal
de la célula y la obliga a engrosar depositando microfibras de celulosa.

Citoplasma. Al igual que todas las células, el citoplasma es el interior de la


célula, y está compuesto por el hialoplasma o citosol, una suspensión acuosa
de sustancias e iones, y los orgánulos celulares.

Plasmodesmos. Son las unidades continuas de citoplasma que pueden


atravesar la pared celular y conectar las células vegetales de un mismo
organismo, permitiendo la comunicación entre citoplasmas celulares y la
circulación directa de sustancias entre ellas.

Vacuola. Está presente en todas las células vegetales, y se trata de un grupo


de compartimientos cerrados sin forma definida rodeados por una membrana
plasmática llamada tonoplasto, que contienen agua, enzimas, azúcares, sales,
proteínas, pigmentos y residuos metabolicos. Por lo general, las células
vegetales maduras presentan una vacuola de gran tamaño, que puede ocupar
hasta el 90 % del volumen celular. La vacuola es una organela multifuncional
que participa en el almacenamiento de sustancias, la digestión, la
osmorregulación y el mantenimiento de la forma y el tamaño de las células
vegetales.

Plastos. Son orgánulos que se encargan de la producción y el almacenamiento


en la célula de sustancias indispensables para procesos primordiales, como la
fotosíntesis, la síntesis de aminoácidos o de lípidos. Existen distintos tipos de
plastos, entre ellos:

Los cloroplastos. Almacenan clorofila (responsable de la coloración verde


característica de los tejidos vegetales) y constituyen la organela en la que se
lleva a cabo la fotosíntesis.

Los leucoplastos. Almacenan sustancias incoloras (o poco coloreadas), y


permiten la conversión de glucosa en azúcares más complejos.

Los cromoplastos. Almacenan pigmentos llamados carotenos, que


determinan, por ejemplo, el color de las frutas, las raíces y las flores.

Aparato de Golgi. Es un conjunto de sáculos aplanados y rodeados de


membrana, que se encarga del procesamiento, empaquetamiento y transporte
(exportación) de distintas macromoléculas, como proteínas y lípidos.

Ribosomas. Son complejos macromoleculares de proteínas y ARN, ubicados


en el citoplasma y en el retículo endoplasmático rugoso, en los que se produce
la síntesis de proteínas a partir de la información contenida en el ADN. Esta
información genética sale del núcleo en forma de ARNm (mensajero), y llega al
ribosoma donde es “leída y traducida” en una proteína determinada.
Retículo endoplasmático. Es un complejo sistema de membranas celulares
que abarca todo el citoplasma celular de los eucariontes, en forma de sacos
aplanados y túbulos interconectados que se continúan con la membrana
nuclear. El retículo endoplasmático usualmente se divide en dos porciones que
tienen funciones diferenciadas: el retículo liso, implicado en el metabolismo de
los lípidos, el almacenamiento de calcio y la desintoxicación celular, y el retículo
rugoso, en cuya superficie se incrustan múltiples ribosomas, y que se encarga
de la síntesis de determinadas proteínas y algunas modificaciones sobre las
mismas.

Mitocondrias. Son orgánulos de gran tamaño presentes en todas las células


eucariotas, que funcionan como centro energético de la célula. En las
mitocondrias se lleva a cabo la respiración celular, por medio de la cual la
célula consigue generar la energía (ATP) que necesita para sus funciones.

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