Palanquita de Mañana
Palanquita de Mañana
Palanquita de Mañana
1. Humildad y Reverencia
Servir a Dios nos ayuda a desarrollar humildad y reverencia. Cuando nos
sometemos a su voluntad y seguimos sus mandamientos, reconocemos nuestra
dependencia de él. Esto conduce a una mayor apreciación de su amor y gracia.
3. Fortalecimiento de la Fe
Servir a Dios nos sumerge en su Palabra, fortaleciendo nuestra fe y confianza en sus
promesas. A través del servicio, experimentamos el poder transformador de su
amor y aprendemos a confiar en él incluso en tiempos de dificultad.
4. Participación en la Salvación
Al servir a Dios, participamos en su obra de salvación y redención. Compartimos el
mensaje del evangelio con los perdidos, los animamos en su fe y los guiamos hacia
una relación con Jesucristo.
6. Amistades Duraderas
Trabajar juntos para Dios crea lazos profundos y duraderos. Al servir junto a otros
creyentes, establecemos conexiones significativas y experimentamos el apoyo y el
aliento mutuos.
7. Satisfacción y Alegría
Servir a Dios brinda satisfacción y alegría. Cuando usamos nuestros dones para un
propósito más grande, encontramos un sentido profundo de cumplimiento y
propósito. Al ser parte de la obra de Dios, experimentamos la verdadera alegría y la
satisfacción que el mundo no puede proporcionar.