Catastro
Catastro
Catastro
Resumen
Abstract
This study presents some of the current fundamentals for economical valuation of natural
resources and the environment with emphasis on total and monetary values. This is based on the
criteria that economic amounts of the existing natural resources would be directly linked to those
who are involved with their management or use. Economical valuation is expressed in monetary
terms as the condition through which preferences are revealed. The use of money as a measure unit
permitted the comparis on between the value of the environment and the value assigned to other
aspects usually associated to economical development. What has been valued is not the
environment or life itself but human preferences derived from changes in the state of the
environment or changes in the levels of risk to their lives. This anthropomorphic valuation is
influenced by the culture of the population group to which their preferences were asked without
setting aside intrinsic values or specific needs. We discuss that from a point of view of
development and environment, at a local level, the low priority given to the environment and
natural resources results from the low economical value already given to them. If the environment
was properly valued it would be easier to understand that development and conservation are not
opposed processes but complementary.
1 Introducción
Los bosques nativos son los biomas que mayor atención han recibido en las últimas
décadas en el ámbito internacional, esto ha sido motivado por tres razones fundamentales
que se esgrimen como argumentos principales: la alta diversidad biológica que albergan,
su importante contribución para regular las condiciones climáticas mundiales (donde la
fijación de carbono tiene un papel destacado), y la rápida tasa de conversión que han
experimentado.
Varios organismos internacionales (PNUMA, PNUD, Banco Mundial) han hecho
hincapié especialmente en la función de los bosques como fijadores de carbono, alertando
sobre las consecuencias de su conversión sobre el cambio climático. En este contexto y
basándose en las herramientas recibidas en el Postgrado de Sistemas de Información
Geográfico Aplicado a la Gestión Ambiental y Territorial, de conocer y cuantificar los
múltiples valores de recursos forestales (bosques y vegetación nativa), y las opciones que
se cierran con su conversión a otros usos impulso en nosotros emprender con el presente
trabajo, por la importancia que la sociedad debe prestar u otorgar a los bosques y
vegetación natural, puesto que en la mayoría de los casos solamente se los mira en
términos tan sólo de producción de madera, más no en todo el contexto que estos tienen
como son los servicios ambientales que ofrece, entre ellos: producción de agua,
protección del suelo, captura de carbono, hábitat de vida silvestre, recreación, etc.
Es menester anotar que a nivel del Ecuador todavía no se han hecho trabajos de Catastro
y Evaluación de la Vegetación Nativa, lo que se ha hecho es un levantamiento de las
áreas protegidas y reservas que constituyen el Patrimonio Forestal, siendo esta otra de las
justificaciones y/o motivos por lo que nos interesamos en este tema.
Tratando de ubicar la zona de estudio, debemos citar que en la Cuenca del Río Paute
existen 19 zonas declaradas como áreas de bosque y vegetación protectores (ABVP), de
las cuales existe la denominada como Dudas, Mazar, Llavircay, Púlpito y Juval. Se
declaran mediante Acuerdo Ministerial No. 0292, publicado en el suplemento No. 255 del
Registro Oficial del 22 de agosto de 1985, cuya extensión aproximada es de 75.000 ha
aproximadamente; el área pertenece a la parroquia Amaluza del cantón Sevilla de Oro,
de la provincia del Azuay, a las parroquias Rivera y Pindilíg del cantón Azogues, de la
provincia del Cañar, a la parroquia Achupillas del Chimborazo y, a las parroquias de
Méndez y Copal, del cantón Santiago de la provincia de Morona Santiago; es el área
protectora con mayor extensión en la cuenca del río Paute, en donde se encuentra el
proyecto hidroeléctrico del mismo nombre que el más importante del Ecuador.
2 Materiales y métodos
Los bosques en el ámbito de la región interandina del Ecuador, abarcan una superficie de
64.760 km2 que representa el 23,93% del territorio nacional; en esta región la
deforestación ha provocado la disminución del bosque natural en un 90% quedando
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Las diferentes zonas de vida que constituyen el bosque forman un mosaico de vegetación
de diferentes estratos con infinidad de plantas que se han adaptado a condiciones de
temperatura, precipitación, viento, heliofonía, tipos de suelos y pendientes del sector.
El enfoque metodológico registro dos grandes etapas, la primera fue el conocimiento del
sistema a través de la caracterización y diagnóstico, la segunda etapa constituyo el
análisis de escenarios alternativos.
Para la realización del trabajo se utilizaron cartas topográficas a escala 1:50.000 con una
superfic ie mínima cartografiable de 6,25 ha, además se cartografió a escalas 1:100.000 y
1:250.000 además, se utilizaron las técnicas del SIG.
El tema de los bosques naturales ha sido objeto de fuertes controversias en varios países
en el mundo durante el último tiempo, las que se han originado en el creciente interés
ciudadano por los bosques. Cada vez más la política forestal es un tema de Estado de
política pública, superando el espectro de la política sectorial.
Esta visión moderna ecosistémica del bosque y sus funciones ha generado un conflicto de
intereses entre las funciones públicas y privadas en torno al uso de los mismos. En el
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Ecuador, como en otros países, esta pugna ha sido bastante compleja y se ha avanzado
muy poco en su resolución, lo que a su vez ha retrasado el diseño de política,
desacelerando el desarrollo forestal.
Carrazana et al. , 1996, pretenden unificar algunos criterios para valorizar ciertos
aspectos de usos indirectos y de otros insumos, utilizando diversos métodos; así:
3. El Método de costos de viaje, técnica para asignar valor por los bienes y servicios
recreativos.
Dado que el objetivo del Catastro es una evaluación que tiene fines ambientales y
económicos a la vez, las definiciones usadas corresponden a conceptos ecosistémicos, y
no a conceptos de uso. La principal definición fue la de bosques, para evitar polémicas
en el punto de partida se utilizó la definición recomendada por la FAO, 2001: BOSQUE
NATIVO: Ecosistema natural en el cual el estrato arbóreo está constituido por especies
nativas, con una altura mayor de 2 m y cobertura de copas superior al 25%.
El valor económico total de un Bosque Tropical, está determinado a través del mercado
(generalmente recibidos por el propietario o quien lo usufructué) y por otra serie de
valores asociados con los servicios ambientales que brindan los bosques. La Unidad para
la Cuantificación de Servicio Ambientale s es la de dólares por hectárea por año:
(USD/ha./año).
El valor económico total de los Bosques se origina en los bienes y servicios que este
brinda a la sociedad. Existen valores de uso a su vez compuestos por usos directos e
indirectos, así como valores de no uso, compuestos a su vez por valores de opción y
valores de existencia. Por lo tanto:
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VET Valor Económico Total = Valor de Uso Directo + Valor de Uso Indirecto * Valor
de Opción + Valor de Existencia. (En Carranza, et al., 1996).
El servicio ambiental de fijació n de carbono, tiene que ver con la capacidad de los países
desarrollados, de emanar gases de combustión final (CO2 ), a la atmósfera por efecto de la
industrialización, provocando lo que se conoce como efecto invernadero y la capacidad
de los bosques del mundo como es el área de bosque y vegetación protectora de Dudas,
Mazar, Llavircay, Pulpito y Juval de fijar este carbono disminuyendo este efecto térmico
negativo.
La valoración del recurso suelo, en cuanto al valor de la tierra como un beneficio directo
del bosque al propietario del mismo, se estimó basándose en encuestas a los pobladores y
latifundistas ubicados en la cercanía del área de bosque y vegetación protectora que
ahora nos ocupa.
2.8 Recurso madera
La valoración de este recurso se basó en el precio del mercado regional, en base a metro
cúbico de producción la cual es adquirida por las empresas privadas comercializadoras de
madera en pie, en el sitio.
Ante el interés mundial de obtener estos recursos los gobiernos tratan de implantar
medidas de control, que garanticen las regalías de dicha comercialización,
lamentablemente en el Ecuador no existe una ley que regule dichas negociaciones, ya que
dependemos de países industrializados para la obtención de principios activos, esta
evaluación en cierta medida pretende dar una alternativa de control para el manejo de los
recursos. El Ecuador es sin duda con relación a su tamaño el país más biodiverso del
mundo, contando con una serie de zonas de vida, que favorece la biodiversidad.
dólares el valor farmacéutico de todas las especies en las 51.1 millones de has. De
bosques de México. Bajo el supuesto simplificador de que la biodiversidad se encuentra
uniformemente distribuida en todos los bosques, este cálculo equivale a una valoración de
0.51 a 90,92 USD por hectárea. Estudios realizados para Costa Rica Harvard Bussines
School (1992), estiman USF 254 cada especie no evaluada, y Aylward (1993) estima los
rendimientos netos de la prospección de la biodiversidad en Costa Rica entre 20 y 2000
USD por muestra y costo anual de la protección de la biodiversidad en USD 50 por
especie.
Con estos datos se pueden estimar algunos factores biológicos, es el caso de recursos
como los insectos, la mayoría de los cuales permanecen aún ocultos a los ojos de la
ciencia, pueden brindar ciertas alternativas de producción en el ámbito científico en el
caso de la Biología molecular y genética, en el caso de la Biotecnología insectos que
pueden sintetizar ciertas sustancias químicas, en el caso de la agricultura como
controladores naturales de plagas, en ciertos casos se conocen experiencias medicinales a
partir del uso de los insectos, comercialmente algunos bichos son productores de
alimentos aptos para el consumo humano, la actividad natural de los insectos es la de
polinizar, por lo que pueden ser utilizados, para obtener variedades en el campo de la
floricultura. En la actualidad ha cobrado mucho interés el manejo de insectos atractivos
especialmente mariposas las cuales son comercializadas como mascotas.
Los recursos que se obtienen de la flora ha excepción de la madera, han cobrado vigencia,
actualmente cubren una demanda creciente especialmente en países industrializados, que
han vuelto sus ojos hacia lo que constituye medicina natural, tal es el caso para nuestro
país la cascarilla (Cinchona spp.) y la famosa Sangre de Drago la cual supera el billón de
dólares en ventas dentro de los Estados Unidos (referencia S King químico de la Shaman
Pharmaceutical).
Pero existen otros recursos que también son potencialmente comercializables dentro de
algunos aspectos como: fibras, resinas, aceites, saponinas, látex, artesanales, alimenticios,
ornamentales entre otros.
Para efecto de nuestro análisis hemos tomado en cuenta la investigación realizada por D.
Neill (1994), en base a colecciones de campo en un transecto, a diferentes altitudes desde
los 4.000 a los 400 m.s.n.m. en la zona del volcán Gran Sumaco en el Parque Nacional
Gran Sumaco-Napo Galeras., ya que el área protectora de Dudas, Mazar, Llavircay,
Pulpito y Juval cuenta con similares características biológicas que la denominada zona de
la investigación, refiriendo con las mismas variables altitudinales.
Dentro del complejo ecosistema de los bosques naturales, el recurso agua juega un papel
muy importante, viene a convertirse en el motor que permite todas las regulaciones del
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medio. Este recurso puede verse afectado en dos condiciones, tanto en su calidad como
en su cantidad, de cualquier modo un deterioro de este recurso tiene implicaciones muy
graves que puede tener una connotación local o nacional reflejado en problemas de
erosión, sedimentación, escorrentías que se manifiestan en la alteración del clima local.
Con relación a este recurso los factores de exclusión y sustractabilidad, varían de acuerdo
al uso que se le de, por ejemplo la construcción de una represa Mazar cuyo proyecto se
ejecutará el próximo año, el control de inundaciones, etc., que tienen una relación directa
con los beneficiarios (pobladores cercanos), y pueden influir a nivel nacional en el caso
de proyectos hidroeléctricos (Paute), recreacionales, abastecimientos de agua para
consumo doméstico.
Kishor y Constantino (1994) en Carranza (1996), presentan valores por hectárea para los
distintos componentes del servicio ambiental de protección de aguas que van desde 16,50
USD hasta 35,60 USD.
Sin lugar a duda, la propuesta más popular resulta la de proteger los ambientes escénicos
tal vez por que el hecho de conservar en si-tu los recursos requiere de un menor esfuerzo,
salvo el caso de los ambientes que requieren ser equipados con alguna infraestructura
física, en este caso el grado de exclusión es medio o alto porque se puede impedir el
acceso de la gente a las propiedades, pero el grado de sustractibilidad es medio bajo
porque el beneficio se puede compartir con otros, por ejemplo por medio de fotografías.
Los mismos autores determinan un promedio de 2,50 a 7,50 USD por hectárea para el
caso de los bosques primarios intervenidos y no intervenidos, y 1,25 a 3,75 USD para
bosques secundarios.
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Biodiversidad: Paisajes
Bioprospección
Recursos –no
Maderables.
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Método de valoración
Contingente.
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3 RESULTADOS
Las diferentes alternativas para obtener ingresos a partir de la explotación de los recursos
naturales que poseen los propietarios en el área de bosque y vegetación protectora de
Dudas, Mazar, LLavircay, Púlpito y Juval, perteneciente a Rivera dependen por un lado
de la ubicación geográfica del predio y de las características biofísicas del mismo, y por
otro lado, de una serie de factores que determinan la rentabilidad tales como precios de
los insumos, precio de los productos finales, y, de manera muy importante, el marco
regulatorio y legal que estructura la política del estado y la estructura del derecho de la
propiedad.
En este capítulo se efectúa un análisis de los ingresos netos que a partir del bosque y
vegetación protectora, se podrían obtener mediante sus distintos usos alternativos.
De manera general y con base en las zonas de vida de Holdridge, en el área en la que se
asienta el área de bosque y vegetación protectora de Dudas, Mazar, LLavircay, Pulpito y
Juval perteneciente a la parroquia Rivera, identificamos: páramo pluvial subalpino (pp-
SA), bosque muy húmedo montano (bmh-M), bosque muy húmedo montano bajo (bmh-
Mb) y, bosque pluvial montano (bp -M).
Independientemente del valor del suelo y de la madera, los bosques del mundo y
particularmente el bosque del territorio de Rivera genera otros ingresos a los que
estimarán sus valores y que podemos citar los siguientes:
A criterio de varios consultores, la fijación del carbono puede valorarse de USD $ 5 ha.
hasta los USD $ 20 ha/año, Clive (1992) en Carranza (1996), valoración que podría
elevarse hasta USD $ 28 ha./año en el año 2003 dependiendo de varios factores,
Fankhauser (1995) en Carranza (1996).
Carranza et al. (1996), estima que en Costa Rica para bosques primarios intervenidos y no
intervenidos, la valoración de este servicio alcanza los USD $ 38 ha./año y para Charrales
y Tocotales lo estima en USD $ 0.76. ha./año.
Con los antecedentes anteriores, en el área de Dudas, Mazar, LLavircay, Pulpito y Juval,
involucrada en la parroquia Rivera, la fijación de carbono debe valorarse en USD $ 20
ha./año en las áreas de bosque húmedo montano y muy húmedo montano bajo, bajo el
supuesto de una producción de 5.1 toneladas métricas/ha./año; y, en USD $ 1 ha./año en
el área de bosque pluvial de páramo con el supuesto de una producción de una tonelada
métrica/ha./año.
alcanza la cifra de los USD $ 5 dólares por ha./año asumiremos para nuestro caso el valor
de USD $ 10 dólares por ha./año.
No obstante no ser muy profusa la investigación en este tema varios autores entre ellos,
Echeverría et al (1994), Adger Neil et al. (1994), Larman y Perdue (1988), Kishar y
Constantino (1994) en Carranza (1996), arribaron a valores netos por ha. por protección
del ecosistema de USD $ 400; entre USD $ 315 a USD $ 346, USD $ 1.62 y USD $ 5.70,
y entre USD $ 12.6 a USD $ 25.1 por has./año respectivamente.
En el caso Rivera se sugiere adoptar el valor calculado por José Augusto Rosero (1996),
quien como consultor del proyecto BID-CONADE en un estudio realizado para las áreas
naturales del Ecuador determina un valor por ecoturismo de USD $ 28 ha./a ño.
En otro aspecto y con la finalidad de obtener el Valor Productivo por hectárea, se utilizó
la estimación económica en dólares realizada mediante sondeo rápido por parte de los
autores a varios propietarios en la parroquia Rivera, asentamiento principal que se
encuentra en la zona de amortiguamiento del área protegida, datos que sirvieron de
referencia para instituir la valoración citada.
El valor total productivo (valor productivo x superficie en ha) por lo antes citado, no
refleja el valor intrínseco del uso, sin embargo nos fue útil para determinar el parámetro
de la referencia del área de bosque y vegetación protectora, que es de $ 34.184.000
4 Discusiones y conclusiones
· El argumento que subyace en muchos trabajos analizados se deriva del método de los
precios hedónicos, el cual permite aislar la contribución al valor total de una unidad de
cada uno de sus componentes. Por lo tanto presenta dificultades para ser aplicado al
análisis de los sistemas naturales.
· Por su parte, el concepto de valor económico total (VET) reconoce una taxonomía de
valores económicos que se relacionan con el medio natural. Todas las componentes que
integran la suma de valores que conforman el VET están basados sobre el argumento de
que es posible conocer las preferencias de los individuos y que estas preferencias
individuales pueden ser sumadas, para obtener las preferencias de la sociedad en su
conjunto.
La comparación ordinal, entre sí, de las preferencias reveladas por los individuos es
metodológicamente correcta, mientras que la cardinalidad resulta imposible. Mas aún,
cuando se traducen estas preferencias a valores monetarios, cada individuo atribuye a
cada unidad monetaria valores distintos de acuerdo a su nivel de educación, ingreso, etc.
· Dentro del marco de las definiciones del desarrollo sostenible, surge un problema
adicional al tratar de identificar el valor de un bosque, por la imposibilidad de conocer las
preferencias de las generaciones futuras. Si sumar las preferencias individuales de
coetáneos es difícil, más lo es sumar las preferencias individuales de generaciones
distintas y obtener una función de preferencia intergeneracional.
· Lo que estos métodos valoran no es el bosque en sí, sino las preferencias de la gente por
los cambios en el estado del ambiente, y sus preferencias por los cambios en su condición
de vida. Lo que es un hecho indudable es que la gente está dispuesta a pagar por asegurar
o prevenir cambios que pueden afectar su calidad de vida.
· Otro problema práctico con los métodos de valoración económica de los bosques es el
que se deriva de los problemas de la falta de mercados para muchos bienes y servicios de
los mismos. Dado que para muchos productos y servicios que se valoran en los ejercicios
por subrogación no tenemos un mercado aparente, o al menos imperfecto, es difícil saber
si se están aceptando valores que, traducidos a precios, reflejan la realidad.
· Cuando se consideran los valores de los bosques, en muchos casos se están obteniendo
resultados fuertemente influenciados por la existencia de incentivos positivos o perversos.
Estos modifican la realidad con respecto a lo que sucedería en un mercado de
competencia perfecta. Los métodos de valoración deben contemplar el análisis expreso de
estas circunstancias.
Entonces, definir una metodología unificada resulta una tarea difícil, debido
principalmente a las diferentes variables que puede presentar cada tipo de bosque y en
cada región.
Sin embargo existen algunos parámetros que pueden considerarse como estándares
(Servicios Directos) para alcanzar una valoración cuantitativa de los servicios
ambientales, entre estos: Valores del suelo y la madera, Valor del Recurso Agua,
Fijación de Carbono, Valor de la Bioprospección, Valor del Ecoturismo y el Valor por la
Extracción de Recursos No Maderables. La adición de cada uno de ellos en valores
cuantificables determina la tasa o valor de Servicios Ambientales.
Vista la situación del área de estudio, hemos visto necesario orientar el diseño de políticas
destinadas a explotar racionalmente los recursos del ABVP de: Dudas, Mazar, Llavircay,
Púlpito y Juval, para ello es necesario explicitar los objetivos que se pretenden con dichas
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Objetivos Ambientales
1. Reducir la deforestación.
2. Promover la recuperación de las áreas ya intervenidas con bosques cultivados o
con sistemas de producción agropecuarios de alta productividad.
3. Conservar la diversidad biológica, mediante la utilización racionalmente
económica de los recursos ambientales y del potencial genético.
4. Racionalizar la explotación de los recursos naturales en las actividades
económicas de la región. Se requiere de un plan de manejo territorial.
Objetivos Económicos
Objetivos Sociales
El Ecuador y la región austral en particular enfrentan serios problemas como son la tala y
deforestación indiscriminada, la erosión, el deterioro de las áreas naturales protegidas. En
muchos casos la principal causa de la depredación del bosque es la crisis económica del
país que fuerza a la población de otras zonas a migrar en busca de oportunidades de
trabajo. Así se observa migraciones de campesinos que deforestan para la
implementación de potreros y cultivos. El principal problema entonces es compatibilizar
la demanda por desarrollo económico de la población con un manejo sostenible de los
recursos. Por este motivo las políticas que se citan están orientadas básicamente a diseñar
mecanismos que fomenten una explotación racional de los recursos naturales.
Existen dos tipos de acciones que deberían estar contempladas en el diseño de una
política para proteger y promover los recursos naturales a: actividades de promoción y
actividades de regulación. Dentro de ésta última, se distinguen dos enfoques: el de
regulación y control y el uso de instrumentos económicos.
Actividades de Promoción. – entre las cuales podemos citar: diseño de un plan de manejo
territorial, desarrollo de infraestructura, apoyo a la investigación científica,
Actividades de Regulación. Entre las cuales podemos citar: cargos por uso, este
instrumento se emplearía para financiar actividades y preservar un nivel de pureza
ambiental. Por ejemplo, cobrar a HIDROPAUTE usuario del agua, una cantidad para
financiar programas de reforestación y mejoramiento de la producción. Impuestos
Ambientales, son impuestos (subsidios) diseñados con la finalidad de que los agentes
contaminantes internalicen el daño (beneficio) que ocasionan sobre otros agentes.
Incentivos Tributarios, tienen la finalidad de modificar el comportamiento o desarrollo
de determinadas actividades o agentes. Los incentivos pueden tomar la forma de
tratamientos tributarios preferenciales para ciertos productores a través de créditos
fiscales, exoneraciones o deducciones. Asignación de derechos de propiedad. - Muchos
de los problemas asociados a una explotación ineficiente de los recursos naturales es
resultado de la falta de asignación de derechos de propiedad sobre los mismos. Por
ejemplo, la depredación del bosque nativo ocurre porque nadie es dueño del mismo.
Un primer paso para lograr este objetivo es valorizar adecuadamente los costos y
beneficios que las políticas macroeconómicas tienen sobre el medio ambiente.
Existe una tendencia a subestimar el valor económico de los beneficios que genera la
conservación de los recursos ambientales, como consecuencia, usualmente se depredan
dichos recursos. Se requiere de esfuerzos metodológicos para casos concretos en los que
se apliquen estos conceptos de valorización al bosque nativo.
Si no existe un plan de manejo territorial o una política de manejo razonable del bosque
nativo, un mayor tipo de cambio puede generar la tala indiscriminada del mismo.
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Así se han identificado dos tipos de acciones que deben estar contempladas en una
estrategia de desarrollo del bosque nativo: acciones de promoción y acciones de
regulación. Dentro de las primeras se cuentan actividades como la inversión del Estado en
infraestructura y actividades de apoyo a la investigación científica, mientras que en la
segunda se incluye el uso de diferentes instrumentos económicos para incentivar
determinadas conductas de los agentes económicos.
5 Agradecimiento.
Los autores dejamos constancia del agradecimiento para el Ing. Eugenio Molinet
de la Vega, igualmente nuestro reconocimiento a la Universidad del Azuay en
especial al IERSE y a todos los instructores del Postgrado, además a las diferentes
personas e Instituciones que nos apoyaron en la realización del presente trabajo
6 Referencias Bibliogáficas
Mapa 6: Geosistema
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