PEPSaL 2021 Santa Catalina

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P.E.P.SA.L.

– ÍNDICE

1. Introducción
1.1 Oración Comunitaria
1.2 Archivo Narrativo
1.3 Campos de Acción de la Pastoral Juvenil Salesiana Familia Salesiana y Grupos Vocacionales
1.4 Estructuras de Animación y Gobierno

2. Breve Historia de la Casa

3. Mapa de la Realidad: Núcleos Problemáticos

4. Mapa Teórico

5. Opciones Históricas Fundamentales

6. Mapa de la Realidad. Desafíos y Líneas de Acción

7. Anexo:
Tiempos Pastorales de la Casa
Nómina de Directores
1. Introducción

1.1 Oración Comunitaria

Como Comunidad Educativa Pastoral, en este tiempo de la historia y del proceso participativo y de
conversión que implicó la realización de este proyecto, queremos rezarte:

Señor
Hoy te pedimos por nosotros
Palabra que quiere abarcarnos y contenernos
Que nos anima a continuar soñando
Como nuestro Padre Don Bosco nos enseñó.

Que nuestros sueños


Se conviertan en opciones
Y que ellas se transformen
En vida para todas y para todos

Queremos ser fieles:


Al clamor de los jóvenes
Al clamor de los pobres
Al clamor que sigue brotando de la tierra
Y nos pregunta:
¿Dónde está tu hermano?

Nos proponemos ser parte:


De una comunidad más amplia,
De una iglesia inserta en esta zona sur de la ciudad
De nuestra Inspectoría,
Construyendo lazos de amor y vínculos de ternura

Ponemos en tus manos


Este proyecto educativo pastoral
Para que sea realmente nuestro
Tuyo, de todos
Para poder decirte sí.
Que nuestra Madre,
La Auxiliadora nos cuide y nos anime
En esta tarea

Amén
1.2 Archivo Narrativo de la Construcción del Proyecto Educativo Pastoral Salesiano Local

En el mes de marzo del año 2015 y en el ámbito del CoCEP ampliado se inicia el proceso de construcción del
PEPSAL. Analizamos la acción pastoral desde los agentes y los destinatarios. La clave fue el análisis de la
realidad de los jóvenes de nuestra Casa y nuestro Barrio.
Trabajamos con variados instrumentos, en donde escuchamos los gritos de la acción pastoral. Desde ahí,
surgieron las necesidades. Haciendo un barrido de los datos más significativos que atraviesan toda la acción
pastoral, llegamos a prenunciar algunos núcleos problemáticos más importantes en el ámbito del CoCEP que
se va consolidando como instancia que anima y coordina toda la Obra Salesiana mediante la reflexión, el
diálogo, la programación y la revisión de la acción educativo-pastoral (cf. CG24, 160-161-171). Este año
también se dan pasos hacia la visualización de los diversos campos de acción de la pastoral juvenil salesiana,
haciendo memoria del origen de cada propuesta y espacio, identificando mejor los destinatarios y creciendo
en una mayor apertura a la compleja realidad del barrio. Con esto constituimos el Mapa de la Realidad.

Durante la primera mitad del año 2016, mediante exposiciones, trabajos grupales y diversos intercambios
en el ámbito del CoCEP, del CoCEP ampliado (con una mayor representatividad de cada sector y de los
diversos grupos de la Casa) , el Equipo del MJS y encuentros de docentes y padres, se avanza en el estudio
y profundización del marco teórico que debía iluminar a la situación problemática recuperada en la Etapa
Perceptiva, pudiendo así establecer Principios y Criterios, que puedan luego orientar la acción pastoral.
Buscamos iluminar la realidad con varios marcos teóricos teológicos, pastorales, eclesiales y pedagógicos,
deteniéndonos de manera especial en la Palabra de Dios, el Cuadro Fundamental de Referencia de la Pastoral
Juvenil Salesiana, el Plan Orgánico Inspectorial (POI) y el Proyecto Educativo Pastoral Salesiano Inspectorial
(PEPSI), que ayudan a iluminar la realidad y sus problemas, posibilitando la elaboración de las Opciones
Históricas Fundamentales con las que esta comunidad se viene comprometiendo.
En la segunda mitad del año 2016 y parte del 2017 se trabaja en el Mapa Operativo, construyendo líneas
de acción y una primera redacción del PEPSAL que se sigue revisando en los distintos encuentros del
CoCEP, hasta que en el año 2018 se trabaja en la corrección y redacción final del mismo, con el que
esperamos poder concretar más eficazmente nuestros sueños.

Durante el año 2021, se realizaron aportes al Marco Teórico, se re escribieron las líneas de acción de
acuerdo a las indicaciones dadas por la Consejo Inspectorial de ARS en el año 2018 cuando se aprobó en
primer documento y se actualizaron datos correspondientes al Modelo Operativo y a los Campos de la
Pastoral Juvenil Salesiana que abarca el PEPSAL, constituyendo todo este trabajo la primera actualización
del PEPSAL de la Casa.
1.3 Campos de Acción, Familia Salesiana y Grupos Vocacionales

Campos de Acción

Utilizamos el concepto de “campos de acción” para indicar los ambientes educativos en los que se
desarrolla la misión salesiana. Cada uno de ellos crea una atmósfera y genera un estilo propio de relaciones
dentro de la comunidad. Nuestra Casa cuenta con diversos ambientes, con variadas estructuras educativo-
pastorales, que se complementan mutuamente para expresar mejor la misión salesiana (cf. CdR p.177).

Campo de Acción: “Oratorio – Centro Juvenil” (CdR p.177)

 Oratorio Festivo: propuesta asociativa que cuenta con más de 250 niños y jóvenes divididos por
edades en las siguientes categorías: 6-8, 9-10, 11-12 y 13-15.
 Batallón de Exploradores de Don Bosco N°4 " General José de San Martín": propuesta asociativa
que cuenta con más de 160 niños y jóvenes (Etapas: Caminantes - Chispitas, Pioneros - Fuegos,
Rastreadores - Hogueras, Baquianos - Antorchas, Soles).
 Oratorio El Patio: propuesta que cuenta con un total de 80 niños y jóvenes en situación de
vulnerabilidad de 6 a 15 años.
 Oratorio Nocturno: propuesta que cuenta con un total de 60 jóvenes en situación de vulnerabilidad
de 15 a 21 años.
 Espacio Joven: propuesta asociativa escolar que busca generar el encuentro e iniciar un proceso de
formación integral para los destinatarios desde 7mo grado de primaria hasta 5to año de secundaria,
mediante espacios de expresión artística, deportiva, recreativa y cultural.
 Misión Caacupé: propuesta misionera para 50 jóvenes del secundario que realizan su tarea
apostólica en la Villa 21-24 de Barracas adonde asisten en apoyo escolar a más de 50 niños y niñas.
 Grupo de Aikido: propuesta creada con el objeto de proveer herramientas que permitan el desarrollo
físico, mental y espiritual de los niños y jóvenes. Cuenta con 20 destinatarios y 3 animadores
 Grupo de Kung Fu: propuesta creada con el objeto de proveer herramientas que permitan el desarrollo
físico, mental y espiritual de los niños y jóvenes. Cuenta con 20 destinatarios y 2 animadores

Campo de Acción: “Obras - Servicios sociales para jóvenes en riesgo” (CdR p.233)

 Apoyo Escolar: propuesta de acompañamiento en el proceso de enseñanza aprendizaje para chicos


en situación de vulnerabilidad, que cuenta con 50 de niños con edad de nivel primario,
acompañados por 3 educadores.
 Solidaridad: propuesta de atención a las diversas realidades del barrio y que cuenta con un servicio
de comedor y despensa centralizada para el Oratorio Festivo, Oratorio El Patio, Oratorio Nocturno,
Apoyo Escolar y Catequesis Parroquial; entrega de alimentos y de ropa; viajes de esparcimiento
para los abuelos y atención médica gratuita.
 Por más Vida: dispositivo conjunto con la Casa Salesiana San Juan Evangelista con el asesoramiento
del Sedronar que busca prevenir e intervenir sobre diversas realidades de fragilidad en
adolescentes y jóvenes en riesgo.
Campo de Acción: “Escuela y Formación Profesional” (CdR p.189)

 Nivel Inicial: con un total de 5 secciones (TM: 3 - JD: 2). Salas de tres a cinco años con un total de
126 alumnos.
 Nivel Primario: con un total de 14 secciones (TM: 7 – JC: 7), de primero a séptimo grado con 448
alumnos.
 Nivel Secundario: con un total de 12 secciones, de primero a quinto año con 453 alumnos. Egresan
anualmente Bachilleres en Administración de Empresas y Comunicación Social.
 Nivel Terciario: con un total de 139 estudiantes que egresan con el título de Docente de Educación
Inicial y Catequista y Docente de Educación Primaria y Catequista. Se dicta además un Seminario
Catequístico.
 Unión de Padres de Familia (UPF): asociación cuya finalidad es que los padres se acompañen entre
sí generando encuentros y acciones de enriquecimiento familiar y pastoral. Compuesta por más de
1000 familias, coordinadas por un grupo de más de 70 madres y padres animadores. Dentro del
ámbito de la UPF se desarrolla además el Campeonato de Papi Fútbol y la Parrillita.
 Centro Deportivo (Cen Dep): cuenta con un programa de actividades deportivas y artísticas para los
alumnos del nivel primario y secundario, con una nueva propuesta semanal específica para niños y
jóvenes del Oratorio El Patio.

Campo de Acción: “Parroquia Santa Catalina de Alejandría” (CdR p. 220)

La Parroquia de Santa Catalina unifica y fortalece la vida de fe de toda la Comunidad Educativo Pastoral,
marcando los tiempos litúrgicos y pastorales del proyecto y cuenta con los siguientes espacios particulares
para la evangelización y catequesis:
 Asociación de María Auxiliadora
 Catequesis de Iniciación
 Caritas Parroquial
 Grupos de Oración
Familia Salesiana y Grupos Vocacionales

Además de la Congregación Salesiana, nuestra Comunidad cuenta con la presencia de otros grupos y
asociaciones de la Familia Salesiana:

 Ex alumnos de Don Bosco


El Centro de Ex Alumnos efectúa la tarea de nuclear a todos los Ex Alumnos de la Casa, tanto los
que hayan asistido a la Escuela, al Oratorio y/o Batallón. Se destaca como actividad principal el
Campeonato de Futbol de los Domingos.

 Mamás Margaritas
Este grupo está integrado por padres, abuelos y familiares de animadores oratorianos que se
comprometen a colaborar, ya sea con la presencia activa o bien a través de donaciones.

 Salesianos Cooperadores
La Asociación de Salesianos Cooperadores, fundada por Don Bosco y aprobada por el Papa en 1876,
se propone vivir el Evangelio siguiendo las enseñanzas del fundador. Nacieron de la invitación que,
ya desde el comienzo, hizo a laicos, hombres y mujeres, y a miembros del clero diocesano a
“cooperar” en su misión de salvar a los jóvenes, sobre todo a los padres y abandonados. (Cfr.RDB)
1.4 Estructura de Animación y Gobierno
2. Breve Historia de la Casa

Corría el siglo XIX y Buenos Aires era todavía “La Gran Aldea”. En el barrio de Constitución estaban
arraigadas varias familias patricias, entre las que se encontraba la formada por Marcelino Rodríguez, muy
devoto de la Virgen y Mártir Santa Catalina de Alejandría, cuya imagen había traído de España. Fue
entonces que concibió la idea de mandar edificar con sus recursos económicos y en terrenos propios, una
capilla dedicada a Santa Catalina Virgen y Mártir.
En 1860, luego de haber pedido autorización al Obispo, se iniciaron las obras. El 25 de noviembre de 1861
y, coincidiendo con la festividad de Santa Catalina, se inauguró la capilla dedicada a la Santa. El estilo
arquitectónico de la capilla tenía influencias góticas, cuyas líneas se conservaron en las posteriores
ampliaciones. En 1875 fallecía el fundador de la obra, Marcelino Rodríguez, y fueron herederos de sus
bienes sus dos hijos: Gregorio y José. Gregorio continuó con la obra iniciada por su padre. No fue fácil este
traspaso pero, finalmente, resolvieron ceder el lote al Arzobispo de Buenos Aires. El Presbítero Carlos
Palomar intercedió para que esas propiedades fueron traspasadas al dominio de la Sociedad Salesiana,
trabajo que rindió sus frutos ya que fueron cedidas.
El primer Director Salesiano de Santa Catalina fue el R. P. Juan
Paseri quien ejerció el cargo por pocos meses y, en 1885, lo
sucedió el R. P. Víctor Durando.
El P. Durando se desempeñó como Director del Colegio hasta
mayo de 1894. En esa época, el colegio contaba con cursos
elementales hasta 4° grado y funcionaba en las que fueron las
naves laterales que se agregaron posteriormente a la iglesia.
Durante su gestión directiva, se ampliaron las instalaciones del
Colegio, dotándolo de nuevas comodidades y completando los
grados de la enseñanza primaria. Le sucede el P. Juan Gasparoni.
En 1895 lo sucedió el R. P. Pedro Milano quien mandó modificar
las construcciones que se encontraban a los costados del templo,
transformándolas en las dos naves laterales. Ladrillo por ladrillo
surgió la majestuosa y esbelta torre de estilo gótico. En 1901
coronada con la imagen del Redentor, cumplió más de medio
siglo de existencia.
El 3 de mayo de 1902 el Padre Bartolomé Molinari fundaba la
Asociación de los devotos de María Auxiliadora; los miembros
de esta Asociación se dedicarán a difundir una especial devoción
a la Santísima Virgen, honrándola de una manera particular los
días 24 de cada mes y, muy especialmente, durante el mes de mayo, a Ella consagrado.
En 1906, sucedió al P. Milano, el R. P. Luis Macchi. Bajo su
dirección se funda el Centro de Ex Alumnos del Colegio en
1907. Ellos se han impuesto una misión, y es la realización, por
medio de obras de apostolado, de hacer extensible a otros
ambientes, lo que aprendieron y asimilaron durante los años
transcurridos en el Colegio como alumnos.

En 1916 se logra concretar la fundación del Batallón 4 de


Exploradores Argentinos de Don Bosco.
En 1927 se adquiere la propiedad
ubicada sobre la calle Caseros 861 al 865
y, en 1928, la ubicada en Piedras 1565.
En 1930 se dio comienzo a las obras de
construcción del edificio destinado a la
Escuela Normal.
En 1931 el Padre Tavella crea la Unión
de Padres de Familia, asociación que
tiene como principal objeto el
acercamiento entre las familias de los
alumnos y la Escuela. Luego será el 1°
Obispo de Salta.
En 1932 se inaugura el nuevo edificio de la sección Normal, sobre la calle Piedras, y comienzan a funcionar
los cursos del Magisterio.
En 1946 comienza a funcionar el Bachillerato. Con lo cual el Instituto Santa Catalina crece. En su transcurso
(1947) se procede a inaugurar el nuevo edificio que da a la calle Brasil.
En 1953, ante el peligro de que la estructura del Templo pudiera ceder, se resuelve iniciar la demolición y
afrontar posteriormente la construcción de una nueva iglesia. Mientras se ejecutan los trabajos de
demolición de la iglesia y hasta tanto se termine de construir la cripta, se habilita el local del Centro de Ex
Alumnos a fin de poder celebrar los cultos religiosos.

El 25 de noviembre de 1955 se colocaba la piedra fundamental de la que es hoy nuestra iglesia. El 14 de


agosto de 1968 se habilita la Iglesia y se inaugura el 25 de noviembre de 1969.

Durante el año 1967 se compra la propiedad de Caseros 835 y en 1969 la de Piedras 1551. En 1986 se
concluye el edificio del gimnasio. Luego, en 1989, se coloca el piso granítico y las gradas-asientos laterales.
En 2015 se da comienzo al nuevo edificio escolar sobre la calle Piedras 1561 que se inaugura oficialmente
el viernes 16 de marzo de 2018.
A partir de las opciones del Capítulo Inspectorial del año 2016 se inician los pasos para constituir una
articulación zonal con las Casas Salesianas de San Pedro y San Juan Evangelista con el fin de que pueda
resignificarse la presencia de los salesianos en las obras.

En el año 2018 y dentro del mismo proceso, la comunidad salesiana se traslada a la Casa San Juan
Evangelista y se nombra al primer director general laico de la Casa.
3. Mapa de la Realidad: Núcleos Problemáticos

En el mes de marzo del año 2015 iniciamos el proceso y analizamos la acción pastoral desde los agentes y
los destinatarios. La clave fue el análisis de la realidad de los jóvenes de nuestra Casa y nuestro Barrio.
Trabajamos con variados instrumentos, en donde escuchamos los gritos de la acción pastoral. Haciendo un
barrido de los datos más significativos que atraviesan toda la acción pastoral, llegamos a prenunciar los
siguientes núcleos problemáticos:
Desafío: Comunión y Comunicación
o Si continuamos sin optimizar la comunicación de nuestras actividades y sin generar mayores espacios
de participación en las estructura de animación, con el objetivo fundamental de socializar y articular
la información y la toma de decisiones de las diversas propuestas educativo pastorales, no podremos
generar acciones concretas y estrategias oportunas para aprovechar recursos ya existentes entre los
diferentes espacios de la Casa y generar mayor conciencia de unidad y de Casa. Para esto contamos
con un gran número de agentes pastorales, adultos y jóvenes, comprometidos en la casa desde hace
muchos años.
Desafío: Formación y Evangelización
o Si continuamos sin aproximarnos a las verdaderas y reales necesidades de nuestros animadores y
agentes pastorales, no podremos ampliar y favorecer propuestas formativas de calidad, ya sean
evangélicas, pedagógicas y/o pastorales, para todos los educadores de nuestra Casa. Además
corremos el riesgo de perder la fortaleza de un buen clima de familia, una buena receptividad a las
propuestas solidarias y un compromiso juvenil con raíces claras en la fe. Aunque contamos con
agentes pastorales con una clara opción de fe, con una buena formación y con el compromiso
necesario como para diseñar y liderar procesos formativos en el tiempo.
Desafío: Sostenimiento de la Opción Preferencial por los Jóvenes más Pobres
o Si continuamos sin planificar el destino de recursos económicos concretos y sin dar pasos en una
economía de participación y comunión, no podremos potenciar, acompañar y sostener las
actividades pastorales juveniles de nuestra Obra en favor de los más vulnerables. Para esto, ya
contamos con personas formadas y sensibles a las necesidades de los más vulnerables, que
dinamizan y direccionan los recursos económicos para favorecer a todos los destinatarios.
Desafío: Articulación Zonal y Misión Compartida
o Si continuamos postergando el comienzo de la articulación zonal de CABA SUR (cfr. 2do. Capitulo
Inspectorial, criterios operativos y estrategias de reestructuración), corremos el riesgo de
empobrecer nuestra propuesta carismática, no lograr mayor significatividad en la zona y no
aprovechar los recursos existentes en los diferentes campos de acción. Para esto, tenemos las
diversas experiencias de encuentros entre las casas, varias propuestas elaboradas en conjunto y el
inicio de la elaboración de un nuevo modelo operativo que pueda sostener las opciones del proyecto
en este tiempo de inicio de una mayor gestión compartida entre salesianos consagrados y laicos.
Desafío: Apertura al Barrio
o Si continuamos sin dar a conocer nuestras opciones fundamentales del carisma a toda la comunidad,
se nos dificultará construir una identidad, para articular y trabajar en red con otras instituciones del
contexto más cercano, aportando propuestas incentivadoras de la encarnación del Reino, ampliando
nuestro horizonte hasta llegar a cada niño y joven que participen de nuestros diversos espacios.
Aunque hace años que tenemos dialogo con diversas instituciones que acompañan a nuestros
destinatarios preferenciales.
4. Mapa Teórico

La realidad contemplada necesita ser iluminada, confrontada, explicada y cuestionada. Durante la primera
mitad del año 2016 se avanza en el estudio y profundización del marco teórico que debía iluminar a la
situación problemática recuperada en la Etapa Perceptiva, pudiendo así establecer aquellos Principios y
Criterios, que puedan luego orientar la acción pastoral.

4.1 Jesús y el Reino de Dios

Jesús salvador y servidor de la humanidad, anuncia el reino con la mediación necesaria de la comunidad
evangelizadora, inserta en el mundo que descubre a Dios en la Historia.
La compasión es el modo de ser de Dios, es su primera reacción antes sus hijos e hijas, su principio de
actuación. Esta experiencia de un Dios compasivo fue el punto de partida de la actuación revolucionaria de
Jesús.
El Reino de Dios solo puede construirse en un movimiento de humanización desde la compasión, admitiendo
el perdón, la inclusión y la misericordia. El Reino de Dios solo puede construirse mirando hacia la dignidad
de los últimos, siendo una mesa abierta donde todos pueden sentarse. La identidad de los discípulos de Jesús
consistía en no excluir a nadie. (PEPSI)
Nuestra fe tiene como punto de partida la comprensión de la Encarnación (Jn 1,14) como hecho fundante
de nuestro proyecto educativo pastoral. Esto hace que nos comprendamos como una comunidad a ejemplo
del “buen samaritano” (Lc 10,25ss) ejerciendo en cada discernimiento el principio de la misericordia.
Lo cual se traduce en vivir nuestra fe con una clara intencionalidad de:

 Comprometernos con los jóvenes, especialmente los más pobres, confiando en que son capaces de vivir
los procesos educativos pastorales que les proponemos e incluso mejorarlos
 Vivir nuestra fe en lo cotidiano, haciendo de cada día un lugar de encuentro con Dios
 Proponer la alegría que surge de la esperanza, haciendo del “optimismo realista” la actitud que nos
proponemos vivir. Nos sabemos una comunidad en la cual Dios confía
 Construir los itinerarios evangelizadores sabiendo que somos capaces de amar a Dios, porque Él nos amó
primero (1Jn 4,19), y por lo tanto queremos vivir la vida sacramental como un camino de inclusión
 Vivir la pertenencia eclesial celebrando las diferencias y al servicio del Reino de Dios, construyendo
caminos de comunión con toda la inspectoría y con la Iglesia local, privilegiando la articulación zonal
como lugar de encuentro con nuestros “prójimos”
 Asumiendo nuestra vocación cristiana de transformar todas las estructuras que limitan el proyecto de
Dios entre nosotros y en nuestra sociedad proponiendo para esto itinerarios de formación que nos
ayuden a discernir.
 Educando para la corresponsabilidad de una economía de comunión, que nos permita poder disponer de los
recursos materiales de una manera más evangélica, y donde todos aprendamos a asumir como propia la
construcción del bien común.
4.2 Don Bosco y la Misión Salesiana: Punto de Referencia Histórico-Carismático

Don Bosco, inspirado por el Espíritu Santo, tuvo una viva conciencia de ser llamado por Dios a una misión
única en favor de los jóvenes más humildes. Signos de lo alto, cualidades naturales, los consejos de
personas prudentes y su discernimiento personal lo convencieron de que Dios lo había enriquecido con
dones singulares y lo llamaba a una entrega total a los jóvenes: "Tengo prometido a Dios que incluso mi
último aliento será para mis pobres jóvenes" (C1).
Sin este rasgo Don Bosco sería irreconocible: "Yo por vosotros estudio, por vosotros trabajo, por vosotros
vivo, por vosotros estoy dispuesto incluso a dar mi vida" (C14). Junto a este campo de acción, Don Bosco
entrevió también la finalidad original de su misión: revelar a los jóvenes el amor de Dios, e intuyó en la
figura de Jesús Buen Pastor los principios inspiradores de su estilo pastoral.
Dios sigue llamando a otros muchos creyentes para que continúen la misión de Don Bosco a favor de los
jóvenes. Entre ellos, los salesianos religiosos (SDB) quienes son consagrados por Dios, reunidos y enviados
para ser en la Iglesia signos y portadores del amor de Dios a los jóvenes, especialmente a los más pobres
(cf. C2).
Juntamente con ellos comparten la misión de Don Bosco otras agrupaciones de la Familia Salesiana y un
amplio número de personas, cada una con una vocación y estilo de vida específicos, es decir hombres y
mujeres pertenecientes a las más diversas condiciones de vida, que constituyen el Movimiento Salesiano.

4.3 Espíritu Salesiano y Sistema Preventivo

La misión y el proyecto de vida de Don Bosco se expresan en un estilo de vida y de acción: el espíritu
salesiano. La encarnación más característica y expresiva del “espíritu salesiano” es el Sistema Preventivo.
El Sistema Preventivo se asocia al alma, a las actitudes y a las opciones evangélicas de Don Bosco. La praxis
salesiana tiene como marco de referencia y como medida de autenticidad la actuación del proyecto pastoral-
espiritual-pedagógico de Don Bosco. La “genialidad” de su espíritu está unida a la actuación del Sistema
Preventivo: un sistema bien logrado, que es modelo e inspiración para cuantos hoy están comprometidos
en la educación en los diversos continentes, en contextos multiculturales y de pluralidad religiosa. Un
sistema que pide a todos una continua reflexión para favorecer cada vez más la centralidad de los jóvenes
como destinatarios y protagonistas de la misión salesiana (cfr. Don Pascual Chávez, ACG 407, “La Pastoral
Juvenil Salesiana”).
La palabra “sistema” sugiere la idea de plenitud, es decir, una experiencia orgánica: una propuesta articulada
hacia un dinamismo pedagógico. En el Sistema Preventivo, de hecho, se pueden distinguir algunas
articulaciones, que están profundamente vinculadas entre sí: el principio inspirador, que crea una
determinada actitud espiritual en la persona: la caridad pastoral. Una triple realidad dinámica:

 Un “impulso pastoral”, es decir, un proyecto educativo de promoción integral (ver el presente


capítulo IV, n.2);
 Una espiritualidad para una propuesta de vida cristiana – Espiritualidad Juvenil Salesiana – (ver el
presente capítulo IV, n.3);
 Un método pedagógico práctico, inspirado en el “criterio oratoriano”, que guía las modalidades
concretas de opciones e intervenciones operativas que se proponen (ver capítulo V, n.3).
4.4 La caridad Pastoral como principio inspirador

Para Don Bosco, educar comporta unas actitudes especiales del educador y un conjunto de intervenciones,
basadas en convicciones de amor, de razón y de fe. En el centro de su visión está la “caridad pastoral”. Se
trata de buscar de manera particular el bien espiritual de los jóvenes, su salvación, su bien integral («Da
mihi animas»).

El Sistema Preventivo encuentra su fuente y su centro en la experiencia de la caridad de Dios que previene
a toda criatura con su Providencia, la acompaña con su presencia y la salva entregando la vida (cfr. Const.
20). Don Bosco tenía una profunda fe en la bondad y en la paternidad misericordiosa de Dios. La elección
de San Francisco de Sales como ejemplo para sus colaboradores y como protector de su Congregación lo
confirma.

Esta experiencia apunta a la acogida de Dios en los jóvenes: en ellos Dios nos ofrece la gracia del encuentro
con Él, nos llama a servirlo en ellos. Una experiencia que reconoce su dignidad, renueva la confianza en sus
recursos para el bien, los educa en la plenitud de la vida (cfr. CG23, n. 95). En esta dinámica educativa,
atendiendo a los jóvenes, los educa para ser protagonistas de la evangelización.

La caridad pastoral salesiana tiene otra característica más precisa que la define mejor: es una caridad
pedagógica. Demuestra pasión educativa, pero también discreción, sentido común, equilibrio, afecto y
respeto al adolescente y al joven. Esta actitud es fruto de la convicción de que toda vida, aún la más pobre,
compleja y precaria, lleva en sí, por la presencia misteriosa del Espíritu, la fuerza de la redención y la semilla
de la felicidad (cfr. CG23, n. 92).
4.5 La Pastoral Juvenil Salesiana: Una experiencia comunitaria

El Sistema Preventivo es nuestra forma de vivir la misión de Don Bosco hoy, lo que llamamos Pastoral
Juvenil Salesiana.

Como Don Bosco, también nosotros, unidos y comprometidos en la acción evangelizadora de la Iglesia en
el mundo, ofrecemos una aportación carismática específica: atendemos preferentemente al mundo
juvenil, y nuestra acción pastoral es específicamente juvenil, con las características propias del espíritu
salesiano.

Nuestro trabajo apostólico y nuestro estilo educativo se caracterizan también por su sentido comunitario,
ya que: la comunidad es el sujeto y objeto de la misión pastoral (cf. C 44), encaminamos a los jóvenes hacia
una experiencia de vida eclesial con su entrada y participación en una comunidad de fe (cf. C 35) y
favorecemos el espíritu de familia, las relaciones personales, la mutua confianza entre educadores y
jóvenes, y la promoción de la vida de grupo y del protagonismo juvenil (cf. C 16.35).
“La acción pastoral es eclesial y se vive y se realiza en comunión: “el mandato apostólico que nos confía la
Iglesia, lo reciben y realizan en primer lugar, las comunidades inspectoriales y locales” (Const. 44). La
inspectoría es la primera escritura territorial en la que la Congregación organiza y anima, en un determinado
territorio, la vida de comunión y la realización de la misión. La comunidad inspectorial es la mediadora que
une las comunidades locales entre sí, con las otras inspectorías, con la comunidad mundial y con la Iglesia.
La realización de la pastoral es fundamental la referencia a las opciones de la inspectoría que se articulan en
el Proyecto Educativo- Pastoral Salesiano Inspectorial (PEPSI O PEPS inspectorial). Este señala las grandes
opciones e indica las orientaciones para el desarrollo de la Pastoral Juvenil en todas las obras.
La comunidad local está llamada a vivir y actuar como clara mentalidad de proyecto: una mentalidad que
lleva a identificar los campos prioritarios de atención y a cumplir las opciones fundamentales que deben
guiar la vida de las personas y el cumplimiento de las acciones en los diversos sectores de la obra.
Para la promoción de una estrecha colaboración entre las diversas obras y servicios en función de la
unidad, hace falta:

 garantizar en el POI la convergencia y la articulación de las opciones de animación y gobierno;


 mantener clara la conciencia de la globalidad de acción pastoral,
 realizar una sistemática reflexión entre la realidad y los objetos.
4.6 Espiritualidad Juvenil Salesiana

La Espiritualidad Juvenil Salesiana es: el elemento fundamental de la acción educativo-pastoral; fuente de


vitalidad evangélica; principio de inspiración y de identidad y criterio de orientación. Se trata de:
Una espiritualidad adecuada a los jóvenes, especialmente los más pobres, que sabe descubrir la acción del
Espíritu en su corazón y colaborar en su desarrollo.

Una espiritualidad de lo cotidiano, que propone la vida de cada día como lugar de encuentro con Dios y
que encuentra en los Sacramentos una fuente regular de gracia.
Una espiritualidad Pascual de la alegría en la laboriosidad, que desarrolla una actitud positiva de esperanza
en los recursos naturales y sobrenaturales de las personas y presenta la vida cristiana como un camino de
bienaventuranzas.

Una espiritualidad de la amistad y de la relación personal con el Señor Jesús, conocido y frecuentado en la
oración, en la Eucaristía y en la Palabra.

Una espiritualidad de Comunión Eclesial vivida en los grupos y, sobre todo, en la comunidad educativa, que
une a los jóvenes y educadores en un ambiente de familia en torno a un proyecto de educación integral de
los jóvenes.

Una espiritualidad del servicio responsable, que suscita en los jóvenes y adultos un renovado compromiso
apostólico por la transformación cristiana del propio ambiente hasta el compromiso vocacional.

Una espiritualidad Mariana, que se abandona con simplicidad y confianza en el materno auxilio de la
Virgen.

Esta espiritualidad ayuda a discernir y a afrontar los desafíos de la acción pastoral, garantiza la energía
necesaria para caminar hacia la meta; es fuente de entusiasmo, profundidad y fuerza evangelizadora; y
crea unidad entre todos aquellos que comparten y colaboran en la misión. (CdR IV-3).

Según la expresión de Don Bosco, los educadores crean con los jóvenes una “familia”, una comunidad juvenil
donde los intereses y las experiencias de los jóvenes se ponen como fundamento de todo el arco educativo.
Los educadores no solo enseñan, sino que “asisten”; trabajan, estudian y rezan junto a los alumnos. Son
personas disponibles para estar con los jóvenes, capaces de hacerse cargo de sus problemas: “maestros en
la cátedra y hermanos en el patio” (Don Bosco)
Don Bosco amplió su compromiso promoviendo el nacimiento de las escuelas salesianas. Intuyó que la
escuela es instrumento indispensable para la educación, lugar de encuentro entre cultura y fe. Consideramos
la escuela una mediación cultural privilegiada de educación en la que se puede dar una respuesta sistemática
a las necesidades de la edad evolutiva; una institución determinante en la formación de la personalidad,
porque trasmite una concepción al mundo, del hombre y la historia.
Don Bosco orienta decididamente su obra hacia la juventud; escoge conscientemente ofrecerse con
disponibilidad para acoger a los adolescentes y jóvenes “en riesgo”: de cara a la liberación integral de los
mismos, esta opción se convierte en el criterio de su planteamiento evangelizador.

Don Bosco elige la condición evangélica de hacerse pobre con los pobres. Camina junto a ellos,
adaptándose a su paso. El encuentro con cada joven es para él ocasión de dialogo y de un posibles
acercamiento a la fe. Este es, sencillamente, el terreno donde la propuesta de fe se revela como recurso de
vida, potencial plenitud de vida. Camina verdaderamente junto a ellos, los sostiene, los anima.
4.7 Comunidad Educativa

La CEP, objeto y sujeto de la evangelización, es un centro de llamada y acogida del mayor número posible de
personas interesadas en los aspectos humanos y religiosos del territorio. Un desafío pastoral bien claro es el
de una participación más plena de la familia, la primera e indispensable comunidad educadora.
Reconocemos que la familia es la célula de la sociedad y de la Iglesia. Ella, aún con todas sus dificultades, es
estimada por los hijos que reciben su indispensable afecto. Para los padres, la educación es un deber
esencial, unido a la transmisión de la vida, vocación original y primaria con respecto a la tarea educativa de
otros sujetos; insustituible e inalienable y que, por consiguiente, no puede ser totalmente delegado o
usurpado por otros (cfr. Familiaris Consortio 36).

4.8 Una Vida orientada a la acción y al compromiso

Un aspecto importante en el actual contexto cultural concierne la formación social. No se pueden descuidar
en educación las actitudes necesarias para asegurar la supervivencia del planeta. A medida que el mundo
llega a ser, cada vez más, un conjunto global en una red de comunicación, de intercambio y de intereses
tanto más difícil resulta el estar juntos en el planeta. El verdadero problema puede quedar sintetizado en la
siguiente pregunta: ¿cómo construir una cultura, que permita vivir sobre la tierra, en relaciones de verdadera
solidaridad, respetando al mismo tiempo la promoción de la diversidad de las culturas?

La espiritualidad cristiana ofrece algunas pistas de solución que se pueden integrar en la espiritualidad
salesiana. Conviene subrayar, por ejemplo, la importancia de una espiritualidad que cuida la memoria de la
cercanía de Dios que por una parte se expresa en la gratuidad de alabar a Dios y, por otra, en una cierta
manera de vivir conjuntamente “como familiares de Dios” (Ef 2,19). Los dos aspectos se han de considerar
al unísono. Se trata de una actitud de gratuidad que tiene consecuencias notables en la convivencia entre
los hombres. Vivir la gratuidad tiene su fundamento en la interioridad. En la perspectiva cristiana de vivir en
una relación personal con Dios, que de por sí no es inmediatamente visible. Dios está presente como Amor
y por este motivo la relación con él crece en la interioridad del hombre. La actitud de gratuidad cambia
interiormente el hombre. Le permite vivir en modo diverso, comportarse diversamente cuando trabaja o
descansa, cuando se divierte o sufre, cuando se encuentra solo o en compañía de los demás.

Una espiritualidad de la unión con Dios supone siempre un cuidado y una cultura de la interioridad. A este
nivel se sitúa ciertamente una verdadera obligación para la espiritualidad salesiana: ¿cómo se puede llegar
a una verdadera interioridad vivida en una vida orientada hacia el compromiso y la acción?
5. Opciones Históricas Fundamentales

Las opciones históricas son decisiones fundamentales que la Comunidad toma. Ellas pretenden orientar
profundamente nuestras acciones futuras y dar consistencia a las mismas, es decir, claridad y sentido a
nuestra misión salesiana (POI 3).

La historia centenaria de la Casa y el propio devenir de sus diversas opciones han iluminado en todo
momento también la revisión del proyecto. Siguiendo con el proceso de construcción participativa, desde
la primera mitad del año 2016, este trabajo se ha visto enriquecido por la reflexión del Consejo de la
Comunidad Educativo Pastoral (CoCEP) que en ese momento particular de la historia estuvo formado por
un numeroso y diverso grupo de jóvenes y adultos animadores de todos los campos de acción de la Obra.
Estos animadores, a partir de un trabajo de construcción comunitaria en sus respectivos campos de acción,
y en sintonía con el Proyecto Orgánico Inspectorial (POI) han elaborado las siguientes opciones que deberán
ayudarnos a:

 establecer vínculos entre lo que está disperso en nuestra misión, para integrarlo en un nuevo
contexto, dándole mayor significatividad a nuestra tarea educativo-pastoral;
 descubrir las nuevas dimensiones de sentido evangélico de nuestra vida ampliando el círculo de
comprensión de lo que nos rodea;
 establecer un puente entre reflexión y acción, entre experiencia y conceptualización, entre teoría y
práctica;
 promover un pensamiento divergente, a través de la tensión, de la búsqueda, y a través de la
organización e integración;
 enriquecer nuestra vida personal y comunitaria en un proceso de formación integral que sea
permanente, paciente y de confianza en Dios. Permanente porque nunca se acaba. Paciente,
porque sus resultados no siempre aparecen inmediatamente. De confianza, porque es a través de la
fe que se vive en una actitud mística del carisma; seguir realizando opciones educativo-pastorales
proféticas que señalen la presencia del Reino en el contexto local (cf. POI 2).
Como Comunidad de la Casa Salesiana Santa Catalina, nuestras opciones son:

1. Con la figura de Jesús Buen Pastor como modelo, optamos por salir al encuentro de los niños y
jóvenes, especialmente de los más pobres, abandonados y en peligro, abrazando sus pobrezas y
dejándonos interpelar por ellos.
2. Optamos por el Oratorio como criterio permanente de discernimiento y renovación de todos los
campos pastorales de la casa. (POI 3, op 7)
3. Optamos por sostener, favorecer y acompañar de manera prioritaria los espacios de gratuidad que
genera el asociacionismo juvenil.
4. Optamos por acompañar procesos de discernimiento vocacional, entendiendo que el niño y el joven
que se acercan, sea en el campo escuela como en las propuestas del MJS, son el centro de nuestra
acción pastoral y que nuestra misión evangelizadora es acompañarlos en la construcción de su
propio proyecto de vida, donde descubran que Dios los invita a ser felices y a participar en la
construcción de una sociedad más justa y equitativa.
5. Optamos por caminar hacia la construcción de una Comunidad local más unida y articulada, en la
que la diversidad sea entendida como signo de la riqueza del Espíritu que se manifiesta en nosotros,
favoreciendo espacios formativos y celebrativos para la comunidad de fe.
6. Inspirados en la maternal presencia de María, optamos por un modelo de gestión, animación y
acompañamiento que privilegie la corresponsabilidad, la escucha, la ternura, la empatía y el
cuidado.
7. Optamos por estar siempre atentos y cercanos a la diversidad de expresiones juveniles en los
aspectos religiosos, deportivos y culturales.
8. Optamos por abrir cada vez más nuestros espacios y nuestra mirada al barrio, articulando con otras
instituciones, para crecer en el cuidado de la vida de los niños y jóvenes más necesitados que
acompañamos
9. Optamos por relanzar la Parroquia, pensada como un territorio afectivo que robustezca el sentido
de pertenencia de toda la CEP, aprovechando las vastas posibilidades y condiciones favorables para
el cumplimiento de la misión salesiana, de manera especial lo referido a la evangelización de los
jóvenes y al robustecimiento de la comunidad de fe de la Casa.
10. Optamos por un modelo de animaciones cada vez más participativo y con mayor corresponsabilidad
entre salesianos consagrados y laicos, asumiendo la opción inspectorial en lo referido a la
animación zonal que busca la mayor significatividad de los consagrados desde la gratuidad.
5. Mapa Operativo: Desafíos y Líneas de Acción

En la segunda mitad del año 2016 y parte del 2017 se trabaja en el mapa operativo, construyendo líneas de
acción y una primera redacción del PEPSAL que se sigue revisando en los distintos encuentros del CoCEP.
De esta manera, se fueron construyendo los desafíos, a partir de los problemas encontrados y que fueron
iluminados por el Mapa Teórico. Estos “desafíos” responden a cinco núcleos temáticos: Comunión y
Comunicación, Apertura al Barrio, Formación y Evangelización, Sostenimiento de la Opción Preferencial por
los Jóvenes más Pobres, Articulación Zonal y Misión Compartida.
A cada uno de estos desafíos, le siguen "líneas de acción” que constituyen el “Mapa Operativo”. Estas líneas
de acción son la matriz pastoral de nuestra propuesta evangelizadora que busca ser pensada, renovada,
estudiada y actualizada. Son respuestas de acción a los desafíos de la realidad (PEPSI 3).
Para profundizar en qué proyectos y/o actividades estas líneas de acción buscan ser concretizadas, será
necesario revisar la planificación anual de cada campo de acción. Al mismo tiempo estos desafíos y estas
líneas sirven como inspiración y orientación para los nuevos proyectos y acciones que puedan surgir, año a
año, de cada espacio educativo-pastoral.
En el año 2018 se trabaja en una revisión global de la mirada sobre las Desafíos, Opciones y Líneas de Acción
y en la redacción final del mismo, con el que esperamos poder concretar más eficazmente nuestros sueños.

Las líneas de acción son el corazón de la planificación pastoral, con las que se permite articular
una respuesta a los desafíos, y así poder construir mapa operativo pastoral de la Casa.

Fruto del camino de discernimiento en el cual planificaremos acciones futuras, nos ayudará el
instrumento de planeación líneas de acción. Estas son la matriz pastoral de una propuesta
evangelizadora, pensada, renovada, estudiada y actualizada. Son respuestas de acción a los
desafíos de la realidad.

La línea de acción es una corriente que “arrastra” todas las acciones y que las “encauza” por un
enfoque teórico que orienta hacia una finalidad concreta, en el marco de ideales o utopías más
amplias. (PEPSI: pag: 31)
Desafío: Comunión y Comunicación
Líneas de acción
Corriente: Dar continuidad a la comunicación entre los diferentes espacios de la Casa.
Enfoque: Sabiendo que el objeto y sujeto de la evangelización, es un centro de llamada y acogida de mayor
número de personas posible de personas interesadas a los aspectos humanos y religiosos del territorio. Un
desafío pastoral bien claro es la participación plena.
Finalidad: Para poder promover el trabajo comunitario y comprometido de todos los actores.
Utopía: Escuchando así todas las voces y llevar adelante proyectos que nos impulsen al amor verdadero de
la comunidad.

Corriente: Continuar afianzando las estructuras e instancias de la orgánica de Casa con mayor
participación juvenil
Enfoque: Siendo conscientes de que la Espiritualidad juvenil salesiana es: el elemento fundamental de la
acción educativo-pastoral; fuente de vitalidad evangélica; principio de inspiración, de identidad, criterio e
inspiración
Finalidad: Propiciando siempre el protagonismo y escuchando sus desafíos
Utopía: Para formar la mesa comunitaria donde puedan crecer todos y todas.

Corriente: Potenciar la oración, reflexión y acción que llevan a una concepción más sólida de unidad de la
Comunidad de fe
Enfoque: Asumiendo que debemos construir itinerarios evangelizadores sabiendo que somos capaces de
amar a Dios, porque él nos amó primero, y por lo tanto queremos vivir la vida sacramental como un
camino de pertenencia.
Finalidad: Para seguir construyendo la vida de la comunidad siendo capaces de sostener y vivenciar un
proyecto común.
Utopía: Para vivir con plenitud y apertura el Reino de Dios, como lo hizo Jesús de Nazaret

Corriente: Sistematizar con toda la CEP, instancias de revisión y planificación de las prácticas pastorales
de acompañamiento
Enfoque: Buscando momentos de discernimiento compartido para revisar y reestructurar el proceso de
planificación pastoral, redefiniendo de manera periódica los procesos de comunitarios y sociales.
Finalidad: Entendiendo la corresponsabilidad de las bases de cuidado y del acompañamiento salesiano.
Utopía: Caminando con los jóvenes hacia el estilo de acompañamiento de Jesús en Emaús.
Desafío: Formación y Evangelización
Líneas de acción
Corriente: Generar un itinerario de Formación situado para cada campo de acción.
Enfoque: Asumiendo nuestra vocación cristiana de transformar todas las estructuras que limitan el proyecto
de Dios entre nosotros y en nuestra sociedad proponiendo para esto itinerarios de formación que nos
ayuden a discernir.
Finalidad: Para construir y favorecer la espiritualidad de comunión eclesial vivida en los diferentes
espacios, que une en un ambiente de familias en torno a un proyecto de educación integral.
Utopía: Impulsando ser comunidades fraternas, donde se pueda apostar al dialogo a través del
discernimiento que buscan transformar la realidad cercana desde el estilo de Don Bosco.

Corriente: Hacer crecer las posibilidades de la Parroquia convocando a la “comunidad de fe” de la CEP,
cuidando a la comunidad juvenil
Enfoque: Como Don Bosco, también nosotros unidos y comprometidos en la acción evangelizadora de la
Iglesia en el mundo, ofrecemos una aportación carismática específica: atendemos preferente al mundo
juvenil, y la acción pastoral con características propias salesianas.
Finalidad: Para afirmar la vida de nuestra comunidad educativa pastoral siendo capaces de sostener y
vivenciar el Evangelio.
Utopía: Celebrando comunitariamente la liturgia comprometiéndonos con la vida de los jóvenes

Corriente: Acompañar la participación activa en los diferentes espacios y propuestas inspectoriales y


acompañarlos a construir su proyecto personal
Enfoque: Asumiendo una espiritualidad de la unión con Dios que supone siempre un cuidado y una cultura
de la interioridad, en donde se sitúa una verdadera obligación de la espiritualidad salesiana
Finalidad: Para acompañar a los jóvenes en el compromiso de la vida de fe, comprometiéndose con la
identidad y la vocación desde la Espiritualidad Juvenil Salesiana.
Utopía: Sabiendo que el Reino de Dios se descubre y se encarna por la mediación de la propuesta
comunitaria
Desafío: Sostenimiento de la opción preferencial por los jóvenes más pobres
Líneas de acción
Corriente: Generar espacios y proyectos que profundicen la formación salesiana, privilegiando la opción
preferencial por el Oratorio y por los jóvenes más pobres, abandonados y en peligro.
Enfoque: Don Bosco orienta decididamente su obra hacia ellos, escoge conscientemente ofrecer con
disponibilidad para acoger a los adolescentes y jóvenes en riesgo: de cara a la liberación integral de los
mismos, esta opción se convierte en el criterio de su planeamiento evangelizador.
Finalidad: Para posibilitar en el encuentro de con cada joven una ocasión de dialogo y de posible
acercamiento a la fe.
Utopía: Caminando como Don Bosco junto a ellos, sosteniendo y animando sus vidas.

Corriente: Elaborar instrumentos para que los diversos espacios puedan ir generando una cultura de
mayor participación y comunión en la economía de la Casa.
Enfoque: Educando para la corresponsabilidad de una economía de comunión, que nos permita poder
disponer de los recursos materiales de una manera más evangélica, y donde todos aprendamos a asumir
como propia la construcción del bien común.

Corriente: Generar un presupuesto participativo que atienda a las necesidades de todas las acciones del
proyecto, en especial las referidas a los destinatarios más vulnerables de nuestras propuestas.
Enfoque: Generar proceso que ayuden a convertir la mirada hacia una economía de comunión en la Casa
(PEPSI, pag: 26)
Finalidad: Para dar pasos en la economía solidaria en las que todos los actores de los espacios se sientan
integrados y comprometidos.
Utopía: Inspirándonos en las primeras comunidades cristianas, poniendo todo en común.
Desafío: Articulación Zonal y Misión Compartida
Líneas de acción
Corriente: Potenciar más las actividades con ambas casas hermanas (San Juan Evangelista y San Pedro)
que posibiliten seguir caminando juntos y construir comunión especialmente en el plano formativo.
Enfoque: Fomentando la mutua conexión y colaboración de todos los espacios de las casas, como la
formación de los educadores y las opciones del proyecto.
Finalidad: Articulando las propuestas y las conexiones entre los educadores y destinatarios preferenciales.
Utopía: Buscando construir una comunidad zonal cada vez más cercana y fraterna.

Corriente: Continuar generando espacios de reflexión y de diseño del Modelo Operativo en la Casa en la
gestión laical
Enfoque: Atendiendo a los nuevos emergentes y necesidades vitales de cada espacio, promoviendo así la
participación de más jóvenes comprometidos con las opciones fundamentales en todos los equipos de
animación de la Casa, asumiendo las responsabilidades.
Finalidad: Para dar pasos cada vez más firmes y constantes en un nuevo modelo de animación centrado en
los valores de EJS.
Utopía: Sabiendo que Dios construye a través de cada uno, conociendo nuestras debilidades y pobrezas.

Corriente: Avanzar en la construcción de espacios formativos comunes de los diversos equipos de


animación de las tres Casas, priorizando los Consejos de Obra.
Enfoque: Priorizando la reflexión, el dialogo, la programación y revisión de la acción educativa pastoral (cfr.
CG 24, nn 160-161, 171)
Finalidad: Atendiendo al proceso de discernimiento de cada Casa, haciendo circular la palabra y
promoviendo una participación genuina entre las tres obras, tomando decisiones hacia la opción
comunitaria.
Utopía: Contagiando el verdadero espíritu de Jesús como servidor del Reino.

Corriente: Comunicar y difundir las diferentes propuestas de las tres Casas Salesianas en conjunto y en
diversos formatos, para visibilizar la articulación que se va construyendo.
Enfoque: Para evidenciar comunidades más fecundas que puedan llevar adelante proyectos comunes en el
tiempo.
Finalidad: Para favorecer el trabajo conjunto y sostenido al servicio de los jóvenes más vulnerables de
nuestra zona.
Utopía: Asumiendo nuestra vocación cristiana de transformar todas las estructuras que limitan el proyecto
de Dios entre nosotros y en nuestra sociedad proponiendo para esto itinerarios de formación que nos
ayuden a discernir.
Desafío: Apertura al Barrio
Líneas de acción
Corriente: Promover la opción por el carisma salesiano y las opciones fundamentales, a los educadores y
familias que se incorporan al campo Escuela
Enfoque: Don Bosco instauró que la escuela es instrumento indispensable para la educación, considerando
este como el espacio de mediación cultural privilegiando la mirada hacia los valores del carisma.
Finalidad: Involucrando a la Comunidad educativa en el nuevo sujeto de un ambiente educativo con
responsabilidad, y concretando criterios y estrategias para afrontar la realización del PEPS.
Utopía: Siendo servidores y educadores promoviendo el clima de familia y la mirada en la centralidad de
Cristo.
Corriente: Generar itinerarios de formación para toda la comunidad con el fin de lograr la formación
conjunta
Enfoque: Como Don Bosco, también nosotros, unidos y comprometidos en la acción evangelizadora de la
Iglesia en el mundo, ofrecemos la aportación carismática específica: atendemos preferentemente al
mundo juvenil, y nuestra acción pastoral es específicamente juvenil, con las características propias del
espíritu salesiano.
Finalidad: Para lograr generar propuestas significativas y valiosas que nos permitan afrontar las nuevas
realidades de las infancias y juventudes.
Utopía: Animándonos a hacer opciones reales como Don Bosco capaces de escuchar los gritos de la
realidad juvenil.
Corriente: Potenciar el trabajo en red con otras instituciones del barrio, como así también los proyectos
del campo de la Escuela que atienden a las situaciones de más vulnerabilidad.
Enfoque: Reflexionando permanentemente sobre la preponderancia de la justicia social y procurando
resguardar cada uno de los derechos de niños, niñas y adolescentes que nos toca cuidar y acompañar.
Finalidad: Para que nos involucremos y nos sintamos interpelados para poder acompañarlos en sus
recorridos y validación de aquellos derechos.
Utopía: Para crear una sociedad, donde los últimos sean tenidos en cuenta y puedan luchar para crecer
cada día mejor.
Corriente: Atender a los nuevos desafíos y necesidades que tengan los niños, niñas y adolescentes del
barrio que mejoren sus respuestas creativas que mejoren su calidad de vida.
Enfoque: “Declarándonos a favor de ellos, abrazando sus legítimos intereses y denunciando todo lo que es
contrario a la Vida” (PEPSI, pag: 41)
Finalidad: Para poder generar propuestas que den respuestas a la realidad teniendo presente siempre la
lucha por la justicia y la vida digan de cada ser humano.
Utopía: Valorando como Don Bosco a los más pobres, abandonados y en peligro.
7. Anexos
Tiempos Pastorales de la Casa
Nómina de Directores (1861-2018)

1861-1885: P. Carlos Palomar 1952-1956: P. Guillermo Leaden

1885: P. Juan Paseri 1957: P. J. Gonzalez del Pino

1885-1894: P. Victor Durando 1957-1965: P. Juan G. Cristiano

1894-1895: P. Juan Gasparoli 1965-1970: P. Francisco Jordán

1896-1906: P. Pedro Milano 1970-1972: P. José Da Costa

1906-1908: P. Luis Macchi 1973-1978: P. José Arévalo

1909: P. Luis Castiglia 1979-1983: P. Juan Cristiano

1910-1920: P. Bartolomé Molinari 1984-1986: P. Silverio Jacuzzi

1921-1926: P. Esteban Pagliere 1987-1992: P. Carlos Morena

1926: P. Tomás Ussher 1993-1998: P. Francisco De Rito

1927-1929: P. Santiago P. Doyle 1999: P. José Repovz/P. Fabián Alonso

1930: P. Juan Farinatti 2000-2005: P. Fabián Alonso

1931-1934: P. Roberto J. Tavella 2006-2008: P. Alejandro León

1934: P. David Ortega 2009: P. Mario Iantorno

1935: P. Pablo Z. Vicari 2010-2011: P. Enrique Lapadula

1936-1942: P. Luis Correa Llano 2012-2017: P. Carlos Bareuther

1943-1948: P. Pablo Z. Vicari


2018 - : Fabián R. Massoni (Inicio Gestión
1949-1952: P. Luis Correa Llano Laical)

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