Definición del libro
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Definición del libro
LOS CÓDICES
Los códices son fuentes históricas de primera mano en los que las sociedades
indígenas, por intermedio de escribas con la habilidad para pintar con gran maestría,
dejaron constancia fiel de sus logros y avances culturales y científicos e informaron
sobre una multitud de aspectos, como las creencias religiosas, los ritos y ceremonias, la
historia, el sistema económico y la cronología, entre muchos otros.
Se llama códices, del latín codex: libro manuscrito, a los documentos pictóricos
o de imágenes realizados como productos culturales de las grandes civilizaciones maya,
azteca, mixteca, zapoteca, otomí, purépecha, etc., que surgieron y se desarrollaron en
Mesoamérica.
Desde épocas muy remotas, se fijaron en esos manuscritos los conocimientos de
los antiguos pueblos; por ello, la información registrada en los códices es de la mayor
importancia: gracias a sus múltiples contenidos temáticos, podemos saber directamente
acerca de sus logros y avances culturales y científicos, creencias religiosas, ritos y
ceremonias, historia, genealogías y alianzas de los señores, nociones geográficas,
sistema económico, cronología, etc. En ellos se encuentran plasmados todos los
antiguos temas derivados de la tradición indígena, antes de la llegada de los españoles, y
los nuevos temas aportados por estos últimos, como la religión cristiana, los problemas
económicos y sociales originados por elcontacto y la vida indígena en el periodo de la
Colonia.
LA IMPRENTA
La imprenta refiere a un mecanismo capaz de reproducir textos e imágenes en un
soporte de papel, de tela o de otros materiales, con el fin de producirlos a gran escala.
Inicialmente operaba en base a dos planchas metálicas entre las cuales se
introducía el material a imprimir, y en las cuales se habían distribuido y entintado los
moldes tipográficos (letras) en el orden correcto del texto. Entonces se presionaba las
planchas y el texto quedaba marcado en la superficie.
La imprenta fue inventada en el siglo XV y perfeccionada con el pasar de los
siglos, pero desde entonces permite la reproducción serial de libros, revistas, folletos,
vestimentas y otros artículos dotados de textos e imágenes, a través de diversos métodos
de presión y entintado.
LIBROS DE BOLSILLO
Se denominan libros de bolsillo a todas aquellas ediciones que tengan un tamaño
pequeño y manejable, en la mayoría de los casos de tapa blanda y con un precio más
económico que las ediciones estándares de tapa dura. Se trata de una adaptación
pensada para que los lectores puedan no solo tener mejor acceso a los libros, sino
también poder llevarlo consigo a todas partes. La tapa blanda está pensada para que
puedan deformarse si van metidos en algún bolso o mochila y, por supuesto, esto hace
que se abaraten los costos de producción y su precio final. En los libros de bolsillo lo
relevante está en el interior y el exterior exclusivamente está pensado para su utilidad.
Su historia se remonta desde la Antigua Roma, cuando los romanos vieron la
necesidad de crear los llamados pugilares, unos códices que cabían en la palma de la
mano. Con el tiempo, la lectura y el saber se fueron popularizando y con la llegada de la
imprenta, varias grandes potencias empezaron a diseñar libros de pequeñas
dimensiones para distribuir la cultura y la tradición, generando incluso foros de lectura.
AUDIOLIBROS
Se trata de un libro que puedes escuchar, en lugar de leer. Es decir, es leído por
un narrador, aunque también existen audiolibros producidos exclusivamente en formato
de audio.
El formato por el que identificamos qué es un audiolibro surgió en la
década de 1930. Sin embargo, su historia se remonta mucho más atrás. Además, tuvo
que recorrer un largo camino. Pasó por el cilindro de fonógrafo, las cintas de casete, el
disco de vinilo y el CD para llegar a la presentación digital que tiene hoy.
En 1877, Thomas Alva Edison inventó el fonógrafo. Para probarlo, usó una
popular canción infantil: Mary tiene un corderito, el primer registro de una
grabación de voz. Desde ese momento se vio el potencial de las grabaciones de voz de
obras escritas. Desgraciadamente, los avances tecnológicos de la época eran muy
limitados.
En la década de 1920, el Real Instituto Nacional para Ciegos, en el Reino Unido,
comenzó a experimentar con “libros parlantes”. Pero fue en Estados Unidos donde se
dio, en 1932, el primer avance
ESTRATEGIAS PARA FOMENTAR LA LECTURA