Guia Fauna Terrestre Es

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Guía de la fauna terrestre del Parque Nacional Islas Atlánticas de Galicia.

Vertebrados.

PARQUE NACIONAL
Realización: Arcea. Xestión de Recursos Naturais S.L. www.arcea.net
Textos: Jorge Mouriño -excepto texto “murciélagos”, de Francisco Arcos- (Arcea)
Cartografía: Javier César Aldariz (Arcea)
Ilustraciones: Rafa Salvadores (Arcea)
Fotografía (páginas): César Vidal (33,35b,36,37,38,39,41,42,43a y
c,46a,48,49,53,54,55,58,59b,60,61,63,65,66,68,70a y 71), Jorge Mouriño
(1,4,5,6,7,8,9,10,11,12,13,15,19a, 28, 30, 34,35a,43b,50,73,78a y c), Luís
Dorado (17a y b,19b,21,22,23,24,25,26 y 27), Samuel Paz (51,57,59a,74,75 y
78b), Juan Sagardia (45,46b y 47), Pedro Galán (17c y 20), Francisco (Pipo)
Sierra-Abraín y Felix Angosto (14), Juan Antonio García Pérez (31), Jesús Framil
(70b) y Álvaro Barros (76).
Digitalización y tratamiento fotografías: Miguel Salvande (Arcea)
Diseño gráfico: Celia Arcos. www.celiaarcos.com
Traducción: Ana Buján y Jorge Mouriño
ÍNDICE
Las islas del Parque Nacional 1
Las islas Cíes 4
Las islas Ons 6
El archipiélago de Sálvora 8
El archipiélago de Cortegada 10
La fauna del Parque Nacional de las islas Atlánticas 11
Conservación de la fauna 13
Cómo ver la fauna 15
Los anfibios 16
Los reptiles 18
Los lagartos 19
Las lagartijas 20
Luciones y eslizones 22
Las culebras 24
Las aves 26
Las aves marinas 27
Los araos 31
Cormoranes 32
Gaviotas 34
Garzas y patos 38
Limícolas 40
Las rapaces 44
Rapaces nocturnas 47
Palomas y tórtolas 48
Chotacabras 50
Pájaros carpinteros 51
Vencejos y golondrinas 52
Pájaros de los acantilados: el colirrojo tizón 53
Lavanderas y bisbitas 54
Pájaros de espacios abiertos 56
Fringílidos 60
Pájaros forestales 62
Mirlos y zorzales 66
Pájaros en paso 67
Córvidos 69
Los mamíferos 72
Insectívoros 73
Roedores 74
El conejo 75
Murciélagos 76
Carnivoros 77
Apéndice. Listado de los vertebrados terrestres del Parque Nacional 79
Glosario 86
Para saber más 89
Normativa del Parque Nacional 90
LAS ISLAS DEL PARQUE NACIONAL
El Parque Nacional de las Islas Atlánticas de Galicia es el segundo de carácter marítimo-terrestre que
se declara en España, acompañando en esa categoría al archipiélago de Cabrera, en las islas Baleares.
Este parque protege ecosistemas litorales atlánticos (región eurosiberiana), principalmente fondos
marinos rocosos, arenosos y de maërl, así como acantilados, dunas y matorrales en la parte emergida,
y pequeñas o testimoniales áreas con bosque atlántico y marisma.

El Parque se creó en el año 2002, agrupando 8.480 ha de los archipiélagos que protegen las bocas
de las tres Rías Baixas más sureñas: las islas Cíes en la ría de Vigo, que ya constituían un Parque
Natural desde 1980; las islas Ons en la ría de Pontevedra, de propiedad pública y que ya gozaban de
cierta protección previa; y el archipiélago de Sálvora en la ría de Arousa, cuya isla principal, la isla de
Sálvora, es de propiedad privada, salvo el dominio público. A estos tres conjuntos insulares se sumó
el archipiélago de Cortegada, situado en el interior de la ría arousana, en una posición casi estuarina
y próxima a la desembocadura del río Ulla; la isla de Cortegada también es de propiedad privada,
salvo el dominio público, y estaba amenazada de urbanización. En conjunto, la superficie protegida
por el Parque es principalmente marina (86%).

Archipiélago Concello Superficie marina Superficie terrestre Superficie total


Cíes Vigo 2.658 433 3.091
Ons Bueu 2.171 470 2.641
Sálvora Ribeira 2.309 248 2.557
Cortegada Vilagarcía 147,2 43,8 191
Total Parque Nacional 7.285,2 1.194,8 8.480

1
Todas las islas gozan de un clima oceánico y submediterráneo, húmedo y cálido, caracterizado por una
temperatura media anual superior a los 14ºC y con un contraste térmico relativamente suave, tanto
entre las temperaturas estivales e invernales como entre las diurnas y nocturnas. En las Cíes, el promedio
de las temperaturas máximas de julio supera los 25ºC y junto con Ons y Sálvora, estas islas son uno
de los lugares con mayor radiación solar de Galicia. Las precipitaciones son variables y oscilan entre
una media anual de 877 litros/m2 en las Cíes hasta más del doble en Cortegada, contando con una
marcada sequía estival de dos a tres meses en los tres archipiélagos exteriores. Los fuertes vientos,
que predominan de componente sur en otoño e invierno y de componente norte en primavera y verano,
traen consigo una elevada salinidad arrastrada en forma de rocío desde las rompientes marinas y
condicionando fuertemente la vegetación.

El sustrato es casi todo de roca granítica aunque sobre todo en Ons y Cortegada también se encuentran
sectores con rocas metamórficas, como esquistos y gneises.

Vista aérea de la entrada de las Rías Baixas. En primer plano, las islas Cíes; al fondo, Ons y Sálvora, y las penínsulas del Salnés y Barbanza.

2
3
LAS ISLAS CÍES
Las islas Cíes son básicamente tres, de similar extensión: la isla Sur o de San Martiño, la del Faro y la de
Monte Agudo. Estas dos últimas están unidas por una playa y por una escollera natural rocosa, y en la
actualidad también por un dique artificial. Estas tres islas destacan por sus fuertes pendientes que
descienden desde cotas superiores a los 175 m sobre el nivel del mar y que culminan en el Alto das Cíes
(197 m), que se encuentra en la isla de Monte Agudo.

La vertiente occidental u oceánica es muy vertical y acantilada, con numerosas paredes y superficies
rocosas intercaladas con vegetación herbácea especializada, la única que aguanta la intensa salinidad
que levantan olas, viento y rompientes. Algunas cumbres y laderas abrigadas de poniente dan paso a
matorrales de tojos y espinales de endrinos, que se extienden por la cara oriental. Esta vertiente desciende
menos bruscamente hacia una costa más dócil, con tramos rocosos y deliciosas playas de fina arena
blanca, entre las que destacan Figueiras, Rodas y la playa de San Martiño, las tres con dunas. Hoy en día,
una gran parte de la vertiente oriental de las islas está ocupada por árboles exóticos e invasores,
principalmente eucalipto y acacia negra, pero también por falsa acacia y pino americano, así como por
plantaciones de pinos marítimos. En torno a estas tres islas existen algunos islotes rocosos, entre los que
cabe mencionar la Penela dos Viños, próxima al suroeste de la isla del Faro, y el Agoeiro, Agoeira o Boeiro,
situado a poco más de un kilómetro al sur de la isla de San Martiño.
Panorámica de las islas Cíes desde el Alto do Balcón

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LAS ISLAS CÍES

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LAS ISLAS ONS
Las islas Ons son dos: la propia isla de Ons, la más grande del Parque con 416 ha, alargada y estrecha; y
la Onza, redonda y mucho más pequeña, situada 600 m al sur de la anterior. El punto más alto se encuentra
en el alto del Cucorno o del Faro, con 128 m, en un contexto orográfico más redondeado y llano que en
las Cíes, si bien la cara occidental es algo rocosa y casi todo acantilada, con algunas playas de cantos
rodados. La vertiente oriental es de nuevo menos abrupta, incluyendo varias playas de arena (Canexol,
Area dos Cans, Melide...), menores que las de las Cíes, así como un total de ocho barrios de viviendas, la
mayor parte de ellas actualmente deshabitadas, excepto en la época estival. Los matorrales son predominantes
e incluyen escobonales de la escoba endémica Cytisus insularis, la principal joya botánica del Parque.
Apenas cuenta con plantaciones forestales de eucaliptos, acacias y pinos.

El componente humano se hace sentir en la isla de Ons, que cuenta con numerosos campos y todavía
algunos cultivos agrícolas. Son típicos los setos de sauce salguero, que hoy en día alcanzan un notable
desarrollo. Apenas separados de la isla de Ons se encuentran el islote Centulo, en el extremo norte de la
isla, y los islotes Freitosas, en la zona suroeste.

Vertiente occidental de la isla de Ons desde Onza

6
LAS ISLAS ONS

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EL ARCHIPIÉLAGO DE SÁLVORA
El archipiélago de Sálvora se compone de la isla de Sálvora, de los islotes Sagres y de un gran número
de islotes situados principalmente al nordeste de la isla de Sálvora, entre los que destacan Noro, Herbosa
y Vionta, zona de reserva y prácticamente los únicos que cuentan con vegetación herbácea entre un
complejo rosario de escollos y bajos rocosos. La Vionta resulta especial, ya que es prácticamente toda
arenosa y una gran parte de sus orillas son playas, contando con dunas fijas y un pequeño escobonal.
Sagres se compone de dos islotes vegetados y numerosos bajíos rocosos, situados todos cerca de la punta
Couso, en el extremo suroeste de la península del Barbanza.

La isla de Sálvora cuenta con una superficie de 212 ha. En la mitad sur aflora un gran número de peñascales
entre suaves y moderadas pendientes tapizadas de matorrales, espinales y pastos de acantilado, que
ascienden hasta los altos de Gralleiros (77 m), centrados en el sur de la isla. La mitad norte es muy llana,
húmeda y arenosa y en ella se encuentran las playas y campos dunares de Lagos, Zafra y Os Bois, así
como varias playas de cantos rodados y la antigua aldea de Sálvora. En la actualidad, aun pastan libres
una manada de caballos y algunos ciervos que soltó el propietario. Probablemente estos animales estén
limitando la regeneración de la vegetación forestal, en la que apenas crecen pies dispersos de sauces
salgueros y un pinar-eucaliptal de repoblación al este de la isla.

Faro de Sálvora con Ons al fondo

8
SÁLVORA

9
EL ARCHIPIÉLAGO DE CORTEGADA
El archipiélago de Cortegada también cuenta con una isla principal, la isla de Cortegada (39,5 ha), y varios
islotes situados al oeste: Malveira Chica, Malveira Grande, Briñas y O Con, todos ellos zonas de reserva.
La posición resguardada dentro de la ría, con menor influencia de viento salino, permite un mayor desarrollo
de la vegetación, que coloniza los pequeños islotes y tapiza mediante cubierta forestal casi la totalidad
de Cortegada, así como una buena parte de la Malveira Grande. Esta última, destaca por su vegetación,
con tojal costero, escobonal y rebollar, un pequeño bosque de melojos o rebollos que debe ser parecido
a los que antaño ocuparon las vaguadas resguardadas de Cíes, Ons y Sálvora.

La isla de Cortegada es muy plana (cota máxima de 19 m) y estuvo habitada hasta comienzos del siglo
XX. Desde entonces, la vegetación forestal se ha ido expandiendo, destacando el desarrollo de los laureles
que integraban los antiguos setos entre campos. Robles, melojos, sauces y alisos cuentan también con
ejemplares de gran porte, acompañados por pinos marítimos, además de algunos sectores plantados con
eucaliptos y pinos piñoneros.

CORTEGADA

10
LA FAUNA DEL PARQUE NACIONAL
DE LAS ISLAS ATLÁNTICAS
La principal particularidad de la fauna del Parque Nacional es su aislamiento con respecto a la fauna de
otros territorios, lo que implica que los animales no voladores (o nadadores de largas distancias) no
mantienen ningún intercambio genético con las poblaciones continentales de su misma especie. Una
excepción podría ser la isla de Cortegada, que durante la marea baja se encuentra prácticamente unida
a tierra a través de una llanura fangosa.

La fauna existente en todas las islas del planeta Tierra reúne unas características comunes que la
diferencian de la fauna de los continentes próximos. Estos aspectos se han desarrollado en una
teoría ecológica propia, reconocida desde la publicación de The Theory of Island Biogeography
en 1967 (MacArthur & Williamson), y varían, entre otros factores, dependiendo de la superficie de
las islas, del tiempo que lleven separadas del continente y de la heterogeneidad y estructura de la
vegetación.

Una de las peculiaridades de las faunas insulares es la de constituir comunidades más simples, que
cuentan con menos especies que en las regiones continentales próximas. Por ejemplo, suele haber
una mayor escasez de depredadores y se establecen menos relaciones de competencia entre especies.
Fruto de esta simplicidad, se crean unas condiciones ambientales diferentes que permiten procesos
evolutivos exclusivos.

Las poblaciones de especies no voladoras se quedaron aisladas en cada isla del Parque Nacional.

11
Por otro lado, y como consecuencia de lo anterior, las islas suelen presentar una gran originalidad, con
un alto porcentaje de endemismos. Es decir, resulta habitual que la fauna isleña cuente con especies y
razas endémicas o exclusivas de estas o aquellas islas.

Los archipiélagos que integran este Parque Nacional se encuentran separados del continente desde después
de la última glaciación, cuando el derretimiento del hielo provocó el ascenso del nivel del mar. Aunque
parece ser que este proceso ya se había repetido en varias ocasiones anteriores, la antigüedad del último
aislamiento cuenta con apenas 8.000-9.000 años, un tiempo muy corto en la escala evolutiva.

Fue entonces cuando las poblaciones de animales no voladores, como es el caso de los anfibios, los reptiles
y la mayor parte de los mamíferos, se fueron quedando aislados, sometidos durante esos miles de años
a fuerzas evolutivas diferentes a las de las poblaciones continentales, sin producirse ningún intercambio
genético. Aunque no se dispone de datos concretos, es previsible que en ese proceso se extinguiesen
varios animales en los territorios aislados, desembocando en la presencia actual de un número más
reducido de especies que en las zonas continentales vecinas. Debido al ínfimo período de tiempo que,
en la escala evolutiva del planeta, suponen los pocos miles de años de aislamiento, apenas se registran
endemismos en estas islas atlánticas. Entre los vertebrados únicamente se ha descrito una raza o subespecie
propia de lagarto ocelado en la isla de Sálvora, que probablemente sea la misma que habita en Cíes y
Ons. También se han detectado diferencias de tamaño, morfológicas o de hábitos reproductivos, entre las
poblaciones insulares y continentales próximas de salamandra común, lagartija ibérica, lagartija de Bocage
y musaraña común, a falta de estudios genéticos que en el futuro puedan describir nuevos taxones.

En general, los peces continentales y los anfibios son malos colonizadores de islas debido a la habitual
escasez de encharcamientos y de cursos de agua dulce de suficiente entidad, así como a la incapacidad
de los anfibios para vivir en aguas saladas. En el Parque Nacional de las islas Atlánticas de Galicia, la
escasa superficie emergida y el período de sequía estival son la causa de la ausencia de ríos de suficiente
entidad para albergar peces. Aunque la fauna piscícola sea muy abundante en el medio marino, sólo se
ha comprobado la existencia temporal de anguilas en determinados arroyos de la isla de Ons. Los anfibios,
por su parte, son escasos y en la actualidad sólo cuentan con tres especies, entre los que destaca la
salamandra por su abundancia en Ons.

Los mamíferos son también escasos y un alto porcentaje de las especies presentes fue introducida. Los
reptiles tienen una mayor representación, favorecidos por los abundantes roquedos y zonas abiertas,
siendo la isla de Ons la que posee una mayor riqueza específica, con un total de ocho especies.

Las aves son un mundo aparte, pues su capacidad para volar permite que se puedan desplazar hasta el
continente o incluso realizar grandes viajes migratorios, como es característico en esta clase de animales.
Algunas especies, como las aves marinas, encontraron en las islas un nuevo espacio en el que
nidificar, libre de depredadores terrestres como mamíferos carnívoros y jabalíes. Constituyen
colonias de cría de importancia internacional tanto de cormorán moñudo como de
gaviota patiamarilla. Algunas de estas aves, o incluso las grajillas, llegan a desplazarse
diariamente hasta la costa continental para buscar comida y vuelven a dormir
a las islas.

Colonia de gaviota patiamarilla en la isla


de Monte Agudo, Cíes. Al fondo Ons.
12
CONSERVACIÓN DE LA FAUNA
Uno de los objetivos de la declaración de Parque Nacional es asegurar la conservación y recuperación de
los hábitats y las especies, así como la preservación de la diversidad genética. Las poblaciones de animales
insulares son más sensibles a los cambios ambientales y a la introducción de nuevas especies, tanto por
estar adaptadas a relaciones ecológicas más simples, como por la evidente limitación de tamaño, tanto
de la población de la especie como de la superficie insular.

Prácticamente no existen datos sobre los cambios que pudieron ocurrir en la fauna de estas islas atlánticas
desde su colonización humana hace más de dos mil años. Sin embargo, se sospecha que pudieron ser
profundos, tanto por la acción humana directa (caza, recolección de huevos, deforestación...) como por
la introducción de animales como las ratas. Existe alguna referencia durante el siglo XX, pero hasta la
década de los setenta no se empezará a obtener y publicar información sobre algunas especies. Aun hoy
faltan por obtener determinados datos faunísticos básicos respecto a algunos grupos como los murciélagos
y especialmente respecto a localidades como las islas de Sálvora y Cortegada. En la última década, las
islas Cíes, y en menor medida las de Ons, fueron objeto de un mayor número de estudios e inventarios
faunísticos, con una frecuencia notable dentro del pobre contexto gallego.

Durante la segunda mitad del siglo XX tuvieron lugar importantes cambios que provocaron la desaparición
de algunas especies y probablemente la colonización de otras. Hacia el año 1950, Cíes, Ons y Sálvora
estaban habitadas y eran objeto de un intenso aprovechamiento agrícola y ganadero, con numerosos
campos cultivados, gran parte de los matorrales rozados o transformados en pastizales y con la vegetación
arbórea original desaparecida. La isla de Cortegada ya había quedado deshabitada en 1926. El Estado
inició una repoblación con pinos y eucaliptos que hoy en día constituye un problema en el Parque Nacional
al desplazar a la vegetación autóctona, sobre todo en las Cíes, y que en los próximos años absorberá un
importante esfuerzo humano y económico para su erradicación.

Al mismo tiempo, los habitantes, al carecer de servicios básicos y tener el pastoreo limitado, se vieron
empujados a dejar las islas, lo que provocó el abandono de los cultivos (total en las Cíes y Sálvora) y la
casi total desaparición de la ganadería. El abandono del pastoreo favoreció la recolonización del matorral
natural, lo que unido a la repoblación forestal perjudicó al grupo de los reptiles y a ciertas aves como la
alondra común, el cernícalo vulgar, la paloma bravía, la chova piquirroja y la grajilla; provocó incluso la
desaparición de esas especies en las Cíes y la extinción de la perdiz en el conjunto del Parque. La cubierta
forestal creada generó, a su vez, un nuevo hábitat que seguramente fue colonizado por el azor, el pico
picapinos, el agateador común, los reyezuelos y otros pájaros forestales.

La alteración humana de los manantiales y de los escasos encharcamientos existentes agudiza la escasa
disponibilidad de hábitats acuáticos, hasta el punto de haber provocado la extinción reciente, hace
aproximadamente treinta años, de al menos dos especies de anfibios en las Ons: el sapo común y la rana
verde; y probablemente también de la culebra de collar, asociada a hábitats acuáticos. La administración
del espacio natural proyecta actuar recuperando hábitats de cría de anfibios.

Caballos en Sálvora
13
Asociada al medio marino, la que antaño había sido la especie nidificante más numerosa, el arao, dejó de criar
víctima de la caza, de la intensificación pesquera (nuevas redes de enmalle) y de los tristemente numerosos
vertidos de petróleo. Las colonias de Ons y Cíes se encontraban en el límite de su amplia área de distribución
mundial. La última pareja crió en el año 1987 en la Furna dos Pesos, en la punta norte de las Cíes. Paralelamente,
las gaviotas patiamarillas multiplicaron su número debido a que se dejó de recoger sus huevos para consumo
humano y a que proliferaron nuevas fuentes de comida, como los residuos de la pesca y las basuras de la
sociedad moderna. Los cormoranes moñudos también se recuperaron tras años de intensa caza y de captura
de sus pollos para cocinarlos.

Araos criando en las Cíes en 1985.

Hoy en día, tanto la gaviota patiamarilla como el cormorán moñudo forman colonias de importancia internacional
debido al número de parejas reproductoras, lo que supuso la declaración de Cíes y Ons como sendas ZEPA
(Zona de Especial Protección para las Aves), en virtud de una Directiva europea. El Parque Nacional ha puesto
en marcha un Plan de Manejo del cormorán moñudo y realiza anualmente la monitorización de la reproducción
de aves marinas, limícolas y de otras aves amenazadas, y algunos años también evalúa la invernada de aves
acuáticas y marinas.

Recientemente han aparecido especies exóticas, algunas de ellas de carácter invasor como el visón americano,
que alteran la biodiversidad original a través de una presión predadora sobre aves marinas y quizás también
sobre anfibios, reptiles y mamíferos. Similares efectos podrían causar o haber causado animales introducidos
si bien propios de Galicia, como el gato doméstico. En la actualidad se están llevando a cabo acciones de control
de estas especies y también de las ratas.

La introducción de especies invasoras supone, después de la destrucción de hábitats, el mayor problema


de conservación de la fauna en el contexto mundial. Si ves algún animal exótico, ponlo en conocimiento
del personal del Parque.

14
CÓMO VER LA FAUNA
Para poder ver, sentir y gozar de la belleza y de la naturalidad de la fauna salvaje, es preciso conocer un
poco acerca de los hábitos de las diferentes especies o grupos de especies. Y, por encima de todo, mantener
una actitud permanente de respeto hacia el ritmo de vida de estos animales, evitando interferir en su
comportamiento, con especial atención para no provocar molestias en su ciclo reproductor. Si te gusta la
fotografía, recuerda que el bienestar de los animales es más importante que una foto. Las observaciones
de animales en su comportamiento natural (buscando comida, cazando, limpiándose o atrayendo a su
pareja) siempre son más gratificantes y emocionantes que cuando los vemos huir asustados.

En general, si queremos localizar fauna, no debemos ir haciendo ruido ni hablar en voz alta, mantendremos
los sentidos alerta y evitaremos llevar ropa de colores llamativos. Los grupos de gente numerosa tampoco
son favorables. Las primeras y últimas horas del día, sobre todo en verano, son las mejores para observar
aves y mamíferos. Por último, debemos respetar y no acceder a las zonas de reserva.
Los anfibios pueden localizarse en manantiales y pozas de aguas estancadas o lentas, fundamentalmente
los tritones y las larvas de todas las especies. Los sapillos pintojos se dispersan
por prados durante los días húmedos y lluviosos, mientras que las salamandras
son propias de noches templadas y húmedas: otoño, comienzos de la
primavera y épocas de lluvia en el verano. Sus movimientos son
lentos y resultan fáciles de ver una vez localizados.

A los réptiles, por el contrario, les gustan los días de sol y se


mueven muy rápido, generalmente en zonas de vegetación
baja o rocosa. Muchas veces los escucharemos al borde de
los caminos haciendo ruido al huir entre la vegetación. Sería
interesante prestar atención para verlos antes de que se
escondan, o bien aguardar con paciencia, a una distancia
prudencial, hasta que vuelvan a salir. Esto también resulta
útil para los pequeños mamíferos, aunque lo más habitual
es que conozcamos su presencia a través de indicios como
las huellas, los excrementos o los restos de su comida.
Letrina de excrementos de conejo.

Las aves son los animales más fáciles de ver, tanto por su abundancia
y diversidad como por confiar en el vuelo para huir a menor distancia
de nosotros. Los prismáticos (8 a 12 aumentos) son una herramienta que
facilita enormemente la observación, ya que permite seguirlas a cierta distancia
sin alterar su comportamiento. Para las aves marinas, acuáticas y de acantilado, resulta muy útil el telescopio
(20 a 60 aumentos), que permite obtener detalles a mayor distancia. Las aves marinas se pueden ver
posadas o volando durante las travesías en barco, en ocasiones a escasos metros. Una vez en las islas,
también se pueden ver sobre todo desde puntos prominentes y a cierta altura sobre el mar (30-50 metros).
Algunos lugares buenos para ello son el Faro da Porta y el Faro do Peito en las Cíes, el mirador de Fedorento
y el Burato do Inferno en Ons, o los alrededores del faro en Sálvora. Patos, garzas y limícolas pueden verse
en playas y costas rocosas bajas que tengan piedras aisladas donde descansar tranquilas, o bien con pozas
para alimentarse. Los mejores lugares son la costa entre Carracido y A Cantareira en las Cíes (principalmente
en el Lago), la costa entre Pereiró y O Castelo en las Ons y el entorno de Sálvora y Cortegada.
15
LOS ANFIBIOS
En las islas del Parque Nacional predominan los ambientes secos, con vegetación
muy espesa y con escasos encharcamientos de agua dulce, lo que no favorece la
presencia de anfibios. De las 12 especies que se pueden encontrar en la costa
continental próxima al Parque, sólo tres de ellas se encuentran hoy en día presentes
en estas islas Atlánticas: dos urodelos o anfibios con cola (salamandra y tritón) y
un anuro –grupo de los anfibios sin rabo y con las patas traseras más desarrolladas,
el sapillo pintojo ibérico. Las larvas de ambas especies tienen rabo pero se diferencian
con facilidad por la existencia o no de patas, y pueden observarse en algunas charcas.

Larva de tritón o salamandra

Larva de rana o sapo

ESTOS ANFIBIOS SON INOFENSIVOS Y BENEFICIOSOS. AL IGUAL QUE EL RESTO DE LA FAUNA, NO DEBEN SER
MOLESTADOS. SU MUERTE INTENCIONADA ESTÁ SEVERAMENTE CASTIGADA

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Salamandra común Salamandra salamandra
Tritón ibérico Triturus boscai
Sapillo pintojo ibérico Discoglossus galganoi
Rana verde Rana perezi
Sapo común Bufo bufo

= posible; = raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

El estado de conservación de los anfibios en el Parque Nacional de las Islas Atlánticas es deficiente, excepto
en Sálvora. En Cíes y Ons existen evidencias de su rarefacción y están desapareciendo en algunas islas debido,
entre otras causas, a la destrucción de hábitats provocada por la eucaliptización y a la degradación o inapropiada
urbanización de fuentes y zonas húmedas. A este respecto, el Parque Nacional proyecta actuaciones para
recuperar los hábitats de los anfibios.
16
El tritón ibérico es menor que
la salamandra común (máx. 8-
10 cm), de color pardo oscuro
y característico vientre rojo o
anaranjado, con lunares negros.
Pasa una época del año en la
tierra y otra en el agua, donde
se reproduce, pone los huevos
y donde se desarrollan las
larvas.

El tritón ibérico y el sapillo pintojo ibérico son especies


endémicas o exclusivas de la mitad occidental de la
Península Ibérica

El sapillo pintojo ibérico es el único anuro (grupo de


las ranas y los sapos) que vive actualmente en estas
islas Atlánticas, asociado a los herbazales húmedos y
a las charcas donde se reproduce. Se parece más a una
rana que a un sapo. Llega a medir 7 cm, es de color
castaño y en el dorso tiene manchas más oscuras o
bien bandas claras.

La salamandra común es de color negro con


grandes manchas amarillas y una longitud de
hasta 15 cm de los cuales poco menos de la
mitad es rabo. Se alimenta de insectos, lombrices
Inofensiva y aliada de la agricultura y babosas y presenta hábitos terrestres y
nocturnos, especialmente cuando llueve y hay
humedad.
Estas poblaciones insulares tienen dos características
propias que las diferencian del resto de las poblaciones
de la costa continental de Galicia, todas de la
subespecie S. salamandra gallaica :
- Son vivíparas, esto es, en vez de poner huevos en el
agua, de los que nacerían larvas que luego se
metamorfosearían en adultos, paren a sus crías ya
metamorfoseadas.
- Tienen un particular diseño de colores, que tiende
al melanismo, con pocas manchas amarillas y tonos
Hembra adulta grávida del Cucorno, Ons rojizos en la cabeza.
17
LOS REPTILES
Al contrario de lo que ocurría con los anfibios, la abundancia de horas de sol,
de roquedos y de matorrales secos, características de las islas del Parque
Nacional, constituye un ambiente óptimo para diversos reptiles. Aquí se
encuentran representadas 9 especies de las 15 existentes en las Rías Baixas:
el lagarto ocelado, dos lagartijas, tres luciones y eslizones y tres culebras.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Lagarto ocelado Lacerta lepida
Lagartija de Bocage Podarcis bocagei
Lagartija ibérica Podarcis hispanica
Lución Anguis fraguilis
Eslizón tridáctilo ibérico Chalcides striatus
Eslizón ibérico Chalcides bedriagai ?
Culebra lisa meridional Coronella girondica
Culebra de escalera Elaphe scalaris
Culebra viperina Natrix maura
Culebra de collar Natrix natrix ? ?

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

Todos estos reptiles son diurnos excepto el lución y la culebra lisa, cuya actividad es nocturna. En general,
hibernan entre noviembre y febrero y se encuentran activos el resto del año, especialmente en los días calurosos,
aunque el lución y las lagartijas también se pueden observar en días soleados del invierno.

TODOS LOS REPTILES, INCLUÍDAS LAS CULEBRAS, SON INOFENSIVOS Y BENEFICIOSOS. AL IGUAL QUE EL RESTO
DE LA FAUNA, NO DEBEN SER MOLESTADOS. SU MUERTE INTENCIONADA ESTÁ SEVERAMENTE CASTIGADA

18
LOS LAGARTOS
Una subespecie exclusiva
de estas islas Atlánticas
El lagarto ocelado es grande (40 cm incluida la cola,
que supone más de la mitad), de color verdoso alternado
con tonos negros, cabeza grande y cuerpo robusto,
sobre todo en los machos. En los costados luce unos
característicos ocelos o lunares azules. Los ejemplares
jóvenes son más pequeños, oscuros y con lunares claros
en el dorso.

El lagarto ocelado acostumbra a tomar el sol en peñascos


entre matorrales o bien en muros de piedra, sus hábitats
preferidos, y puede verse en los caminos pedregosos o en
sus proximidades. Busca refugio en matorrales, debajo de
peñascos o en grandes grietas de las rocas. A principios
del verano, las hembras ponen de 7 a 16 huevos en nidos
enterrados, de los que nacerán las crías a principios de
otoño. Se alimenta principalmente de insectos y de
caracoles.
En la isla de Sálvora se describió una subespecie o raza de lagarto
ocelado endémica de esta isla: Lacerta lepida oteroi, que probablemente
sea la misma que habita en Cíes y Ons, con diferencias morfológicas,
dentarias y genéticas con respecto a la raza continental (L. lepida
iberica), presente también en Cortegada. Las poblaciones de Ons están
sufriendo un alarmante declive en los últimos años.

Lagarto ocelado joven


19
LAS LAGARTIJAS
Las lagartijas son pequeñas, de tonos verdosos y castaños, diferentes según el sexo y la especie. Se alimentan
sobre todo de insectos y de arañas.

La lagartija ibérica es el reptil más común en Cíes, Ons y Sálvora, y el único que vive en los islotes de este
último archipiélago (Noro, Herbosa, Vionta y Sagres). Los machos son muy variables, alternan colores pardo-
verdosos y negros, mientras que las hembras son más pequeñas, castañas y con un rayado claro. Los ejemplares
juveniles poseen una llamativa cola azulada.

La lagartija ibérica es una gran amante del calor y está muy asociada a rocas, adaptada a trepar por ellas, así
como por peñascos y muros de construcciones humanas, refugiándose incluso en estrechas grietas. Pone de 2
a 5 huevos entre abril y julio, y las hembras de mayor tamaño llegan a efectuar hasta tres puestas.

Debido al aislamiento, existen reconocidas diferencias corporales


entre las poblaciones de las diferentes islas y las lagartijas ibéricas
de la costa continental próxima. Por ejemplo, la longitud de hocico
a cloaca varía en los machos desde una media de 68,6 mm en
Noro (Sálvora) a los 53,6 mm en las Cíes -las únicas semejantes
a las poblaciones continentales-, con valores intermedios en Ons
(58 mm). Las lagartijas de Bocage de Cortegada y Malveira Grande
también son más grandes que las continentales.

Diferentes diseños en la coloración de los machos de las lagartijas ibéricas

20
En el Parque Nacional, la lagartija de Bocage sólo
aparece en el archipiélago de Cortegada. Tiene
líneas dorsolaterales claras y continuas en el dorso,
con el vientre amarillo o rojo, a diferencia de la
lagartija ibérica, cuyo vientre es blanco. Las hembras
lucen dorso castaño, mientras que el de los machos,
que son más grandes, siempre es verde.

Llega a poner hasta 7 huevos, entre mayo y julio,


que eclosionan entre julio y septiembre. La lagartija
de Bocage habita matorrales, herbazales, zonas
rocosas, muros y claros de bosque. Se trata de una
especie endémica del extremo noroeste ibérico.

Lagartija de Bocage
macho y hembra.

21
LUCIONES Y ESLIZONES
En el Parque Nacional se encuentran las tres especies de luciones y eslizones existentes
en la Península Ibérica. Se trata de lagartos que en su proceso evolutivo perdieron las
patas o las tienen muy atrofiadas (eslizones) y que pueden desprender la cola cuando se
sienten amenazados.
Se alimentan de insectos y arañas, y en el caso del lución, de babosas, caracoles y lombrices. Son animales
vivíparos, paren a mediados del verano de 2 a 4 crías, hasta 7 el eslizón ibérico y entre 3 y 12 el lución.

Eslizón ibérico

Eslizón tridáctilo ibérico

Lución

Las poblaciones de Cíes y Ons


están catalogadas
En Peligro de extinción

El eslizón ibérico, endémico de la Península Ibérica, es el que tiene el


cuerpo relativamente más grueso y corto, hasta 9 cm sin contar la cola,
con dorso y laterales pardo brillantes -más claro en los especímenes
juveniles-, y patas con cinco dedos. Habita en dunas y matorrales soleados
y abiertos, donde resulta difícil de ver ya que vive debajo de piedras o
de arena. En Galicia es muy escaso.
22
El eslizón tridáctilo
ibérico sólo tiene tres
dedos, es muy alargado,
hasta 16 cm sin cola y 32
con ella, y tiene el cuerpo
estriado con casi una
docena de líneas oscuras.

Habita en matorrales
bajos y pastizales, y es
común en los cantiles,
siempre en zonas abri-
gadas y soleadas.

El lución tiene el cuerpo


alargado como una culebra
y puede llegar a medir 45
cm, con un máximo de 20
cm sin contar la cola. Su
color es castaño brillante
con los laterales negruzcos,
más oscuros en las hembras;
los ejemplares juveniles son
más dorados.

Se encuentra en cantiles,
dunas y zonas arboladas,
pero principalmente en
matorrales y pastizales,
generalmente en lugares
más húmedos que los
eslizones. Suele hacer vida
bajo tierra.

23
LAS CULEBRAS
Pese a su mala fama, las tres especies de culebras que habitan en las islas
del Parque Nacional son inofensivas y además huirán sólo con nuestra
presencia. Debido al aislamiento, las culebras alcanzan en estas islas longitudes
superiores a las habituales en el continente. En función de la especie, ponen
entre 4 y 15 huevos a principios del verano, bajo tierra o piedras. Las crías
nacen entre un mes y medio y dos meses después.

ESPECIES INOFENSIVAS Y BENEFICIOSAS. NO SE DEBEN MATAR. SU MUERTE INTENCIONADA ESTÁ PENADA

La culebra lisa meridional es una especialista en


capturar lagartijas y eslizones, de los que se alimenta.
Llega a superar los 80 cm (normalmente 60 cm) y
posee una característica lista negra entre el ojo y
el cuello, a veces hasta la nariz. Vive en matorrales
soleados, muy asociada a roquedos.

24
La culebra de escalera es la más grande de las tres,
alcanzando 135 cm, aunque lo normal es que no supere
el metro. Posee un color castaño rojizo, con dos líneas
oscuras paralelas en el dorso, que en los ejemplares
jóvenes están unidas por numerosas líneas
perpendiculares a modo de escalera, de ahí su nombre.
Se encuentra en varios tipos de hábitats abiertos, siempre con buena
exposición al sol, principalmente en matorrales con rocas y en cultivos,
donde acude a comer ratas y ratones, sus presas favoritas. Se defiende
ferozmente intentando morder (sin veneno) cuando se siente
acorralada.

La culebra viperina es una culebra de


agua que en estas islas vive principalmente
en rocas litorales y charcas mareales,
donde va a pescar pequeños peces,
llegando a nadar en el mar. En la isla de
Onza se midió el ejemplar más grande
conocido en España, con una longitud de
1,02 m, aunque lo normal es que alcance
una longitud entre 65 y 85 cm. El diseño
dorsal en zigzag y su actitud de defensa
achatando la cabeza, recuerdan a las
víboras como su nombre indica, aunque
resulta inofensiva.

25
LAS AVES
Las aves son los vertebrados terrestres con mayor número de especies, y las islas no son una
excepción. En función del uso estacional que hacen de las islas y de las aguas marinas próximas,
podemos agrupar las aves que habitan el Parque Nacional en las siguientes categorías:
- Aves sedentarias: permanecen todo el año en el Parque, donde la mayoría se
reproduce en la primavera y el verano. Algunas realizan movimientos dispersivos,
normalmente los individuos juveniles y a poca distancia. Como ejemplos se pueden
citar la gaviota patiamarilla, el busardo ratonero o el mirlo común.

- Aves estivales: sólo residen en el Parque durante la primavera y el verano, adonde


la mayoría acude para nidificar desde sus cuarteles de invierno africanos. Este es
el caso del vencejo real o de la lavandera boyera.

- Aves invernantes: no se reproducen en las islas, sino que llegan para pasar la época
del año desfavorable (otoño e invierno), generalmente desde localidades más norteñas.
Algunos ejemplos son el cormorán grande y la bisbita común.
- Aves en paso migratorio: ni permanecen durante la época invernal ni durante la
época estival, sino que sólo se ven en el período en que duran sus migraciones, en
la primavera y sobre todo en el otoño, generalmente durante uno o dos meses: el
correlimos común o los papamoscas comparten esta pauta.

Además, siempre existe la posibilidad de que aparezcan especies que se presentan de forma
accidental u ocasional, desorientadas en sus viajes migratorias o movimientos dispersivos,
procedentes incluso desde puntos tan lejanos como Siberia o Norteamérica. Este es el motivo
por el que en el Parque Nacional se hayan visto aves como la cigüeña negra, el alimoche o el
piquituerto. Finalmente, la proliferación de especies exóticas, asilvestradas o escapadas de
cautividad, también permite la posible observación de aves como la cotorra de Kramer o las
minás comunes, originarias de África y de la India.

26
LAS AVES MARINAS
Las islas son los lugares preferidos por las aves marinas para criar: esto no es
un capricho, ya que estas aves viven y buscan alimento en el mar y generalmente
sólo acuden a tierra el tiempo imprescindible para nidificar, donde normalmente
son torpes. En este período son muy vulnerables y evitan los lugares a los que
puedan tener acceso los depredadores terrestres.

En el Parque Nacional de las islas Atlánticas, donde crían el cormorán moñudo,


la gaviota sombría, la gaviota patiamarilla y el paíño europeo, no hay carnívoros
como zorros, ginetas o garduñas, ni tampoco jabalíes, que depredarían los
huevos, los pollos o incluso las aves adultas. De ahí que sea un peligro introducir
animales en estos ecosistemas insulares, en particular carnívoros terrestres,
incluidos gatos y perros de procedencia doméstica. De ahí también que la
llegada del visón americano esté causando estragos en algunas colonias. El
paíño europeo se encuentra muy limitado incluso por
las ratas.

Durante años, la recogida de huevos


de gaviota y de pollos de cormorán
para consumo humano, desplazó
las zonas de nidificación de
estas aves hacia los acan-
tilados más inaccesibles
a las personas. Hoy en
día, pasadas las épocas
de hambruna, estas
aves crían mayori-
tariamente en lade-
ras, donde pasan a
ser más vulnera-
bles a hipotéticos
depredadores.

Gaviotas patiamarillas y cormoranes moñudos,


adultos e inmaduros, en Noro (Sálvora).

27
Dependiendo de la época del año, en las aguas alrededor de las islas o en las travesías
en barco podemos ver pardelas, alcatraces y araos, y en ocasiones también págalos y
paíños. Todas ellas son aves marinas pelágicas, que pasan su vida en el mar y acuden
a tierra sólo para nidificar. También resulta habitual observar charranes, cuatro especies
de gaviotas y dos de cormorán, que tienen hábitos más litorales y se posan en playas
y costas rocosas para descansar. En general, son aves longevas –viven muchos años,
que crían pocos pollos cada año e incluso deciden no criar en aquellos años en los
que las condiciones no resultan favorables.

Pardelas Paíños Alcatraces Cormoranes


Son grandes planeadoras que Los más pequeños del grupo Las aves marinas más grandes Negros con brillos metálicos
acostumbran a volar a ras de de las aves marinas, de tamaño de Europa, también plane- verdosos y picos fuertes y
las olas, pescando en la aun menor que el de un mirlo, adoras aunque suelen volar ganchudos. Las aves inmaduras
superficie del mar o a través también negros pero con el más alto, desde donde se presentan tonos más castaños,
de breves inmersiones. Sus obispillo blanco. Vuelan y lanzan al mar para pescar aclarados en garganta, pecho y
alas son largas y puntiagudas planean muy rápido sobre las mediante espectaculares vientre. Se posan en posición
(ver pág. 30). olas, excepto cuando se picados, con las alas plegadas. erguida sobre las rocas y vuelan
alimentan, momento en el que Destacan las alas puntiagudas rápido y directo, con cuello
parece que andan sobre el mar. y el cuello, la cabeza y el pico estirado y alas atrasadas, como
grandes (ver pág. 30). los patos. Se alimentan sumer-
Todavía en los años noventa fue giéndose desde la superficie del
descubierta una colonia de paíño agua, donde nadan manteniendo
europeo criando en un minúsculo una línea de flotación baja (ver
islote rocoso que forma parte del
Parque Nacional, el único lugar donde pág. 32-33).
se mantiene a salvo de las ratas.
Como otras aves marinas pelágicas,
vive y come en el mar, y en la época
de cría (junio-octubre) se acerca por
la noche a los islotes, poniendo un
único huevo sobre la roca, en el
interior de estrechas grietas o
agujeros, por lo que parece un
fantasma. El pollo llega a la pesar el
doble de los adultos y cuando éstos
dejan de alimentarlo, pierde peso y
abandona la colonia a los dos meses
de vida.

Paíño europeo nidificando en el Parque Nacional


28
40 cm

Gaviotas Charranes Págalos Álcidos


Oportunistas, poco especia- Pequeños y emparentados con Aves marinas robustas de Al contrario que las anteriores
lizadas, generalmente robustas las gaviotas; de plumaje hábitos piratas, que acosan a aves marinas, son mucho más
y de picos fuertes. Las adultas mayoritariamente blanco. Sin otras especies para que nadadores y permanecen largo
tienen plumaje blanco excepto embargo, son grandes pes- suelten las presas que tiempo sobre la superficie del
en la parte superior de las alas cadores de peces muy peque- capturaron, robándoles el agua (de ahí que sean los más
y el dorso, mientras que las ños que capturan del mismo alimento. De este compor- afectados por las mareas
aves jóvenes son acastañadas modo que los alcatraces, tirán- tamiento típico derivan negras), desde donde bucean
(ver pág. 34-37). dose en picado sobre el mar, nombres que reciben de los para capturar peces. El plumaje
por lo que disponen de un pescadores gallegos, como alterna colores blancos en las
pico fino y afilado. Las alas mallóns, merdeiros o caga- partes inferiores con oscuros
son puntiagudas y la cola rruteiros. Los plumajes son en las superiores, y cuando
larga, habitualmente en forma variables, generalmente vuelan lo hacen de modo
de horquilla. oscuros, con alas puntiagudas rápido, a ras del agua, con un
y cola larga. vuelo directo y con continuos
El más frecuente es el charrán
patinegro, el mayor de las especies batidos de sus cortas alas (ver
Los págalos parásito y pomarino pág. 31).
que se pueden observar en la zona y prácticamente sólo se ven los días de
la única de pico negro con la punta temporal en septiembre y octubre,
amarilla. Resulta fácil encontrarlo cuando los charranes a los que
pescando en playas y puertos durante piratean entran en las rías para buscar
las migraciones, sobre todo en marzo- refugio. El págalo grande es oscuro
abril y agosto-septiembre, y es el único con características manchas blancas
que se puede ver en invierno. Los debajo de las alas, del tamaño de la
charranes común y ártico, ambos con gaviota patiamarilla y se puede
pico y patas de color rojo, y el observar en número reducido, a finales
charrancito, inconfundible por su del verano y en el otoño-invierno.
tamaño y por cernerse en el aire, son Cleptoparasita aves más grandes
visibles en los pasos migratorios, sobre como gaviotas y pardelas.
todo cuando hay temporales del oeste
que los empujan hacia tierra y buscan
refugio en las rías. Finalmente, el
fumarel común es raro entre sep-
tiembre y octubre, tiene el dorso
oscuro y no suele pescar con picados,
sino descendiendo de manera oblicua
sobre la superficie del mar. 29
Entre los meses de abril y noviembre resulta relativamente fácil ver pardela cenicienta y pardela balear.
La primera es más grande -casi como una gaviota patiamarilla-, de tonos más claros y vuela batiendo
mucho menos las alas que la pardela balear. De cerca, destaca el tono amarillo del pico de la pardela
cenicienta, siendo negruzco el de la balear.

El pico de las pardelas es ganchudo, como el de los paíños y otras especies del mismo orden (albatros,
petreles...), y posee una protuberancia en la base donde se abren los orificios para respirar.
La pardela balear es una especie particularmente amenazada de extinción. En la actualidad, sólo crían unas 2.000 parejas en las
islas Baleares y en el verano se desplazan al Atlántico para aprovechar los bancos de peces pelágicos. La ría de Pontevedra, incluidas
las proximidades de Ons, principalmente los alrededores de A Porta, es un lugar habitual de concentraciones de cientos o incluso
de miles de ejemplares, que con menor frecuencia también se pueden detectar en los alrededores de Cíes y Sálvora, lo que convierte
al Parque Nacional y a su entorno en una zona importante para la conservación de esta especie. Más raras, también se pueden ver
otras dos especies en los alrededores del Parque: la pardela sombría, que cría cerca del Antártico, y la pardela pichoneta.

Pardela cenicienta Pardelas baleares

Los alcatraces atlánticos adultos son blancos Estos alcatraces crían en el Atlántico Norte e invernan mayoritariamente
en el Banco Sahariano, aunque no resulta raro observarlos durante esa
con los extremos de las alas negros. Los juveniles época en Galicia. En el Parque Nacional, especialmente en Sálvora,
del año son totalmente castaños, mientras que resulta muy patente su migración hacia el norte, entre enero y febrero.
los inmaduros -hasta seis años de edad-, van Durante la primavera y el verano es habitual observar ejemplares
incorporando progresivamente el plumaje blanco. inmaduros, y a partir de agosto, los primeros ejemplares juveniles y
adultos, que regresan hacia el sur.

Alcatrraz atlántico adulto Alcatrraz atlántico juvenil

30
LOS ÁLCIDOS
En las aguas que circundan el Parque Nacional de las islas Atlánticas son
habituales, pero escasas, dos especies de araos: el arao común y el alca
común. El frailecillo atlántico es más raro, siempre mar afuera. El alca también Se sumergen hasta 100 m
se puede ver desde tierra, nadando o buceando próxima a la costa. de profundidad en busca
de peces

Alca en invierno Arao en invierno Arao en plumaje de cría Frailecillo adulto en invierno

Aunque el frailecillo es sólo una cuarta parte menor que los otros dos, las tres especies se diferencian fácilmente
por su pico: cónico y afilado en el caso del arao, más corto y achatado lateralmente en el alca, y grande y
colorido en el frailecillo. En plumaje estival arao y alca tienen toda la cabeza negruzca, mientras que en
invierno las mejillas, la garganta y el cuello son de color blanco.

A mediados del siglo XX, el arao


era el ave marina nidificante
más numerosa y criaba en
ciertas grutas de los
acantilados de Cíes y Ons.
Hoy en día está aquí
extinguida como repro-
ductora desde 1987,
aunque es muy nu-
merosa en el norte de
Europa, llegando en el
invierno ejemplares
procedentes de las islas
Británicas, principal-
mente aves jóvenes del
año. La acción combinada
de la caza abusiva, la con-
taminación petrolífera (mareas
negras) y la mortandad en tras-
mallos y otras artes de enmalle, es
probablemente el motivo de este proceso.

31
LOS CORMORANES
El Parque Nacional de las Islas Atlánticas destaca por acoger la mayor parte de los
cormoranes moñudos que nidifican en España, principalmente en los archipiélagos
de Cíes y Ons. Pero además, también son importantes internacionalmente, ya que las
más de 2.000 parejas que crían en la actualidad, representan casi el 3% de su población
mundial, distribuida por el Atlántico europeo y el Mediterráneo.
En los últimos años, los cormoranes moñudos de la isla del Faro (Cíes) han sido mui estudiados, gracias a
lo cual se pudieron comprobar algunos de los efectos del vertido del Prestige, que provocó un descenso
de la población y peores condiciones de reproducción (las aves crían menos descendencia), debido a la
disminución de su presa favorita, los lanzones, unos peces propios de fondos arenosos.

La principal amenaza para la supervivencia de esta especie son los trasmallos, redes
que se calan en zonas poco profundas donde se alimentan los cormoranes y en las
que quedan atrapados y mueren ahogados.

Los cormoranes moñudos son fáciles de ver durante todo el año, posados en rocas y
cantiles, que suelen quedar blancos por las acumulaciones de excrementos. También
se observan volando a ras del mar o nadando y buceando, incluso cerca de las playas
y puertos. En la costa oriental de Cíes y de Ons resulta habitual que se reúnan cientos
de cormoranes en bandos compactos, sumergiéndose donde se concentran bancos de
peces; estas agrupaciones reciben el nombre local de ralleiras.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Cormorán moñudo Phalacrocorax aristotelis
Cormorán grande Phalacrocorax carbo

= frecuente o abundante

Cormorán grande Cormorán moñudo


32
Los cormoranes moñudos son
totalmente negros con las comisuras
del pico amarillas. Desde noviembre,
cuando los machos comienzan a
defender el territorio para el nido y se
forman las parejas, lucen una cresta
de plumas en la cabeza, a modo de
ornamento. Las aves jóvenes y hasta
los dos años de edad, son castañas
con el vientre claro y las patas
amarillas, pudiéndose diferenciar las
aves nacidas el mismo año de las
nacidas en los dos años anteriores.
Crían normalmente entre febrero y julio en los
cantiles, en grietas o debajo de grandes piedras.
Ponen de 2 a 3 huevos que incuban durante un
mes y crían a los pollos aproximadamente en
un mes y medio.

Las colonias del Parque


Nacional reúnen una
parte importante de su
población mundial

Desde agosto resulta habitual la presencia


del cormorán grande, mayor que el
moñudo y de cabeza más voluminosa.
Con viento favorable suele volar
a mayor altura, incluso cruzando
por encima de las islas. En
plumaje nupcial, que exhibe
desde enero o febrero, tiene
plumas blancas en la
cabeza, en la garganta y
en el costado.

Antes de abril se desplaza


a criar al centro y al norte
de Europa. Aquí sólo se
quedan algunas aves in-
maduras, de plumaje pardo
y normalmente con una mayor
extensión de tonos claros que
los cormoranes moñudos in-
maduros, llegando a ser casi blancos
en pecho y vientre.
33
LAS GAVIOTAS
Las gaviotas son las aves más numerosas y fáciles de ver en el Parque Nacional.
Se observan por todo el perímetro de las islas y en las aguas próximas, y durante
la época de cría (abril a agosto) ocupan la mayor parte de los acantilados. También
visitan los puertos y otras zonas humanizadas para aprovechar desperdicios o robar
comida. Aunque normalmente veremos gaviotas patiamarillas, también es probable
que podamos observar otras especies.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Gaviota reidora Larus ridibundus
Gaviota cabecinegra Larus melanocephalus
Gaviota sombría Larus fuscus
Gaivota patiamarilla Larus michahellis
Gavión atlántico Larus marinus
Gaviota tridáctila Rissa tridactyla

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

La gaviota patiamarilla tiene


aquí sus mayores colonias, un
10% de su población mundial

La gaviota patiamarilla es blanca


con el dorso y la parte superior de
las alas de color plateado, y las
plumas de las puntas de color
negro con espejos blancos.
Patas y pico son de color
amarillo, este último con un
punto rojo.
La gaviota patiamarilla tiene en estos
archipiélagos sus principales localidades
de cría del planeta, que reúnen a más
de 30.000 parejas reproductoras, casi
un 10% del total de la población mundial.
Hace nidos en todas las islas menos en
Cortegada, donde sólo nidifican unas pocas
en la Malveira Grande. El resto del año, una
parte de estas gaviotas permanece en los
alrededores de las islas, mientras que otras se
expanden por toda la costa gallega, el norte de
Portugal e incluso Asturias, empezando desde enero
a reocupar poco a poco los acantilados.

34
La gaviota sombría es muy parecida a la patiamarilla, pero con el dorso y la parte superior
de las alas más oscuro, de color pizarra. Algunas parejas crían entre las patiamarillas,
principalmente en la isla de Sálvora. Aparece más frecuente en los pasos migratorios (marzo-
mayo y agosto-octubre), cuando en ocasiones decenas de ellas se encuentran reposando
en las playas. Aunque más escasa, también se ve durante todo el invierno.
Gaviotas sombrías y patiamarillas ponen de 2 a 3 huevos a finales de abril y durante mayo, en nidos hechos en
el suelo, entre peñascos o vegetación baja de los cantiles. Los pollos nacen un mes después y ya caminan por
las proximidades de los nidos a las pocas horas, completando su crecimiento aproximadamente en mes y medio.
Por norma general, las gaviotas sombrías comienzan la reprodución unos días después que las patiamarillas.

La demografía natural de estas gaviotas provoca que más de la mitad


de las aves jóvenes del año muera en su primer año de vida. Muchas
perecen en los meses siguientes a abandonar el nido e
independizarse, por lo que a finales del verano resulta habitual
encontrar cadáveres o ver gaviotas debilitadas en las playas
y caminos. Dado que se trata de especies no amenazadas,
hay que dejar que la naturaleza siga su curso.

A las gaviotas patiamarillas y sombrías les gusta seguir a los


pesqueros para comer los descartes, esto es, aquellos restos y
capturas que no se aprovechan comercialmente y que se tiran por
la borda. Las gaviotas no son pescadoras especialistas, pero se
desenvuelven bien tanto en el agua como en tierra o volando. En
la época de cría capturan muchos cangrejos patexos, que viven
mar afuera y que en esas fechas acuden a la costa para desovar.

De izquierda a derecha, gaviota patiamarilla adulta, gaviota sombría adulta y ejemplar inmaduro
35
El gavión atlántico destaca por su tamaño superior
a las gaviotas patiamarilla y sombría. Está dotado
de un pico parecido pero más fuerte, y el dorso
y la parte superior de las alas son aun más
oscuros que en la gaviota sombría. Además,
los adultos son fáciles de diferenciar por
sus patas rosas.
El gavión es un visitante invernal que está en
expansión. En Galicia crió por primera vez en 2005,
por lo que no sería de extrañar que pronto anidase
alguna pareja en el Parque Nacional, sobre todo en
Sálvora, donde es más numerosa y se ve todo el año.

Todas estas gaviotas son aves


longevas, que tardan entre 3 y 5 años
desde que nacen hasta que empiezan
a reproducirse. Durante esos años se
dice que son inmaduras, adoptando
plumajes más pardos, con las patas
color carne y el pico negro o rosáceo.
Aunque existe cierta variación, cada
año de edad inmadura se corresponde
con un diseño de plumaje, cada vez
más parecido a las adultas.
La mancha roja del pico de los adultos sirve
a los pollos de gaviotas para picar en él con
el fin de que les den de comer, estimulando
la regurgitación de la comida que los adultos
ingirieron. Este comportamiento es fácil de ver
con un poco de paciencia en las zonas de
acceso permitido a los acantilados donde crían.
Gaviota patiamarilla inmadura en su primer
invierno, anillada para el estudio de la población.

Si lees o encuentras alguna anilla,


avisa al personal del Parque.

36
Bastante más pequeña, la gaviota reidora sólo se ve en invierno, cuando aprovecha los
descartes de algunos barcos o reposa en la proximidad de los puertos. Sus patas y su
pico son rojos y en la punta de las alas tiene plumas negras y blancas. En los últimos
inviernos se detecta con mayor asiduidad la gaviota cabecinegra, muy parecida a la
reidora pero más robusta, con el pico más grueso y la punta de las alas totalmente
blanca.
En los puertos y estuarios de las Rías Baixas, las gaviotas reidoras son aves comunes que se ven desde finales
de junio hasta abril. En la primavera, antes de volver a sus colonias de cría, las adultas lucen un capuchón
de plumas achocolatadas, que es más negro en las cabecinegras.

Gaviotas reidoras en plumaje invernal, con un vuelvepiedras delante.

Por último, la gaviota tridáctila es una de las gaviotas más numerosas del mundo, de hábitos exclusivamente marinos y buena
pescadora. Es más pequeña y tiene el pico amarillo más fino que la patiamarilla, sin mancha roja. Las patas y las plumas de la punta
de las alas son totalmente negras. Puede verse en invierno en aguas próximas a las islas, sobre todo en la vertiente oeste. Otras
especies que se han visto en el Parque Nacional son la gaviota argéntea y la gaviota groenlandesa.

37
GARZAS Y PATOS
Las garzas son aves que pescan al acecho en aguas poco profundas, gracias a las
patas y al cuello largos, con un pico fuerte y puntiagudo para capturar peces.
Ninguna especie cría en el Parque Nacional, pero durante prácticamente todo el
año pueden observarse garzas reales y garcetas comunes en costas rocosas bajas,
playas y charcas, sobre todo entre agosto y abril.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Garza real Ardea cinerea
Garceta común Egretta garzetta
Ánade azulón Anas plathyrhynchos
Negrón común Melanitta nigra

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

La garza real tiene plumaje gris y es más grande


que la garceta común, la cual es totalmente
blanca con unos llamativos pies amarillos.
Además, durante la migración, sobre todo en agosto, algunos
años se han observado cigüeñas blancas en las Ons.

Garza real

Garceta
38
Los patos o anátidas no son habituales en estas islas Atlánticas. Algunos ejemplares de una especie
de pato marino, el negrón común, descansan en sus migraciones en aguas del Parque Nacional, casi
siempre cerca de las playas, donde se sumergen en busca de alimento. Los machos son negros con el
pico amarillo y una protuberancia en la base, mientras que las hembras son pardas con la cara más clara.
No obstante, frente a la cara exterior u occidental de Cíes, Ons y Sálvora, existe un intenso flujo migratorio de negrones que
comprende miles de individuos, que se dirigen hacia el sur entre agosto y noviembre, y hacia el norte en marzo y abril. Con
prismáticos o telescopio se pueden ver bandadas de decenas de ellos en fila o en V, a ras de mar.

Negrón hembra Negrón macho

Entre marzo y junio aparecen algunos ánades azulones o patos


reales emparejados en el Lago de las Cíes y en la costa de
Canexol en Ons, que llegan a anidar. En Cortegada se ven
durante todo el año. Los machos son mucho más vistosos que
las hembras, acastañadas para pasar desapercibidas mientras
incuban los huevos.

39
LIMÍCOLAS
Las aves limícolas son pequeñas zancudas que suelen comer en limos gracias a
sus picos, largos en la mayoría de las especies, que entierran en busca de lombrices
y de otros animalillos. Las especies de pico corto capturan las presas en superficie.
La mayor parte de las limícolas tienen un comportamiento gregario, agrupándose
en bandos compuestos por varias especies.

Son grandes migradoras que se desplazan desde las regiones árticas, donde muchas especies crían
en la tundra en la primavera y verano, hasta las costas africanas o del sur de Europa, donde pasan
el invierno. Algunas están más adaptadas a costas rocosas bajas y son las más habituales en el Parque
Nacional. La chocha perdiz tiene costumbres diferentes, vive en bosques y matorrales y sale a comer
a los prados por la noche.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Ostrero euroasiático Haematopus ostralegus
Chorlitejo patinegro Charadrius alexandrinus
Chorlitejo grande Charadrius hiaticula ?
Chorlito dorado Pluvialis apricaria
Correlimos tridáctilo Calidris alba
Correlimos común Calidris alpina
Chocha perdiz Scolopax rusticola
Aguja colipinta Limosa lapponicca ?
Zarapito trinador Numenius phaeopus
Zarapito real Numenius arquata
Archibebe común Tringa totanus
Andarríos chico Actitis hypoleucos
Vuelvepiedras Arenaria interpres

= posible; = raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

40
40 cm

Ostrero

Zarapito trinador

Andarríos chico
Vuelvepiedras

Chorlito

Chorlitejo
Correlimos común

El ostrero euroasiático parece que criaba a mediados


del siglo XX, al menos en algunos islotes de Sálvora.
En la actualidad se ve durante todo el año,
principalmente en invierno. Posee un llamativo
plumaje blanco y negro, con el pico y las patas largas
de color rojo.

41
El andarríos chico es un
limícola habitualmente
solitario, pequeño y
parecido a los correlimos,
con el dorso castaño y el
pecho y el vientre claros,
aunque camina moviendo
la cola de un modo muy
característico, que resulta
inconfundible. Se ve de
agosto a abril.

Un especialista en comer pulgas de arena

Zarapito trinador

Zarapitos y agujas son limícolas grandes y pardos,


de patas y pico largos. En el caso de la aguja colipinta,
de vientre claro en el invierno y rojizo en el plumaje
nupcial de primavera, el pico curva ligeramente hacia
arriba, mientras que en los zarapitos trinador y real
se curva pronunciadamente hacia abajo. El zarapito
trinador es más pequeño que el real, con el pico más
corto y una pequeña banda negra en los lados del
píleo. Se ven durante los pasos migratorios, aunque
algunos zarapitos, trinadores y reales se quedan
durante todo el invierno.

42
Los vuelvepiedras comunes son
migradores de larga distancia,
que se ven durante los
pasos migratorios y la
invernada. También
acastañados, des-
tacan por el pico más
corto, las patas ana-
ranjadas y su pecu-
liar diseño arlequi-
nado de dorso y
alas, visible cuando
vuelan. El plumaje
nupcial es más vis-
toso, con tonos
blancos, negros y
anaranjados.

Comen entre las rocas o


entre las algas arrastradas
a las playas, levantando piedre-
cillas y otros objetos en busca de
gusanos, lombrices y pulgas de arena.

Sólo un limícola cría en el Parque Nacional, el chorlitejo


patinegro, muy afectado por la presión humana
en las playas. Pone de 2 a 3 huevos
directamente sobre la arena, entre
abril y junio. Es pequeño y con
el pico corto, el vientre
blanquecino y el dorso
color arena, por lo que
pasa desapercibido.
Se parece mucho al
chorlitejo grande,
que se deja ver
en las migracio-
nes, sobre todo
en septiembre, y
del que se distin-
gue por las patas
negras (rojizas en
el grande) y collar
oscuro sin cerrar. Chorlitejo patinegro y su nido

Además, otras limícolas han sido


vistas más raramente durante las
migraciones o en la invernada: el
chorlito dorado europeo (especialmente
en Sálvora), el chorligo gris, la avefría (llega
en los inviernos muy fríos), los correlimos tridáctilo,
gordo, oscuro (en Sagres) y común, así como los archibebe
común y claro, entre otras. 43
LAS RAPACES
En el Parque Nacional de las islas Atlánticas nidifican 4 especies de aves
rapaces, poco abundantes debido a la escasa superficie de las islas, pero Las hembras son siempre
relativamente fáciles de ver durante todo el año. más grandes y fuertes que
los machos

1,20 m

Azor

Busardo ratonero

Cernícalo vulgar Halcón pregrino

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Azor Accipiter gentilis
Busardo ratonero Buteo buteo
Cernícalo vulgar Falco tinnunculus
Halcón peregrino Falco peregrinus

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

44
El azor es la rapaz más esquiva,
asociado a espesuras de árboles
donde instala el nido, aunque
caza frecuentemente en
zonas abiertas. Su color
es grisáceo y posee un
diseño barreado, con
el dorso más oscuro,
las alas redondeadas
y la cola bastante
larga. Los juveniles
son castaños.
Es un ave de presa muy
robusta que llega a cazar
aves de un tamaño seme-
jante al suyo, como gaviotas
patiamarillas adultas, además
de alimentarse de ratas, conejos,
palomas y otras aves. En cada
archipiélago cría una pareja, quizás
dos en las Cíes.

Como en el resto de Galicia,


las aves de presa más
numerosas y visibles son los
busardos ratoneros, que suelen
planear en el cielo trazando
grandes círculos. Su plumaje es
castaño con zonas claras de
extensión variable, las alas
largas y la cola en abanico.
Anidan en árboles y a veces en acan-
tilados, pero se alimentan en zonas
abiertas, principalmente de roedores,
conejos y reptiles. Normalmente crían
dos pollos entre abril y julio.

45
El cernícalo vulgar está muy ligado a espacios abiertos y agrícolas, con
pocos árboles. Se trata de un pequeño halcón de alas puntiagudas y cola
larga; los machos tienen el dorso de color teja, mientras que en las
hembras es más castaño y punteado de negro. Como estrategia de
caza suele cernirse en el aire, de ahí su nombre y el que recibe en
ciertas zonas de Galicia, peneireiro; o también lagarteiro, derivado
de su alimentación a base de lagartijas, además de roedores y grandes
insectos.
En la actualidad está amenazado de desaparición en el Parque, donde sólo nidifica
en grietas y agujeros de ciertas grutas en acantilados de Ons, la isla más humanizada
y abierta. Antes de las plantaciones forestales de eucaliptos y del abandono del
pastoreo y de la agricultura, nidificaba también en las Cíes y en Sálvora, donde aun
se puede ver, sobre todo en esta última isla, procedente de otras zonas próximas.

Finalmente, el halcón peregrino es más grande y robusto que el


cernícalo, pero con una silueta semejante en cuanto a la forma de las
alas y de la cola, con una notoria bigotera. Su color dominante es
grisáceo, diferente en los juveniles, que son castaños. Cría en grietas de
grutas marinas y acantilados de las tres islas del archipiélago de las Cíes
y también en las Ons, registrando un notable incremento en los últimos años.

Pone de 2 a 3 huevos en marzo y los pollos ya vuelan en mayo, coincidiendo con


un importante flujo de aves migradoras que les sirven de alimento. Se puede ver
volando o bien posado en peñascos dominantes de los acantilados, a la espera del
paso de las aves que constituyen sus presas, principalmente palomas y limícolas.

Su vuelo picado es famoso por alcanzar


velocidades record, que rebasan los 400 Km/h

De manera rara u ocasional, también se pueden


ver otras aves rapaces que no llegan a nidificar,
como es el caso del aguilucho lagunero occidental,
que parece habitual en el verano en Sálvora, o del
aguilucho cenizo, el gavilán común, el milano
negro o incluso alguna águila pescadora.

46
RAPACES NOCTURNAS
Las lechuzas, los mochuelos y otras aves de presa nocturnas sufrieron mala fama
durante muchos años en el mundo rural, debido a supersticiones y desconocimiento.
Hoy en día, su destacado papel como depredadoras de roedores está contribuyendo
a que sean más apreciadas.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Lechuza común Tyto alba
Cárabo europeo Strix aluco

= raro; = escaso o poco común.

En el Parque Nacional sólo cría la


lechuza común, muy vinculada a
construcciones humanas, donde
nidifica en desvanes. Pone de uno
a siete huevos, dependiendo de la
cantidad de alimento que haya
cada año, y llega a criar más de
una nidada. Es blanca con tonos
cremas y grises en el dorso Caza
sobre todo en prados y cultivos, y
En Cortegada resulta muy probable al volar no hace ni el más mínimo
que también nidifique el cárabo ruido, lo que la ayuda a sorprender
europeo, un buho de tamaño a sus presas.
parecido aunque de color pardo y
de hábitos forestales. El cárabo es
muy común en las Rías Baixas, donde
casi siempre anida en agujeros de
grandes robles, por lo que extraña
su ausencia en las islas, quizás debida Cada lechuza puede
a la falta de árboles huecos. capturar miles de ratones
Las rapaces nocturnas son aves difíciles de al año
detectar, por lo que hay que aprovechar las
épocas en que se pueden localizar a través
de sus reclamos. Algunas especies no
nidificantes podrían pasar desapercibidas,
como el búho chico, que se ha visto en los
últimos otoños en Sálvora.
Lechuza común

47
PALOMAS Y TÓRTOLAS
Tanto palomas como tórtolas pertenecen a la misma familia
de los colúmbidos. Son aves robustas, de patas y pico cortos
y fuertes, adaptadas a comer grano y otras semillas.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Paloma torcaz Columba palumbus
Paloma bravía Columba livia ?
Tórtola turca Streptopelia decaocto
Tórtola europea Streptopelia turtur

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

Hasta los años ochenta o noventa, la paloma bravía criaba en grutas marinas y cantiles de
las islas Cíes y Ons, seguramente favorecida por la existencia de cultivos y ganadería.
Más pequeña que la torcaz, tiene el obispillo blanco. Hoy en día está practicamente
desaparecida, aunque son relativamente comunes las palomas domésticas y
mensajeras, de la misma especie pero habitualmente con plumajes de
diferentes diseños.

La paloma torcaz es fácil de ver en todos los


archipiélagos, donde nidifica principalmente
en árboles, aunque normalmente come
en el suelo. Su color es grisáceo-
azulado, con franjas alares y
manchas a ambos lados
del cuello, de color
blanco.

48
La tórtola europea, asociada a cultivos y prados con arbolado
intercalado, tiene el dorso ferruginoso alternado de negro y una
característica banda terminal blanca en la cola. Puede verse u oírse
durante las migraciones en todos los archipiélagos, aunque sólo
debe nidificar en Cortegada y quizás en Sálvora.

En proceso inverso al de la paloma bravía, en los


últimos años resulta más habitual la tórtola turca,
asociada a ambientes humanizados. Se trata de una
especie oriental en expansión natural por Europa,
que llegó a Galicia en los años setenta. El plumaje
es de color crema pálido, con unas peculiares manchas
oscuras a ambos lados del cuello.
Durante el siglo XX colonizó toda
Europa desde Turquía

49
CHOTACABRAS
Los chotacabras son aves de hábitos crepusculares y nocturnos, que podemos ver después de la puesta
de sol en zonas abiertas, incluso posadas o volando a ras de suelo en los caminos, con un característico
vuelo irregular y quebradizo. Resulta más fácil escucharlos, ya que repiten habitualmente una nota parecida
a la del grillo, pero mucho más continuada, como un pequeño motor.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Chotacabras gris Caprimulgus europaeus

= posible; = frecuente o abundante.

El chotacabras gris tiene colores grises y negros que lo hacen pasar desapercibido durante el día, escondido en
el suelo, bajo árboles y matorrales, donde también nidifica. Cuando vuela se aprecia que tiene alas y cola muy
largas. El pico es muy corto, aunque posee grandes comisuras, por lo que la boca se abre con amplitud para
capturar insectos mientras vuela.

Se trata de una especie relativamente frecuente y abundante en estas islas atlánticas, a donde llega en abril
después de invernar en África. Algunos no se marchan hasta principios de octubre.

Chotacabras gris
50
PÁJAROS CARPINTEROS
Los pájaros carpinteros picotean y taladran los troncos de los
árboles en busca de larvas de insectos. Son aves forestales, aunque
el pito real y el torcecuello también se ven en matorrales y prados,
adonde van a comer hormigas. Su cuerpo es robusto y tienen un
característico vuelo ondulado. Normalmente delatan su presencia
por medio de sus estridentes reclamos.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Pico picapinos Dendrocopos major
Pito real Picus viridis
Torcecuello euroasiático Jynx torquilla

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

Tienen una lengua enorme, dos veces


más larga que la cabeza, provista de
pequeños ganchos para atrapar
insectos en los agujeros de la madera

El pico picapinos es la única especie fácil de


observar, con tamaño superior al del mirlo. Su
plumaje alterna colores blancos y negros, con
llamativas plumas rojas en el cogote y en el
bajo vientre. El pito real es de color verdoso,
con el píleo rojo. Nidifican en agujeros de los
árboles, frecuentemente abiertos por ellos
mismos.

Los carpinteros crían y pasan todo el año en las


islas, excepto el torcecuellos euroasiático, más
pequeño y castaño, que sólo se detecta en los
pasos migratorios, principalmente en septiembre. 51
VENCEJOS Y GOLONDRINAS
Los vencejos y las golondrinas son aves parecidas: cuentan con alas largas y
estrechas y pasan buena parte del tiempo volando y capturando insectos en el
aire. Con todo, están poco emparentadas, ya que las golondrinas pertenecen
al gran grupo de los paseriformes, mientras que los vencejos comparten
clasificación con los colibríes de América. Las cuatro especies habituales en el
Parque pasan el invierno en África y visitan las islas entre marzo y septiembre.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Vencejo real Tachymarptis melba
Vencejo común Apus apus
Golondrina común Hirundo rustica
Avión común Delichon urbica

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

13 cm

Vencejo real Vencejo común Golondrina común Avión común

Los vencejos apenas se posan en los nidos en la época de cría: pasan el resto del año volando
sin parar e incluso duermen en el aire

En el Parque Nacional sólo nidifica el vencejo real, una especie muy escasa en Galicia (menos de cien parejas), que
cría en estrechas grietas de los acantilados más verticales de Cíes y Ons. Son aves de mediana envergadura (0,5-
0,6 metros), castañas con el vientre y la garganta blancas, que se ven con más frecuencia hacia el atardecer, volando
en los acantilados en ruidosos grupos, a alta velocidad. Común en los alrededores del Burato do Inferno, en Ons.
El vencejo común es un poco menor y muy oscuro, mientras la golondrina común y el avión común son mucho más pequeñas y se
diferencian entre ellas por el color de la garganta y del obispillo y por la forma de la cola. Estas tres especies se pueden ver volando sobre
las islas durante sus migraciones o bien procedentes de localidades de la costa cercana, donde anidan en casas y edificios. El vencejo
común crió en las Cíes, en el convento que hoy alberga el Centro de Interpretación.

52
PÁJAROS DE LOS ACANTILADOS:
EL COLIRROJO TIZÓN
En las zonas acantiladas y de rocas, donde crían las aves marinas, el halcón peregrino, las
chovas piquirrojas, las grajillas o los vencejos reales, resultan poco habituales los pequeños
pájaros, y cuando están presentes generalmente están asociados a los matorrales. Este es el
caso del acentor común, del chochín y del mirlo común.

El pájaro característico de estos ambientes rocosos es el colirrojo tizón (Phoenicurus


ochruros), que también ocupa costas rocosas bajas y llega a criar en construcciones
humanas, pudiendo aparecer alimentándose en matorrales y cultivos. Se trata de una
especie frecuente en los cuatro archipiélagos, donde permanece durante todo el año.

Los machos son negros con manchas blancas en las alas, mientras que las hembras y los
ejemplares jóvenes son pardo-oscuros con el pecho y el vientre más claros. Todos se caracterizan
por su cola rojiza, muy vistosa cuando vuelan.
Hacen nidos en grietas de las rocas, en muchas ocasiones en lugares más o menos accesibles, donde llegan a efectuar
2 ó 3 puestas a lo largo de la primavera. Ponen entre 4 y 6 huevos que incuban en menos de medio mes, criando
a los pollos en otros 15 días.

De manera ocasional, se han visto colirrojos reales durante las migraciones, asociados a matorrales, setos y cultivos.

Hembra Macho

53
LAVANDERAS Y BISBITAS
Las lavanderas y las bisbitas son pájaros emparentados en una misma familia, que
habitan espacios abiertos donde pasan la mayor parte del tiempo andando o
corriendo por el suelo, en busca de insectos. Anidan en el suelo, entre la vegetación.
Tienen la cola larga y su vuelo es ondulado.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Lavandera boyera Motacilla flava
Lavandera cascadeña Motacilla cinerea
Lavandera blanca Motacilla alba
Bisbita común Anthus pratensis

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

La lavandera boyera es estival,


de dorso verde, pecho y vientre
amarillos, garganta blanca y
cabeza azulada, con una
peculiar lista blanca sobre
el ojo. Habita en matorrales
bajos y húmedos, frecuen-
temente alternados con
pastizales, como las laderas
de Fedorento en Ons.
La lavandera cascadeña es parecida
a la boyera, pero con el dorso de color
gris. Con todo, apenas coinciden en
septiembre, ya que es una visitante
invernal de la costa, frecuentando playas
y zonas rocosas. No cría en el Parque, pues
para eso prefiere los ríos con torrentes,
inexistentes en estas islas.

54
La especie más común es la lavandera blanca, con diferentes
tonos en blanco, gris y negro. Habitual durante todo el año, come
en las líneas de marea de las playas, además de en zonas
humanizadas como campos cultivados, caminos y fuentes. Nidifica
en campos dunares, tejados y muros.
Los machos, las hembras y los ejemplares jóvenes de las tres especies de lavanderas
son relativamente fáciles de distinguir por el diseño del plumaje, siempre más
vistoso y contrastado en los machos.

Las bisbitas son fácilmente diferenciables


de las lavanderas por sus tonos castaños,
con vientre claro estriado de negro. Este
es el plumaje típico de la bisbita común,
de patas color carne, habitual en prados
y otras zonas de vegetación baja, aunque
sólo durante el invierno, en general desde
finales septiembre hasta marzo.
Muy parecida es la bisbita arbóreo, de hábitos más
forestales, que se puede detectar durante la migración
de primavera, en marzo y abril.

55
PÁJAROS DE ESPACIOS ABIERTOS
Además de bisbitas y lavanderas, los matorrales, los pastos y las zonas de campos y
cultivos, incluso con setos y árboles dispersos, son el hábitat de un numeroso y
heterogéneo grupo de pájaros, que agrupamos aquí para facilitar su conocimiento e
identificación. Todos son sedentarios, esto es, visibles durante todo el año en las islas.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Alondra común Alauda arvensis
Chochín Troglodytes troglodytes
Acentor común Prunella modularis
Tarabilla común Saxicola torquata
Buitrón Cisticola juncidis
Curruca rabilarga Sylvia undata
Curruca cabecinegra Sylvia melanocephala
Curruca capirotada Sylvia atricapilla
Gorrión común Passer domesticus
Verdecillo Serinus serinus
Verderón común Carduelis chloris
Pardillo común Carduelis cannabina
Jilguero Carduelis carduelis
Escribano soteño Emberiza cirlus

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

La alondra común es castaña y de cierto tamaño (18 cm), con un característico


copete de plumas en el cogote y un canto musical, que emite mientras
vuela, en ocasiones casi parada a gran altura. Le gustan los lugares con
vegetación muy baja, donde se alimenta y anida en el suelo.
Se trata de una especie cada vez más escasa en Europa, debido a los modernos cambios
agrícolas (intensificación). Tampoco abunda en el Parque Nacional debido al abandono de los
cultivos y del pastoreo. Una especie parecida que se ha visto ocasionalmente es la totovía.

56
Acentor

Tarabilla

Curruca rabilarga

Alondra
Curruca cabecinegra

Fringílidos (verdecillo, verderón, pardillo...)

El chochín es una de las aves más


populares de Galicia, así como una de
las más pequeñas. Tiene el cuerpo
rechoncho con la cola corta generalmente
apuntada hacia arriba, plumaje castaña
y pico fino. Resulta más fácil de detectar
por el canto, pues le gusta vivir en la
espesura de zarzas y otros arbustos,
incluso bajo zonas arboladas.
Los chochines construyen nidos muy elaborados
con musgos y pajitas, en agujeros de árboles y de
rocas o en los muros de las casas. Llegan a criar
dos o tres veces cada primavera-verano.

El buitrón es poco vistoso, de color castaño listado


de negro, con el vientre y la garganta blanquecinos.
Vuela de manera ondulada emitiendo un reclamo
corto y monótono, y le gusta posarse verticalmente
en finos tallos herbáceos.

57
El acentor común es un pájaro habitual
en estas islas Atlánticas, pero poco vistoso
y de hábitos discretos entre matorrales y
setos, por lo que no es muy conocido.
Tiene el dorso pardo estriado de negro.
El pecho es gris-azulado y el pico fino,
típico de insectívoro. Hace su nido en tojos
u otros arbustos, donde pone sus huevos
azulados.

La tarabilla común es uno de los pájaros


más fáciles de observar en el Parque
Nacional, tanto por su abundancia como,
sobre todo, por su hábito de posarse al
descubierto en lo alto de arbustos, rocas
o estacas. Los machos tienen la cabeza
negra, el pecho rojizo y una mancha blanca
en el cuello, mientras que las hembras y
los ejemplares jóvenes son de colores
acastañados. Resulta inconfundible por el
reclamo (“chac-chac”), de donde proviene
su nombre gallego, chasco.
Vive en matorrales y campos con setos. Anida en
arbustos y cría dos o tres veces al año. Se alimenta
de insectos, que frecuentemente captura al vuelo,
Tarabilla común macho oteando desde sus posaderos.

58
La curruca rabilarga destaca por su cola larga y
hábitos escondedizos entre los tojales, costumbre
de la que deriva un nombre vernáculo de la isla de
Ons: furatoxo. Garganta, pecho y vientre son del
color del vino tinto, mientras que las partes superiores
son cenicientas. Los ejemplares jóvenes son grises
y acastañados hasta la llegada del otoño.

Por su parte, la curruca cabecinegra,


también secretiva y de cola larga con los
bordes blancos, prefiere zarzales y
espinales. Predomina una coloración
grisácea, más clara en el vientre y sobre
todo en la garganta. La cabeza es negra
hasta debajo de los ojos, que cuentan con
un anillo rojo. Las hembras son parduscas,
más claras en el vientre y con la cabeza gris.

Muy parecida a la cabecinegra es la curruca capirotada, sólo


que la garganta es más grisácea y la zona negra de la cabeza
tiene forma de boina por encima del ojo. Las hembras son
más pardas y tienen la boina castaña. Le gusta la presencia
de árboles, sobre todo en huertas y jardines. Consume una
gran cantidad de moras y otros frutos, principalmente en
otoño. Su canto aflautado resulta característico.
Las currucas son pájaros insectívoros que hacen el nido entrelazado en
ramas de arbustos. La curruca rabilarga alcanza densidades elevadas en los
matorrales del Parque Nacional, mientras que la curruca cabecinegra es
una especie de óptimo mediterráneo, que colonizó de manera natural las
Rías Baixas en la década de los setenta y prosigue su expansión por Galicia.

59
FRINGÍLIDOS
El verdecillo, el verderón, el jilguero y el pardillo pertenecen a la misma
familia: los fringílidos. Son pájaros granívoros, de pico corto y fuerte. Se ven
todo el año en las islas, donde anidan en ramas de árboles o arbustos. Fuera
de la época de cría se pueden agrupar en bandos mixtos.

Solo incuban las hembras,


mientras los machos les
llevan de comer

El verdecillo (11 cm) es de color amarillo


estriado de negro, con tonos más vivos en la
cabeza, en el pecho y en el obispillo. Las
hembras son más pálidas. Le gustan zonas con
árboles dispersos, cercanas a campos y zonas
abiertas, siendo rara su presencia en tojales.
Suele cantar desde árboles o mientras vuela,
emitiendo un sonido chirriante.
En invierno también puede verse el lúgano, especialmente
en Cortegada, de plumaje estriado como el verdecillo pero
más verdoso y con el píleo negro en los machos.

El verderón común es parecido, pero


más grande (15 cm), verdoso y sin
estrías negras. Las hembras y los
juveniles son más pálidos. También
prefiere zonas arboladas aclaradas o
en posiciones extremas con cultivos,
aunque se adentra más en matorrales.
60
El pardillo común es castaño, con los
extremos de las alas negros y la cabeza
gris. Los machos lucen vistosas plumas
rojas en la frente y en el pecho. Le
gustan los espacios abiertos, campos,
cultivos y matorrales, incluso las zonas
con roquedos o campos dunares.

El jilguero resulta inconfundible, muy colorido


y apreciado por su canto. Por esta razón, y
por desgracia, en algunas localidades este
pájaro se captura ilegalmente para enjaularlo.
El jilguero alterna colores castaños, negros
y blancos, tiene la cara de color rojo y las
alas con vistosas franjas amarillas.

Parecido a los fringílidos, el gorrión está muy ligado a la actividad humana, de manera que abandona aquellos lugares o aldeas
que quedan despoblados. Su color es pardo con el pecho y el vientre grisáceos, pico fuerte de granívoro, babero negro y con
píleo gris en los machos. En las Cíes está muy limitado a la zona del camping, que abandona en el invierno; en las Ons está
más expandido.

En las zonas humanizadas y dunares de las Cíes crían unas pocas parejas de escribano soteño. Presenta colores ocres y grises,
con el vientre y la cara amarillos, de tonalidad más intensa en los machos, donde contrasta con la garganta y dos listas en la
cara, de color negro. Los escribanos pertenecen a otra familia de pájaros granívoros, que ponen huevos con trazos irregulares
negros, que recuerdan a las manchas de tinta de escribanos, de donde toman nombre. Ocasionalmente también se puede ver
el escribano montesino.
61
PAJAROS FORESTALES
Los pájaros forestales agrupan especies de diferentes familias, que se especializaron
en explotar distintos microhábitats dentro de las masas arbóreas: en el suelo, en los
troncos, en las ramas bajas, en las copas... En invierno, reyezuelos, herrerillos, carboneros
y agateadores comunes, se mueven a menudo en bandadas mixtas. Los archipiélagos
de las Cíes, y sobre todo Cortegada, los únicos con apreciables extensiones arboladas,
concentran la mayor parte de estos pájaros.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Petirrojo Erithacus rubecula
Mosquitero común Phylloscopus collybitta ? ?
Mosquitero ibérico Phylloscopus ibericus
Reyezuelo listado Regulus ignicapillus
Mito Aegithalos caudatus
Carbonero garrapinos Parus ater
Herrerillo capuchino Parus cristatus
Herrerillo común Parus caeruleus
Carbonero común Parus major
Agateador común Certhia brachydactyla
Pinzón vulgar Fringilla coelebs
Camachuelo común Pyrrhula pyrrhula

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

2
1 Agateador
4
2 Mirlo
3
3 Camachuelo
1 4 Carboneros y herrerillos
5 Mosquitero
5
6 Pinzón

62
Los mosquiteros común e ibérico
son casi iguales y sólo se diferencian
en mano o por su canto. Se trata de
pequeños pájaros insectívoros,
amarillentos y de pico fino. Suelen
moverse a baja altura en árboles y
arbustos, tanto en bosques como en
setos y jardines. El común es
invernante mientras que el ibérico es
nidificante, en primavera y verano.
El reyezuelo listado es el pájaro más pequeño
de Europa (9 cm), nervioso y poco visible entre
el follaje de los árboles. El cuerpo es pálido,
verde en las partes superiores, con una
inconfundible raya blanca sobre el ojo,
enmarcada en dos listas negras y con el píleo
anaranjado (machos) o amarillo (hembras). Se
ve todo el año.

El petirrojo es uno de los pájaros más conocidos Son muy territoriales y


y familiares de Galicia, común en jardines, huertas agresivos entre ellos,
y setos, además de bosques y matorrales. Suele incluso en el inverno
acercarse mucho a la gente, de ahí la expresión
“me lo contó un pajarito” cuando se descubre
un secreto. Es inconfundible, rechoncho con el
pecho rojizo y pico fino de insectívoro.
En invierno puede resultar más abundante por la llegada
de ejemplares de Centroeuropa. En el verano y en el otoño,
los petirrojos jóvenes son totalmente castaños finamente
moteados de negro.

63
Los páridos (carboneros y herrerillos) son pájaros pequeños que apenas
paran quietos, posándose acrobáticamente en las ramas –a veces cabeza
abajo- en busca de larvas, insectos y semillas escondidas en grietas y
hendiduras, que recogen con su pico corto pero fuerte. Generalmente
crían en agujeros de muros o de árboles. Se ven durante todo el año.

11 cm

Carbonero común Carbonero garrapinos

Mito

Herrerillo común

El mito es de color castaño rosáceo, con la cabeza blanquecina atravesada por sendas listas negras sobre los
ojos, que se juntan en el dorso. La cola es muy larga y negra, y el pico diminuto. Hace un nido cerrado y muy
elaborado, construido con musgos y tejido entre finas ramas.
Más raros son el herrerillo capuchino, pardo-grisáceo con una característica cresta de plumas en la cabeza, y el herrerillo común, de
pecho amarillo y dorso azulado. Al primero le gustan los pinares y al segundo los árboles caducifolios, siendo una especie común en
el rural gallego.

64
El carbonero común es el más grande de este grupo,
con el vientre amarillo cruzado por una línea negra
desde el pecho, que también es negro como el píleo
y el cuello, enmarcando la cara blanca. Su porte es
parecido al del carbonero garrapinos, sólo que éste
tiene el cuerpo de colores pálidos, con el cogote
blanco. El carbonero garrapinos habita principalmente
en pinares, mientras que al carbonero común, aunque
viva en los pinares de las Cíes, le gustan los setos con
árboles caducifolios.

El agateador común es inconfundible por su comportamiento,


trepando por los troncos con la cola pegada a la corteza. Busca
insectos o sus larvas en las grietas de las cortezas, que atrapa con
su pico fino y largo, ligeramente curvado hacia abajo. También
anida en agujeros y se puede ver durante todo el año.

En las zonas de árboles caducifolios de Ons y Cortegada podría


criar la oropéndola, un vistoso pájaro estival, negro y amarillo, del
tamaño del mirlo común, que es difícil de ver entre el follaje,
aunque su fuerte y aflautado reclamo es distintivo.

El pinzón y el camachuelo son fringílidos, como verdecillos y


jilgueros, pero están más asociados a las zonas forestales, incluso
florestas espesas, aunque pueden aparecer en campos y setos,
sobre todo en invierno. Son también granívoros, del tamaño del
verderón y con el pico grueso. Se quedan todo el año en las islas
y anidan en árboles. Los machos son mucho más coloridos que
las hembras.

En el caso del pinzón vulgar, los machos tienen la garganta y


el pecho de color granate, con la cabeza gris-azulada y unas
características marcas alares blancas. Estas marcas blancas
también las tienen las hembras, sobre un color castaño pálido,
más claro en el vientre.

El camachuelo común macho tiene la


garganta, el pecho y el vientre de un llamativo
color rojo, con la cabeza negra, el dorso gris
y el obispillo blanco. Las hembras son parecidas
pero con tonos más pálidos. Comen yemas de
los árboles.

Pinzón macho
65
MIRLOS Y ZORZALES
Son pájaros de tamaño medio (20-30 cm), robustos y de vuelo potente. Comen
insectos y lombrices en el suelo, así como un gran número de frutos en árboles y
arbustos, de los que son agentes de dispersión de semillas a través de los excrementos.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Mirlo común Turdus merula
Zorzal común Turdus philomelos

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

El zorzal común es más pequeño que el mirlo común. Su parte superior es castaña,
con el vientre blanco y el pecho crema moteado de negro. Sus hábitos son forestales
y no resulta fácil de ver, aunque su fuerte canto es de los más variados y bonitos
de la fauna gallega. Lo emite habitualmente desde la copa de los árboles, al
amanecer y al atardecer. Come caracoles rompiendo las conchas contra las piedras.
Algunos inviernos, especialmente en épocas frías, se pueden ver el zorzal charlo, el zorzal alirrojo y
el zorzal real, los dos últimos incluso formando bandadas numerosas.

El mirlo común es un pájaro muy conocido por frecuentar parques y jardines y por ser abundante en el medio
rural, aunque también se encuentra en matorrales y bosques. Los machos, de característico y melodioso reclamo,
son negros con el pico anaranjado; las hembras tienen tonalidades más pálidas y los ejemplares jóvenes son
castaño-oscuros. En el suelo camina a saltos.
El mirlo es el principal dispersor de semilla de la interesante población de camarina de las dunas de Muxieiro, en las Cíes, que madura sus
frutos blanco-verdosos en el verano. Los otros dos dispersores de esta planta son la gaviota patiamarilla y el conejo.

66
PÁJAROS EN PASO
En Europa asistimos a dos épocas principales de migraciones de aves, en las cuales millones
de ejemplares de un buen número de especies se desplazan entre los lugares de invernada
(África o sur de Europa) y las zonas de cría europeas. La mayor parte de ellas viajan por
la noche y sólo se ven cuando se detienen durante el día. En la migración prenupcial o de
primavera, entre marzo y mayo en función de las especies, las aves apenas descansan, pues
tienen prisa por buscar territorio y pareja en los lugares de cría, mientras que en el paso
migratorio postnupcial o de otoño (agosto, septiembre y octubre), suelen detenerse durante
más días.

La migración de otoño coincide parcialmente con el período de turismo en el Parque


Nacional, cuando es habitual detectar pájaros que no se ven el resto del año.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Tarabilla norteña Saxicola rubetra
Collalba gris Oenanthe oenanthe
Zarcero común Hippolais polyglotta
Curruca zarcera Sylvia communis
Curruca mosquitera Sylvia borin
Mosquitero musical Phylloscopus trochilus
Papamoscas gris Muscicapa striata
Papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

Otros pájaros que se han localizado en paso son el ruiseñor, el


ruiseñor bastardo -que podría criar en riberas de ciertos arroyos de
Ons-, y durante la primavera el alcaudón común. Aunque no son del
grupo de los pájaros (paseriformes), cabe señalar que durante la
migración hay citas frecuentes de cuco y abubilla, dos aves comunes Pájaros de 15 gramos que
en el medio rural continental próximo. pueden viajar 6.000
kilómetros en pocos días

67
Existen dos especies de papamoscas que se observan fácilmente, posados
en árboles o postes junto a zonas abiertas, desde donde realizan
vuelos cortos para atrapar insectos.
La tarabilla norteña tiene unas costumbres de caza parecidas,
pero en zonas de matorral. Se parece a una hembra de tarabilla
común, habitual en los matorrales del Parque, ya que se posa
de manera bien visible en lo alto de arbustos, pero presenta
estrías negras sobre el plumaje castaño y una marcada
ceja blanca.

El papamoscas negro es muy común,


aunque en el otoño los machos, con
el dorso negro en la primavera, visten
un plumaje parecido al de las hembras,
de color crema pálido más claro en el
vientre, con características marcas
alares blancas.
El papamoscas gris no tiene esas marcas alares
blancas y muestra un tono más grisáceo, con
el pecho y el píleo finamente estriados.

La collalba gris se posa en el suelo, en zonas


pedregosas y de vegetación muy baja, como algunas
pistas de Ons. Su color es crema claro, las alas son
negras y posee una doble lista negra y blanca en el
ojo, aunque lo más característico es el píleo blanco,
visible cuando vuela. Algunas vienen desde
Groenlandia, donde cría una raza más blanquecina.
El zarcero común es parecido a los mosquiteros, sólo que más
amarillo, con el pico más largo y suele posarse más derecho,
frecuentando zarzales. Debe criar en Cortegada. Mucho más común
resulta el mosquitero musical, casi indistinguible del mosquitero
común y del ibérico, de no ser por la voz o por las patas de color
pálido en vez de oscuro.

Hay dos currucas (ver otras especies en pág. 59) que sólo se ven
en las migraciones, comiendo pequeños frutillos en zarzales y otros
arbustos. La curruca mosquitera se parece a un mosquitero,
aunque es más grande, castaño-grisácea y con el pico más grueso.
La curruca zarcera, que debe criar en Cortegada, tiene la garganta
blanca como la cabecinegra y se parece a las hembras de esta
especie, sólo que con un color más rojizo, especialmente en las alas.

68
CÓRVIDOS
El Parque Nacional acoge a una interesante comunidad de córvidos, con dos
especies ya desaparecidas en el resto de las Rías Baixas y que se encuentran aquí
muy amenazadas de extinción: la chova piquirroja y la grajilla. En general, son
aves con un comportamiento social muy evolucionado.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Urraca Pica pica
Arrendajo Garrulus glandarius
Chova piquirroja Pyrrhocorax pyrrhocorax
Grajilla Corvus monedula
Corneja Corvus corone
Cuervo Corvus corax

= raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante; = extinto.

Algunos años crió la urraca en Ons, un


córvido blanco y negro de cola larga,
común en el rural de las Rías Baixas, por
lo que se puede ver ocasionalmente en
cualquier archipiélago. En Cortegada se
encuentra el arrendajo, una urraca
forestal de color gris-rosado, con exóticas
plumas azules y blancas en las alas.

Corneja

Cuervo
Grajilla

Chova piquirroja

69
La grajilla (32 cm) es negra con el cogote gris y
llamativos ojos azulados, con pico corto y fuerte. Cría
en grutas de los acantilados, donde construye el nido
en agujeros.
A partir de junio, las grajillas jóvenes acompañan a
las adultas y se van juntando en bandadas, que cada
año son menos numerosas en el Parque Nacional,
pese a ser una especie abundante en zonas agrícolas
de la España mediterránea, aunque escasa en Galicia.

Chova y grajilla se encuentran muy amenazadas


de desaparición en el Parque Nacional

La chova piquirroja (40 cm) es totalmente negra excepto las patas y el pico, de llamativo color rojo. El pico
es fino, relativamente largo y curvo, adaptado a capturar insectos en matorrales aclarados, pastos naturales,
prados y dunas, incluso revolviendo piedras. Es un ave relativamente fácil de ver en los cantiles de Ons, donde
exhibe sus acrobáticos vuelos. Su aparición suele venir acompañada de un estridente reclamo, que da nombre
onomatopéyico a este ave.
Cría en agujeros inaccesibles de grutas marinas y cantiles. Hoy en día sólo nidifica una pareja en las Ons, donde es habitual que
a principios del mes de junio vuelen 3 ó 4 pollos, que durante un tiempo, antes de dispersarse, acompañan a la pareja progenitora.

Tanto la chova piquirroja como especialmente la grajilla fueron comunes y abundantes en Cíes y Ons a mediados del siglo XX, favorecidas
por la existencia de cultivos y de rebaños de ovejas y cabras, que mantenían un bajo porte del matorral e incrementaban la abundancia
de los grandes insectos de los que se alimentan. La grajilla, en bandadas que superaban el centenar de aves, llegó a ser una plaga para
los cultivos de cereal. En Sálvora también debieron ser comunes, dado el nombre de Gralleiros que reciben los altos de la isla.

Chovas adultas en Canexol, Ons.


70
Cuervo Corneja

El cuervo también es totalmente


negro pero mucho más grande que
la chova y la grajilla. Anida en lugares
abrigosos en las grutas marinas y
cantiles de las Cíes, Ons y Sálvora.
Llega a criar hasta cuatro pollos que
vuelan en junio o julio.
El cuervo es una especie oportunista de
alimentación omnívora, que en primavera suele
introducir en su dieta huevos de gaviotas e
incluso de cormorán, y en el invierno visita las
playas en busca de restos depositados por el
mar.

En los últimos años ha colonizado


las islas la corneja, abundante en el
rural gallego. Es menor que el cuervo
(47 cm, por 60 de éste), con el pico
menos fuerte, voz menos grave y una
silueta con alas y cola relativamente
más cortas, esta última en forma de
abanico (en cuña en el cuervo).

Cuervo

71
LOS MAMÍFEROS
Son pocas las especies de mamíferos que viven en estas islas Atlánticas, y existen dudas sobre el carácter
autóctono de la mayor parte de ellas. Se da por cierto que los gatos, el erizo o las ratas fueron introducidos
a través de la actividad humana, pero existen dudas con respecto al conejo y a pequeños roedores e
insectívoros, como ratones y musarañas..

Mucho más evidente es la introducción de los ciervos de Sálvora, con el objetivo de ser abatidos en las
cacerías que se organizaban en la isla antes de la creación del Parque Nacional. Hoy en día, todavía varios
ejemplares comparten la isla con una manada de caballos semisalvajes. En las Cíes también se soltaron
zorros, sólo machos, en la época de los cultivos forestales, para depredar los conejos que comían los árboles
pequeños; actualmente ya murieron todos. En Cortegada pastan unas veinte cabras en semilibertad y en Ons
quedan algunas ovejas y burros de la que antaño fue una nutrida cabaña ganadera.

Un caso aparte entre los mamíferos son los murciélagos, que según la especie se pueden desplazar volando
a considerables distancias; o la nutria y el visón americano, que pueden alcanzar las islas a nado.

Cíes Ons Sálvora Cortegada


Erizo común Erinaceus europaeus
Topo común Talpa occidentalis
Musaraña común Crocidura russula
Murciélago común P. pipistrellus/mediterraneus
Murciélago hortelano Eptesicus serotinus
Visón americano Mustela vison
Nutria Lutra lutra
Gato doméstico Felis catus
Ratón de campo Apodemus sylvaticus
Rata común Rattus norvegicus
Rata negra Rattus rattus
Ratón casero Mus domesticus
Conejo Oryctolagus cuniculus

= posible; = raro; = escaso o poco común; = frecuente o abundante.

72
INSECTÍVOROS
El erizo común, con el cuerpo recubierto por agudas púas, fue introducido
en las Cíes a mediados del siglo XX, según el testimonio de personas nativas.
Hoy en día habita en matorrales y campos dunares en las zonas bajas de
las islas del Faro y Monte Agudo.

Erizo comiendo caracoles

El topo sólo está presente en Cortegada, donde es frecuente observar los


montones de tierra que deja en la superficie del suelo cuando excava sus
galerías en busca de lombrices e insectos de los que se alimenta. Es negro,
con el hocico en forma de trompa y grandes manos para excavar.
Los topos no comen raíces ni vegetales, aunque por desconocimiento es frecuente que se
les culpe de comer las plantas que los topillos, unos roedores que excavan galerías subterráneas,
comen en huertas y labradíos

La musaraña común también tiene el hocico en forma de trompa, pero


es muy pequeña y de color leonado, casi ciega, pero con un buen oído y
olfato. Come invertebrados entre la hojarasca o bajo los matorrales. Como
sucedía con varios reptiles, se ha demostrado que los ejemplares insulares
de Ons y Sálvora alcanzan un tamaño mayor que los de las localidades
continentales próximas.

73
ROEDORES
Los roedores más conocidos en estas islas son las ratas, representadas por
dos especies introducidas probablemente hace ya varios siglos. Viven en
prácticamente todos los ambientes isleños, principalmente en las zonas
humanizadas donde aprovechan basuras. En las Cíes llegaron a ser plaga
al final de algunos veranos.
Durante el otoño, el invierno y la primavera, épocas en las que apenas existe presencia humana
en las islas, las ratas se alimentan de brotes de plantas, frutos, semillas e insectos, yendo incluso
a mariscar caramujos y mejillones a las rocas durante la bajamar. Sus huellas son habituales
en las playas.

huella delantera

huella trasera

La rata negra suele vivir en


ambientes más naturales que la
rata común, que es más parda
y típica de las ciudades. Ambas
poseen una asombrosa
capacidad de procreación y de
supervivencia.
Además, también están citadas dos
especies de ratones: el ratón casero,
ligado a zonas humanizadas, y el ratón
de campo, una especie que se nutre de
semillas, yemas e invertebrados en casi
todos los hábitats terrestres del Parque.
En Cortegada también se ha citado el
lirón careto.

74
EL CONEJO
Los conejos son muy abundantes en los cuatro archipiélagos del Parque
Nacional, incluso en islas menores como Onza o Malveira Grande. Son
animales muy conocidos, robustos y de orejas grandes y patas cortas, aunque
las traseras son fuertes y le permiten correr a gran velocidad.
En todas estas islas apenas cuentan con depredadores terrestres, al margen de gatos y
recientemente visones, y además están libres de la intensa presión cinegética a la que se ven
sometidos en el resto de Galicia, aúnque sí los capturan azores y ratoneros. El hábitat es
favorable, con matorrales donde buscar refugio y pastos y zonas abiertas para alimentarse.

Pueden verse al borde de los caminos, sobre todo a primeras horas de la


mañana y últimas de la tarde. Algunos años se ven especialmente afectados
por la mixomatosis, enfermedad que los deja ciegos y que les provoca bultos
en el cuerpo, muriendo una gran cantidad de animales.
La presencia de conejos se hace muy evidente por las letrinas de excrementos (bolitas
acastañadas), que acumulan en ciertos lugares (ver pág. 15), así como por las madrigueras
que excavan. Comen numerosas especies de plantas; su efecto sobre la vegetación natural es
desconocido, aunque ya es difícil determinar cuál pudo ser su impacto en el momento en que,
como se sospecha, fueron introducidos en estas islas.

El mamífero más fácil de


observar en estas islas
Atlánticas

75
MURCIÉLAGOS
Los murciélagos son mamíferos nocturnos; vuelan como las aves pero tienen pelo y
amamantan a sus crías. Se relacionan con el medio que los rodea a través de la emisión
de sonidos inaudibles para las personas (ultrasonidos), por medio de un sistema que funciona
de forma similar al sónar de los barcos. Emiten estos sonidos por la boca; por ello, si
llegamos a verlos de cerca y tienen la boca abierta, no significa que nos estén enseñando
los dientes porque nos quieran morder.

Aunque faltan prospecciones apropiadas, sólo dos especies son habituales en el Parque,
muy ligadas a la presencia humana: los murciélagos común y hortelano.

El mejor momento para observarlos es al atardecer, ya que son especies que inician su
actividad bastante temprano, sobre todo el murciélago común. Un buen lugar para hacerlo
es el mirador del Burato do Inferno, en Ons. Además, acuden a comer insectos que atraen
farolas y luces nocturnas, por lo que estos también son buenos lugares para verlos.

El murciélago común (B) es más


pequeño (4 cm), su vuelo es errático
y efectúa frecuentes requiebros.
El murciélago hortelano (A) es
mucho mayor (7 cm), tiene alas
anchas que le proporcionan una gran
maniobrabilidad de vuelo y son
característicos sus cortos planeos y
pequeños picados. Suele cazar a
mayores alturas que el murciélago
común y en áreas más abiertas.
Se alimentan de insectos voladores, que cazan
y comen mientras vuelan. El hortelano captura
con frecuencia presas “duras” como
escarabajos, ya que posee una dentadura más
fuerte que el común. Estos animales hibernan,
por lo que sólo será fácil observarlos entre
Murciélago común refugiado en un ladrillo los meses de abril y octubre. Buscan refugio
principalmente en grutas y construcciones
humanas, en grietas o debajo de tejas.
76
CARNÍVOROS
El único mamífero carnívoro que debió habitar originalmente alguna de
estas islas es la nutria, común en casi todos los ríos de Galicia, pero que
también se adentra en aguas marinas litorales. Es un animal grande de pelaje
pardo, con un rabo largo muy fuerte, adaptado a la natación y al buceo,
fundamental para la captura de peces, la base de su dieta.
En las Cíes queda la referencia del lugar denominado Furna das Lontras, al norte de la playa
de Figueiras, a cuya fuente acudían estos animales (lontras en gallego) durante el crepúsculo,
según el testimonio de personas que vivieron a mediados del siglo XX en estas islas.

Ligados a asentamientos humanos, los gatos domésticos encontraron en


estas islas unos lugares libres de carnívoros salvajes. Algunos se establecieron
y se reprodujeron en libertad después de desaparecer los asentamientos
humanos, tanto en las Cíes como en Sálvora, donde llegaron a ser una plaga.
Su alimentación parece que está basada en micromamíferos, tanto roedores como insectívoros,
así como pájaros y reptiles.

5 cm

Nutria Gato Visón

77
Recientemente está haciendo acto de presencia el visón
americano, un mamífero exótico e invasor que se viene
escapando o liberando de las granjas peleteras desde la
década de los setenta. El mosaico de islas e islotes de Sálvora,
próximas a tierra, fue su primera conquista, y recientemente
han aparecido en las Cíes, lugares donde se trabaja por
controlarlos. Son buenos nadadores, de cuerpo alargado y
pelaje negruzca.

Los visones causan estragos en las colonias de aves marinas,


aunque también se alimentan de peces, reptiles y pequeños
mamíferos. Como en los casos de la nutria y el gato, sus
huellas, excrementos y los restos de sus presas son los indicios
más habituales de presencia, siendo más difícil observarlos.
La predación de un visón sobre un ave se identifica por las
mordeduras en los cañones de las plumas, que quedan serrados,
mientras que un ave de presa le arrancaría las plumas enteras.

78
APÉNDICE
LISTADO DE LOS VERTEBRADOS TERRESTRES DEL PARQUE NACIONAL
MARÍTIMO-TERRESTRE ISLAS ATLÁNTICAS DE GALICIA
Se excluyen peces, tortugas marinas y mamíferos marinos

Se indica su inclusión en alguno de los seguintes listados:

.
1 En el caso de anfibios, reptiles y mamíferos: Directiva 92/43/CEE del Consejo, de 21 de mayo
de 1992, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres.
Anexo II: especies que deben ser objeto de medidas especiales de conservación de su
hábitat.
Anexo IV: especies estritamente protegidas.
Anexo V: especies que pueden ser objeto de medidas de gestión.

Sólo para el caso de las aves: Directiva 79/409/CEE del Consejo, de 2 de abril de 1979, relativa a
la conservación de las aves silvestres.

Anexo I: especies que deben ser objeto de medidas de conservación de su hábitat.


Anexo II: especies cazables.
Anexo III: especies comercializables.

.
2 Categorías de amenaza en España según los correspondientes Atlas y Libros Rojos promovidos
por el Ministerio de Medio Ambiente (Pleguezuelos et al., 2002; Madroño et al., 2004; Palomo
& Gisbert, 2002)
CR= En Peligro Crítico, EN= En Peligro, VU= Vulnerable, NT= Casi amenazado, LC= Preocupación
menor, DD= Datos Insuficientes.

.
3 Status legal según el Real Decreto 439/90, de 30 de marzo, por el que se regula el Catálogo
Nacional de Especies Amenazadas, y posteriores modificaciones y ampliaciones: PE= En Peligro de
Extinción, V= Vulnerable, IE= De Interés Especial.

79
ANFIBIOS

Nombre científico Nombre castellano Nombre gallego 1 2 3

Salamandra común Salamántiga común VU


Tritón ibérico Tritón común LC IE
Sapillo pintojo ibérico Sapo pinto IV LC IE
Sapo común Sapo común LC
Rana verde Ra verde V LC

REPTILES

Nombre científico Nombre castellano Nombre gallego 1 2 3


Lución Escáncer común LC IE
Eslizón ibérico Escáncer de patas ibérico IV EN IE
Eslizón tridáctilo ibérico Escáncer de patas común DD IE
Lagarto ocelado Lagarto arnal VU
Lagartija de Bocage Lagartiña común DD
Lagartija ibérica Lagartiña dos penedos LC IE
Culebra lisa meridional Cobra lisa meridional LC IE
Culebra de escalera Cobra de escada DD IE
Culebra viperina Cobra viperina LC IE
Culebra de collar Cobra de colar LC IE

AVES
Nombre científico Nombre castellano Nombre gallego 1 2 3

Colimbo grande Mobella grande I IE


Pardela cenicienta Pardela cincenta I EN/NT IE
Pardela sombría Pardela escura IE
Pardela pichoneta Furabuchos atlántico EN IE
Pardela balear Pardela balear - CR PE
Paíño europeo Paíño pequeno I VU IE
Paíño boreal Paíño de rabo gallado I IE
Alcatraz atlántico Mascato IE
Cormorán grande Corvo mariño grande IE
Cormorán moñudo Corvo mariño cristado VU IE
Garceta común Garzota I IE
Garza real Garza cincenta IE
Cigüeña negra Cegoña negra I VU PE
Cigüeña blanca Cegoña branca I IE
Espátula común Cullereiro I VU IE
80
Ibis sagrado Ibis sagrado
Flamenco común Flamingo I NT IE
Ánade azulón Lavanco II,III
Silbón europeo Asubiador II,III
Negrón común Pentumeiro II,III
Abejero europeo Miñato abelleiro I IE
Milano negro Millafre negro I NT IE
Alimoche común Voitre branco I EN IE
Aguilucho pálido Gatafornela I IE
A. lagunero occidental Tartaraña das xunqueiras I IE
Aguilucho cenizo Tartaraña cincenta I VU V
Azor Azor IE
Gavilán común Gabián IE
Busardo ratonero Miñato IE
Águila pescadora Aguia pescadora I CR IE
Cernícalo vulgar Lagarteiro NT IE
Esmerejón Esmerillón IE
Alcotán europeo Falcón pequeno I DD IE
Halcón peregrino Falcón peregrino II,III DD
Perdiz roja Perdiz II NT
Codorniz común Paspallás II IE
Ostrero euroasiático Gabita I IE
Cigüeñuela común Pernalonga VU IE
Chorlitejo grande Píllara real IE
Chorlitejo patinegro Píllara das dunas I IE
Chorlito carambolo Píllara rubia I IE
Chorlito dorado europeo Píllara dourada II IE
Chorlito gris Píllara cincenta II
Avefría europea Avefría II IE
Correlimos gordo Pilro gordo IE
Correlimos tridáctilo Pilro tridáctilo IE
Correlimos oscuro Pilro escuro EN IE
Correlimos común Pilro común II,III
Agachadiza común Becacina II,III
Chocha perdiz Arcea II IE
Aguja colinegra Mazarico rabinegro II IE
Aguja colipinta Mazarico rubio II EN IE
Zarapito trinador Mazarico chiador II VU IE
Zarapito real Mazarico real II
Archibebe común Bilurico patirrubio II IE
Archibebe claro Bilurico claro II IE
Andarríos chico Bilurico das rochas IE
81
Vuelvepiedras común Virapedras IE
Págalo pomarino Palleira pomarina IE
Págalo parásito Palleira parasita IE
Págalo grande Palleira grande IE
Gaviota cabecinegra Gaivota cabecinegra I IE
Gaviota enana Gaivota pequena IE
Gaviota de Sabine Gaivota de Sabine
Gaviota reidora Gaivota chorona II
Gaviota sombría Gaivota escura II
Gaviota argéntea Gaivota arxéntea II
Gaviota patiamarilla Gaivota patiamarela
Gaviota groenlandesa Gaivota polar
Gavión hiperbóreo Gaivota hiperbórea
Gavión atlántico Gaivotón IE
Gaviota tridáctila Gaivota tridáctila VU IE
Charrán patinegro Carrán cristado I NT IE
Charrán común Carrán común I NT IE
Charrán ártico Carrán ártico I IE
Charrancito común Carrán pequeno I NT IE
Fumarel común Gaivina negra I EN IE
Arao común Arao I CR IE
Alca común Carolo IE
Frailecillo atlántico Arao papagaio IE
Paloma bravía Pomba das rochas II
Paloma torcaz Pombo torcaz II,III
Tórtola turca Rula turca II
Tórtola europea Rula II VU
Cotorra de Kramer Cotorra de Kramer
Críalo europeo Cuco real IE
Cuco común Cuco IE
Lechuza común Curuxa IE
Autillo europeo Moucho de orellas IE
Mochuelo común Moucho IE
Cárabo europeo Avelaiona IE
Búho chico Bufo pequeño IE
Chotacabras gris Avenoiteira cincenta I IE
Vencejo común Cirrio IE
Vencejo real Andoriñón real IE
Martín pescador Picapeixe I NT IE
Abubilla Bubela IE
Torcecuello euroasiático Peto formigueiro DD IE
Pito real Peto verde IE
82
Pico picapinos Peto real IE
Terrera común Calandriña I VU IE
Totovía Cotovía pequena I IE
Alondra común Laverca
Golondrina común Andoriña IE
Avión común Andoriña de cu branco IE
Bisbita arbóreo Pica das árbores IE
Bisbita común Pica dos prados IE
Bisbita campestre Pica campestre I IE
Lavandera boyera Lavandeira amarela IE
Lavandera cascadeña Lavandeira cincenta IE
Lavandera blanca Lavandeira branca IE
Chochín Carriza IE
Acentor común Azulenta IE
Petirrojo Paporrubio IE
Ruiseñor común Rousinol IE
Colirrojo tizón Rabirrubio IE
Colirrojo real Rabirrubio de testa branca VU IE
Tarabilla norteña Chasco norteño IE
Tarabilla común Chasco IE
Collalba gris Pedreiro cincento IE
Collalba rubia Pedreiro rubio NT IE
Mirlo común Merlo II
Zorzal real Tordo real II
Zorzal común Tordo común II
Zorzal alirrojo Tordo rubio II
Zorzal charlo Tordo charlo II
Ruiseñor bastardo Rousinol bravo IE
Buitrón Carriza dos xuncos IE
Zarcero común Folosa amarela IE
Curruca rabilarga Papuxa do mato I IE
Curruca cabecinegra Papuxa cabecinegra IE
Curruca zarcera Papuxa común IE
Curruca mosquitera Papuxa picafollas IE
Curruca capirotada Papuxa das amoras IE
Mosquitero común Picafollas europeo IE
Mosquitero ibérico Picafollas ibérico IE
Mosquitero musical Picafollas musical IE
Reyezuelo listado Estreliña riscada IE
Papamoscas gris Papamoscas cincento IE
Papamoscas cerrojillo Papamoscas negro IE
Mito Ferreiriño rabilongo IE
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Herrerillo capuchino Ferreiriño cristado VU IE
Carbonero garrapinos Ferreiriño negro IE
Herrerillo común Ferreiriño azul IE
Carbonero común Ferreiriño real IE
Agateador común Gabeador IE
Oropéndola Ouriolo IE
Alcaudón común Picanzo cabecirrubio IE
Arrendajo Gaio
Urraca Pega
Chova piquirroja Choia I IE
Grajilla Gralla pequena
Corneja Corvo pequeno
Cuervo Corvo grande
Estornino pinto Estorniño pinto
Estornino negro Estorniño negro
Miná común -
Gorrión común Pardal VU
Gorrión molinero Pardal montés
Pinzón vulgar Pimpín
Verdecillo Xirín
Verderón común Verderolo NT
Jilguero Xílgaro
Lúgano Úbalo
Pardillo común Liñaceiro
Piquituerto común Cruzabico IE
Camachuelo trompetero Trompeteiro I IE
Camachuelo común Cardeal IE
Escribano soteño Escribenta común IE
Escribano montesino Escribenta riscada IE

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MAMÍFEROS

Nombre científico Nombre castellano Nombre gallego 1 2 3

Erizo común Ourizo cacho IV DD


Topo común Toupa cega DD
Musaraña común Furaño común LC
Murciélago común Morcego común IV IE
M. grande de herradura M. grande de ferradura II, IV VU
Murciélago hortelano Morcego espertello IV
Zorro Raposo LC
Visón americano Visón americano
Nutria Lontra II, IV NT IE
Jabalí Porco bravo LC
Ciervo rojo Cervo VU
Ratón de campo Rato do campo LC
Rata negra Rata cincenta DD
Rata común Rata común
Ratón casero Rato caseiro LC
Lirón careto Leirón careto LC
Conejo Coello bravo LC

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GLOSARIO
Endrino: Prunus spinosa, arbusto espinoso de hojas pequeñas, flores blancas y fruto azulado con el que
se elabora el pacharán. Es el antepasado de los ciruelos.

Melojo o rebollo: Quercus pyrenaica, árbol parecido al roble carballoaunque propio de climas más secos
o fríos que éste, con las hojas más hendidas y pelillos en el envés.

Cleptoparasitismo:actividad de robo del alimento de un animal a otro; pirateo.

Clima submediterráneo: clasificación climática característica de las zonas de clima templado con sequía
estival, generalmente próximas a áreas de clima mediterráneo.

Playa de cantos rodados: acumulación de rocas redondeadas por la acción erosiva del mar; en gallego, coídos.

Comunidad: en ecología, conjunto de especies de un grupo determinado que habitan un espacio geográfico
(p. ej. comunidades de anfibios, de aves de matorrales, de murciélagos...).

Píleo: en las aves, la parte más alta de la cabeza, situada por encima de los ojos, entre la frente y el cogote.

Dentarios: relativos a los dientes.

Endemismo: ser vivo exclusivo de un área geográfica restringida, fuera de la cual no aparece de forma natural.
Generalmente está relacionado con condiciones ecológicas específicas o con la presencia de barreras físicas
en el territorio.

Especie exótica: aquella introducida fuera de su área de distribución natural a raíz de las actividades
humanas, tanto por causa intencional como no intencional.

Especie invasora: aquella que se constituye en agente de cambio que amenaza a la diversidad biológica original.

Estuarina: propia de estuario, espacio con influencia mareal en la desembocadura de los ríos y que cuenta con
agua salobre, mezcla de aguas dulces y saladas.

Hibernar: proceso por el que un animal ralentiza su ritmo metabólico para pasar la estación desfavorable; letargo.

Inmaduro: ejemplar animal ya desarrollado e independizado, pero que aun no posee capacidad
reproductora.
86
Invernar: pasar la época del año desfavorable, otoño e invierno, en un espacio determinado.

Maërl: fondos marinos mixtos formados por cascajos o restos de conchas y por una pequeña alga roja
calcárea de aspecto arborescente, Lithothamnion calcareum.

Melanismo: pigmentación negra de piel, pelo, pluma o escamas, debido a una anormal presencia de
melanina.

Metamorfosis: proceso de cambio de morfología que experimentan algunos animales.

Microhábitat: ambiente reducido y diferenciado dentro de un hábitat, donde desarrollan su actividad ciertas
especies.

Nidificar: reproducirse, criar. Término usado para el grupo de las aves, que habitualmente construyen nidos.

Paseriformes: orden de las aves que agrupa a los verdaderos pájaros y que se caracteriza por tener patas
con tres dedos hacia adelante y uno hacia atrás.

Plumaje nupcial: en las aves, el plumaje que lucen en la época de celo y apareamiento, normalmente a
finales del invierno y de la primavera.

Población: : en ecología, conjunto de individuos de una misma especie entre los que se establece algún
tipo de relación.

Rabadilla: en las aves, la parte superior que se encuentra entre la cola y el dorso.

Región eurosiberiana: región biogeográfica que abarca la mayor parte de Europa, excepto determinadas
zonas de las franjas mediterránea y ártica, así como la zona noroeste de Asia.

Rocas metamórficas: rocas que fueron sometidas a determinadas transformaciones en su estructura y en


su composición mineral y química.

Subespecie o raza: división taxonómica de rango inferior a la especie, que normalmente se origina en
hábitats o áreas geográficas diferenciadas.

Taxón: unidad sistemática relativa a especies y subespecies.

Tundra: ecosistema herbáceo o de matorral, frecuentemente encharcado, propio de las zonas árticas.

Vertebrados: clase de animales caracterizada por la existencia de columna vertebral y de médula espinal.
Agrupa a peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos.

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Partes de una ave

ojo frente
píleo
pico

garganta

cuello
dorso

ala pecho

obispillo
vientre

cola

patas

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Para saber más

Arcea. 2001. Plan de Ordenación dos Recursos Naturais da Illa de Cortegada. Consellería de Medio
Ambiente. Xunta de Galicia. Informe inédito. Disponible en http://medioambiente.xunta.es/

Barbadillo, L.J.; Lacomba, J.I.; Pérez-Mellado, V.; Sancho, V. & López-Jurado, L.F. 1999. Anfibios y reptiles
de la Península Ibérica, Baleares y Canarias. GeoPlaneta. Barcelona.

De Juana, E. & Varela, J. 2000. Guía de las aves de España. Península, Baleares y Canarias. Lynx
Edicións. Barcelona.

Domínguez, J.; Tapia, L.E.; Martín, G.; Arenas, M.; Quintero, I.; Rego, L.E.; Vidal, M.J. 2003. Atlas de las
aves nidificantes de los archipiélagos de Cíes y Ons (Parque Nacional de las Islas Atlánticas).
Organismo Autónomo Parques Nacionales, Serie técnica. Madrid.

Galán, P. 2003. Anfibios y reptiles del Parque Nacional de las islas Atlánticas de Galicia. Faunística,
biología y conservación. Organismo Autónomo Parques Nacionales, Serie técnica. Madrid.

Galán, P. & Fernández-Arias, G. 1993. Anfibios e réptiles de Galicia. Edicións Xerais, Vigo.

Martí, R. & Del Moral, J.C. (eds.) 2003. Atlas de las aves reprodutoras de España. Dirección General
de Conservación de la Naturaleza-SEO/BirdLife. Madrid.

Mouriño, J.; Otero, X.L.; Sierra-Abraín, F. & Alonso, P. 2002. Guía de las Islas Cíes. Concello de Vigo. Vigo.
(ediciones en gallego, castellano, francés e inglés).

Mullarney, K.; Svensson, L.; Zetterström, D. & Grant, P.J. 2001. Guía de aves. La guía de campo de aves
de España y de Europa más completa. Ed. Omega, Barcelona.

Palomo, L.J. & Gisbert, J. 2002. Atlas de los Mamíferos Terrestres de España. Dirección General de
Conservación de la Naturaleza-SECEM-SECEMU, Madrid.

Pleguezuelos, J.M.; Márquez, R. & Lizana M. (eds.) 2002. Atlas y Libro Rojo de los Anfibios y Reptiles
de España. Dirección General de Conservación de la Naturaleza-Asociación Herpetológica Española,
Madrid.

Purroy, F.J. & Varela, J. 2003. Guía de los mamíferos de España. Península, Baleares y Canarias.
Lynx Edicións. Barcelona.

Vilas, A.; Gamallo, B.; Framil, J.; Bonache, J.; Sanz, K.; Lois, M. & Toubes, M. 2005. Guía de visita. Parque
Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia. Organismo Autónomo Parques
Nacionales. Madrid. (ediciones en gallego y castellano).

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Normativa do Parque Nacional
En las islas hay pocos o no hay contenedores, por su impacto visual y por los problemas ambientales que
conllevan el transporte y almacenamiento de residuos. Colabora llevando tus residuos al puerto de origen.

Sólo se permite acampar o vivaquear en el cámping o en la zona de acampada.

Las colillas constituyen un residuo especialmente difícil de retirar en playas y caminos. Apágalas bien y
llevátelas.

Para prevenir los incendios no está permitido hacer fuego.

No se permite arrancar plantas ni ninguna de sus partes.

Está prohibido introducir animales (excepto perros lazarillo) pues pueden interferir con especies nativas.

No esta permitido emitir ruídos que alteren la tranquilidad natural del lugar, molesta a los otros visitantes
y a la fauna de las islas.

Circular fuera de los caminos principales provoca el pisoteo de plantas y el deterioro de la vegetación; al
abrir atajos, aumenta la erosión.

La fauna no puede ser molestada ni se le debe dar de comer, ya que puede causar enfermedades y cambiar
sus costumbres de alimentación . Tampoco se pueden arrancar los seres vivos de las rocas como mejillones
y lapas, ni está permitido llevarse las conchas de las playas.

Las aguas del Parque actúan como uno de los pocos refugios de vida marina. La pesca deportiva está
prohibida.

Para fondear y practicar submarinismo es necesaria la autorización del Parque Nacional.

El baño en el Lago de las Cíes está prohibido pues en sus aguas tranquilas y poco profundas crían muchas
especies marinas.

Existen zonas de reserva a las que no se puede acceder, como los acantilados o las dunas, bien porque
albergan importantes colonias de cría de aves, o por la fragilidad de su flora, entre otros motivos.

Más información en: www.mma.es/parque/lared/islas_atlan/index.htm


e-mail información: iatlanticas@oapn.mma.es

90
Agradecimientos:
A Titín, Pipo, Marta, Cris, Mili, Sés, Viki, Nena y Kenny, y también
a Suso y Jorge de la oficina del Parque Nacional, por sus
comentarios sobre la guía. A Ricardo de las Cíes, a Luís y
Carmela de Ons y a Pepe y Julio de Sálvora, por sus
comunicaciones faunísticas y por su acogida en las islas.

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