Temario Unidad 1

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Módulo Empresa e iniciativa emprendedora

Unidad 1: Iniciativa emprendedora

Ciclo Formativo de Grado Medio

Emergencias Sanitarias
Introducción
A lo largo de esta unidad se pretende transmitir la necesidad de estar al día en las
innovaciones, no sólo tecnológicas, sino en todos los ámbitos en los que puedan existir.
No son pocas las ocasiones en que la innovación ha desbancado a una empresa
consolidada del ranking de primeras empresas pues su producto ha pasado a ser
obsoleto frente a las novedades ofertadas en el mercado.
Por tanto, no sólo habrá de estar al tanto de los avances tecnológicos el nuevo
emprendedor sino también todo aquel que quiera mantener a flote su negocio.
Del mismo modo, se estudiará qué características debe tener la persona para
considerarse emprendedora y cómo se desarrolla profesionalmente como empleado o
empresario, según el caso. La idea de negocio, el plan de empresa y la organización son
factores imprescindibles para convertirse en emprendedor empresario como se verá a lo
largo de esta unidad.

1.1. Innovación y desarrollo económico. Principales características de la


innovación en la actividad de los centros de emergencias sanitarias.

En esta sociedad en la que se vive que va tan deprisa y en la que todos deben adaptarse
con rapidez a los cambios sufridos para ser competentes, la innovación tiene mucho que
decir, pues es la que en mayor medida lleva a las empresas a ser competitivas siempre y
cuando se adapten al ritmo que esta marca en el mercado actual.
A continuación, se verán las características propias de un buen emprendedor y su
relación con la innovación y por ende, con la competitividad empresarial. Del mismo
modo, se analizarán cuáles son los aspectos inherentes a la función de emprendedor que
suponen riesgos.
También se examinarán las distintas fases por la que pasa la innovación empresarial
para llevar al desarrollo económico y mejorar el empleo en la sociedad.
Un centro de emergencias sanitarias puede ofrecer servicios adicionales extras no
típicos de estos centros, que puede hacerlo más atractiva y por tanto competente en el
mercado. Del mismo modo, habrá que prestarle especial atención al diseño de ésta pues
será la imagen que se verá desde el exterior. Por ejemplo: mobiliario sobrio dará lugar a
una idea de antigüedad.

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Las innovaciones tecnológicas pueden suponer ventajas económicas para el centro de
emergencias sanitarias del mismo modo que consiguen una imagen de la empresa
actual. Por ejemplo, la robotización, el hilo musical del centro de emergencias sanitarias
o un blog de este centro.

Abrir áreas paralelas al negocio, pero relacionados con éste puede ser una buena
oportunidad en el mercado. Por ejemplo, montar una panadería saludable.

1.1.1. El proceso innovador y sus características

Mantenerse en la cúspide del mercado con los productos o servicios que se ofrecen
desde hace tiempo significa valerse de las nuevas tecnologías y avances. Esto es la
innovación. Ahí se ve la relación tan estrecha que existe entre el emprendedor y la
innovación necesaria para conseguir ofrecer mejores precios por unos bienes o servicios
determinados dando lugar por tanto a un crecimiento económico del país y a un mejor
bienestar social.

Las características que de esta relación sacamos son las siguientes:

● Crea o modifica: Creación de un producto o servicio novedoso y atractivo para


el público que se convierte en un éxito o modificación de un producto o servicio
ya existente para convertirlo en más atractivo y por tanto que genere más ventas
que las que antes producía haciendo mejorar la posición de la empresa ante la
competencia.
● Actúa sobre el conocimiento: Si no hay conocimiento previo, no se puede
traducir éste con su mezcla de innovación en mejora y bienestar social.
● Resultado del desarrollo científico y humano: sin perder de vista los
requerimientos ambientales y de seguridad.
● Orientada directamente al progreso: Hoy puede ser una ventaja de mercado lo
que ofrezco pero en un futuro puede convertirse en una debilidad.
● Requiere protección: Se utilizan mecanismos de protección tales como patentes,
copyrights… para darle exclusividad legal a los productos generados por el
emprendedor.
● Mayor flexibilidad de producción y menor coste de producción: Las novedades
tecnológicas y los avances permiten mejorar a nivel económico.

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● Desarrollo en el empleo: Pues al abaratar los precios, se compran más productos
o se solicitan más servicios y por tanto, se necesita más personal en las empresas
suministradoras, fabricadoras…
● Interrelacionada con todas las áreas de la empresa: Ninguna de las funciones de
la empresa son ajenas a la innovación.
● Implica riesgos: Pues innovar no siempre es acertar.

1.1.2. Fases del proceso innovador

Las fases son todos los pasos desde el descubrimiento hasta la puesta en práctica de la
idea.

La primera fase es la del descubrimiento o identificación de oportunidades para idear


con el uso de la innovación e inteligencia valiéndose de la formación y habilidades del
equipo de trabajo.

La segunda fase es la de valoración o evaluación de ideas siguiendo el criterio de mayor


o menor potencial aportado para generar nuevas fuentes de ingresos y mayor bienestar
social. También se valorará si es factible llevarlas a cabo o no sopesando los riesgos de
su puesta en práctica. Se plantearán las soluciones posibles llegado el caso teniendo en
cuenta para priorizar las ideas, el tiempo que se necesitará para que sean rentables y los
trámites legales necesarios para su puesta en marcha. Se valora la necesidad de
implicación de los distintos departamentos de la empresa que puede hacer que se
produzcan cuellos de botella en el funcionamiento habitual del resto de áreas.

La tercera fase es de concreción a través de dar forma definitiva a la idea innovadora


como un proyecto definitivo con planes concretos de trabajo y asignación propia de
recursos.

La cuarta fase es la de ejecución, que consiste en dedicar el tiempo, dinero y recursos


necesarios a la innovación para que el proyecto salga a flote, concienciando a los
participantes de la importancia de lo que se quiere lograr con él.

La última fase es la de seguimiento. Una vez finalizado el proyecto se hace un análisis


para ver si se han ajustado a la previsión en todos los aspectos o por el contrario ha
habido desviaciones importantes. En este último caso se deben estudiar las causas que

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las han producido y buscar mejoras en el proceso.

Mucha importancia aquí tiene el equipo de análisis de riesgos, tesorería o calidad de la


empresa.

1.1.3. Factores de riesgo en la innovación empresarial

Se ha comentado con anterioridad que la innovación tiene como característica la


asunción de riesgo, por lo tanto, el emprendedor deberá conocer todos ellos y tener
previsto para llegado el caso de producirse una acción paliativa del mismo modo que
deberá prever medidas para intentar evitar en la medida de lo posible que se produzcan
éstos.

Los riesgos que pueden identificarse en la innovación son:

● Que en poco tiempo los productos innovadores se conviertan en obsoletos, pues


la normativa es cambiante en todos los aspectos.
● Que la inversión de la que se precise para innovar no sea rentable pues se coman
los intereses de los apoyos financieros o no se sea capaz de recuperar lo
invertido en el tiempo necesario.
● Que la empresa se haga dependiente del nuevo producto el cual puede no tener
la aceptación esperada en el mercado o disminuir con el tiempo su demanda
porque se hagan obsoletos o simplemente porque deje de ser un producto
novedoso. Esta dependencia del nuevo producto supondrá una desatención a los
productos que han funcionado toda la vida que a la larga pueden ser los que
salven los resultados financieros de la empresa.
● Aparición de nuevos competidores o imitación por otros especializados más
eficientes que en poco tiempo le añadan algún valor al producto novedoso
haciéndolo mucho más útil.
● No tener la habilidad de convertir la idea en plan concreto eficaz asignándole los
recursos necesarios. En definitiva, no tener la capacidad para implementar la
innovación que tenemos en mente.

1.2. Factores claves de los emprendedores. Iniciativa, creatividad y formación.

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Cualquier persona que toma la decisión de montar un negocio debe tener iniciativa ya
que lo que está planteando es hacer funcionar un proyecto que conllevará resultados
económicos y sociales generando el conocido “desarrollo económico”.

La persona con iniciativa no sólo se anticipa a los problemas que se pueden generar en
el desarrollo de su actividad, sino que visualiza con facilidad las oportunidades que
pueden crearse, realizando las acciones necesarias para ello. La iniciativa implica poner
en práctica lo imaginado resolviendo con agilidad cualquier incidencia.

La capacidad que tiene una persona para generar ideas con un modo de pensar claro y
conciso y una personalidad ilimitada hace a ésta creativa.

El emprendedor además ha de ser innovador, utilizando su formación y conocimiento


del sector para crear o mejorar los productos o servicios que ofrece para conseguir éxito
en el mercado y favorecer el bienestar social. Esto es lo que deriva en una idea
novedosa.

El emprendedor es aquel que tiene unas cualidades innatas:

● Capacidad para detectar oportunidades: Observan el entorno y ven cualquier


cambio en él como una oportunidad para emprender un negocio.
● Creativos e imaginativos, con visión de futuro: Tienen el don de tener todo el día
la bombilla encendida.
● Optimistas: Convierte las adversidades en ventajas.
● Constantes y tenaces: No paran hasta que llevan a cabo su idea.

Diferencias entre emprendedor y empresario

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EMPRENDEDOR EMPRESARIO
Nace siendo emprendedor El empresario no nace, se hace
No se puede aprender a ser
emprendedor Se puede aprender a ser empresario
Se le ocurren infinidad de ideas Convierte la idea del otro en una empresa
brillantes rentable
Le gusta la aventura y el riesgo Le gusta el control y el riesgo calculado
No tiene una parte aprendida Requiere gran formación

1.2.1. La cultura emprendedora

La persona emprendedora es singular desde el punto de vista de sus creencias, valores,


ideas, actitudes… pero necesita de la aceptación de la sociedad para ejecutar su plan de
negocios y con él obtener rentabilidad.

Se refiere esto a la sociedad emprendedora que se anticipa a otras sociedades


identificando oportunidades y previniendo dificultades. Se convierte en una sociedad de
progreso. Esta sociedad se compone de un grupo de personas con un comportamiento
diferenciador respecto a creencias, costumbres, destrezas… tanto innatas como
adquiridas.

Esto, junto con la formación de competencias técnicas propias del negocio y


empresariales generales de cualquier otro, genera lo que se denomina cultura
emprendedora la cuál lo que pretende es ofrecer un producto a precio razonable
atendiendo al cliente de manera idónea y beneficiando en todo momento a la sociedad,
en concreto, a su bienestar social.

Si la persona emprendedora se ha descrito como creativa, con iniciativa y formación


determinada a la par de optimista y arriesgada, cuándo estas habilidades y
conocimientos son dirigidos a gestionar un proyecto concreto se convierte en cultura
emprendedora.

Otro aspecto a destacar es la necesidad de ser una fuente de creación de empleo por lo
que para desarrollar el ejercicio de la actividad empresarial se debe contar con mayoría
de edad, libre disposición de bienes y capacidad legal suficiente tal como establece el

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Código Civil.

El elevado desempleo actual hace que el interés por el fenómeno del emprendimiento y
creación de empresa vaya creciendo en el sector de la educación y es por ello que se
lucha por crear una cultura emprendedora desde muy jóvenes para que aprendan a
desarrollar capacidades de responsabilidad y cambio ya que, la creación de una empresa
supone crear el propio trabajo, pero también colaborar al crecimiento económico de la
zona creando nuevos puestos de trabajo.

1.3. La actuación de los emprendedores como empleados de un centro de


emergencias sanitarias.

Un trabajador, tiene como principal motivación el dinero o el ascenso profesional a


cambio del trabajo y esfuerzo máximo. No concibe trabajar si no es con ese fin.

El emprendedor empleado sabe que aunque trabaje duro podría no obtener un pago si no
se obtienen unos buenos resultados, por lo que va muy lejos para obtenerlos nutriéndose
de lo que va aprendiendo para dar respuestas a nuevos retos. Está movido por su
entusiasmo y espíritu creativo.

Lo que sí mantiene el empleado mientras desempeña sus funciones propias del puesto es
la idea de negocio en mente, la necesidad de independencia laboral, la búsqueda de
mejorar a través del autoempleo aunque de momento, no pueda hacer uso de ésta por
falta de recursos.

Los emprendedores pueden ser productores, esto es, con mucha capacidad inventiva y
recursos técnicos suficientes para generar nuevos productos que luego serán patentados
por ellos mismos. Este tipo de emprendedor parece saber hacer uso de la tecnología que
los tiempos ofrecen, pero además dispone de los medios necesarios para generar el
negocio profesional. Por ejemplo: Startups.

El emprendedor puede tener una gran connotación social porque desarrollen actividades
a favor de sectores de la sociedad más vulnerable ofreciendo una mejora en la calidad

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de vida a cambio de no recibir pago alguno. Por ejemplo: Médicos sin fronteras.

Otro modo de ser empleado y emprendedor es el tipo conocido como intraemprendedor.


Este empleado desempeña sus tareas en una organización y se dedica a elaborar
proyectos novedosos para ésta innovando en productos, servicios o procesos ya
existentes. Por ejemplo: Google.

También el empleado interemprendedor trabaja para una empresa durante un tiempo,


conoce y aprende el qué y cómo hacer del negocio y después lo aplica en su nuevo
negocio. Se verá más adelante que es una de las vías de generación de ideas.

1.4. La actuación de los emprendedores como empresarios en el sector de las


emergencias sanitarias.

Dentro de los tipos de emprendedores, aparte de los comentados en el punto anterior,


existe el emprendedor empresario que es aquel que desarrolla habilidades
administrativas para generar negocios haciendo redes de contacto y llevando un buen
control y organización de este. Es una persona líder y buena motivadora de su equipo.

Encontramos también como tipo de emprendedor empresario el “low cost”, que es el


tipo de emprendedor que, partiendo de un modelo de negocio existente, reduce los
márgenes al máximo para rentabilizar el negocio. Cualquier descuido en la gestión
puede llevar a pique la empresa aunque la ventaja de este modelo sea un producto
testado.

Aunque en el punto siguiente se analizará el concepto de empresario como tal y sus


principales características, se resume aquí un poco la idea del emprendedor que decide
ser empresario.

El técnico en emergencias sanitarias que tiene claro que quiere tener éxito y obtener
beneficios altos sabe que tiene que esforzarse más que el resto de compañeros de
profesión pensando de manera distinta a ellos para conseguir poner en práctica nuevos
retos. Este será el emprendedor empresario que no deja de pensar en los resultados.

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El empresario emprendedor puede venir de ser previamente empleado en un centro de
emergencias sanitarias o no, es decir, lanzarse directamente a la creación de un nuevo
negocio una vez finaliza la formación necesaria previa para poder establecerse como tal.
En cualquier caso, el técnico de emergencias sanitarias que monta su propio centro, pasa
a ser responsable de todas las decisiones. Por ejemplo: Qué debe hacer para poner en
funcionamiento la empresa, cómo y cuándo.

Al no trabajar para otros, no solo debe cumplir con lo que le pide el momento, sino que
debe prever las necesidades del futuro arriesgándose probando nuevas ideas estando en
continuo aprendizaje sobre los aspectos que no se manejan de manera natural, pero
siempre, haciendo lo que gusta y no cualquier cosa por dinero. Esto supondrá muchas
horas de trabajo no pagadas.

1.5. El empresario. Requisitos para el ejercicio de la actividad empresarial.

El empresario es el titular de una empresa, es decir, aquella persona propietaria de una


empresa, bien porque la ha creado o la ha heredado. Todas aquellas personas que tienen
una empresa son empresarios, ya sea el dueño de Zara ya sea el dueño de la frutería de
al lado de casa. Por tanto, ser empresario es fácil. Otra cosa es ser buen o mal
empresario, ya que para ser un buen empresario hay que conseguir unos objetivos
planificados previamente, organizando de forma adecuada la empresa y los recursos de
los que dispone. Además, la persona ha de tener unas cualidades innatas:

● Capacidad de trabajo y esfuerzo: Un centro de emergencias sanitarias dejado en


mano de un encargado al final trae consecuencias.
● Capacidad de asumir riesgos: El primero que se asume es el dinero que va a
invertirse en el centro de emergencias sanitarias.
● Capacidad de reacción frente a las adversidades: Continuamente surgirán
adversidades que no podrán permitirse.
● Capacidad para tomar decisiones: Se toman a diario, con determinación y sin
miedo siempre recopilando la mayor información posible para que las decisiones
sean las correctas.

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● Capacidad para solucionar problemas: Tomaremos los problemas por las riendas
y les daremos una solución, no esperando que se solucione solo.

También la persona empresaria deberá tener unas aptitudes adquiridas o aprendidas:

● Formación en todas las áreas de la empresa: Esto es lo que os explicaba que


vamos a ver aquí, en este módulo, un poco de todo, pues debemos saber
defendernos sin pretender ser expertos en un curso. Debemos ser capaces de
identificar qué está pasando en cada área, para que mis trabajadores, externos…
no me estafen o, simplemente se equivoquen.
● Formación para saber dirigir un equipo de personas: Debe ser capaz de crear un
buen ambiente de trabajo en la empresa, para hacer ver a los trabajadores que
son un equipo y tienen que remar en la misma dirección.

1.5.1. El empresario y la empresa

El dueño del centro de emergencias sanitarias se encarga de liderar de manera adecuada


aplicando sus conocimientos y generando un ambiente adecuado, mandando y
motivando a los empleados cuyo comportamiento conocerá perfectamente de manera
individual y grupal, para que realicen tareas esenciales para la consecución del fin
último esperado por la empresa. Planificará el futuro de la empresa con una buena
gestión de recursos combinada con un buen uso de las técnicas de las que dispone.

Igual de importante es para un trabajador conocer la empresa cómo conocer al


empresario para encontrarse bien en su puesto de empleo.

Intervienen aquí dos conceptos importantes. El temperamento, que es la forma que tiene
el técnico de emergencias sanitarias titular de su centro de comportarse y que le sale de
manera natural. Son los llamados rasgos de personalidad que permanecen estables en el
tiempo y que por su naturaleza son difíciles de cambiar. Es por tanto algo innato. El
carácter que es la forma que se tiene de expresarse psicológicamente y consiste en
aplicar el temperamento afectado por la cultura, el entorno, las experiencias, los
conocimientos… Es el sello personal que diferencia a uno de los demás y es moldeable.
No es algo innato sino que se adquiere.

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La práctica del temperamento y el carácter a la hora de dirigir se denominan hábitos
directivos. Por ejemplo, cómo el técnico de emergencias sanitarias titular delega, cómo
comunica…

La mezcla de la personalidad con el carácter da lugar a unos hábitos directivos que se


traducen en comportamientos. Es decir, el comportamiento es la consecuencia de la
ejecución y puesta en práctica de la personalidad y el carácter.

Un buen directivo lo es por su carácter, ya que esto sí es esfuerzo propio. Aunque no


debemos olvidar que las bases o cimientos sobre los que forjamos nuestro carácter las
pone la personalidad.

1.5.2. Funciones de la dirección: dirección, planificación, organización, ejecución y


control.

La dirección tiene cuatro cometidos bien importantes los cuáles tiene que cumplir de
manera obligatoria:

- Planificación: Lo que se necesita de un director con esta función es


“programación”. El director debe anticiparse a todo lo que se va a tener que
llevar a cabo en la empresa a corto, medio y largo plazo.

Dentro de esta función, se recogen otras propias tales cómo establecer los
objetivos de la empresa, los principios básicos por los que regirse o las normas
a cumplir. También los procedimientos que habrá que desarrollar para realizar
el trabajo requerido para conseguir dichos objetivos y la valoración económica
de lo que todo esto supondrá.

- Organización: Lo que se necesita de un director con esta función es


“estructuración”. El director debe ordenar las ideas planificadas detallando las
formas necesarias para alcanzar el objetivo empresarial y determinando la
estructura interna de la empresa.

Dentro de esta función, se recogen otras propias tales cómo exponer a través
de organigramas las relaciones funcionales y jerárquicas de la empresa o

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explicar la circulación de la comunicación e información interna y con el
exterior.

- Ejecución: Lo que se necesita de un director con esta función es “actuación”.


El director debe poner en práctica las ideas planificadas a través de las formas
establecidas a través de la función “organización” para alcanzar el objetivo
empresarial.

Dentro de esta función, se recogen otras propias tales cómo conseguir que se
realicen las tareas propias para la consecución del objetivo marcado
previamente por la empresa haciendo uso de su liderazgo sobre el equipo
humano, orientándolo y motivándolo.

- Control: Lo que se necesita de un director con esta función es “inspección”. El


director debe hacer un estudio comparativo entre los resultados obtenidos y
los objetivos propuestos, para de esta manera obtener un resultado y en el caso
de existir desviación relevante, poder paliar ésta y evitarla en sucesivas
ocasiones.

Dentro de esta función, se recogen otras propias tal cómo auditoría de que se
cumple lo previsto, examen del presupuesto y preparación de datos
estadísticos para realizar las comparaciones necesarias para evaluar la
ejecución del resto de funciones.

1.6. Objetivos personales versus objetivos empresariales

Cuando se habla de objetivos personales se refieren a las metas que una persona se
propone lograr o alcanzar en su vida, sin embargo cuando se nombra los objetivos
empresariales se está haciendo referencia a los objetivos que una empresa pretende
alcanzar, los cuáles establecen el camino a seguir y sirven como fuente motivación a los
miembros de la empresa.

Por tanto, las personas que trabajan en la empresa deben trabajar para conseguir los
objetivos empresariales, por ello, se puede decir que la empresa está utilizando el
trabajo y esfuerzo del trabajados para alcanzar dichos objetivos, pero también ellos
utilizan a la organización para lograr sus objetivos personales, por lo que no se trata de

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un conflicto entre unos objetivos. Ya que las organizaciones velarán por sus intereses
mientas que los individuos tienden a satisfacer ciertas necesidades que entrelazarán los
objetivos empresariales con lo personales.

Pero no siempre se cumplirá todos los objetivos personales y empresariales, que sería lo
ideal, en algunas ocasiones sólo la organización logrará sus objetivos y los personales
no se cumplirán o al revés. Aunque pueden resultar más afectadas las personas ya que al
no conseguir sus objetivos personales, surgirá la frustración, conflicto y fracaso como
resultado de no lograr lo que se ha propuesto conseguir dentro de la organización y
como resultado las personas se terminarán yendo a otras empresas donde volverá a tener
la esperanza de conseguir sus objetivos deseados.

1.7. Plan de empresa. La idea de negocio en el ámbito de las emergencias sanitarias


y afines

El plan de empresa se puede definir como un documento en el que se va a recoger el


contenido del proyecto empresarial que se pretende llevar a cabo y que abarcará desde
la idea de negocio hasta la forma concreta de llevarlo a cabo. Es, por tanto, una
herramienta primordial para poder hacer un seguimiento del desarrollo de la actividad
empresarial, analizando y comparando previsiones y resultados. Además, resultará muy
útil para solicitar ayuda o apoyo financiero ya que servirá como tarjeta de presentación
del proyecto empresarial ante las distintas entidades financieras, instituciones o posibles
socios.

Cuando se quiere seleccionar una idea de negocio, ya sea en el ámbito de emergencias


sanitarias o en cualquier otro ámbito, son muchos los factores que pueden llevar a una
persona a inclinarse por un negocio concreto. Normalmente vienen determinados por los
siguientes:

 Oportunidad de negocio en mercados poco abastecidos, de nueva creación o con


un alto potencial de crecimiento.
 Conocimientos técnicos sobre mercados, sectores o negocios concretos.
 Simplicidad del negocio

Por tanto, la idea de negocio en el ámbito de las emergencias sanitarias puede ser

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montar un centro de emergencias sanitarias propiamente dicho u otro más atípico
acompañado de servicios adicionales extras. Sea lo que sea se debe tener claro y
plasmarlo en el plan de empresa con el objetivo de darle forma a esa idea. Analizar si
será un negocio rentable, si contará con financiación o las posibilidades que posee para
llevarlo a cabo.

El emprendedor se debe asesorar muy bien para minimizar los posibles riesgos a los que
se puede enfrentar cuando se tome la decisión de abrir ese nuevo negocio, y más aún
cuando se trata del sector de la salud.

1.7.1. Objetivos de la empresa u organización

Cuando se lleva a cabo un nuevo proyecto es bueno pararse a reflexionar y especificar


los objetivos que se pretenden conseguir. Para especificar dichos objetivos se pueden
realizar las siguientes preguntas:

 ¿Qué quiero conseguir?


 ¿Cómo voy a conseguir mi plan?, ¿qué fases van a permitir que se cumplan los
objetivos?
 ¿Cuándo se alcanzarán los objetivos?
 ¿Quiénes serán las personas responsables de realizar cada uno de los pasos o
procesos que llevarán a conseguir los objetivos?

Para que la organización interna de la empresa sea más eficaz será necesario que los
objetivos sean claros y se conozcan por todos los empleados que trabajan en dicha
empresa. Ya que esto ayudará a saber dónde dirigir su trabajo y se coordinarán más
fácilmente. Asimismo, los objetivos permiten la evaluación de la organización y los
procesos llevados a cabo mejorando progresivamente la actividad realizada.

Cuando se formulan los objetivos, se debe tener en cuenta que éstos sean:

 Medibles
 Proporcionados
 Ambiciosos
 Realistas
 Proporcionados
 Compatibles

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 Coordinados

Toda empresa tiene en común la obtención de una serie de objetivos generales, los
cuales se pueden agrupar en:

 Económicos: ya que buscan la obtención de un beneficio económico.


 Técnicos: ofreciendo a la sociedad los productos necesarios, utilizando para ello
la tecnología adecuada e invirtiendo en investigación, desarrollo e innovación y
aportando creatividad.
 Humanos: ya que tanto el empresario, como al trabajado reciben una retribución
económica, la posibilidad de relacionarse socialmente, fomenta las relaciones
interpersonales, ayuda a la inserción social y favorece la autorrealización
personal.
 Sociales: las organizaciones contribuyen a la creación de empleo lo que sostiene
la economía del país a través del pago de los impuestos, que el Estado reinvierte
en servicios públicos, tales como sanidad, educación obras públicas, justicia, etc.

Pero al mismo tiempo cada empresa debe especificar su propia organización. Por ello,
deben especificar su misión, es decir, lo que realmente quiere ser la empresa, lo que
marca su identidad y su política de actuación. Además de especificar sus objetivos
generales y operacionales:

 Los objetivos generales son los fines a largo plazo y concretan la misión de la
empresa. Estos objetivos son flexibles ya que se pueden y deben variar según
cambie el entorno y la propia estructura interna de la empresa. Es primordial
revisar regularmente los objetivos marcados para comprobar si siguen siendo
válidos y de actualidad.
 Los objetivos operacionales concretan en corto plazo los objetivos generales
definiendo cada uno de los procesos o tareas que van a permitir conseguir los
objetivos a largo plazo, para cada una de las secciones de la empresa.

1.7.2. Estrategia empresarial

Cuando se habla de estrategia empresarial se hace referencia al conjunto de acciones


que permiten conseguir los objetivos de la empresa a largo plazo. Concretándose en el

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diseño de un programa o de un plan de acción, fundamentados en una política o
filosofía empresarial.

La estrategia influye en aspectos fundamentales de la empresa como:

 El estilo de dirección.
 La toma de decisiones ya que proporciona un patrón coherente.
 Organiza los recursos de la empresa de modo que se encaminen de la manera
más eficiente, al logro de los objetivos de la organización.
 Proporciona una base para establecer el marco de relaciones entre la empresa y
los grupos con los que se relaciona.

Se distinguen tres niveles;

1. Nivel corporativo: hace referencia a las decisiones que influyen al conjunto de la


organización y que pretenden crear la idea de una misión común. Pretenden
unificar en una misma dirección todos los esfuerzos de los diferentes elementos
de la empresa.
2. Nivel funcional: En este nivel se fijan las estrategias que perseguirán cada uno
de los departamentos de la empresa, las cuales deberán ir orientadas al logro de
la estrategia global, definida previamente.
3. Nivel de la unidad de negocio: Cuando una misma empresa desarrolla varios
productos distintos que cubren mercados diferentes, fija estrategias específicas
para cada negocio o producto. Casi todas las estrategias de este nivel se ocupan
de los aspectos de comercialización.

1.7.2.1. Estrategia de ventaja competitiva

En una empresa se produce una ventaja competitiva cuando esta tiene una mejor
posición en el mercado que el resto de las organizaciones competidoras. Esta condición
más favorable puede deberse a múltiples causas:

 Liderazgo en costes: Una empresa es líder en costes cuando puede ofrecer un


bien o servicio comparable al de sus competidores, incurriendo en menores
costes. Con esta estrategia la empresa persigue reducir los costes al máximo

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posible, pudiendo bajar los precios por debajo de la competencia y seguir
obteniendo beneficios.
 Diferenciación: con esta estrategia se pretende diferenciar el producto que ofrece
la empresa del resto de la competencia, o alguno de sus componentes para que
sea percibido como único en el mercado, de manera que los clientes estén
dispuestos a pagar un precio más alto por éste.
 La empresa podrá diferenciar su productos por sus características, por las
características del mercado al que se dirige, es decir adaptándolo a los gustos y
necesidades específicas del consumidor o por las características de la empresa,
es decir, por su identidad, estilo, valores, reputación y prestigio ante los clientes.

1.7.2.2. Estrategias de desarrollo o crecimiento

Cuando se plantean las estrategias, también debe tenerse en cuenta por dónde puede
crecer en un futuro, más o menos próximo. Relacionado con esto diferenciamos las
siguientes estrategias:

 Estrategia de concentración: consiste en ofrecer un solo producto para


especializarse en el mismo. Aunque también existe la posibilidad de
especializarse en un segmento de mercado.
 Estrategia de diversificación: radica en comercializar nuevos productos además
de los que ya se vendían en la empresa y/o introducirse en nuevos mercados.
Una empresa opta por esta estrategia cuando el mercado al cual se dirigía está
colapsado, pudiendo diversificar de dos formas diferentes:
o Diversificación horizontal: consiste en producir y/o vender nuevos
productos en mercados similares a los tradicionales de la empresa y
empleando una tecnología equivalente.
o Diversificación vertical: se basa en la producción y venta de productos
relacionados con el ciclo de explotación de la empresa. De esta manera,
la empresa se convierte en su propio proveedor o cliente iniciando
actividades que antes cubrían compañías ajenas a la empresa.

Para el desarrollo de esta estrategia es importante el desarrollo de competencias,


habilidades o conocimientos nuevos por parte de la empresa.

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 Internacionalización: el objetivo de esta estrategia es ampliar los mercados y
ampliar el ciclo de vida llegando a mercados exteriores.

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1.7.2.3. Estrategias de Cooperación

Otras estrategias permiten a las empresas establecer alianzas con otras empresas.
Actualmente existe una gran variedad de acuerdos de cooperación, cada vez más
flexibles y adaptados a cada realidad. Entre ellos, destacamos:

 Los contratos de larga duración: Las empresas firman un contrato a largo plazo,
para desarrollar una serie de actividades de manera conjunta y normalmente
complementaria. Estos contratos dan lugar a una relación continuada entre las
partes firmantes. Los acuerdos pueden ser de distintos tipos:
o Entre competidores para disminuir por un tiempo la competencia entre
ellos,
o Entre empresas que ofrecen productos complementarios.
 La franquicia. por la cual se establece un contrato que te permite vender un
producto de una firma comercial en una tienda de otro propietario y bajo ciertas
condiciones económicas.
 Las licencias: es un contrato por el cual una empresa cede a otra el derecho a
utilizar su propiedad industrial a cambio de una contraprestación. Estos derechos
incluyen las patentes, las marcas comerciales, los diseños, los derechos de autor,
el saber hacer (know-how) y la información técnica. La licencia puede incluir
acuerdos extensos, para cubrir todo lo referente al desarrollo tecnológico de una
empresa.
 La subcontratación: una empresa que funciona como contrata encarga a otra,
subcontratista, la realización de determinadas actividades del proceso de
producción, pudiendo llegar a fabricar el producto completo. De esta forma, la
empresa principal reduce costes fijos y ya no tiene necesidad de tantos recursos,
por lo que consigue producir a un coste inferior. Por otra parte, cada empresa se
especializa y se centra en desarrollar las habilidades y competencias que cada
una precisa.

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