Alfabetización Inicial en el Nivel Superior
Alfabetización Inicial en el Nivel Superior
Alfabetización Inicial en el Nivel Superior
FUNDAMENTACIÓN:
Las prácticas de lectura y escritura de textos tienen sólida presencia en los
estudios de Nivel Superior. Sin embargo, uno de los mayores obstáculos que
debe sobrellevar el estudiante es adquirir la práctica de la lectura sostenida,
profunda, crítica y analítica de textos extensos, complejos, ante los que, en la
mayoría de los casos, es la primera vez que se enfrenta. Del mismo modo, la
escritura en los comienzos de su formación, requiere apropiarse de ideas y
volverlas relevantes para que sea eficaz lo que se quiere decir; esta práctica
también requiere seleccionar, parafrasear y resumir cuidadosamente las citas
para que sobre éstas se puedan aportar la propia mirada, la opinión personal y
hasta la propia experiencia. Mientras más se practique la inclusión de la propia
perspectiva, mediante la discusión de lecturas, más se avanza en los textos
desde una voz meramente reproductiva hacia una voz que construye
conocimiento (Scardamaglia y Bereiter,1992). Escribir basándose en las lecturas
de ese campo disciplinar, representar ideas en un texto y posicionar las propias
aserciones al respecto es un principio conocido como “intertextualidad”.
Partimos de la definición fundacional de Bajtín: “cada esfera del uso de la
lengua elabora sus tipos relativamente estables de enunciados a los que
denominaremos géneros discursivos”; estos enunciados “reflejan las condiciones
específicas y el objeto de cada una de las esferas no solo por su contenido
(temático) y por su estilo verbal o sea por la selección de recursos léxicos,
fraseológicos y gramaticales de la lengua, sino ante todo, por su composición o
estructuración” (Bajtín, 2005:248-249). Y a partir de la noción de género
discursivo se puede abordar tanto la secuencia estructural de la monografía como
las normas de puntuación o los conectores utilizados. De esta manera, las
diferentes dimensiones del texto cobran sentido porque se articulan con los
objetivos sociales del género como un todo.
Abordar explícitamente las prácticas letradas en la formación superior es
importante en un doble sentido: por un lado, es preciso escribir y leer para
aprender, ya que estas prácticas sirven como instrumento privilegiado para
explorar y aprender los contenidos disciplinares (Carlino, 2004: 8); por el otro, es
preciso aprender para escribir y leer ya que los contenidos y conocimientos se
enseñan, aprenden, negocian y evalúan según rasgos retóricos específicos en
cada disciplina (Rose y Martin,2013:18; Nesi y Gardner, 2012:3).
Los textos que los estudiantes de nivel superior escriben, los textos que los
docentes usan en sus cursos y los textos que los expertos publican en revistas
especializadas o debaten en congresos científicos- y que a veces también tienen
que interpretar los alumnos noveles- no pueden considerarse como expresiones
individuales y aisladas, sino que se insertan en un conjunto de prácticas letradas
donde confluyen acuerdos, disputas, expectativas y antecedentes disciplinares
(Hyland, 2004:1).
Los géneros que predominan en las prácticas de lectura académica se
caracterizan porque, en su gran mayoría, sólo se producen en ese espacio
institucional por lo que muchos de los conocimientos y de la experiencia previa
en escritura con la que el estudiante llega a los estudios superiores suelen
requerir una adecuación a las nuevas exigencias. Algunos géneros escolares
guardan una relación estrecha con los géneros de la formación ( interpretación de
consignas, respuestas de examen escritas, informes, reseñas y hasta
monografías ), pero esos mismos géneros adquieren ya rasgos particulares que
los complejizan.
Llevar a cabo esta tarea requiere de aprendizaje y desde este enfoque es
que la Institución ha emprendido acciones de alfabetización académica que
atraviesan el Profesorado de Geografía, Profesorado de Química, Profesorado
de Educación Inicial y Profesorado de Educación Primaria que se ofrecieron en la
Institución y que compromete a los estudiantes y profesores de todas las
unidades curriculares. No obstante esto, el Consejo Académico Institucional ha
aprobado como Trayecto Formativo, este taller de Alfabetización Inicial para el
primer año de la última carrera mencionada, que tiene estrecha relación con el
Taller de lectura, escritura y oralidad. Los acuerdos entre los profesores de ambas
unidades curriculares permitirán desarrollar el primero, en torno a los temas de
estudio y de formación ciudadana, mientras que el segundo se circunscribirá
especialmente al ámbito de la literatura.
Desde este Taller de Definición Institucional nos proponemos acompañar
al estudiante lector ,escritor y hablante para que aprenda los códigos que regulan
estas actividades en el Nivel Superior.
Los textos que se leen suelen estar vinculados al quehacer científico; son
variados heterogéneos, pero casi todos de alto grado de complejidad que puede
deberse a los conocimientos previos que demandan, a la presencia de citas cuya
orientación no siempre es evidente y cuya interpretación requiere que se las lea
en red, en sistema ya que el estudiante debe relacionarlos con las condiciones
histórico-sociales en que fueron pensados.
Asimismo sabemos que los géneros que el estudiante debe abordar como
escritor, desde el primer año, le resultan extraños y ajenos. Esto se convierte en
un problema si tenemos en cuenta que, en gran parte de su carrera, éste va a ser
evaluado a partir de los escritos que produzca y cuyas pautas de escritura a
menudo desconoce. Uno de los problemas recurrentes que se manifiesta en sus
escritos es la indefinición acerca del rol que debe asumir como enunciador.
Convertirse en un escritor hábil de textos escritos requiere un conocimiento de
las pautas genéricas de los escritos a producir y un control sobre el propio
proceso de escritura.
Creemos que la alfabetización inicial debe llevarse a cabo a partir de los
aportes de los profesores de las distintas disciplinas, pero desde este taller nos
proponemos brindarles situaciones problemáticas para que los estudiantes
aborden reflexivamente las nociones que implican los procesos de lectura y de
escritura que, a modo de ejemplificación, mostrarán modalidades complejas y con
sentido que deberán resolver en Filosofía, Pedagogía, Didáctica, psicología del
aprendizaje y Mundo Contemporáneo. Las actividades propiciarán la interacción
con el texto y con un tercero – otro estudiante o el docente- como manera de
recuperar la situación comunicativa lingüística de base y, a partir de esa
copresencia, retomar la interacción con el texto que se lee o escribe.
EXPECTATIVAS DE LOGRO:
PROPÓSITOS:
Propiciar situaciones de comunicación para mejorar y potenciar las
habilidades para leer críticamente y escribir con eficacia a partir de lo que
los alumnos traen de su formación previa.
Ofrecer múltiples oportunidades para la producción de diferentes tipos de
textos y géneros discursivos sobre diversos tópicos y de distintos niveles
de dificultad.
Proponer el análisis y comprensión de textos disciplinares –que se
frecuenten en otras unidades curriculares- y la producción de escritos
académicos pragmáticamente eficaces y de complejidad creciente, en
interacción con otros profesores del curso.
Incorporar el uso de las nuevas tecnologías de la información como
fuentes informativas o como herramientas para la escritura.
Enriquecer la articulación de saberes heterogéneos – psicolingüística,
lingüística textual, pragmática y análisis del discurso- a partir de una
perspectiva global que enfoca el lenguaje situado en contextos y usos
particularizados.
Lograr que focalicen la adecuación que un escrito, con miras a ser eficaz,
debe entablar con las convenciones del género que lo modela, el auditorio
y la imagen de sí que el estudiante planea transmitir en su producción.
Poner el énfasis en la interacción verbal como elemento de construcción de
significados que mejoren la calidad de los textos escritos de los estudiantes
así como su comprensión lectora con miras a que acrecienten una
perspectiva crítica en torno a las producciones escritas propias y ajenas.
CONTENDIOS:
La anticipación de la intervención didáctica explica que la siguiente organización
en unidades no es ni secuencial ni acumulativa. En cada una de ellas aparecen
actividades exploratorias de discusión general, se abordan uno o más textos
fuente actualizados y relevantes, se resuelven consignas de escritura y se
sistematizan aprendizajes construidos colectivamente.
Unidad I
Unidad II
Unidad III
Leer para estudiar : los resúmenes y los mapas conceptuales. La lectura en los
estudios superiores; lectura reflexiva y crítica. Los textos de estudio en las
distintas disciplinas: convenciones. Los contenidos, el léxico o vocabulario, el
tratamiento de los conceptos. Lectura de paratextos. Dificultades más frecuentes.
Trabajo conjunto con los profesores de Pedagogía, Didáctica y Filosofía.
Bibliografía obligatoria:
Marin, M. y Hall, B. (2005), Prácticas de lectura con textos de estudio, Bs. As.,
EUDEBA : pp. 13 a 27.
Unidad IV
Unidad V
Unidad VI
Unidad VII
PRESUPUESTO DE TIEMPO:
RECURSOS:
1. Portfolio
2. Textos en arrtículos de periódicos y revistas, tales como:
Costa, Ivana (2004) Una historia sobre la ciencia y la ética, Ideas en Ñ 38, Clarín
Etcheverry, Guillermo Jaime (2004) Sin reglas, La Nación, Revista
Jitrik, Noe, El obsesivo trazo de Ferrari en Revista Ñ, 18 de diciembre de 2004
Skorka, Abraham, Censura y agravio, Carta de lectores en La Nación, 12/1/2004
Lorca, Javier El desempleo multiplica a los estudiantes, Página 12, 13 de julio de
1999
Bourdieu, Pierre Más ganancias, menos cultura, Clarín, 24/11/99 trad. De Elisa
Camelli
Saramago, José ¿Para qué sirve la comunicación? en Le Monde Diplomatique,
marzo de 2000, traducción de carol Abousteiman
Handford, Paul Descifrando el pasado, Ciencia Hoy, n° 52, 1999
3. Sitios de Internet:
Sábato, Ernesto (2004) “Les quiero pedir a los chicos y a los jóvenes que lean” en
http//www.literatura.org. Imaginaria
Aleman Perez Reinaldo (2005) Girasol: agricultura sostenible en http://
www.unrc.edu.ar/publicar/23/presdosi.html
Samus, Sergio A. Mixomatosis en http:
//www.sagpya.mecon.gov.ar/new/o-o/ganaderia/otros/consejos/sanidad/index php
4. Libros:
Estos figuran como bibliografía recomendada para el estudiante en
cada una de las unidades.
Alvarado, Maite (1994) Paratexto, Buenos Aires, Oficina de Publicaciones, UBA
Link, Daniel (2003) Cómo se lee y otras intervenciones críticas, Norma, Bs. As.
Pipkin, M. y Reynoso, M.(2010) Prácticas de lectura y escritura académicas,
Córdoba, Comunic-Arte.
5. Películas como Escritores de la libertad.
6. Procesador de texto- en la medida en que pueda compartirse- para
las sugerencias, reescrituras y formalidad de la cita bibliográfica.
7. Textos que se presenten en otras unidades curriculares y que
sean de difícil abordaje.
8. Propuestas de escritura que se planteen en otras unidades
curriculares y cuya revisión pueda ser abordada desde el taller.
BIBLIOGRAFÍA DEL DOCENTE:
PROPUESTA DE EVALUACIÓN: