Escalas Musicales y Temperamentos
Escalas Musicales y Temperamentos
Escalas Musicales y Temperamentos
(2) 20)-210
ABRIL 1998
Bustamante
y Ricardo
U""\'l'rsit!lId
R. Boullosa
, .
Centro de InSlrtll1lentos
Unil'l'rsitllria,
elipl'@alep1l.cillSlrtllll./II/llI1l.lIlx.
For some rcason. Ihe tcaching ami cornprchcnsion 01' mallcrs rclalNlto musical scales ane!their temperamcllls results in a difficult llnder~akin~. Perhaps this is hc",'ause Ihe cenlral fact orthe subjecl is not ver)' casil)' arrcptcd: lilac i.\' 110/U'rjl'CI "'Il.ca/.\mft>. This article dcals w1th thls fact and makes yct anothcr atternpt 10 exlain it in general tCl'ms.
K"ywonl.\';
Por tina u olr<l razn, el tema de las escalas musicales y sus tcmpef<llllclltos r('sulta difcil de comprender )', en consecuenc:ia, difcil de exponer: lal vez porque el meollo del problema no se acepta f:cilmentl': 110('xi.\Il' la l'.\"('a/tI flllIsica/l'elj('Cfa. El presente artculo abund:l sohre esta cuestin e intenta Ull:lexplicacin m~sdel asunto. lh'scriplor('s: AClslica musical. escalas musicales. temperamentos
rAes:
43.75.Bc
1. 1ntroducdn
El lema que nos ocupa se sita en la confluencia de una sorprendente variedad de ;:reas de nuestra cultura. entre ellas: la mlsica. la fsica. la matemtica. la fisiologa. la Psicologa. etl,;. Dehido a esta diversidad. es difcil estahlecer un lenguaje c0I111n a toJos los especialistas en estas reas; lo que quizs sea un factor en el hecho de que no todo lo que se ha escrito en rclacin a las escalas musicales sea del lodo correclO. El ohjetivo de este trahajo, lejos de pretender una exposicitlll completa y enteramente satisfactoria (algo casi imposihle de llevar a caho). es indicar algunas de las ideas que nos parecen ms susceptihles a interpretaciones incorrectas y generar en d lector un inters para profundizar en el estudio de este fascinante tema. Por ello hemos incluido una lista ms o menos extensa de referencias. incluyendo algunas a investigaciones recientes en torno a las escalas musicales y sus temperamentos. Desde un punto de vista muy simplista uno podra descrihir el desarrollo histrico de las escalas musicales como un mero ejercicio de "conquista" de nue\'as notas musicales. Sin cmbargo, esto introducira una extraa nocin de "progreso" en materia de msica que. aparentemente. se medira cn funcin del lHmero de notas que componen la escala musical. Una concepcin de este tipo. adellHs de errnea, quedara incompleta al descrihir el desarrollo de las escalas musicales fuera del contexto evolutivo de la ll11sica, de los estilos musicales y. particularmente, de la armona. AIlllenos desde la aparicin de la nusica polifnica en la Europa dc la Edad !\ledia. el desarrollo de la escala lJ1usical gira histricamente en torno al prohlema de allnar los intervalos' lI1ili;:abll'.\' en una ohra musical. Es dt.'cir. en torno al problema de /{,III/J('mr la escala () del 1l'lIIp('r(/lIIefl10, entcn-
dido como el proceso de suavizacin de los inevitahles intervalos imperfectos o disonantes que forman cualquier escala musical. Esto relm:senta, en esencia. la historia del esfuerzo por obtener la mayor c'ollsonancia posihle al sonar dos o ms notas simul!neamente (es decir. que suenen "hien" juntas). de manera que entre ellas existan intervalos justos o perfeclos de quinta. cuarta, tercera. cte. Podra decirse pues. que la escala Illusieal moderna se desarrolla a travs de una pro. hlemtica armnica ms que meldica [1 J. aunque algullos investigadores I~Iugieren que la suavidad en el desarrollo s meldico pudo haher sido el factor relevante cn el desarrollo de las escalas musicales durante la antigedad (cuando la expresin musical era predominantemente lIlondka: de una sola mcloda o \,01.). El tcma es ciertamcnte muy interesante: pero. gracia. 110 puede relatarse de manera simple. ni en unas cuantas lneas. Por ejemplo. el conjunto valos considerados consonantes ha \'ariado a travs por desresumirse de interde la his-
toria segtn cada poca. cultura o cstilo; tamhin ha variado el uso de la modulacin y de la transposicin (relacionadas con camhios de tonalidad), cte. El prohlema va. incluso, ms all de lo complejo o lo diverso. La ditlcultad al exponer este tel11a es tamhin UIl prohlema dc idiosincrasia. Nos es dllcil aceptar la simple y dura realidad impuesta por la naturaleza de las cosas: !lO (',ri.H' 1(/ ('scola lIIusical pe'.1cta. Es decir. no existc una escala musical que contenga nicamente intervalos (,.'onsonantes y que. al mismo tiempo, est dividida en intervalos L'xactalllcntc iguales: 110existe una escala musical que pennita cOlllhinaci(lI1es perfcclamcnte armnicas de varias llolas y Cll la qUL' todas las tonalidades sean armnicamcnte cqui\'alcntes. sta es la disyunli\'a en la que se dehate el pro~ hlellla de las escalas musicales.
2116
FELJI'E()J{DUA
BUSTA\tANTE
y RICARI)()
I( HOCLlJ)S,\
le. ulla 110((/ es una instruccin (el1 el pcnlagrami1. por ejelllplo) para emilir un lono () sonido Illusical 1'1.51. Una nota pucde ;l'';(lciarsc. cntn: otras cosas. con la impresin subjeli\'<1 de allura tilo' la inlinidad de posihles sonidos que representa (aunque tina nota tamhin define otros atrihutos perceptuales del sonido como duracin. timbre, etc.). Con respecto a la altura que representan, las notas musi~ ,,:ale..;pueden recibir un nombre determinado. Por ejemplo. en Illlllisica occidental la escala diatnica de Do mayor [G] cst formada por las notas Oo. Ik, :\Ii. Fa. So!. La. Si. Estos nomhres de,>ignan la..; notas transpucstas dcntro de una Illis~ rna octay;!, digamos la octava central del piano. Para eliminar esta amhigcdad es necesario indicar adem<s de qu octava se trala: para eslo se nUllleran las octavas (existen varias numeraciOllL'S) y stas sr.:indican en las notas con un suhndice:
La:.,!.
DI)I.
ansticas (e inl"luso cul!urak..;) son JlllIchas v Illll\, intrincadas. as quc no" limitarclllos a una lkscripci~l sim,le dehida inicialmente a Ilclmh()ltl. [il. La supL'rp()sicill de dll$ tonos puros se percihe C0l110una cOllsonancia si un gran nlmero de sus componentes coinciden en frecuencia. Por ejemplo. un tono con componentes armnicas RRO fl/. 17tlO 111..26..l0 HI.. etc .. es cOllsonante con c1tono descrito en el p;lTafo <Interior: lo mislllo ocurre con un tono cLJ:'as componelltes armnicas "'(Hl(,60 H/. IJ2() Hz. Il)X(111/. ~6-H) II/.etc. En gL'lll'ral. d{,... tOllO";"'Olll"l)IiSOIllIltescuando la rcl<lci<1lde ~ll'i frecucncias fundamenlalcs se da a trav0s de IlllllCros enteros pequeos. EnlO.'i ejcJllplos anteriores las relaciones son 2/1 (una octava) y .V2 (una quintal. La con ... onancia es "mejor" mientras m<s "si mple" sea l:l rel:!ciln: por ejemplo. las relaciones nl<sconsonantes son: 1/1 (el unsono). 2/1 (la octava). 312 (la quinta). "/J (la CLlarla). etc. Los nomhres de los intervalos musicales correspondientes tiene su origen en el nmero de Ilotas de la escala mayor diatnica quc sc necesitan para aharcar cada uno de esos irllL'rvalos (sohre un teclado. por ejL'lllplo).
etc.
Dl'SllL' un punto t.le vista fsico. los sonidos a los que el ser humano puede asociar una altura determinada se caracterizan por ser peridicos durante una buena parte de su duracin. la cual abarca al menos unos cuantos perodos de la componente fundamental. En la mayora de los casos. la altura pL'rcihida guarda ulla relacin directa con la frecuencia fundamental de la seilal. De hecho, esta relacin es aproximadamente logartmica: el intervalo de alturas entre tonos de 100 Y 2()() Hz :-.epercibe equivalente al intervalo entre l ()OO Y 2000 111.. Las complicaciones fisiolgicas, psicolgicas y fsicas dc la percepcin de la altura son innulllerables I:q: sin l'mhargo, la caractcrizadn anterior hasta para los propsitos de es la cxposicin. Dehido a su canlcter peridko.los sonidos l1lusicales (tonos) pueden considerarse como una mezcla de <.:omponentcs peridiL'as senoidales o tonos puros. cuyas frecuencias son mltiplos cnteros de cierta frecucncia fundamental. As. el tono de un violn, por ejemplo. es una mezcla JI.' seales sClloidales cuyas i"n:cucncias pueden ser: ..l-tO Hz. RX() HI.. 132011/. 1760111. noo IIz. 26.jO 11/. elc. La presencia predominante de estas componentes armnica." en el sonido del violn permite al ser humano percibir su altura. No ocurre lo Illi~rno nH1 el sonido de un platillo. por ejemplo. en el que las compOIll'llleS predominantes tiellen frecuencias que no son IlL'cL'sariamclltc armnicas; es decir. no son mltiplos cnteros de la h\'cuen<.:ia fundamental. En este caso no es posible percihir una altura distintiva. La supL'rposicill de dos () ms tonos puede percibirse suhjetivamente COIl distintos grados de consonancia (l dis()~ nancia. Aqu. al igual que antes, las implicaciones psico~
1'1'. Mc.\. ,..,\ .
..w
ESCALAS MUSWAI.ES
y SUS THlI'ERAt<.IENTOS
2117
En un estilo musical cstrictamcnte Illondico. no c.\isIC en principio ninguna restriccin con respecto a la altura tILIas notas dc la escala musical: al menos desde vista de la consonam:ia. Ejemplos claros de esto los rahes e hindes mencionados atlleriormente. de estilo polifnico (varias voces simult.ncas). cia de las distintas voces depende crticamellle el PUllto dc son los estiEn lI11sicl la l'0I1S0nalldc la l'sl'aL.I
."istemas ccrrados tk divisiiln mltiple dc la octava o temperamento regular (como la escala modcrna o las escalas del llamado Sonido I J), en donde el intervalo de quinta es igual a 27/1:.! ::::: 1. 1~IS:~ no tk :~/2 = l.:j. Si se usan estas quintas y "alterada,,". una "cric dl' t!OCl' produce un internllo justo de :--iete octavas despucs de pasar por las 12 notas de la escala mllsic;d.yaqul'('27/1:.!)L! '271111. Por otra parte. la scrie lk quintas perfectas permite ~enerar ulllHlllero inlinito de Ilotas musicalcs distintas. Invitamos a los lccton:s a investigar cuantas notas musicales diferentes se pucden gellc'!";.!' usando la "ley de quintas". El plantea-
l1lusical usada. Las caractersticas de la escala musical tambin jucgan un papelllluy importante en otro aspecto de la expresitlnlJlusical: la transposicin: es decir, la posibilidad de ejecutar una misma meloda (una secuencia determinada de intervalos Illusicales) comenzando desde cualquier Ilota th: la e:--cala. Este recurso aparece primordialmente en msica de estilo polif6nit:o o, 111;:\Soncretamente, c contrapuntbtico, donde el material meldico puede aparecer imitado en distinta" Hll"eS y a distintas alturas (por ejemplo en una fuga o un caIHHl). Para permitir la transposicin, una escala Illusil'al tIL-IK'estar dividida en intervalos ex.actamente iguales. Idealmcnte, una escala musical apta para la ejet:lll,:in de mlsica polifnica dehera cumplir con los siguicntes n:quisitos: Debe tener un nlmero relativamente tas. Dehe contener Dehe permitir intervalos consonantes. "pequefo" de no-
(3/2)11 necc11/
"itan aculllularse para lograr un intervalo de (2'/1) con un error n:lativo menor a I cent
octavas
21/1200
(1 cenl corrcsponde aproximadamente al lmitc tk discriminaci{n relativa dl' la frecuencia del sonido en el scr humano). Es tkcir. para qu nmeros naturales 11.111 se cUlllpll' que (:~/2)'l 2/l1(l + () con 1+ \ti 21jl:'WO. (Soluciiln: 11 = 66;j. /11 = ~~S!).)
:s
la transposicin.
Desgraciadamente. el requisito de la consonallt:ia no puede cumplirse simultneamente con los otros dos. juntos {l por separado. La nica combinacin posihle es la de una eSl',lIa musical con un nmero pequeo de notas y que pl'rmita la 1llodulacin. La escala de doce notas de temperamento igual usada a(;tualmcnte es justamente de es!e tipo. En cste caso los intervalos entre las notas son slo aproximadamente (;onsonantes (con excepcin de la octava). La quinta cs. despus de la octava, el intervalo m;s consonante al odo de todas las culturas a lo largo de la hi."toria. como lo demuestra el estudio de la expresin musical de diferentes culturas S-lO). El intervalo de quinta cs el intcf\'alo entre la primera y la quinta nota en una escala diatnica: esta quinta puede ser perfecta (perfectamcntc conS{lIlanlt: 1.alterada o temperada. La sucesin de quintas utilil.ada para conslruir Ull;:lescala da origen a un sistema que puetk scr t:c[Tado o ahicrto segn se llegue o no a la nota inicial de que ."c parti6 (por supucsto varias octavas m<.sarriha). Para conslruir la escala en el comps de una misma octava. cada nota alcanlada siguiendo una serie dI..'quintas ascendentcs se tra"Jlone hada ahajo el nmero dc octavas quc sea necesario. As. Ull sistema cerrado utiliza quintas alteradas y un sistcma abierto
De esta manera. la serie dc quintas perfectas permite generar hh5 Ilolas dikrl'ntcs (delltro de Ulla octava) an distinguibks por el odo humano. Se deduce entonces que la serie de quintas liene una capacidad pl"<cticamente inl1nita para generar nuevas notas musicales. Esto implica adcms. que cs imposihk construir una escala con un nmcro reducido de notas en la que todos los posihles intervalos de quinta sean perfectos (Y' lo mislIlo es \';ilido tamhin para otros intcn'alos). Dehido a e:--to. la definicin de una escala musit:al sielllpre acarrea un compromiso t'ntre cl nmero dc Ilotas. la consonancia de los intcrvalos y la lihertad de transposicin (es decir. la regularidad con que est dividida la escala). Dado un lllmero lijo de notas. digamos docc, es posihle selecciollar un cOlljUlllo de intervalos para formar una escala. A esto se le Ilanla un /l'I/IIIl'/wIII'I/IO. Cada lemperamenlO representa un halance partkular entre la consonancia de los intervalos y la lihertad de transposicin. Por ejemplo: la escala musical moderna usa un 1'lIIjJ'ml1l'lI1o igual en cl que el intcrvalo m;\s pequeo. un semitono, corresponde a una relacin dc frecucncias de '21/1 ~ I~. En esta escala ningn itllervalo
es perfecto
(con excepcill
de la octava).
pcro la di\'isin
de
la l'Scala es pl'rkclalllcnte regular. E" importante nolar que las "imperfccciones" de alinacin de lo." intervalos en la cscala JI..' temperamento i~ual :--011 sutiles IK'ro an pert:eptihles. Por ejemplo: la dikrellcia entre Ull intervalo de tercera mayor igualmente lelllperado UdJI = 21/" = if2 '" 1.2G) Y UIlO perfecto Ud JI =
.tr)
1.2'-,) es de aproximadamcnte
14 cents
Ila rclach'm
quintas perfectas
11 L 12J.
cn cents se l'all'ula llIediante la expresin 1200 lo'{,~(hl JI) l. Esta diferencia es plenamcnte distinguible: es incluso algo mayor que el intcrvalo m;s pequeilo usado en una escala microtonal de dieciseisa\'os dI.' tono (h/ JI 21/%) que correspont1c a 12.5 ('ent:-- 11::]. Curiosamentc. esta est:ala miCnJI()!lal cOlltiene un inlcr\'alo particular h /JI 2:~1/% ::::= 1.~~)tJ~J que es lllUY cncano a un;l tercera mayor perfecta: sin cmhar-
Expresando matemticamente lo dicho anteriormentc: la seric dc quintas exactas (3/2)11, no se "dclTa" l'<111 rc~pl'cto a la scrie de octavas 2/11 para ningln par de ntmeros naturales 11.111. El crculo de quintas existe solamente para los
NI'I' .
\k\',
211X
Un pocollljs tude. alin dllranlL' el Renacimienlo, se esnibil msica \'ol'al e instrulllenlal en el estilo "crom<lico" que usaba l'01l gran liherlad las doce nolas de la escala. Es posible cilar una gran canlidad de instrulllcntos renacenlislas quc pcrmiten la ejccucin de esle tipo dc ohras: principalmenlc los in"lrLllllentos de teclado. los inslrumentos cnlrastados y las Ilalllada" arpa" LTOIll;iticas, Como un l~jemplo lkl estilo nOIll;itico, p{ldemos reCOlJIl'nt!ar que ~e escuche la mtlsica cor,ll tkl ilaliano Cario (,csuahlll (cifca 1560-161 J) 1171 quc. adcm<s de consumado asesilHl, fue compositor las obras nds osadas dc su lielllpo, de algunas de
Tamhin sera adecuado resallar quc no slo Bach esnihit'l composiciones Illusicales cn tonalidades lejanas (cs decir. lonalidades COIl UIl gran nlmero de hcmoles o "lhtenidlls), ~ll1dHIS l:OI11PIISitorl'S rcnaccntislas y harrocos CtlmO Bul!. Frescohaldi. Pachclbel. Rallleau y Scarlatti. cscrihic. ron ohra" en una gran varicdad de lonalidades (abarcando L'I l'OIllP;ls dc las doce Ilolas) ,Iln antcs de que Johann Sehastian Badl lo l1il'iera, de manera exhaustiva, en el primer volumcn del "Das \Vohltcmperier!e Klavier" (El clave bicn lemperaEsta ohra consiste de 24 prcludios mayorcs y menores, Un segundo '.OlllIllCIl con el mislllottulo y con un conlenido similar flll' puhlicado por Bach l'l1 1744, lo cllal suhraya el intl'rl;s qUl' Badltella Cll rclal'in con eltcmpcralllento de la do) puhlicado en 1722.
121"
Sin emhargo, cn la pr:ctica musical de csta plK'a existan Icmperamentos de una gran diversidad. Prohahlcmentc con temperamcntos particulares para cada tipo dc lI11sica o COI1junhl in.strumenlal: tcmpcramcntos aproxi madamclllc iguales l'll los conjuntos dc instrumcntos trastcados, lemperamcntos jllst()~ cn los instrumcntos dc tcclado, clc. Incluso se ha sugerido que en la ll11sica puramente vocal. (1 ((11'(>//(1, la tendcncia natural de los cantantes para producir inten'alos justos resullaha en una escala musical de altura \'ariahk 11.;). fenmeno quc sc ohserva an cn nuestro tiempo cn algullos grupos de msica vocal y en instrumentos no temperados corno L'I violn, por ejemplo IIGI. En cstc caso, el mismo conccplO de temperamcnto pierde un poco de senlido (rel:on!e1110"que. pucsto brevcllll'nle,l.'1 temperamenlo es la relaci6n Ilrl'l'isa de intervalos enlre la" notas de una escala lija). LI aparellle prl'fercncia por lemper.unentos de cntonacin justa durantc esta poca pudiera tal \'el. sugerir que las cXl'llI"siones hacia notas fuera de la cscala dilltnica de sietc Ilolas (o hacia lonalidadcs lejanas) SOIl un rl'curso musiL'al relali\'allh.'nte \'L'I'CllltlS. reciente, l:sl<l apreciacin es illl'lllTecta l'OIllO
l'scab lIIusical. Sin clllhargo. las eviderKias 1lI11sil:oltgL'as al'luaks 112. .-)I, apUlllall al I1l'ch(1 de que eltelllperalllcnlll 111tlsic;1Iprolllo\'ido por .Iohann SL'l1astian l3ach no era precisalllL'llll.' el sistema de temperallll'nto igua!.
Exislan desde el \kdioe\'o (durante los siglos XII y XIII) t1i"cusiollCS en torno a la llamada fIIll,('nji('((/ Ollll/,c(/jl.w l'n la que "L' pcrmitia la licencia de usar accidentes lllusiC<lk ..(hl'molcs y sostenidos) para lograr la !luido mel6dica y armnica que era diUcil lk aleanlar apcg:ndose a las reglas dl' la llamada IIIlf.C(/ \'cm, basada estrictamcnte cn lo que hoy II,llll;IIllOS la escala diatnica tlL'siele notas IISI. I~slll implica qUl' ya desde la Edad Media haha composiciones Illusicales qUl' maban IllS de siete Ilotas distintas, Esta tendencia conlillUlllll;s tarde duranle el Rl'nacimiento, De hecho. Illuchas ohra ..dc Jos siglos XV y XVlulililan un comp" de aproximadamente diel Ilotas diferentes.
en (1{)()X 20)-21 ()
21)9
grado que seguramente sorprendera a la mayora de nosotros). la versin en Sol mayor sOllar con una ligera disonancia .Yla versi6n en Do sostenido mayor sonari. muy disonanle [ISI. Por el contrario. si el piano se atina en la escala de temperamento igual. las tn:s versiones sonar:n (cada una en su altura respectiva) con una consonancia armnica similar. Sin emhargo. sta no sed (an perfecta como la consonancia de la vcrsin en Do mayor cn la afinacin justa. Esto [Jos lleva a las siguientes consideraciones. Un temperamento que no es igual favorece la juste/a (armnica y meldica) dc los intervalos entre las notas dc cienas tonalidades. pero sacrifica la modulacin o transposicin a tonalidades lejanas. Un temperamento de este tipo es lll<s apto para la composici6n de ohras Illusicales que usan relativamcnte pocas notas alteradas (helllOles y sostenidos) y esto slo en un cierto Illmero reducido de tonalidades. Una conseClH..'llCia de esto cs que cada tonalidad posee un car<cter distinto. Esto sin elllhargono excluye del todo el uso de tonalidades lejanas. Por el contrario. se sahe que algunos compositores renacentistas y harrocos escrihieron en tonalidades lejanas COIJlOun recurso de expresin artstica, I~sta, por cierto. es una de las Illuchas r;uones delrts de[ inters por la ejecucin de la nusica antigua en los instrumentos original cs. y del liSO de las corrcspondientes tcnicas y afinaciolles. Por otra parte. el temperamento igual favorece la lIIodulacin o transposicin a tonalidades lejanas, pero sacrifica [a justCl.a de los intervalos en todas las tonalidades. Es decir, en la escala de temperamento igual todas las tonalidades son armnicarnenle equivalentes: todas exhihen el mismo grado de con~onancia (o disonancia, segln se quiera ver),
intervalos de cuartos de tOllO; de igual manera. algunas esca~ las hindlcs tiencn :21 notas: los srulies, Con el !in de ohtener intcrvalos m:s allnados. rvlcrselllle propuso en el siglo XVII un sistema con lIna divisin de la octava en JI Y 53 parles, y a mediados del siglo XIX Bosanquel construy en InglatcITa un annollio de 53 teclas por ()ctava 11'2. III, Actualmentc sc sahe quc otras divisiones regulares de la octava tamhin producen escalas musicales con illtervalos aproximadamentc consonallles [19-211, Algunos divisores para los que esto ocurre son. por ejemplo: 12. 19, 2X, 29, 31, ~.. -11. .s~, 9. L 5 ctc, Tamhin dehemos apuntar aqu que las escalas microtona les propuesta..; por ~krsennc y por Carrillo persiguen ohjetivos distintos. i\lcrselllle. el cientlico, huscaha una escala l11usical con intervalos lIl<scOllsonantes; Carrillo, el lIllbico. huscaha un nue\'() lenguaje Illusical. El resultado, sin emhargo. es que amhas escalas cumplen de alguna manera los dos ohjetivos. La cscala de rvlcrsellne constituye tamhin un nuevo lenguaje musical. Por su parte, la escala en dieciseisavos de tono del Sonido I ~ contiene un suhconjunto de intervalos que se aproximan hast;uHe a los intervalos justos. A Julitn Carrillo Il:q se dehe tamhin la ohservaci()n de "la gran discrepancia que existe entre las teoras de los sonidos Illusicalcs que se cnsean Cll lo..; cursos de fsica y en los cursos de aclstica para ll11sicos:' \ceptando que en la poca en que cscribi .Iulitn Carrillo csto haya sido cierto, y que cn algunos lihros de anstica de hacc cuarenta o m:s aos se dicran ciertas inf(mnaciolles ino)JTcctas, dehemos mellci()nar que. en la actualidad. los lihros que tocan temas tic aclstica musical {almcnos los huenos lihros) I:l. 22. 2:q no contienen errorcs tic este tipo.
1. D.\\'. Martill.
SOlllull
(11)62) 22.
,\"0(". A/II.
20 (19-1X) ::;4::;.
MI/x/ul!
'lSlrt1l1/('1I1S (!I"lfll'
lI'orld.
(Ball-
(~r
~). A Kendall.
TI/('
\\'or!d
(lrlllll,\inJ!
ill.\'lrtllll('1I1.\,
(1Iallllyn.
SciCIIl"t'
1(72).
(}rigill.l' lllt'
iII
Aj'()/(.\'/ic,c
TlI/'
(Yak
(JI.\'oll//(1
.,1, E. Tcrhardl.//IIIJ1(/"iti('s
Ag('
(JI" NI'\\'lorl.
l1niversity
I're~s.
.,. R. ParnClll1.
G. J. \lurray
f/amllJl1\":
(Sprin-
&
MI/sic.
(Dover.
t)()H). (Da
('PI)
,\/11,21 (1949)
ofl0fll',
5X6.
()"
111('Sl'/l.WlliOflS
(Do\"l'r.
195-1).
-millg
(I//(17i'IIIIIl'IWIIl'1I1.
Prcss. :">-Ic\\'
Rl':
Me.\". FtI",
.w (2) (199X)
205-210
2H1
Jo por J. Carrillo. (~1xico. 1(48). 11. 11.Turnhull. Tlle guita,. fmm da.". (Batsfortl. L(ludon. 1974).
IS R. [)onninglon. Fahcr. Ltlndon. 1987).
tJI('
Tlll' itlll'rprclarion
nI early
/Ilusie. IFahcr
8.:
I~( //lllJiell/
lI(,ou.\lio.
(Dover.
:!.I. J. Vos. I
2,.,. .\I.v. 1114. Scientilic
XJ (19RR) 23X3.
r\COIf.H.
Madrigllux. Les Arts Florisants (\Villiam Christie. director). lIarmonia ~ll1ndi Hf\.lC 90126R. (Franee, Il)RR).
/,OS .Hmido.\"
Prensa
Soc. AIII.
1!l. R.J. Kranll. anu J. DOlllbctt. J. Acoust. Soco Am. 95 (1994) J(}.U.
2i". A. IImnl'l" ~lI1d L. Aycrs . .1.ACOIHI. Soc. Am. lOO (1996) 630,