Declaración de Tokio Sobre La Tortura
Declaración de Tokio Sobre La Tortura
Declaración de Tokio Sobre La Tortura
TOKIO SOBRE LA
TORTURA
Son normas directivas para mdicos con respecto a la tortura y otros
tratos o castigos crueles, inhumanos o degradantes, impuestos sobre
personas detenidas o encarceladas, Adoptada por la 29 Asamblea
Mdica Mundial, Tokio, Japn, octubre 1975
Para fines de esta Declaracin,
la tortura se define como el
sufrimiento fsico o mental
infligido en forma deliberada o
caprichosamente por una o
ms personas, que actan
solas o bajo las rdenes de
cualquier autoridad, para forzar
a otra persona a entregar
informacin, hacerla confesar o
por cualquier otra razn.
DECLARACIN
1El mdico no deber
favorecer, aceptar o participar
en la prctica de la tortura o
de otros procedimientos
crueles, inhumanos o
degradantes, cualquier sea el
delito atribuido a la vctima,
sea sospechosa, acusada o
culpable, y cualquiera sean
sus creencias o motivos y en
toda situacin, incluido el
conflicto armado o la lucha
civil.
2. El mdico no proporcionar ningn lugar, instrumento, substancia o
conocimiento para facilitar la prctica de la tortura u otros tratos crueles,
inhumanos o degradantes, o para disminuir la capacidad de resistencia
de la vctima a soportar dicho trato.
3. El mdico no
deber estar
presente durante
ningn
procedimiento que
implique el uso o
amenaza de
tortura, o de otro
trato cruel,
inhumano o
degradante.
4. El mdico debe gozar de una completa independencia clnica para
decidir el tipo de atencin mdica para la persona bajo su
responsabilidad. El papel fundamental del mdico es aliviar el sufrimiento
del ser humano, sin que ningn motivo, personal, colectivo o poltico, lo
aleje de este noble objetivo.
5. En el caso de un prisionero que rechace alimentos y a quien el
mdico considera capaz de comprender racional y sanamente las
consecuencias de dicho rechazo voluntario de alimentacin, no deber
ser alimentado artificialmente. La decisin sobre la capacidad racional
del prisionero debe ser confirmada al menos por otro mdico ajeno al
caso. El mdico deber explicar al prisionero las consecuencias de su
rechazo a alimentarse.
6. La Asociacin Mdica
Mundial respaldar y debe
instar a la comunidad
internacional, asociaciones
mdicas nacionales y colegas
mdicos a apoyar al mdico y
a su familia frente a amenazas
o represalias recibidas por
haberse negado a aceptar el
uso de la tortura y otras
formas de trato cruel,
inhumano o degradante.