LA EDUCACIÓN

Escuela Sabática
Guía de Estudio de la Biblia

4 to. TRIMESTRE
OCTUBRE-DICIEMBRE
2020

EL SÁBADO: CÓMO
EXPERIMENTAR Y
VIVIR EL
CARÁCTER DE DIOS
LECCIÓN
12
Para el 19 de Diciembre de 2020

Resumen en PowerPoint

“El Llano” @IASD_EL_Llano

@IglesiaElLlanoTulaHg
 Para memorizar

 “También les dijo: El día de

reposo fue hecho por causa del
hombre, y no el
hombre por causa del día de
reposo. Por tanto, el Hijo del
Hombre es Señor aun del día de
reposo”
(Mar. 2:27, 28).
 Enfoque del estudio
El sábado es mucho más que 24 horas de descanso del trabajo:
es un regalo de tiempo teológicamente rico e íntimo que nos
brinda nuestro Creador. Independientemente de lo que sepamos
sobre el sábado, sin duda siempre habrá más por descubrir.
El sábado también garantiza tiempo para volver a aprender lo
que olvidamos. La prueba del sábado referida al maná era
realmente una prueba de confianza y obediencia para volver a
familiarizar a Israel con su Dios después de una permanencia
desconcertante en Egipto. Jesús utilizó el sábado para
reestructurar la santidad en el sentido de aliviar el sufrimiento
humano, en lugar de priorizar las tradiciones que acrecentaban
las prohibiciones para el sábado (Mat. 12:11, 12). Su reprensión
brillante pero breve: “El día de reposo fue hecho por causa del
hombre, y no el hombre por causa del día de reposo” se presenta
como un monumento de reeducación y corrección (Mar. 2:27).
Jesús es “Señor aun del día de reposo”, y podemos aprender de
él al estudiar sobre el sábado (Luc. 6:5).
 EL SÁBADO: CÓMO EXPERIMENTAR Y VIVIR EL CARÁCTER DE
DIOS
Muy pocas personas parecen tomarse el Sábado en serio. La mayoría de los cristianos ni
siquiera adoran en Sábado, adoran en domingo. Incluso el domingo, el único momento Sábado
especial es cuando están en la iglesia. El resto del día es como cualquier otro. ¿Es esto lo que
Dios tiene en mente? ¿Cuál es su "mejor práctica" para el Sábado? Mientras estudiamos, la
Biblia nos dice que el Sábado debería ser un deleite. Hoy estudiaremos cinco aspectos sobre
el tiempo del sábado: 1) Es tiempo para sorprenderse, 2) Es tiempo para redescubrir, 3) Es
tiempo para aprender prioridades, 4) Es tiempo para encontrar el equilibrio y 5) Es Tiempo
para la comunidad.
Vivimos en la época del microsegundo y el reloj de pulsera digital. Nuestra sociedad
altamente informatizada depende de las horas, los minutos y los segundos para su propia
existencia. Pero toda esta precisión en las horas, los minutos y los segundos nos ha convertido
en esclavos del tiempo. Sabemos cuando llegamos tarde y cuándo estamos a tiempo. Sabemos
cuándo ir a trabajar y cuando salir del trabajo. Registramos récords de tiempo. Pero de alguna
manera, tendemos a perder el significado de la vida que medimos.
El sábado no era para Israel solamente, sino para el mundo entero. Había sido dado a conocer
al hombre en el Edén, y como los demás preceptos del decálogo, es de obligación
imperecedera. Acerca de aquella ley de la cual el cuarto mandamiento forma parte, Cristo
declara: “Hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota un ina tilde perecerá de la ley”. Así
que mientras duren los cielos y la tierra, el sábado continuará siendo una señal del poder del
Creador. Cuando el Edén vuelva a florecer en la tierra, el santo día de reposo de Dios será
honrado por todos los que moren debajo del sol. “De sábado en sábado”, los habitantes de la
tierra renovada y glorificada, subirán “a adorar delante de mí, dijo Jehová”. Mateo 5:18; Isaías
66:23 (El Deseado de todas las gentes, p. 250).
 TIEMPO PARA SORPRENDERSE
“Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios
en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo.”
(Génesis 2: 1 -2)
Domingo
¿Cómo te ayudan tus conclusiones a entender lo que puede significar la bendición
divina del sábado y su santificación?
R: El primer sábado no podría haber sido una experiencia pasiva para Adán y Eva. Fue
una oportunidad creada por Dios para que se concentraran en su Creador y en lo
creado. Era el momento para sorprenderse.
Dos relatos armoniosos de la creación en el principio del libro de Génesis. Génesis uno,
relata la semana de la creación y el milagro creciente de la tierra a medida que se le daba
forma y luego vida, culminando en la creación del hombre y la mujer en el sexto día.
Génesis dos, analiza el mismo relato, pero desde una perspectiva diferente. Hace hincapié
en el sexto día. Adán ahora esta en el centro de la escena, y todo lo que se describe esta
allí, para él y para su mujer: el jardín, los ríos, los animales y demás.
Después de descansar el séptimo día, Dios lo santificó; es decir, lo escogió y apartó
como día de descanso para el hombre. Siguiendo el ejemplo del Creador, el hombre
había de reposar durante este sagrado día, para que, mientras contemplara los cielos y
la tierra, pudiese reflexionar sobre la grandiosa obra de la creación de Dios; y para que,
mientras mirara las evidencias de la sabiduría y bondad de Dios, su corazón se llenase
de amor y reverencia hacia su Creador (Historia de los Patriarcas y Profetas, p. 28.)
Reflexionando: Enumera las diferentes oportunidades de aprendizaje que Adán y Eva
tuvieron durante ese primer sábado.
 TIEMPO PARA REDESCUBRIR
“Y ellos lo guardaron hasta la mañana, según lo que Moisés había mandado, y no se
agusanó, ni hedió. Y dijo Moisés: Comedlo hoy, porque hoy es día de reposo para
Jehová; hoy no hallaréis en el campo” (Éxodp 16: 24-25).
Lunes
En Éxodo 16:14 al 29, ¿qué lecciones aprendieron los israelitas?.
R: Aprendieron que Dios es el proveedor, su cuidador, libertador y redescubrieron lo
que significa ser el pueblo de Dios.
Definidamente cuando Moisés saca al pueblo de Israel del cautiverio en Egipto, habían
perdido la perspectiva como hijos de Dios. Necesitaban redescubrir quienes es el Dios que
requiere su adoración. Y les da muchas promesas de un futuro increíble. Una de las
principales experiencias de reaprendizaje fundamental fue sobre el sábado. Lo habían
olvidado en parte una gran mayoría. Por lo cual era prioritario que ellos comprendieran lo
que significaba el sábado para Dios y para ellos. El Dios que los liberaba les había dado a
Adán y Eva el sábado para tener intimidad con su creador. Para ellos ahora, era un día que
les recordaría cada semana al creador y libertador de ellos.
Así como el sábado fue la señal que distinguía a Israel cuando salió de Egipto para entrar
en la Canaán terrenal, así también es la señal que ahora distingue al pueblo de Dios
cuando sale del mundo para entrar en el reposo celestial. El sábado es una señal de la
relación que existe entre Dios y su pueblo, una señal de que este honra la ley de su
Creador. Hace distinción entre los súbditos leales y los transgresores (Testimonios para la
iglesia, t. 6, p. 351.)
Reflexionando: Como puedes redescubrir el sábado en tu vida y ayudar a otras personas
a que hagan los mismo.
 TIEMPO PARA APRENDER PRIORIDADES
“Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo
llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no andando en tus propios
caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus propias palabras,” (Isaías. 58: 6).
Martes
Lee Isaías 58:1 al 14. ¿Qué le está diciendo Dios a su pueblo aquí que es relevante
para nosotros hoy?
R: Que tenemos que aprender a reorganizar nuestras prioridades. El aprendizaje debe impactar la
vida. El sábado es el momento para aprender las prioridades y vivirlas.
Es muy importante que analicemos que el éxito o fracaso de Israel se identificaba con la forma de
guardar el sábado. Dios consideraba que la falta de voluntad para respetar el sábado era una señal de que
él, era irrelevante en la vida de ellos. Lo mismo paso en el tiempo del profeta. (Jeremías 17:19-27) Un
compromiso renovado con el sábado también fue parte de la restauración en el tiempo del profeta Isaías.
Muy seguido los Israelitas fingían ser seguidores de Dios, pero su estilo de vida después de terminar el
culto, mostraba que solo estaban siguiendo las formalidades de un comportamiento correcto. Pero no hay
un compromiso sincero y de corazón con la ley de Dios.
El sábado es un broche de oro que une a Dios y a su pueblo. Pero el mandamiento del sábado ha sido
violado. El día santo de Dios ha sido profanado. El sábado ha sido sacado de su lugar por el hombre
de pecado, y se ha ensalzado en su lugar un día de trabajo común. Se ha hecho una brecha en la ley, y
esta brecha ha de ser reparada. El sábado debe ser ensalzado a la posición que merece como día de
reposo de Dios. En el capítulo 58 de Isaías, se bosqueja la obra que el pueblo de Dios ha de hacer.
Debe ensalzar la ley y hacerla honorable, edificar en los antiguos desiertos y levantar los
fundamentos de muchas generaciones. A los que hagan esto obra, Dios dice: “Serás llamado
reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar…”(Testimonios para la iglesia, t. 6, p. 354).
Reflexionando: Estas haciendo del sábado una delicia, es tu prioridad sincera de corazón ir al templo
de Dios a darle la honra y gloria, o solo es un formalismos que debes cumplir.
 TIEMPO PARA ENCONTRAR EL EQUILIBRIO
“En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados en un día de reposo; y sus discípulos
tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer. Viéndolo los fariseos, le
dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo.” (Mateo
Miércoles
28: 1-2).
Lee Mateo 12:1 al 13 y Lucas 13:10 al 17. ¿Qué le enseñó Jesús a la gente de su época,
y a nosotros hoy, con estos hechos?
R: Lo que Jesús les estaba enseñando y hoy enseña que debemos tener Equilibrio, con
respecto al día de Reposo, ya que este día nos es nuestro es de Dios, por tanto es licito hacer el
bien.
Jesús respeto y confirmó la ley de Dios. (Mateo 5:17 y 18). Jesús desafío a los dirigentes sobre su
interpretación de la Ley. Ninguno de sus desafíos fue más amenazante para el establishment que las
decisiones que tomo en relación con la observancia del sábado. Las sinagogas no dejaban de hacer
del sábado una oportunidad para educar: Allí se leía y se interpretaba el Torá sin excepción. Los
escribas y fariseos conocían la letra de la Ley. Sin embargo, Jesús llego mucho más lejos en la
educación de sus seguidores en lo concerniente al día de reposo.
Antes que empiece el sábado, tanto la mente como el cuerpo deben retraerse de los negocios
mundanales, Dios puso el sábado al fin de los seis días de trabajo para que los hombres se
detengan y consideren lo que han ganado en la semana en su preparación para el reino puro que
no admitirá a ningún transgresor. Debemos hacer cada sábado un examen de nuestra conciencia
para ver si la semana transcurrida trajo ganancia o perdida espiritual (Testimonios para la iglesia,
t. 6, p. 357).
Reflexionando: ¿Cómo observas el sábado? ¿Se ha vuelto un día de “no hagas esto y no hagas
aquello”, en lugar de un tiempo para descansar verdaderamente en el Señor y conocerlo mejor?
 UN TIEMPO PARA LA COMUNIDAD
“Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no
dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y
tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” (Hebreos 10: 24-25).
Jueves
Observa los siguientes pasajes: Hechos 13:14–45; 16:13, 14; 17:1–5; 18:4. ¿Qué nos dicen
sobre los seguidores de Jesús como testigos en ámbitos públicos?
R: Que debemos combinar el testimonio personal y bíblico para impartirlo mediante la
predicación, la enseñanza y el debate. Por la combinación de la Escuela Sabática con el
culto de adoración (predicación) y otras reuniones sabáticas brindan una solida base
educativa para la adoración adventista del séptimo día.
Jesús nos dio un ejemplo al asistir cada sábado a las sinagogas a’ Después de que Jesús
ascendió al cielo, ellos continuaron asistiendo y con todos los que aceptaron el cristianismo.
Las sinagogas se convirtieron en uno de los principales lugares para los apóstoles. Cada sábado
confirmaban que Jesús era el Mesías predicho en el Antiguo Testamento. Que mejor lugar para
los apóstoles testificar a los judíos de Jesús. (Hechos 13:16, 26).
El sábado no esta destinado a ser un período de inactividad inútil. La ley prohíbe el trabajo
secular en el día de reposo del Señor; debe cesar el trabajo con el cual nos ganamos la vida;
ninguna labor que tenga por fín el placer mundanal o el provecho es lícita en ese día; pero
como Dios abandonó su trabajo de creación y descansó el sábado y lo bendijo, el hombre ha
de dejar las ocupaciones de su vida diaria, y consagrar esas horas sagradas al descanso sano,
al culto y a las obras santas. La obra que hacia Cristo al sanar a lo (Mi vida hoy, p. 238).
Reflexionando: Dos preguntas: en primer lugar, pregúntate si realmente fragmentas tu
vida espiritual. En segundo lugar, si tu respuesta es sí, ¿cómo puedes aprender a dejar que
la espiritualidad reine en todo lo que haces?
 PARA ESTUDIAR Y MEDITAR
En la semana hemos estudiado cinco aspectos sobre el sábado: 1) Es tiempo para sorprenderse, 2) Es
tiempo para redescubrir, 3) Es tiempo para aprender prioridades, 4) Es tiempo para encontrar el
equilibrio y 5) Es tiempo para la comunidad.
Cuando Jesús dijo: «El sábado el sábado fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del
sábado» (marcos 2: 27), le estaba quitando la carga en la que se había convertido e iluminando su
propósito original. Los adventistas del séptimo día se preocupan por las futuras leyes dominicales, a
través de las cuales se intentará prohibir la observancia del sábado. ¿Cuántos de nosotros amamos tanto
el sábado en este momento que estaríamos dispuesto a morir por él? Una futura ley dominical no nos
hará amar el sábado. Los cristianos están sellados, no porque creen que el séptimo día es el sábado, sino
porque han experimentado a Jesús en ese día sin permitir que nada los separe de él y de esa experiencia.
“El cuarto mandamiento es explícito. No debemos hacer nuestro propio trabajo en el sábado. Dios ha
dado al hombre seis días para trabajar, pero se ha reservado el séptimo y ha pronunciado una
bendición sobre los que lo santifican. El sexto día deben hacerse todos los preparativos necesarios para
el sábado... Deben estar hechas todas las compras, y todas las comidas, el viernes. Los baños tomados,
los zapatos lustrados y los vestidos preparados. Debe cuidarse de los enfermos el sábado, y todo lo que
sea necesario para su comodidad es un acto de misericordia y no una violación del mandamiento...
Pero no debemos permitir que nada de nuestro trabajo se mezcle en el tiempo sagrado.” (En los lugares
celestiales, p. )