Copérnico había de exponer esta doctrina en seis libros que publicó a requerimiento del cardenal de Capua y del obispo Culmense y dedicó su libro acerca De las Revoluciones Celestes, al sucesor de León X, es decir, a Pablo III; dicha obra, publicada por aquel entonces, ha sido bien recibida por la Santa Iglesia, y leída y estudiada por todo el mundo, sin que jamás se haya formulado reparo alguno a su doctrina.
La C.N.T., en este Congreso, ha de tomar una conciencia clara de la necesidad de constituirse en una gran Organización, y no olvidarse de que en un futuro no muy lejano, no ha de ser más que lo que hoy son los Comités Regionales, con respecto a ella frente o, mejor dicho, de la A.I.T., y es importante que una vez elaborado un auténtico plan de desarrollo de la Organización, posteriormente lo transmita a la A.I.T., para que todas las Secciones lo analicen y, en unos países de una forma y en otros de otra, lo apliquen con las aportaciones y modificaciones que crean necesarias. O bien que, estudiada nuestra estrategia, elaboren ellos la suya propia.
Pero Vuestra Alteza conoce lo ocurrido a ese matemático de Pisa que en su vejez había emprendido el estudio de la doctrina de Copérnico, con la esperanza de refutarla en sus fundamentos: pero si, cuando no la tenía estudiada, la consideraba falsa, bien pronto quedó persuadido de la exactitud de las demostraciones sobre las que se fundaba, así pues, luego de haber sido su adversario, se convirtió en su más firme defensor.
Pero la movilidad de la Tierra y la estabilidad del Sol no constituyen proposiciones de este género; una proposición semejante ha permanecido al margen de las disputas de escuela y, prácticamente no ha sido estudiada por nadie; por ello se comprende que ni se les ocurriera a los Padres ponerla en discusión, puesto que, en esas cuestiones, ellos y todos los hombres concordaban en la misma interpretación.
Y en resumen, tal fue la simpatía y la indignación que con su desespero infundió al tribunal y al pueblo todo, que suprimiendo enojosos trámites y largas investigaciones acerca de las pruebas del crimen y los ambajes de una estudiada defensa, exclamaron unánimemente «que tra preciso lapidar públicamente a tan monstruoso criminal.» Los jueces, no obstante, por temor a su seguridad personal y para que la indignación publica no produjera una conflagración, creyeron del caso obrar con calma para evitar más tarde, en caso de error, la represión del pueblo.
No, la causa debe ser otra. Ella fue estudiada y expuesta en forma lúcida por Guizor, historiador francés monarquista, Ministro de Luis Felipe de Orléans.
Sentados sobre una de las trincheras, todavía en pie, de los desdichados vencidos, nos narró el episodio con la más
estudiada modestia.
Florencio Sánchez
La transformación del sistema educacional no será obra sólo de técnicos tarea estudiada, discutida, decidida y ejecutada por las organizaciones de maestros, trabajadores, estudiantes y padres y apoderados dentro de los marcos, tales de la planificación nacional.
La condición relativa al retiro del general Zapata no podía ser estudiada mientras no se diera entrada a los delegados zapatistas, pero por otros pasos dados por la Junta, se demostraba claramente que en vez de laborarse por la eliminación de Zapata, virtualmente se procura fortalecer su personalidad.
Pues bien, compañeros, sepan ustedes que nueve u once directores de esas compañías ganaban, hasta julio del año pasado, en total, cerca de 700.000 dólares; que un solo funcionario ganaba 65.000 dólares al año, mientras los trabajadores salitreros tenían un salario de doce escudos y cuarenta centésimos; y este señor, a quien le puso término en su trabajo el propio Gobierno de Frei, este señor ha demandado a la empresa, vale decir, al Estado chileno, por una suma cercana a los 3.000 millones de pesos, y, según me han dicho, tiene todavía estudiada una posible demanda de 2.000 millones de pesos más.
Pero, sobre todo, si las dificultades que tuviéramos nosotros fuesen de orden económico porque no podemos hacer la zafra, entonces calculen cómo los enemigos se ensañarían contra la Revolución; por lo tanto, en estos momentos, puesto que la tiranía es derrocada a principios, cuando la zafra va a empezar, no habiendo dispuesto de tiempo ni el gobierno ni los trabajadores para organizar la zafra de una manera estudiada, de una manera justa, nos encontramos con la circunstancia de que las lluvias están apenas a dos meses de distancia y tenemos que producir 5 800 000 toneladas.
Fuéronse las criadas y ella acudió a la sala a persuadir a Leonora acudiese a la voluntad de Loaysa, con una larga y tan concertada arenga, que pareció que de muchos días la tenía
estudiada.
Miguel de Cervantes Saavedra