No quiera Dios que siga los varones que moran nuestras plazas macilentos, de la verdad infames histrïones; estos inmundos, trágicos, atentos al aplauso común, cuyas entrañas son oscuros e infaustos monumentos.
Todos quedaron pasmados de tal manera que se preguntaban unos a otros: ¿Qué es esto? ¡Una doctrina nueva, expuesta con autoridad! Manda hasta a los espíritus
inmundos y le obedecen. 1.28.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Entonces los espíritus
inmundos salieron y entraron en los puercos, y la piara unos 2.0000 se arrojó al mar de lo alto del precipicio y se fueron ahogando en el mar.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Entre horribles penalidades pasan los días estos hermanos nuestros: baños
inmundos, comidas podridas, envenenadas, incomunicaciones interminables, insultos, azotes y mil cosas más, indignas, canallescas, cobardes, se usan sobre ellos con un refinamiento que haría gozar a las torvas imaginaciones de un Felipe II y un Stambouloff.
Práxedis G. Guerrero
Y recorría los pueblos del contorno enseñando. 6.7. Y llama a los Doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus
inmundos. 6.8.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Y llamando a sus doce discípulos, les dio poder sobre los espíritus
inmundos para expulsarlos, y para curar toda enfermedad y toda dolencia.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Y si a la raza le naciesen demagogos inmundos, o almas ávidas cuya impaciencia propia azuzase la de su color, o en quienes se convirtiera en injusticia con los demás la piedad por los suyos, –con su agradecimiento y su cordura, y su amor a la patria, con su convicción de la necesidad de desautorizar por la prueba patente de la inteligencia y la virtud del cubano negro la opinión que aún reine de su incapacidad para ellas, y con la posesión de todo lo real del derecho humano, y el consuelo y la fuerza de la estimación cuanto en los cubanos blancos hay de justo y generoso, la misma raza extirparía en Cuba el peligro negro, sin que tuviera que alzarse a él una sola mano blanca.
Hubo en mi alma muladares inmundos que limpió la fuente de aguas vivas abierta en ella por la mirada insostenible de tus ojos azules.
Aquellas líneas, sin embargo, las he roto después; el estado de excitación en que me hallaba, el hambre y la sed que sufrí, mis luchas con inmundos reptiles, no me permitían escribir con orden ni concierto y solo muchos días después, empecé estas memorias destinadas al mismo objeto, pero trazadas bajo una más grata impresión.
También acudía la multitud de las ciudades vecinas a Jerusalén trayendo enfermos y atormentados por espíritus
inmundos; y todos eran curados.
La Biblia (Nuevo Testamento)
nútil montón de piedras, de años y hazañas sepulcro, que viandantes y pastores miran de noche con susto, cuando en tus almenas rotas grita el cárabo nocturno y recuerda las consejas que de ti repite el vulgo; escombros que han perdonado, para escarmiento del mundo, la guadaña de los siglos, el rayo del cielo justo: esqueleto de un gigante, peso de un collado inculto, cadáver de un delincuente de quien fue el tiempo verdugo; Nido de aves de rapiña, y de reptiles inmundos vivar...
· Vea V.M.: si el mantenimiento que les fiamos le roen, si el regazo en que los abrigamos le envenenan, si el seno donde los recogemos le abrasan, ratones son, Señor, enemigos de la luz, amigos de las tinieblas,
inmundos, hidiondos, asquerosos, subterráneos.
Francisco de Quevedo