Obviando el gran apartado visual, que mezcla los efectos de ordenador muy bien disimulados para el castillo, con la habitual animación tan táctil del estudio, diría que es mi película favorita de todas las que han hecho, pero no tengo claro si como tal es la mejor.
El último tercio se alarga demasiado, y algunas subtramas y relaciones entre personajes son demasiado apresuradas.
Por lo demás, una película muy encantadora, y con una banda sonora alucinante.
Lo que define a esta y a todas sus obras sin duda para mi sería la VIDA que desprende todo lo que ocupa cada plano en cada escena.