Cada vez se pierde mas la esencia de la saga de Mad Max, para realizar superproducciones esperando conseguir una buena recaudación a posterior. Anya Taylor-Joy esta bien sobre el papel, pero Chris Hemsworth me parece un villano absurdo e infantil, cuando Mad Max son películas de acción constante, sangre y carretera. Por otro lado, no es una mala película para ver en algun rato libre y para pasar el rato.